Aviso: En este fanfic se cambiara la fecha de algunas cosas, esto para evitar cualquier confusión.

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Era 1998. Específicamente 12 de Septiembre. En algún lugar de Estados Unidos, había un lugar llamado "Condado Mandela" o "Mandela County" para los amigos. En este lugar había un chico llamado Mark Heathcliff. Un muchacho con cabello castaño, tes blanca, con uno que otro lunar en la cara. Este estaba escribiendo sus plegarias a Dios. Cabe aclarar que el chico era católico, incluso iba a la iglesia diariamente si podía. Pues sus padres lo habían educado para que fuera un fiel creyente.

Su inspiración al escribir es interrumpida cuando escucha el teléfono sonar. Confundido, decide contestar. Era su amigo Cesar Torres, quien lo llamaba por ayuda.

Cesar: Hola, ¿Que tal? Es Cesar, espero no sea muy tarde.

Mark: No, está bien. ¿Que paso? ¿Estás bien?

Cesar: Si... No soy yo... Es mi madre... Parece que se asustó y tengo que ir al hospital. ¿Me harías un favor?

Mark: Si claro. ¿Que necesitas?

Cesar: ¿Podrías encender las cámaras de seguridad? Ya sabes... Por si a caso.

Mark: Okey. ¿Tienes tus puertas y ventanas cerradas?

Cesar: Si, hay una llave debajo del tapete, puedes usarla.

Mark: Okey... Entonces son las cámaras y ya.

Cesar: Si. ¡Ah! Una última cosa.

Mark: ¿Si?

Cesar: Ve al pasillo y [redactado]

Mark: Entonces eso es todo. Voy para haya.

Así... Mark tomó las llaves de su auto y casa, se coloca su sudadera gris y se dispone a ir en su auto.

Cuando llegó, entró a la casa. Las luces apagadas y el silencio le daban un toque lúgubre a esa casa. El castaño entra con algo de timidez, se puso a repasar lo que su amigo le habia encargado. "Encender las cámaras, ir al pasillo, y era todo. ¿Que podría salir mal?

Mark, enciende una por una las cámaras. Las termina y recuerda la otra cosa que su amigo le habia encargado.

Mark: Solo tengo que hacer eso. Y ya seria to-... ¿pero que?

Justo al final del pasillo... una puerta que daba al patio trasero... estaba completamente rota... el viento entraba a sus anchas, obvio que Mark se asusto.

Mark: ¿Que mierda?

En ese momento, se empezaron a escuchar unos frunidos, eran los de una criatura... al parecer...

Mark: No me gusta para nada ese sonido...

Mark: ¡Te dije que no me gustaba!

Mark sale corropiendo a toda prisa, con la esperanza de llegar a la puerta principal. El muchacho tenia miedo. Cuando llegó a su auto arrancó, conducia con prisa hasta que perdió a la criatura de vista. Al ya no ver al alterno sintió un poco de alivio, pero el estres de la situación lo seguia agobiando. Entro a su cuarto con tal de calmarse, se acosto en la cama dispuesto a hacer descansar su mente...

El castaño se duerme, profundamente... hasta que... en la madrugada...

Unos toques se escucharon en la puerta de su habitación. Mark se despierta por la fuerza del sonido, se levanta asustado y mira a la puerta confundido.

César: Dejame entrar, Ma-a-a-ark... Tengo un regalo para ti-i-i... Es una sorpresa-a-a...

Mark: *susurra* No no no no no no no, no puede ser.

César: Vamos... No te voy a lastimar...

Mark solo se quedó mirando a la puerta con preocupación, pues tenia miedo de que de repente el alterno tuviera la idea de derribar la puerta a la fuerza...

.....

Asi pasaron dos días, Mark comenzaba a tener hambre y sed, alenas y podia dormir, ya que cuando lo intentaba el alterno volvía a tocar la puerta de su habitación. Pero esa noche... Mark cambiaria las cosas... o almenos hacer el intento... recordando dónde habia guardado su arma, decide utilizarla en contra del alterno... aquel que estaba aparentando ser su amigo.

Mark abre la puerta de su habitación... dispuesto a huir del lugar.

Camino en silencio por los pasillos de su casa. Llegó a la cocina, donde habia una puerta que se dirigía a la parte trasera de la casa.

Trato de abrir hasta que sintió una respiración cálida en su cuello.

Cesar agarra a Mark de la cintura... este se intenta soltar, grita deseperado por ayuda pero... de repente... Cesar comienza a respirar en su cuello.

Pov: Mark.

¡¿Que está haciendo?! La cosa que me estuvo jodiendo por 3 malditos me está... ¿abrazando?

Cesar: Diablos, Mark... tu olor es bastante llamativo...

¿Será por el hecho de no me he bañado en 3 malditos días? ¡¿acaso es idiota?! ¡¿que chingados está pasando?!

Mark comenzó a notar que Cesar estaba metiendo las manos debajo de su ropa... específicamente la zona de los pantalones.

Mark: E-espera. ¡D-detente! ¡No quiero que me lastimes!

Cesar: Oh~ tranquilo... yo no pienso hacer eso mi lindo chico~

Mark: ¡Alto he dicho!

Cesar suelta a Mark por que este se comenzó a mover como una sanguijuela fuera del agua.

Mark: ¡¿Quien chingados eres en realidad?! ¡No está bien que llegues por atrás y que toquetees a la gente!

Cesar: Hm-mh... pero o cuenta si es alguien a quien le tengo confianza.

Mark: ... Dime una cosa que solo Cesar sepa de mi...

Cesar: En secundaria... en primer grado del curso... se te cayeron tus libros... un grupo de niños se comenzó a burlar de ti... y yo te defendí... y nos volvimos amigos desde ese instante... fue... maravilloso...

Mark: Okey... eso es verdad... pero... ¡No explica el hecho de por que me manoseaste!

Cesar: La verdad due por que te ves muy lindo cuando estas nervioso... por eso lo hice.

Mark: Hijo de- Uhg... ¿Entonces por que querias matarme?

Cesar: ¿Matarte? Pero si solo queria jugar a las atrapadas.

Mark: ¿?

Cesar: Es mas... con respecto a la llamada... fue para llamar la atención.

Mark se botaba enojado... ¿como era posible semejante mamada?

Pero esto... va a dar comienzo a una bonita amistad... y tal vez... en algo más... pero... se tendrian que desarrollar... poco a poco... estos dos idiotas... con baja lógica... se aprenderan... a entender...

Continuara...