Izuku abría sus ojos confundido, le dolía la cabeza y la parte baja de su espalda, con cada movimiento sentía un pinchazo en ese lugar.

Noto que tenía una camisa mucho más grande que apenas se ajustaba a su cuerpo y que se le bajaba por un hombro, el aroma del perfume era demasiado varonil para su gusto, que normalmente usaba una fragancia mucho más dulce y calmada.

No una fuerte y tosca como esa, miro a todos lados y noto que no era su habitación, confundido miro todo el lugar, miro las sábanas mojadas, condones en el suelo y él mismo que no tenía nada debajo de esa camisa que no era suya.

Se sonrojo de sobremanera al ver la tan obvia situación, se movió levemente y el dolor en sus caderas regreso, escuchó la puerta abrirse ahí vio a cierto pelirrojo, fue ahí que recordó ciertas imágenes que provocaron que su sonrojo aumentará.

— Buenos días Midoriya, ¿dormiste bien? ¿Te duele algo? — el pelirrojo dejo la bandeja sobre la cómoda, se acercó al menor acariciando su mejilla, Izuku se sonrojo demasiado que sentía que en cualquier momento se iba a desmayar.

— Y-y-yo, estoy b-bien, Kirishima-Kun, pe-pero ¿Qué... Qué sucedió? — pregunto mirando al pelirrojo con duda, el mayor acaricio con cariño el cabello del pecoso.

— Descuida Midoriya, entiendo que esto es confuso, pero todo lo que sucedió ayer fue real — el pelirrojo estaba muy cerca del menor, demasiado cerca, Izuku solo podía verse como un tomate en ese momento, para Eijiro el gesto no era más que adorable, beso la nariz del pecoso, Izuku era un manojo de nervios y lo fue aún más cuando el pelirrojo dejo su nariz para bajar a sus labios.

Izuku no pensaba con claridad, así que se dejó llevar por el suave contacto con el mayor, luego de dejarlo Kirishima lo llevo a su habitación, ninguno de sus amigos estaba en el hotel, todos se fueron y seguro ahora estaban totalmente ebrios en algún lado.

Cargo al menor sobre su espalda, ya una vez en su cuarto Eijiro le dio unas pastillas para su dolor, Izuku las acepto aún sonrojado y queriendo preguntar que los había llevado a "eso" Izuku no tenía clara su sexualidad, nunca la tuvo ni la tendrá, le gustaban las chicas sí, pero también los hombres, aunque aveces pensaba que no le gustaba nadie y otras que el sexo era asqueroso y solo le gustaría una relación de pareja sin sexo, aunque aveces pensaba que las personas trans eran muy atractivas, así que realmente ya no sabía que era, pero ahora con Eijiro todo estaba peor.

El mayor lo trataba tan bien, siendo delicado y atento, recuerda que antes de ser parte de la selección veía al pelirrojo en la tele, tan admirable, era un excelente portero que parecía ser de roca.

Y ahora resulta que aquel que tanto admiraba había estado con él compartiendo cama y haciendo algo más que dormir.

Sonrojado el pelirrojo solo le veía con ternura, Izuku era tan tierno, desde que había entrado a los entrenamientos con la selección y que el hombre rubio que tenían de director se los presentará, había quedado encantado, pero no había comprobado ese cariño hasta ayer por la noche.

Izuku era un ángel, tan hermoso como deseado, claro que notaba las miradas lascivas de sus compañeros y hasta del mismo director técnico sobre el hermoso pecoso.

Luego de una tarde de juegos y de discretas caricias por parte del pelirrojo, al fin llego la noche, el mayor se fue y Izuku se pudo quedar a pensar, pronto sería el siguiente partido y está vez estaba mucho más alterado por el equipo que se venia, España fue realmente fácil para su gusto y el del equipo, sin embargo ahora iría Alemania y realmente tenía miedo, es decir, era Alemania, si ganaban irían contra Argentina y ahí si que lo gobernaba el terror.

Lo mejor para él era dormir, después de todo dentro de dos días sería aquel partido, solo debía estar al pendiente de las clasificatorias, era todo.

Shoto estaba en su habitación, mira do el techo como si fuera interesante, cerró sus ojos recordando lo que había oído la noche anterior, esa era claramente la voz de Izuku en forma de gemidos, además, Kirishima se escuchaba acelerado y jadeante mientras hablaba con él, no quería hacerse escenarios poco reales, pero es que todo era tan obvio que era imposible compararlo con algo más.

Encendió el televisor, luego de eso se había quedado en su habitación, no tuvo ganas de ir a seguir bebiendo con los demás, así que solo se durmió y ahora por la mañana lo mejor sería ver las noticias.

Todos hablaban del triunfo inesperado de su selección sobre españa, pero sobre todo, de aquel misterioso delantero que había hecho literalmente papilla al equipo español, sonrió, había derrotado al equipo de su padre, porque aunque el pelirrojo era japonés, al decir que era una selección inútil tomo a su cargo la española, peor claro, él no, él se quedó con su equipo y amigos, sabía que la selección iba a ser mucho mejor y no se equivocó, Izuku era un prodigio, desde que All Migth lo llevo con ellos supo que sería alguien excepcional.

De la nada salió una noticia que llamo su atención, tenía que ver con su padre y la selección española.

"En pleno mundial, el director técnico de la selección de España quiere una revancha con el equipo de Japón"

Oh mierda, sabía que de ahí nada bueno iba a salir, en el reportaje Endevor estaba en una conferencia de prensa, aclarando que retaba a Toshinori a una revancha, fuera del mundial, totalmente ajeno y sin ningún valor en cuanto a posiciones, solo quería de regreso su dignidad al perder contra su selección, era todo.

Se veía molesto, totalmente enojado y furioso por la derrota reciente, Shoto río, su padre seguía siendo un inmaduro.

Pero luego algo llamo su atención, las cámaras fueron dirigidas a un segundo en la mesa de conferencia, aquella cabellera ceniza con la que se había topado antes.

"— ¿Cómo se siente Katzuki al perder contra Japón, y que opina de su nuevo jugador estrella? —" una de las reporteras soltó con veneno, el cenizo se veía mucho más calmado de lo normal, incluso no parecía él.

"— A ese jugador yo solo quiero asegurarle que si aceptan nuestra revancha le ganaré sin problemas, así que "Deku" prepárate para nuestro próximo encuentro porque te dejaré en la banca por el resto de tu vida —" Todos en la sala hablotearon sobre lo dicho "Deku" ahora se había vuelto el apodo tendencia de Twitter, Facebook y Instagram, el jugador que fue apodado como "Deku" era el pequeño pecoso, quién seguro no tenía idea de la polémica en la que se acaba de meter.

All Migth estaba como loco, se movía de un lado a otro confundido, había visto el reportaje claro y aunque no lo hubiera hecho se habría enterado por las redes sociales, además del apodo que se le había puesto a su querido jugador peliverde, no le quedaba mal si lo pensaba severamente.

"Deku" sonaba a "tú puedes" así que quedaba perfecto para el lindo pecoso, pero por otro lado estaba el reto de Endevor, no podía arriesgar a sus jugadores, tenían un mundial en sus manos para arriesgarse tanto y jugar contra España fuera de este.

Debía consultarlo con sus jugadores, no podía mover las piezas a menos que estás quisieran, debía preguntarles y pronto.

El jugador de la selección Española caminaba por los pasillos del hotel donde su equipo se hospedaba, odiaba la prensa, debía vestirse formal y actuar calmado, odiaba hacer eso y hasta ahora lo tenía muy en claro, pero, si de algo sirvió, fue que aquel pecoso había recibido su mensaje y ahora no descansaría hasta dejarlo jodido y no exactamente a golpes.

Aquel niñato le había dejado muy en claro que quería cogerlo, esas jodidas piernas que no salían de su cabeza, además de lo bien que se verían sobre sus hombros mientras el dueño de las mismas gime como perra en celo, quería ver esa carita tan tierna y adorable llena de su semen mientras el menor gime por más, estaba seguro que eso sucedería pronto y nada ni nadie se lo iba a impedir.

De regreso al hotel del equipo Japónes, Izuku se despertaba por segunda vez en el día, se había dormido luego de que el pelirrojo se fuera de su cuarto, los toques en su puerta eran insistentes, así que cansado, y cambiado, se fue a la puerta abriéndola, se sorprendió un poco al ver al delantero que lo acompañaba, si bien no era el principal, era uno de los dos delanteros que debía tener el equipo.

— ¿Yaoyorozu-Kun? — el pelinegro con una sonrisa lo saludo, Momo le miro con gracia y estilo, tan Yaoyorozu, pensó Izuku.

— Hola Midoriya-San, disculpa la molestia está noche, pero, Toshinori-Sama nos está llamando al restaurante del hotel, dice ser urgente — el menor confundido asintió, se cambió y cuando salió no espero ver a Yaoyorozu ahí.

— ¿Me esperaste? — el contrario asintió y sin ninguna palabra más ambos se fueron, el pelinegro miraba a cada segundo al pecoso, Dios era tan hermoso que juraba que quería comercelo a besos, que quería que ambos vieran películas y mejor aún, fueran pareja, no era un secreto que todo el equipo estaba más que enamorado del menor, pero ese es otro cuento, ahora estaba feliz de ir a la par del tierno pecoso.

Llegaron al restaurante del hotel, no había nadie más que ellos, incluso la servidumbre se había ido, el rubio miraba bien que todos sus alumnos, ya estaban así que no había necesidad de esperar.

Comenzó a hablar.

— Ejem, bien, cómo ya saben la polémica que está ahora sobre nosotros, realmente no pude tomar una decisión, es decir, no los puedo arriesgar por los caprichos de Endevor, ustedes deciden — todos se miraron entre sí, Izuku nos avía de que hablaban ¿Qué escándalo? No entendía nada.

Kirishima vio ka confusión en el menor, asi que se fue junto al menor, lo abrazo por sus hombros y luego le susurro lo ocurrido Izuku estaba muy desconcertado, ¿porque Endevor quería la revancha? No entendía.

Kirishima le sonrió, para que luego el capitán dijeran todo lo que sucedía, Izuku vio como Eijiro se levantó.

— Bien Toshinori-Sama, todos decimos que vamos a aceptar su apuesta —All Migth asintió, ahora tenía que entrenarlos para ese capricho.

— Por cierto joven Midoriya — Izuku volteo, atrapando una camisa de la selección, miro detrás y quedó confundido, en la playera en lugar de su apellido venía un apodo.

"Izuku, Deku"

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Muy bien, muy bien, ya ven por dónde va esto jajaja

Los amo!!! (⁠｡⁠・⁠/⁠/⁠ε⁠/⁠/⁠・⁠｡⁠)