6._Estrategia
Mary estaba al borde de la hipotermia. De no haber encontrado a Bulma y compañía quizá hubiera muerto. De la caída resultó con una fractura en la pierna, muñeca y hombro. Fue un dolor terrible, pero la suerte de Whiss la curo permitiéndole escapar. También la ayudo a no congelarse, pero no estaba en un buen estado.
Las mujeres le quitaron la cortina y le prestaron algo de su ropa, para posteriormente dejarla junto al fuego. Le dieron algo de agua tibia que consiguieron derritiendo nieve en un sartén. Bebió con dificultad de mano de Milk, que le sostenía la cabeza mientras le hacia preguntas que intentaban mantenerla despierta. Bulma cuidaba de Maron y Vegeta se despertó descubriendo, con un poco de sorpresa, a Mary entre ellos. La muchacha percibió la mirada de su compañero y giró la cabeza hacia él con una expresión fría, también un poco cansada.
-Hola... Vegeta- le dijo con una voz tranquila. A ella también le sorprendió verlo allí. Él no respondió. Se acurrucó entre las mantas y le dió la espalda.
-No le hagas caso. Está muy lastimado y tiene un humor horrible- le explicó Bulma.
-Lo sé. Sé como es cuando alguien le pega en el orgullo y Bills le dió una paliza- comentó la muchacha esbozando una simpática sonrisa.
-Ese sujeto es terrible. Pensamos que te había capturado y que...
-Lo hizo- exclamo Mary interrumpiendo a Bulma- Escape de su casti...llo...
La declaración de la muchacha sorprendió a todos, pero no fue posible interrogarla al respecto, pues Mary sucumbió al cansancio cayendo en profundo sueño. Bulma y Milk decidieron no molestarla. La mujer estaba más que exhausta y no querían imaginar lo que tuvo que vivir en manos de Bills.
Por la mañana la nevada había terminado y Mary despertó temprano, primero que todos, momento que aprovecho para ir hacia la cortina y buscar la suerte de Whiss. La había escondido allí, haciendo un nudo en uno de los extremos. Con la piedra entre sus manos se quedó de rodillas viendo hacia el exterior. Seguramente Whiss no estaba nada feliz con su huída, pero es que no se le ocurrió otra cosa. Buscar uno de los pasadizos secretos le hubiera tomado mucho tiempo y hubiera evidenciado todo. Al descubrir que esa piedra le daba la facultad de curarse inmediatamente tuvo la idea de saltar por la ventana, pues existia una alta probabilidad de sobrevivir a la caída y además que era mucho más rápido salir así del palacio. Mirando el paisaje reflexiono un poco. Lo que pasó con Bills no lo consideraba un abuso, pero tampoco era un recuerdo agradable. Hubiera preferido no recurrir a ese método con él. Se levantó y fue hacia Vegeta mientras se colgaba la piedra en el cuello.
Whiss le dijo que él podía curar con esa piedra, pero que su don era permanecer jóven. Mary pensó en otra explicación para ello. Whiss y ella tenían el mismo don. Solo que el Santo,
como ella decidió llamarlo, había encontrado la forma de sanarse así mismo del deterioro físico que ocurre con los años. De esta forma evitaba convertirse en un anciano, luciendo jóven y fuerte siempre. Considerando aquello pensó que ella podía curar a otros mientras llevará la suerte de Whiss con ella y ensayo su idea con Vegeta. Puso sus manos sobre él y se concentro en esa ida cerrando los ojos. Mary no pudo verlo, pero de sus manos surgió un leve destello y de inmediato las heridas de su compañero sanaron. La mancha morada en el ojo vacío de Vegeta se había borrado. Animada por eso se giró hacia Goku imitando la acción. Pero al terminar sintió un fuerte tirón en su cuello que la hizo perder el balance.
-¡La suerte de Whiss!-exclamó Bulma con jubiló y codicia en los ojos- No imagino lo que tuviste que hacer para conseguirla, pero sin esto, estoy segura, Bills es vulnerable.
La mujer había despertado, sin embargo, se fingió dormida para observar a la cazadora de recompensas.
-Tuve que acostarme con el dos veces y saltar desde una de las ventanas más altas de ese castillo- le respondió Mary poniéndose de pie- Regresame eso ahora.
-Esta piedra perteneció a San Whiss. Lo justo es que nosotros la guardemos... Después de todo...
-No digas sandeces-la interrumpió Mary mirando el equipaje y los trineos tirados por los perros que dormían un poco más allá- Es obvio que ustedes están escapando de la Villa de San Whiss e imagino que saben muy bien lo que es esa piedra,
pero es mía. Yo la conseguí.
Bulma miró de reojo hacia una de las pistolas de Vegeta que estaba junto al cuerpo del sujeto que estaba despertando a raíz del alboroto. Goku también abrió los ojos, pero lo primero que hizo fue mirar hacia donde antes estaba su brazo. La herida que antes tanto le dolía estaba curada, lo mismo sus huesos rotos. Un poco desconcertado se rasco la cabeza y después miró a las mujeres. Milk también se estaba incorporando.
Bulma ambicionó esa piedra desde siempre. Al tenerla entre sus manos...No pensaba renunciar a ese objeto bajo ninguna circunstancia.
-La usaré para salvar a la villa- dijo Bulma intentando apelar a la clemencia de Mary. Una idea nada fructífera.
-Y yo prometí devolverla a su dueño- exclamó Mary dando un cauteloso paso hacia delante. Calculaba el alcance de su patada.
-¿A su dueño?-repitió Milk- Acaso...
-San Whiss está vivo-les dijo la cazarrecompensas mientras Goku y Vegeta se levantaban-
Vive en el castillo de Bills hace años.
-¿Qué Whiss es prisionero de Bills? Eso es imposible-le dijo Bulma.
-Te digo que lo conocí. Es un tipo muy alto, de cabello blanco, ojos morados y...
-Tú viste su retrato-la interrumpió Bulma con una sonrisa astuta.
Mary se quedó callada un momento.
-Tiene una forma de reír muy rara, bastante ridícula en realidad, es como: jojojo -le dijo Mary rascándose la cabeza y viendo a otro lado porque imitar eso le dió vergüenza.
-¡Ese es San Whiss!-exclamó Milk.
-Sí...-murmuró la cazarrecompensas- Él me ayudó y prometi devolverle su suerte. Regrésame esa piedra ahora-le exigió a Bulma.
La mujer no iba a hacerlo, pero Goku la tomó por el brazo y le quitó el collar, devolviéndolo a Mary.
-Gracias- le dijo la muchacha, que rápidamente se colgó la piedra al cuello mirando hacia dónde antes estaba el brazo de su compañero.
Goku quedó manco y Vegeta tuerto. La suerte de Whiss no restauraba lo que no estaba ahí, pero les devolvió la salud y estaban listos para retomar su rumbo. Los tres se dirigieron hacia uno de los trineos.
-¿Qué es lo que van a hacer? ¿A dónde van?- les preguntó Bulma.
-Sí entiendo bien, Bills ahora está más vulnerable sin esa piedra-le dijo Vegeta volteando a verla.
-Sí, pero no por eso es más débil. Piensen un poco. Bills sigue siendo muy fuerte y tiene todo un ejército a su disposición. Ir a enfrentarlo así, es un suicidio-les dijo Bulma.
-Por eso no te preocupes- le dijo Mary-Tengo un plan...
Bills estaba hecho un demonio. Apenas Mary escapó ordenó fueran tras ella y no conforme con eso, él mismo salió en su búsqueda después de ordenarle a los artistas, que mantenía en el palacio, hicieran retratos de la mujer que serían llevados a cada pueblo, villa y aldea en sus tierras y más allá. Esa mujer no iba a escapar de él y cuando la encontrará iba a suplir que terminara con su vida, pero Bills no le concedería el privilegio de la muerte. Ella pagaría su osadia viviendo el infierno en vida.
Whiss ,desde el interior de las paredes oía a los guerreros al servicio de Bills correr de un lugar a otro, mientras el señor del lugar gritaba sus órdenes con la ira hecha voz. Hace mucho que alguien no lo ponía así de rabioso.
-Espero no te hayas olvidado de mí, Mary- murmuro Whiss acariciando su barba- Creo que necesito afeitarme-se dijo después y se perdió por el estrecho corredor justo cuando Bills salía en su trineo.
La nevada ocultaba las huellas de Mary, pero Bills estaba seguro ella iría a la Villa de San Whiss, sin embargo, a medio camino algo lo hizo detenerse. La segunda vez que le dió la oportunidad de escapar a la mujer no le fue posible encontrarla. Tuvo que recurrir a sus hombres para lograr ubicarla. La primera vez no hizo falta tal cosa ¿Qué cambio? Dió la vuelta y volvió a su palacio con una calma extraña. Se sentó ante la chimenea para entrar en calor. La nieve sobre sus hombros se derritió y humedecio su abrigo, pero él no se molestó en quitárselo. Callado se quedó mirando el fuego.
-Pensé que no volverías hasta haber encontrado a la mujer-le comentó Whiss y Bills miró atrás, a la pared.
-Mañana es veinticuatro de Diciembre, tengo que ir por mi tributo-le respondió.
-Estas demasiado tranquilo...
-Esa mujer es muy necia y orgullosa. Puede haberse llevado tu suerte, pero volverá con el único propósito de vengarse de mí- le señaló Bills y se giró hacia su interlocutor- Y cuando lo haga...
-No deberías tomarla a la ligera. Sola no puede hacer mucho, pero lo que te sobran son enemigos. Una alianza sería muy peligrosa para tí...
-Jamás han tenido el coraje de formar un frente contra mí, aunque tal vez ahora sea diferente- comentó Bills con un poco de disgusto- Imagino que todos estarán muy felices de saber que sigues vivo.
-¿Y cómo se enterarían de algo así?- le cuestionó Whiss con un tono indiferente.
Bills no le contesto y fue hacia el pasillo murmurando un villancico.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro