En el bosque que estaba a las afueras de la ciudad, se encontraba Hiccup mirando una fotografía de una joven peli roja, estaba tan sumido en sus pensamientos que no escuchó que alguien se acercaba a él

–Eres un desgraciado ¿hasta cuándo dejarás de serlo?– Jack estaba molesto y el castaño no tenía ganas de pelear, así que guardó la fotografía

–Hasta que se te quite a tí – respondió sin ganas, el albino frunció el ceño

–¡Cuidado con lo que contestas!–

–Entonces, piensa lo que vas a preguntarme – 

–Eres un sin vergüenza...–

–¿De qué me estás hablando?–

–¡No te hagas! Anoche le llevaste serenata a mi hermana ¿cómo crees que van a pensar de ella? tú eres un hombre casado y con hijo, no deberías hacer eso...–

–No te pongas tan hablador ¿acaso tú no le llevaste serenata a mi mujer?– el peli blanco se quedó callado

–Eso es diferente...–

–¡¿Diferente?! ¡Todos en la calle, cuando me miran se ponen a hablar que me están engañando!–

–Tú empezaste esto, quizá me contaste lo de Elsa para que no te matara..–

–¿Insinúas que yo inventé todo?–

–Te creo capaz de eso y más para salvarte –

–Mira, te he aguantado todas delante de la gente pero ya no pienso callarme nada, si quieres matarme, hazlo – en el momento en que Hiccup se acercaba al chico, Jack lo golpeó en la nariz, el castaño tocó en donde le había pegado y le devolvió el golpe logrando que el albino cayera. El castaño aprovechó eso para ir por una gran piedra y ponerse frente al chico que seguía en el suelo – ¿Vas a pegarme de nuevo?

–¿Piensas lanzarme esa piedra? – el castaño la soltó

–Ya te dije que no puedo matar al hermano de la mujer que amo... y que es mi mejor amigo – el peli blanco lo miró mal unos segundos – Lo que te dije es verdad, Elsa no quiere que lo sepan por pena y yo, sólo quiero que acabemos con nuestra enemistad y volvamos a ser los mejores amigos como antes

–Bien, creo que tienes razón – cedió el peli blanco – Hay que calmar nuestros problemas, ya los discutiremos luego... – Hiccup le tendió la mano para ayudarle a levantarse y el otro, la aceptó. — A lo que venimos, necesito que me consigas una reunión con Elsa

—¿Yo por qué debo hacerla de cupido? En el trato que hicimos no acordamos eso...

—Si no lo haces, no vuelves a ver a mi hermana — el castaño rodó los ojos

—Bien... ¿para cuándo?

—Mañana en la noche, en mi casa...

—¡¿Qué?! ¿Pretendes que lleve a mi mujer a tu casa?

—Será tu pareja en mi fiesta de cumpleaños, sólo necesito que la convenzas de ir — Hiccup lo abrazó

—¡Muchas felicidades, Jack ! Ojalá te mueras... — el peli blanco lo miró mal —No me dejaste acabar, ojalá te mueras dentro de muchos años...

***

El castaño volvía a su casa luego de reunirse cn Jack, al parecer estaban arreglándose y volvían a ser amigos...

—Hiccup — llamó un hombre y el castaño sonrió al verlo

—Dígame, General —

—Usted sabe que Jack está comprometido con mi hija, Rapunzel

—Sí , señor.

—Y sabe que anuncié el compromiso...

—Sí, señor.

—Pero, lo que usted no sabe es que su gran amigo le ha deshonrado por traerle serenata a su mujer ¡estando él comprometido!

—Bueno... en un pasado fueron novios y a lo mejor vino en olan de amigos...

—¿Amigos? Se puso a gritar en toda la calle ¡te quiero, te quiero! ¿de verdad cree que era en plan de amigos? Y estando a un paso de la boda...

—No vale la pena, general...

—Vine listo para matarlo... pero, luego pensé que eso no me correspondía, no debía hacerlo...

—Pensó muy bien

—Sino que debe hacerlo usted — el castaño lo miró asustado

—¿Yo? — el hombre asintió — Voy a darle la peor de las muertes...

—Bien dicho...

—La muerte civil.

—¡¿Qué?!

—¿Qué se puede hacer en casos como éste? Es mejor ignorarlo...

—No, señor. Usted va a matarlo, vamos ahora — el castaño fue llevado a la fuerza por las calles de aquella ciudad en busca del peli blanco.

—¿No me deja siquiera ir al baño ?

—Luego de matarlo podrá irse.

—¿De verdad debo matarlo?

—Le ha faltado al respeto, es lo menos que puede hacer...

—¿Y si hubo otra persona metida en eso? —el hombre lo miró serio

—¿Qué dice? ¿Usted dio su consentimiento para eso?

—N-no... quería evitar que Rapunzel se casara con él

—¿Por qué?

—Porque Jack está enfermo, no tiene cura...

—Según usted ¿qué tiene? — el castaño le susurró ciertas cosasque dejó al hombre sorprendido

—... No creo que quiera que sus nietos salgan feos, cabezones y pelones ¿o sí?

—Por supuesto que no... pero, vamos a ir a confirmarlo con él

—Pero vamos a chocarlo

—Pues que se choque, me deben explicaciones —se acercaron a la oficina de correos, donde Jack estaba saliendo del lugar con una carta en mano —¡Jack! — el chico se giró y sonrió

—Supongo que viene a hablar por el escándalo de ayer...

—Quiero aclarar lo de su enfermedad...

—¿Mi qué?

—¿Es cierto que tiene una enfermedad? — Hiccup asintió varias veces y el peli blanco se rio

—General, esa la tenemos todos...

—Dios me libre de eso...

—Todos la tenemos siempre, incluso él también — el hombre abrió los ojos sorprendido y miró a Hiccup

—¿Usted?

—P-pero menos que él

—¿Y no le da pena llevarla?

—¿Por qué habría de tener pena? La llevo en el alma...

—En la sangre, querrá decir.

—En el alma, en la sangre, en los huesos ¡en todo mi cuerpo!

—¿Y no ha visto a un doctor? — el chico comenzó a reír

—Esto no tiene cura, uno mismo debe curarse o morir con ella — el hombre frunció el ceño pensando que Jack estaba loco —Iba a mandarle una carta a Rapunzel para explicarle...

—¿Puedo leerla? — el peli blanco asintió y el hombre abrió la carta, se sorprendió al leer lo que en ella contenía — Si usted todavía quiere que cumpla con mi palabra de casarme con ella, yo...

—No no no, no hay problema, así está bien y ella entenderá. Mañana la llevaré a tu fiesta y le diremos queel compromiso terminó — el hombre se dio la vuelta — Hasta luego — se alejó de ellos y Jack miró a su amigo confundido

—¿Qué le has dicho para que se vaya sin darnos la mano?

—Nos he salvado de una matanza, vamos, te explico — ambos se alejaron de ahí...