Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Esperando la cena

Hola a todos 😊 aquí el siguiente capítulo espero les guste owo ya se viene la cena y la fuga de Wakiya a la fiesta en la tercera clase e.e
Casi owo xD

┏━━━━•❃°•°•°•°❃•━━━━┓
Esperando la cena
┗━━━━•❃°•°•°•°❃•━━━━┛

✧゜゚°º。✧。º°゚゜✧゜゚°º。✧。º°゚゜✧゜゚°º。✧

Rantaro y Wakiya estaban pasando un momento muy agradable juntos mientras paseaban... Se estaban conociéndo y era realmente agradable estar con él, hablando con Rantaro era una forma de escapar de su situación... de su compromiso.

Y a Rantaro le hacía sentir bien que Wakiya este a gusto con él, eso también le agradaba, pues las sonrisas que el ojiazúl le daba o el tono de su voz le hacían ver que estaba a gusto y feliz y eso estaba bien para él.

Mientras estaban hablando y paseando, a la salida del comedor de la primera clase Ruth iba con un par de amigas para salir también fuera.

— Vaya, ahí viene esa mujer.— Comento una de las acompañantes de la señora Komurasaki.

— Finjan que no la han visto.

Cómo se había mencionado antes, a la madre de Wakiya no le agradaba la señora Brown, la cuál con una sonrisa se estaba acercando a ellas, no pudieron fingir que no la vieron.

— ¿A dónde van chicas?.— Sonrió amablemente.

— Íbamos a dar un paseo.— Sonrió una de ellas.

— Perfecto, las acompaño, así nos ponemos al tanto de algunos chismes.

Sonrió para ir con ellas aunque a Ruth no le agradará la idea pero educada aunque un tanto cínica acepto su compañía.

Mientras tanto la pareja había llegado a una zona de la cubierta del barco y Wakiya se recargo en el barandal.

— Vaya, si que has viajado mucho.

Sonrió pues Wakiya estaba maravillado con las historias de los viajes de Rantaro, ya que este le iba contando que lugares a visto y las cosas que a aprendido. Realmente llamaba bastante la atención que, a pesar de sus limitaciones económicas él a estado en muchos sitios interesantes.

— Quisiera ir a muchos lugares, así como tú.

—  Podríamos hacerlo.— Sonrió para recargarse junto a él.

— ¿Lo dices en serio?.— Wakiya sonrió.

— Si.— Seguía con su sonrisa viéndolo animado.— ¡Te llevaré a lugares muy lindos! ¡Te van a gustar!

Wakiya asintió.

— Me gustaría mucho, quisiera ver los lugares que has visitado.

— Entonces es una promesa, cuando lleguemos a tierra.— Rantaro sonrió.— Te llevaré a dar paseos, montar a caballo.

— ¿Montar dices?.— Lo vio con curiosidad.

— Si, pero, montar como debe ser, no de lado.

— O sea...— Balbuceo nervioso.— Con una pierna a cada lado... ¿cómo hombre?

— Por supuesto.— Rantaro sonrió mientras Wakiya se avergonzaba un poco pero lo vio.

— Está bien... me gusta la idea.— Sonrió.— También quiero silbar como hombre.— Irónicamente aún siendo doncel eso era lo que es pero, Rantaro todavía no lo sabía.

— Muy bien.— A Rantaro se le estaba haciendo bastante divertido hablar de ello, Wakiya era una "chica" sin igual.

— También a escupir como hombre.— Wakiya había reído por eso.

— Eso se puede hacer ahora.— Le tomo la mano para hacerlo voltear al barandal.

— ¿Que? ¿Ahora?.— Se había puesto nervioso.

— Mira, toma impulsó y acomula la saliva así.

A Wakiya se le estaba haciendo divertido como Rantaro le estaba diciendo cómo hacer para escupir, aunque el ojiazúl no lo hacía tan bien pero se estaba riendo... tan entretenidos estaban con eso que no se dieron cuenta cuando la madre de Wakiya llegó acompañada... Hasta que el ojiazúl se dio cuenta y de un codazo hizo parar a Rantaro, viendo quienes llegaron solamente se limpio la boca.

Ruth enseguida frunció el entrecejo molesta, no le gustó ver a Rantaro junto a su hijo... De hecho mientras Wakiya le presentaba a las demás damas a quién fue su salvador, Ruth solamente lo veía como quien veía un estorbo cualquiera... una amenaza.

Más en cambio las demás mujeres no lo veían de ese modo, sino que les parecía  interesante aquel joven, no les importaba que fuera de clase humilde.

— Creo que debemos irnos Wakiya.— Ruth en cambio, no lo quería cerca de su hijo y hacía por querer alejarlos.— Debes arreglarte para la cena.

— Es verdad...— Wakiya vio a su madre empezar a irse junto a a las otras dos acompañante.— Nos vemos.— Sonrió.

— Hasta la cena.— Rantaro le devolvió la sonrisa.

Y lo vio alejarse mientras lo veía de un modo especial. Aunque no se quedó realmente solo. Pues la señora Molly quedó a su lado.

— Estás por entrar a la boca del lobo.— Sonrió.— ¿Tienes que usar para está noche hijo?

Pero Rantaro se rasco la nuca y sonrió, se encogió de hombros mostrándole su ropa. Realmente no llevaba nada más que pueda usar.

— Eso pensé...— Lo jalo del brazo para caminar con él.— Ven conmigo.

La señora Brown había llevado a Rantaro a su camarote, le iba a ayudar para verse bien en la cena. Le parecía un joven muy agradable y además amable... Ella a comparación de Ruth no se fijaba en eso de las clases sociales ni mucho menos hacia distinción de las personas, todos son iguales y además Rantaro le generó confianza.

Ella viajaba sola, pero llevaba varias cosas de su familia, así que mientras Rantaro se daba un baño ella preparo un smoking negro elegante para él. El muchacho comenzó a vestirse y después de eso ella le ayudo a ponerse el saco.

— Si señor.— Sonrió alisando los hombros del traje cuando el joven se lo puso.— ¡sabía que tenías la talla de mi hijo!

— Pues casi...— Rantaro se ajusto los puños de la camisa. Para verse en el espejo.

— Te vez muy bien Rantaro.— Sonrió para silbarle como halago.

Rantaro sonrió para verse en el espejo nuevamente, realmente las personas se ven diferentes con la ropa.

Ya quería ver la cara de su "amada" cuando lo vea...

Las trompetas habían sonado indicando que ya era la hora de la cena. Y Rantaro estaba al pie de las escaleras principales donde un hermoso reloj era a veces el punto de partida. El pelirrubio sino le conocieran podría pasar fácilmente desapercibido como uno más de aquéllos jóvenes elegantes e ilustres de la alta sociedad.

El artista estaba ensayando un poco algunos movimientos, de hecho había llevado una de sus manos detrás de su espalda quedando lo más erguido posible. Fue ahí cuando noto como Silas iba bajando de las escaleras llevando a Ruth de su brazo.

— Silas...

Rantaro se había acercado a ellos pero el peliverde lo ignoro debido a que no lo reconoció, en cambio Silas saludo a otras personas. Eso dejo un poco extrañado y algo fuera de lugar a Kiyama.

Pero Rantaro sintió una mirada sobre él y volteo hacia el reloj.

Wakiya iba bajando poco a poco las escaleras con una sonrisa... Llevaba un vestido rojo largo y guantes blancos, su cabello iba trenzado hacia un lado y tenía adornos de pequeños rubíes haciendo destellos en sus hebras doradas.

El ojiazúl llevaba una bella sonrisa y estaba encantado con ver a Rantaro... Se veía tan guapo...

Con suavidad Wakiya le mostró el dorso de su mano y Rantaro le sujeto está con cariño, hizo una reverencia y le beso con ternura la mano.

— Vi esto antes, y siempre quise hacerlo.— Rantaro sonrió.

Mientras que Wakiya lo veía con una sonrisa y un brillo especial en la mirada.

Ambos se veían de manera distinta.

✧゜゚°º。✧。º°゚゜✧゜゚°º。✧。º°゚゜✧゜゚°º。✧

┏━━━━•❃°•°•°•°❃•━━━━┓
CONTINUARÁ
┗━━━━•❃°•°•°•°❃•━━━━┛

Ya se están enamorando y también ya falta poco para que Wakiya diga: que crees soy niño xD o bueno se entiende xD
Gracias por leer 😊❤️ y nos leemos pronto ❤️😊

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro