Arya Glover se sentía extraña en el sur, aún más en la corte de la princesa heredera.

Era una norteña sin conocimientos de las cortes sureñas, pero había sido escogida sobre las hijas Manderly, quienes tenían más conocimientos de las habilidades sureñas, solo por ser la prima de Cregan Stark.

En un principio pensó que tendría que ir al Septo a rezar a los Siete , pero la princesa no era alguien religiosa, solo Florence, Cecilia, y Ellyn usaban sus tiempos libres para ir al Septo a rezar, lo que dejaba a Arya tiempo para rezar en el Arciano que estaba en la fortaleza.

Arya se arrodilló y junto sus manos a las raíces del Arciano, metida en sus pensamientos, rezando por la salud de sus padres y hermanos, de su primo Cregan. Su pequeño primo estaba bajo la regencia de su Bennard, quien se notaba demasiado cómodo en el trono de invierno.

Terminó de rezar cuando escuchó risitas. Lily estaba colgada del brazo de Laenor Velaryon con Ser Arcturus y Joffrey Lonmouth detrás de ellos.

Laenor Velaryon la estaba cortejando, siempre usaban el tiempo libre de Lily para conversar, y Arcturus como el único hermano presente de ella, vigilaba a la joven pareja.

Ellos pasaron de largo dejando a Arya sola en el bosque de Dioses, luego llegaron las Septas de la reina Alicent.

La Septa Marilla era una mujer en sus treintas, con la mirada suave que combinaba con esos ojos verdosos, en cambio La Septa Simona era una mujer con la mirada amargada y ojos oscuros, las arrugas alrededor de las comisuras de los labios y ojos.

Las dos la juzgaban con esas miradas santurronas. Arya se levantó y sacudió su falda, camino de regreso al saloncito donde se reunían en las tardes.

—Sucia pagana — dijo la Septa Simona en voz clara, Arya bajó la cabeza, no quería comenzar un pleito con las Septas de la reina.

Camino por los pasillos hasta el saloncito, en la puerta estaba Ser Criston haciendo guardia, lo que significaba que la princesa había terminado su reunión en el Consejo.

—¿Se encuentra bien, Lady Arya? — preguntó amablemente Ser Criston.

—Si Ser — Arya forzó una sonrisa — ¿La princesa se encuentra dentro?

—Si, y las demás damas igual .

Arya asintió con la cabeza y Ser Criston abrió la puerta. La princesa estaba sentada detrás de un escritorio leyendo correspondencia, mientras Cecilia, Florence y Ellyn estaban trabajando en flores de tiras de seda.

—Princesa — Arya inclinó la cabeza hacia la princesa Rhaenyra.

—¿Disfrutaste de tu tiempo de oración? — preguntó con una sonrisa la princesa, Arya asintió con la cabeza.

Ellyn palmeó el lugar junto a ella, Arya se sentó y Florence le pasó aguja, hilo y tiras de seda. Todas estaban trabajando en las flores para los sombreros que quieren hacer, todas ellas quedaron encantadas por los sombreros adornados de Lily.

Lily mostró un libro donde decía como hacer sombreros, bolsos de manos, patrones de bordado, cosa que emocionó a las demás damas.

Arya empezó a trabajar en silencio mientras sus compañeras murmuraban sobre el vestido de la princesa. Lily llegó con una sonrisa y detrás de ella venía Arcturus Black.

—Señoritas — dijo Arcturus — Princesa.

Lily se sentó mientras se quitaba su sombrero lleno de flores de seda y cintas color pastel. Arcturus se sentó a lado de la princesa mientras la ayudaba con el papeleo que tenía que hacer para abrir su fundación.

Todas regresaron a su trabajo de hacer flores de seda.

—Laena ha enviado a Nuez — dijo Lily para todas — Ella y James ya se han instalado en Runestone.

—¿Y cómo va el bebé? — preguntó Florence — Puse velas a los pies de la Madre deseándole salud a Laena y su bebé.

—Es un lindo gesto, Florence — sonrió Lily — Si todo va bien. James le escribirá a mamá. Madre se ha ofrecido a ser la partera de Laena.

—Cierto, nos dijo que su madre es sanadora — comentó Cecilia — Es bueno que Laena tenga a alguien de confianza.

—Madre tiene formación de medimaga y participó en el programa de medicina quirúrgica que el Ministerio implementó — dijo Ser Arcturus levantando la mirada de los papeles de la princesa — Ha ayudo a brujas a dar a luz, así que está entrenada en ese ámbito.

—¡Podemos bordar mantas y tejer ropa para el bebé! — propuso emocionada Ellyn.

Cecilia asintió silenciosamente con la cabeza y Florence sonrió ampliamente a la idea de hacer ropa para bebé. Florence, Lily y Ellyn empezaron a decir que debe ser en colores de los Royce, Potter y Targaryen.

—¿Arya estás bien? — preguntó la princesa fijamente en ella —¿Te veo decaída?

—No me sucede nada — contestó Arya.

—¿Fueron las Septas? — señaló Lily con su mano enguantada de encaje rosado.

—Solo son Septas — dijo Arya — Solo las ignoró.

—Si te llegan a insultar, házmelo saber Arya — contestó la princesa con una mirada que irradia fuego — Eres mi dama. Eres la hija de una casa noble, ellas solo han de ser plebeyas que escogieron la Fe como una opción para liberarse de la miseria.

Arya asintió la cabeza a su princesa.

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James ajustó sus anteojos, la biblioteca improvisada fue al fin ordenada. Tuvo que leerle la mente al Maestre Cassian para saber que su lealtad estaba en los Royce y no la Ciudadela.

—¡Alquimia! — dijo emocionado, era solo dos años menor que él. Un joven bastardo de los Redfort que se crio desde niño en la Citadel gracias al auspicio de su tía Jessamyn Redfort Antes estaba otro Maestre viejo, peor antes que la Ciudadela y los Hightower enviaran a un espía, Lady Redfort ordenó a su sobrino que sirviese a los Royce — ¡Pociones!

—Cassian, lamento informarte que soy más afín a las Runas y los Encantamientos — contestó James.

—No importa, Ser — siguió emocionado Cassian. Era flacucho y con orejas grandes, lo único llamativo en su apariencia era sus ojos azules— En la Citadel solo nos habla de las fábulas mágicas de manera superficial. ¡Pero mire! ¡Magia!

James cerró el libro que muchas damas sangre pura leen cuando se enteran de su embarazo. Las mantas para bebé, sobre todo como hacer hilo mágico para bordar las runas.

—¿Libro de bordado? — preguntó Cassian detrás de él.

—Todos los niños de cuna sangre pura son envueltos en mantas bordadas — dijo James— Debe estar empapado de la forma mágica de ambos padres.

—¿Entonces usted tuvo su manta?

—Así es Cassian — James se quitó los anteojos. Además de heredera el nombre y señorío de los Potter, heredó su conocida miopía. Así que tenía sus anteojos y los goggles que usaba para montar en Greyghost — Madre lo hizo durante sus primeros meses de embarazo.

—¿Y la tiene con usted?

—No, mi manta se quedó en Potter Estate en mi mundo — contestó James — Pero se que Lily tiene ese conejo de peluche donde nuestro padre puso su firma mágica. Creo que aún duerme con esa cosa.

—Que envidia nacer con magia — dijo Cassian mirando sus manos — Las maravillas ilimitadas. El poder...

—No te emociones mucho, Cassian — le detuvo James — Hay magos que se pasaron de curiosos con la magia negra que iniciaron guerras sangrientas.

Cassian levantó las manos diciendo que no hablaría más pero no pasaron más de dos minutos que preguntó : — ¿Y donde consiguió estos libros?

—Son duplicados de los originales en Potter Estate — James caminó y tomó uno de runas básicas. Lady Rhea dijo que los Royce tienen antiguos pergaminos desde la edad de los Héroes y los primeros hombres — Artu tiene los de Grimmauld y los duplicados de Black Manor.

—¿Y Lady Potter-Black se quedó sin libros mágicos? — preguntó Cassian.

—Duplicó las bibliotecas y se que Jason Lannister le construyó una cabaña para su uso personal — contestó James — Madre se llevó a nuestra elfina Dilly y Artu se quedó con Mhag.

Claro, y de alguna extraña y retorcida manera, aparecieron cuatro jóvenes elfos domésticos que dicen ser hijos de Dilly y Mhag, tan jóvenes que eran instruidos por Mhag. Artu les había enviado una carta a madre y a él, diciendo que aparecieron ligados a la casa Black.

"Espere un tiempo para que uno de los elfos vaya a Runestone para servirte" había escrito madre.

—Mmmm — Cassian tocó su barbilla — ¿Y cuando comenzara a trabajar en la manta de runas para el nuevo bebé? Quiero ver como hace magia.

—Mañana iré al pueblo o haré un viaje a Puerto Blanco — dijo James — O mejor le escribiré a la princesa Rhaenys.

—¡Es una buena idea, milord! — se emocionó Cassian — Lord Corlys de seguro enviará las telas e hilos más finos para su primer nieto.

—Ni dudes — sonrió James volviéndose a colocar sus anteojos para leer.

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Alicent estaba nerviosa, Larys Strong le dijo que la princesa intercambiaba muchas cartas y tenían pergaminos nuevos todos los días.

Había escuchado que el último mes del año pasado Arcturus invitó a Rhaenyra y sus damas a celebrar algo llamado Yule el día veintiocho del último mes. Una de las tradiciones de mago que Rhaenyra expresó celebrar.

Arcturus y Lily dieron regalos ( algo tradicional) a Rhaenyra le dieron unos lujosos pendientes de rubíes. Al rey un bestiario de dragones que se podrían ver en el mundo de los magos, y las damas de Rhaenyra recibieron hermosos brazaletes de flores.

Y a Alicent un poemario de un tal Percy Shelly.

Alicent no tocó ese regalo de celebración pagana.

En el tercer mes del año, muchos señores de grandes casas llegaron a la capital para la boda de Rhaenyra y Ser Arcturus.

Alicent camino junto a su prima Loretta Bulwer por los jardines reales donde se encontraron con la pareja del momento. Ser Arcturus tenia una capa que se unía aun broche de cuervo, una larga espada colgaba de su cintura en una funda de cuero negro y tachuelas plateadas.

El negro y plata los colores de los Black.

—Yo si deseo una niña — dijo Ser Arcturus con esa sonrisa brillante. — Puede que el sueño de cualquier lord sangre pura sea un varón para que su legado perdure, pero una niña es mi anhelo.

—¿Tu anhelo? — preguntó divertida Rhaenyra.

Loretta miró con el ceño fruncido a Rhaenyra. Desde ahora Loretta era su dama de compañía, estaba molesta porque quería atrapar a Jason Lannister, pero ahora estaba casado con la hija de Daemon Targaryen.

—Una niña que seguirá las enseñanzas de las Vías Antiguas — sonrió él — Forjare su cepillo de magia y me encargaré de cepillarlo. Los muchachos tendrán que batirse a duelo conmigo si quieren su mano. Será mi mayor joya.

—Entonces la primera niña llevará nombre de flor como tu abuela Lily — Rhaenyra inclinó su cabeza para recostarla en el hombro de Arcturus.

Arcturus miró a Ser Criston, la espada jurada de la princesa se dio la vuelta, con vista a los rosales.

Arcturus Black tomó con delicadeza el rostro de Rhaenyra y le besó los labios.

Alicent maldijo a la princesa. ¿Cómo podía tener a tan apuesto caballero como esposo y el trono que le pertenece a Aegon? 

N/a: ¡El próximo capitulo el torneo y la boda de Rhaenyra!

Loretta Bulwer es un Oc que Cassisins usa en su fic de El Dragon de Hierro, es una maldita insufrible que decidí usarla aquí en ese mismo papel de perra santurrona. 

El Maestre Cassian junto a James ( que se note que amo el Merthur)

Loretta Bulwer

*Aparecen cuatro nuevos elfos domesticos*

X: Oye Aly, como se reproducen los elfos domesticos?

Yo: