La primera vez que lo vio lo consideró un tonto e infantil ¿pero ahora?, lo consideraba de igual forma pero con la diferencia de que se había enamorado

¿Como?, ni idea, simplemente de un día para otro se reía de sus malos chistes, le gustaba su compañía, no paraba de pensar en el y deseaba su alegre compañía

Supo que lo que sentía era amor cuando unas chicas lo intentaban coquetear, sintió su estomago hecho una bola, como fruncía su ceño, su mandíbula se tensaba y las enormes ganas de lanzarse a esas zorras para quitarles las extensiones

Pero Obito lo veía como un amigo

Obito: Deidara-sempai usted es el mejor amigo que pude tener

Obito: Deidara-sempai es mi mejor amigo

Obito: Deidara-sempai es un gran amigo

Cada palabra era como una puñalada en su corazón, algunas veces reunía algo de valor para darle algunas indirectas por lo que sentía con el

No sabía si Obito era estúpido o ignoraba sus indirectas, prefería que las ignorara porque al menos estaba al tanto de que el lo quería

Quería besarlo, acariciar su cabello y rostro, sentir la calidez de su cuerpo, como las grandes manos de Obito exploraban cada rincón de su ser, quería que el le hiciera sentir nuevas sensaciones, quería compartir recuerdos a su lado, despertarse para lo primero ver fuera su rostro

Konan: ¡Deidara me tienes los ovarios reventados! -la chica lo toma de los hombros para zarandearlo- ¡llevas enamorado de el desde la secundaria y ya estamos en la universidad! ¡te le declaras tu o te le declaras tu con un golpe mío!

Deidara: ¡Pero Konan es que ne entran los nervios! -se excusa algo mareado-

Konan: Pero...

Deidara: Pero también el solo me ve como su mejor amigo Konan, solo soy un amigo para el

Konan: Yo veía a Pain como mi mejor amigo y mira ahora, llevamos cuatro años de novios

Deidara: Solo porque le hiciste un amarre -Konan le da un golpe en la cabeza- ¡hey!

Konan: Amarre te veo yo a ti haciéndole a Obito pronto -refunfuña- no seas cobarde Deidara

Deidara: Konan tengo miedo, tengo miedo de que me deje ver como su amigo, tengo miedo de que me deje de hablar, tengo miedo de dejar de pasar ratos a su lado y dejar de ver su hermosa sonrisa, Konan tengo demasiado miedo de perderlo

Konan: Que miedos más pendejos, yo le tengo miedo al Chuky -el rubio la mira mal- ok ok, se que temes perder todos esos momentos por una declaración fallida PERO el puede aceptar tus sentimientos y hacer de solo salir como amigos a salir como novios, tener citas y que te deje como Bambi cuando nació

Deidara: ¿Tu crees? -mira al suelo nervioso, no quería arriesgar poco por tanto, le gustaba pasar tiempo con Obito y no quería perder esos momentos agradables a su lado-

Konan: Seré sincera contigo Dei, no tengo ni idea si te dirá si o si te dirá no pero que te confieses será un gran paso, tanto tu -lo señala- como tu corazón -señala ahora la zona de su corazón- se sentirán mejor, tal vez sufras si te rechaza pero tal vez te alegres demasiado si acepta tus sentimientos, no sabrás nada hasta intentarlo

Deidara: Tienes razón Konan -alza su cabeza con una mirada decidida- le diré a Obito lo que siento porque el que arriesga no gana

Konan: ¡Ese es mi amigo!

Deidara: Iré ahora mismo a su casa a decirle lo que siento

Konan: Te acompaño

(...Más tarde...)

Deidara reunió el valor suficiente para tocar la puerta de la residencia Uchiha

Itachi: Oh, hola Deidara -Itachi eñ primo de Obito lo saluda- ¿vienes a ver a Obito no?

Deidara: Si -asiente algo nervioso-

Itachi: El está en su habitación -se abre paso para dejarlo entrar- ya sabes donde es

Deidara: Muchas gracias Itachi

Volteó un poco su cabeza para ver a Konan dándole ánimos de manera silenciosa desde su auto

Entrando a la residencia camina directamente hacia la habitación de su crush, sentía que el corazón se le saldría de la boca en cualquier momento y sus manos temblaban demasiado, nunca en la vida se había sentido tan nervioso pero siempre había una primera vez para todo

Al estar parado frente a la puerta de la habitación de Obito la tocó unas cuantas veces recibiendo un "pase"

Deidara: ¿Obito podemos hablar? -pregunta asomando la cabeza-

Obito: ¡Deidara-sempai!

Este lo recibió con una sonrisa y un abrazo

Aunque ellos solo se lleven un año de diferencia Obito lo llamaba sempai... y le gustaba demasiado

Obito: Yo también tengo algo que decirle

Algo en su interior dio un vuelco, una pequeña esperanza llegó a el de ser correspondido por Obito

Notoriamente emocionado lo sienta a el en su cama y Obito se sienta a su lado con una gran sonrisa

Obito: ¿Deidara-sempai quiere decirlo usted primero?

Deidara: Mejor dilo tu Obito

Obito: Nop -negó con la cabeza- digalo usted

Deidara: Bien -agacha la mirada demasiado nervioso, sentía como su corazón latía tan rápido como si quisiera salir de su pecho- Obito me gustas desde la secundaria

La sonrisa que portaba Obito se borró poco a poco, esta fue cambiada por una expresión de sorpresa

Obito: Deidara-sempai me siento verdaderamente halagado, usted es una persona muy preciada para mi pero yo tengo novia, específicamente la chica que me gustaba desde mi infancia... perdón

El ambiente se tornó incómodo y el silencio reinó el lugar

Deidara: Jaja, Obito no tienes que pedir perdón por nada

Al levantar su mirada inconscientemente las lágrimas caían por sus mejillas

Deidara: No miento cuando digo que eres alguien importante en mi vida, fuiste uno de mis primeros amigos ya que nadie se quería acercar a mi por mi personalidad tan arisca, malhumorada y sarcástica, aprecio demasiado que me hayas soportado todos estos años pero te quiero hacer una pregunta y necesito toda tu sinceridad, ¿lo prometes?

Obito: Si -asiente-

Deidara: ¿Tu y yo podemos seguir siendo amigos?, no quiero perder tu amistad por una estúpida confesión pero entenderé que quieras alejarte de mi porque te sientas incómodo o no querrás tener un amigo maricón

Obito: ¡Para nada diga esas cosas!, ¡Deidara-sempai usted es alguien demasiado preciado para mi y no soportaría perder su compañía!

Aquellas palabras sorprendieron demasiado a Deidara

Obito: Me importa un pepino que sea gay, usted es mi mejor amigo y nunca me arrepentiré de ser su amigo, admito que será algo incómodo al principio pero estoy seguro que el tiempo se encargará de borrar eso

Los brazos de Obito lo envuelven, quiso separarse pero no pudo

Sabía que sus palabras eran sinceras, el pelinegro nunca mentía y esa era una de las lindas virturdes que poseía

Obito: De verdad quiero seguir siendo su amigo

(...Más tarde...)

Konan: ¿Y que te dijo? -pregunta ella viendo a su amigo rubio sentarse en el asiento del copiloto-

Deidara: Me rechazó Konan pero apreciado realmente que el me haya rechazado de una manera tan amable

Konan: ¿Quieres un abrazo? -extiende sus brazos hacia el, Deidara asiente y corresponde aquel abrazo de su amiga-

Deidara: Será algo incómodo verlo en la universidad pero trataré de ver al futuro y solo recordar esto como un simple recuerdo

Konan: Sabias palabras Dei

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Tobi: ¡Deidara-sempai!

El rubio gira su cuerpo hacia el llamado de su amigo Uchiha que trajo consigo a un chico pelirrojo

Obito: Deidara-sempai le presento a mi amigo Sasori

Sasori: Ho-hola -desvía la mirada con las mejillas tan rojas como su cabello-

Obito: Mi amigo Sasori dice que le gusta mucho y que quiere invitarlo a salir

Sasori: ¡Obito cierra el puto hocico! -grita avergonzado-

Deidara sonríe para sus adentros

Deidara: Mucho gusto Sasori, con gusto aceptaré una cita contigo

Una parte de su corazón siempre le pertenecería a Obito pero miraría al futuro y haría una nueva vida para recordar estos momentos no con tristeza o de manera melancólica, sino con alegría