Hirai-Myoui Momo.

La primogénita por tres minutos.

Hermana gemela de Mina.

Y una jodida loca.

Vivió su infancia y parte de su adolescencia en Kyoto, Japón.

Se metió en malos pasos desde los catorce años, atravesaba el terrible divorcio de sus padres cuando comenzó a robar espejos de carros.

Tres años después, los crimenes del robo al museo nacional de Japón, a una de las más importantes joyerías y a una reserva nacional se le fueron imputados.

Robos de guante blanco en su mayoría.

No culpa a la gente que cayó en sus trampas.

Momo tiene una facilidad para caer bien.

O más bien una necesidad.

Ser una ególatra tiene sus defectos, al parecer.

¿Pero qué es una persona ególatra?

Ególatra es un adjetivo que califica a una persona o una actitud que muestra culto, veneración o adoración exagerada a sí misma.

Si buscas sinónimos de la palabra estoy segura que te saldrán todos los apodos con los que se le conoció a Momo en sus épocas más jóvenes.

Sin embargo, lo que se tiene de amor propio lo tiene de inteligente.

Pues sabía con qué mentes podía meterse.

Pobre Dahyun.

Una alfa tan tierna y suave como lo es ella obviamente caería bajo los hechizos de Momo.

¿Hay algo más atractivo que la confianza en uno mismo?

Y la mayor de las H-M lo sabía, sabía perfectamente que jugaba con alguien que apenas había logrado pasar la raya entre omega y alfa.

Sabía cada debilidad y cada maldita inseguridad de la chica.

Habían pasado tres años desde que las hermanas Myoui habían llegado a la casa, mil y noventa y cinco días bastaron para que Momo pudiera conocer a fondo a su presa.

Conocía todo sobre ella.

Sabía que en los días lluviosos Dahyun se escapaba al patio para bailar debajo de las gotas de agua, sabía que cuando estaba enfadada tendía a irse unos cuantos días de la casa, sabía que había crecido con un dolor interno ante la constante comparación con su propia hermana.

¿Qué peor que te comparen con una omega siendo una alfa?

Momo lo sabía todo.

Y cuando en una tarde llena de relámpagos y gotas gordas de agua KIm peleó con su padre Hirai tomo su oportunidad.

Comenzaron a acercarse, y pronto Dahyun se encontraba pidiendole a Nayeon que les diera una oportunidad de subir al piso cinco.

La omega sin querer más problemas con su menor acepto, y las hermanas subieron al cielo.

Sin embargo, Momo siempre quería más.

Estaba en su naturaleza el no ser conformista.

El querer ser el centro del maldito mundo.

Y ese fue su error.

Vi al peligro acercarse pero cuando quise meterme y avisarle a Nayeon fue tarde.

Momo había marcado a Dahyun.

Aún lo recuerdo tal y como si fuera ayer.

“Tzuyu, Nayeon y ella fruncen su ceño cuando un aroma desagradable les llega a las fosas nasales.

— Dios, ¿qué mierda es ese olor?

La alfa nunca decía groserías.

Ahí supo que el aroma era lo suficientemente fuerte como para descolocar a Chou. Y se preocupo aún más cuando unos pasos resonaron.

Momo entra a la cocina con una sonrisa. Dahyun está escondida detrás de ella.

— ¿Eres tú la del olor, Momo?

Nayeon cuestiona.

— Hazme el favor de tomar una ducha, Hirai. Estoy apunto de vomitar.

Señala Tzuyu sosteniéndose con más fuerza de la encimera.

Momo mueve los labios hacia un lado.

Está disgustada.

— ¿Perdón?

— Voy a vomitar si no te largas de aquí, niña.

El lobo de Tzuyu habla.

Momo gruñe.

— Está sera la ultima vez en tu vida que dices eso, Chou. Te pido el mínimo de respeto para mi pareja.

Toma el brazo de Dahyun y la mueve para que ahora este a su lado.

Unos colmillos marcados en su cuello se muestran orgullosos.

Y ahí es donde el equilibrio se rompe.

Nayeon baja de la encimera y corre hacia su hermana, pero el gruñido de su ahora alfa la detiene.

— No te acerques a ella.

Tzuyu frunce su ceño.

— ¿Dahyunnie? Mi dubu, ¿qué te han hecho?

Su omega hace el intento de volver a acercarse pero la alfa la vuelve a detener.

— He dicho que te alejes, maldita sea.

No.

Simplemente no.

¡No le puedes hablar con la voz de mando a la omega de Chou Tzuyu y pretender que todo saldrá bien!

El gruñido que Tzuyu deja salir hace que las omegas y Dahyun comiencen a temblar.

— ¡Largo de aquí ahora mismo!

Grita enojada.

— ¿O si no qué?

Responde Momo con una sonrisa burlona mientras pasa su brazo alrededor de la cintura de Dahyun y la acerca más a su cuerpo.

— No estoy para juegos, Hirai.

Dice ella colocando a Chaeyoung y a Nayeon atrás suyo.

— Yo tampoco pero no dudes que yo misma cortaría tu garganta si es que le vuelves a faltar el respeto a mi chica.

Momo muestra sus dientes.

— ¿Eso es una amenaza?

— Es una maldita promesa, si crees que puedes ofender a Dahyun estás muy equivocada.

Dice y sale por la puerta.”

¿Sabes cuál es uno de los principales problemas de los humanos?

Su insatisfacción.

Siempre quiere poseer más de lo que tiene.

Y no considero que este mal, las ganas de superarse hablan bien de uno mismo. Pero hay líneas que no se deben cruzar, hay cosas que no puedes desear o querer sin salir ileso.

Como esos hombres que están aburridos de sus vida y engañan a su mujer, pero los descubren. Y terminan perdiendo lo todo.

En el caso de Momo no había nada que pudiera perder.

Mina, tal vez, pero ella no había hecho absolutamente nada malo. Y Nayeon no tenía el corazón para dar la orden y que su cabeza rodara por los suelos.

Dahyun, tal vez, pero ella solo había sido engañada con atención y palabras bonitas. Y Nayeon y Tzuyu no podían ejecutar a tan linda flor.

Si, eran malas. Pero llegaban a ese extremo.

¿Recuerdan que dije que no había nada que perder?

Menti.

Hay algo que a cada persona en esta tierra les partiría en dos perder.

La libertad.

Cuando Momo amenazo sutilmente con ser lo suficientemente fuerte como para derrocar a Tzuyu del poder perdió la confianza de la casa.

Todos tenían prohibido hablar con la mayor H-M sobre cualquier plan u operación hasta que se decidiera que hacer.

Y eso fue una emboscada.

La casa dejaría de estar en peligro, Jeongyeon salía como una ganadora al detener a tan importante delincuente y Tzuyu podría respirar sin el miedo de que su familia y ella estuvieran en peligro constante.

Claro que tuvo que verse creíble.

Chou llegó con el rostro maquillado de golpes y moretones para hacer creer a Dahyun que realmente las habían atrapado.

Dahyun paso todo un año en depresión.

Pero al final logro salir adelante.

Hasta que la vio por la televisión.

Y los sentimientos volvieron a surgir.

¿Qué pasa cuando juntas a una chica con sed de venganza con una que está locamente enamorada?

Pronto llegaran las respuestas.

(El tiempo se agota.)

dios q tensión hay por aquí

vieron q puse KIm q grandes ideas q tengo por dios (Kim e Im juntos pq son hermanas sjsja)

H-M es Hirai-Myoui pero queda mejor así la vdd

tmb vieron q cambie la portada?

me gusto mucho la vdd

otra noche en la que le lloro a tzuyu por ser tan bonita 💔

espero q les haya gustado

y recuerden, están olvidando algo importante

tqm