Conocerte
Hola a todos 😊 aquí el siguiente capítulo xD espero les guste
Ya dos se van a enamorar... Bueno cerca e.e
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Conocerte
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Las primeras horas desde que había zarpado el barco habían empezado con tranquilidad...
En ese lapso de tiempo, desde que se habían visto... Rantaro no podía apartar de su mente la imagen de Wakiya, que si bien fue un momento demasiado fugaz no pudo olvidarlo realmente, había algo, quién sabe, pero había algo en "esa chica"... si, así como su nuevo amigo Shu, también él se dejó llevar por las apariencias y también por el vestido tan elegante que Wakiya llevaba puesto... había confundido también al ojiazul en ese momento con una mujer.
Pero quizás Shu tenía razón en lo que dijo: una chica como ella... jamás se fijaría en alguien como él...
Wakiya por su parte, conforme pasaba el mayor tiempo junto a Silas y junto a su madre más ofuscado se encontraba... era como ahogarse en un vaso de agua y más cuando en una de las conversaciones había tocado el tema de su boda con el peliverde... ese tema en especial era lo que más lo hacía poner tenso.
Y justamente por estar tenso era que también estaba siendo bastante descortés y algo cortante con las cosas que decían, le sugerían o solamente con la simple mirada.
Eso a Silas y en especial a Ruth no les estaba gustando.
A las 18:00 horas de la tarde, habían sonado las trompetas... Así era como se anunciaba el inicio de la cena para la primera y segunda clase. Aunque cada clase tenía sus lugares indicados. Las vajillas estaban hermosamente arregladas y los músicos tocaban para ambas clases aunque en diferentes tiempos. La comida y bebida era de primera y todos los modales eran impecables tanto de los pasajeros como de los que servían la comida.
Cómo era de esperarse ser de una familia con renombre les hacía convivir con gente igual de clase...
— De verdad es un barco fascinante.— Silas había vuelto a mencionar mientras cenaban.
— Muchas gracias señor Karlisle...— El señor Andrews había hablado.— Es el trasatlántico más grande hasta ahora.
— Se sabe que las cosas grandes.— Continuo Wakiya.— Sirven para cubrir otros complejos.
Algunos en la mesa habían reído mientras que Ruth se había fastidiado por ello, Wakiya sujeto un cigarrillo y se lo llevó a la boca para encenderlo. Aunque el hecho de que una mujer fume no está bien visto, eso era igual para los Donceles.
— Sabes que no me gusta que fumes.— Le murmuro su madre.
Pero Wakiya no le hizo caso, fue Silas quién le arrebato el cigarrillo y lo apagó.
— Eso es algo que ya sabe que debe cambiar.— Comenzó el peliverde viendo con seriedad a su prometido.
Nuevamente Wakiya se volvió a fastidiar. Pues ya no aguantaba esa situación.
Conforme pasaba el momento de la cena, ya entrando la noche en esta el pelirrubio ya no aguanto demasiado.
Wakiya había salido corriendo del salón sin dar explicaciones, solamente dijo que debía retocarse y por eso nadie dijo nada. La realidad es que salió corriendo no solo del salón sino que pasó por toda la cubierta del barco empujando a las personas sin fijarse por dónde iba realmente, solamente quería estar solo y acabar con todo ese pesar que sentía. Había acabado por llegar a la popa del barco, se sujeto de la barandilla respirando agitado viendo el agua del mar.
Aparentemente no estaba solo.
Ya que Rantaro estaba recostado en una de las bancas que había ahí contemplando las estrellas en el cielo nocturno mientras fumaba, fue ahí cuando sintió como alguien paso de largo, eso le llamo la atención, por lo que se enderezó notando a Wakiya. Cómo lo vio ofuscado decidió ir tras él.
Se sorprendió como el otro pelirrubio se había trepado aún con el vestido por la barandilla de protección que se encontraba en la popa para evitar caídas. Pero Wakiya ya se encontraba sujeto de está del lado que no era seguro. Eso alarmó al ojicafé.
Wakiya seguía en su conmoción dispuesto a saltar y a acabar con todo su pesar que no se dio cuenta que lo habían seguido hasta que una suave voz lo alarmó pero no sé movió.
— Por favor no lo haga.— Rantaro estaba a pocos metros detrás de él.
— ¿Que?.— Wakiya lo volteo a ver aún sujeto de la barandilla pero negó.— Por favor váyase...
— N-no... escuché...
— Váyase.— Volvió a insistir.
Pero Rantaro sabía lo delicado del momento así que debía ser cuidadoso para no alterar a Wakiya y así evitar que vaya a saltar.
— Escuché, no lo haga.— Hablo con calma y con cuidado comenzó a acercarse.— Yo se que es algo que no quiere hacer.
— ¿Y usted que sabe?.— Se molestó el ojiazúl.— Usted no me conoce, así que váyase.
— Si, ya se que no la conozco... pero... se que no querrá saltar, el agua es bastante fría.
Wakiya solamente lo veía, Rantaro le mostró el cigarrillo para que viera que se acerca a lanzarlo al agua pero no sé movió más.
— ¿Que tan fría?.— Wakiya se le quedó viendo ya menos alterado.
— Bastante... yo, cuando era niño, pesqué en hielo con mi papá...— Continúo Rantaro acercándose de a poco con cuidado.— Verá pescar en hielo es-...
— ¡Si se que es pescar en hielo!.— Se molestó.
— Bueno.— Sonrió aún con la molestia del contrario, hasta eso se le hizo lindo.— Es agua muy fría, como aquí, por eso creo que... si salta deberé saltar detrás de usted.
— ¿Saltar dice?.— Comenzó a burlarse.— No diga tonterías... la caída lo mataría...
— Pues correré el riesgo.— Rantaro comenzó a quitarse las botas y la chaqueta.— Soy un buen nadador.
— ¿Que está haciendo?
— Si usted salta yo salto.— Con calma le extendió la mano, para ese momento ya estaba demasiado cerca de él.— Por favor no lo haga.
El ojiazúl se le quedó viendo pero sorpresivamente se giro con cuidado para darle la mano. Rantaro lo sujeto y sonrió.
— A todo esto.— Sonrió presentándose.— Me llamo Rantaro Kiyama...
— Wakiya...— Lo vio a los ojos.— Wakiya Komurasaki Bukater.— Lo dijo bastante rápido.
— Va a tener que escribirme su apehido señorita, porque no le entendí.— Sonrió para sujetar bien su mano.— Suba...
El ojiazúl había soltado una pequeña risa pero no dijo nada sobre "lo de señorita"... simplemente acepto la mano del joven y de su ayuda comenzó a subir por la barandilla...
Pero por accidente había pisado mal el vestido y este le hizo resbalar... se pudo haber caído de no haber sido por Rantaro quien tuvo buenos reflejos y lo sujeto.
— ¡¡No me suelte no me suelte!!.— Wakiya se había asustado comenzando a gritar.
— ¡No la soltaré!.— Rantaro lo sujetó del brazo con fuerza.
También gracias a los gritos llamaron la atención de los vigilantes que estaban cerca de ahí por lo que estos comenzaron a correr rumbo a dónde provenía el ruido. Rantaro había sujetado a Wakiya sin soltarlo aunque esté estaba bastante asustado.
— Tranquila, sujetese bien...
— S-si...
Rantaro había hecho con su voz que Wakiya se calmara en su drama con los gritos, y con cuidado y con fuerza logro subirlo de nueva cuenta, lo había sujetado por la cintura pero por el peso cayeron al suelo en una posición bastante comprometedora.
Los vigías habían llegado justo al momento en que Rantaro estaba sobre Wakiya y este tenía las piernas descubiertas pues los pliegues del vestido quedaron torcidos.
Haciendo ver la imagen comprometedora.
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CONTINUARÁ
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CURIOSIDAD: Los horarios para las comidas eran los siguientes: desayuno de 8:30 a 10:30; comida de 13:00 a 14:30; cenas de 18:00 a 19:30. Y sí, tal y como se sugiere en la película, la cena se anunciaba con un toque de trompeta.
XD Wakiya tiene buenas piernas... Okya
XD así es una buena forma de conocer al amor de tu vida e.e más si es así de lindo como Rantaro ❤️
Gracias por leer 😊❤️ y nos leemos pronto ❤️😊
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