Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

El reloj


Helen

¿Cómo es que Moisés llegó a encontrar a alguien más? Se supone que aun ahora solo seríamos él y yo. Y me da igual quedar como la monumental pone cuernos del país, elijo a Moisés por sobre todas las cosas y el que se atreva a decirme que soy una mujer casada es porque poco entiende del amor, el verdadero amor.

Me ha bajado de la nube en dos tiempos al saberlo enrollado con alguien más y "esa" alguien más es un peligro que lastimosamente puede avanzar quizá mucho más que yo en menos tiempo, y es que es extraño que Moisés hable de alguien más en tan poco tiempo, ¿O será que ya se conocen hace mucho? ¡Maldición! Ahora no podré pensar, si al entrar a casa tengo que cambiar la cara y fingir tanta felicidad que no sé de dónde me inventaré...

— ¡Bienvenida a casa Baby! —Grita mi esposo, Amaro— ¡Estamos en la cocina!

¿Estamos? Oh no, no quiero visitas... ¿Por qué tenía que ser justo hoy?

Con dirección a la cocina voy oyendo la voz de mi cuñada y me comienzo a retorcer de rabia de tan solo imaginar que ahora estaremos obligados a estar despiertos con ella hasta las una de la madrugada por lo bajo.

—Hola querida—Le digo con una sonrisa más falsa que mis uñas.

—Qué mala cara traes, seguro te explotaron en el trabajo Helen. —Comenta con una sonrisa macabra que me molesta tres veces más pero que disimulo muy bien acercándome a saludar a Max.

— ¿Qué quieres que te diga? Soy una chica muy solicitada. —Me mofo divertida abrazando por el cuello a Max que me mira extrañado— ¿Han preparado algo de cenar?

—Sí, Selena preparó pescado al horno. —Dice Max levantándose del taburete en el que estaba para ir a revisarlo— Que de hecho está listo.

Sonrío a Selena que también me sonríe. La mosca muerta esta se tituló en Hollywood porque bien trae de la corbata a Max para cada cosa que ella quiere, para ser mi cuñada más parece mi suegra. Por supuesto Max ni cuenta se da de toda la mala onda que nos lanzamos ella y yo, como dice mi madre, nos masticamos pero no nos tragamos.

Sentados alrededor de la isla de la cocina voy sacándole las espinas al pescado, mi mal rato con Moisés se repite una y otra vez en mi cabeza, y termino casi ahogándome con una de las espinitas.

— ¿¡Estás bien!? —Max me golpea la espalda y termino soltando la espinita en el plato. Enseguida me estira un vaso con agua y respiro profundo.

—S-sí. —Respondo entre cortado tratando de toser sin dolor.

—Debes comer con más calma Helen, luego si te mueres ¿Con quién se quedaría mi hermano? —Pregunta la bruja menor.

—Ay por favor. —Respondo con sarcasmo— Como si no hubiese una fila de mujeres deseosas de asesinarme para quedarse con él.

—Cuídate entonces. —Respondo ella echándose un pedacito de pescado a la boca.

—Selena... —Max la reprende con la mirada y ella termina mirando hacia otro lugar.

—Y... ¿Cómo te fue el sábado pasado en tu reemplazo? —Pregunto cambiando el tema o terminaremos del cuello.

—Bien, habían muchas personas. De hecho conocí a alguien especial. —Comenta mirando a Max que le mira atento, Max es muy celoso de su hermanita.

— ¿Especial? —Indago yo tomando el vaso con agua.

—Sí, se trata de un hombre mayor... no sé... quizá tenga unos treinta y algo. Tiene Asperger y hace Yoga pare tener control de sus emociones, su nombre era Moisés.

Una espina imaginaria se me cruza por la epiglotis y se me queda allí al escuchar aquello. No tengo dudas de que Moisés es el único chico con ese nombre en veinte kilómetros o más a la redonda y que Selena venga a decir que es especial es casi como comerse masitas de las pizzas sin salsa ¡Un asco!

— ¿Asperger? —Pregunta Max— Creo que has conocido al amigo de mi Helen, él es "Aspis" y se llama Moisés. ¿No crees que pueda ser él amor?

Asiento sonriendo para no tener que tragar. Prefiero ahogarme de rabia.

— ¡Ah! —Selena me observa alzando las cejas— Le preguntaré por ti a ver si te conoce, quizá así sea Helen. Que genial tener conocidos en común, ¿No crees?

—Yo estaba pensando en invitarlo a cenar un día de estos Selena, Helen me contó tanto de él que hasta quiero conocerlo yo. Imagino que debe ser difícil ser tan adulto y padecer algo así... Como sea, quiero poder hablar con él más de lo que hablo algunas mañanas en el autobús.

— ¿Cómo? —Pregunto sacada de onda a Max.

—Ah... no te había comentado, pero algunas mañanas nos topamos en el autobús cuando nos dirigimos al trabajo, no hablamos mucho, pero algo es algo... Quizá si estamos los cuatro se anime a hablar algo más. ¿No crees?

—Sí... eso creo. —Digo arrastrando la silla para levantarme— Iré por el postre.

¡Malditos sean todos sus ancestros! Detesto con el alma a Selena con su teatro. ¿¡Por qué tenía que conocerla!? ¡Seguro que se refería a ella!

Me cuesta pensarlo, pero el reloj comienza a correr para mí... 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro