[CAPITULO TRECE]
TORCEDURAS

Khaleesi había sacado su teléfono para responder un mensaje de Asher. Desde la conversación que tuvieron volvieron a hablar frecuentemente.

En cambio, Bella seguía sin tener alguna respuesta de Jacob. La menor de las Swan le había pedido a Asher que le dijera a Jacob que hablara con Bella al menos para darle un cierre a lo que tuvieron, pero no obtuvo éxito.

— Volveré como a las tres — aviso Eros a su hija.

Tanto Eros como Khaleesi se encontraban en la casa de Charlie, con quien iría de cacería.

— Con cuidado, papá — pidió Khaleesi.

Eros sonrió, acercándose a su hija dejando un beso en su frente.

— Claro que si — escuchó Khaleesi la voz del señor Clearwater.

— Tengan cuidado — insistió Bella mirando a ambos hombres.

— Siempre lo hago — hablo Charlie.

— Tengo los reflejos de un león, Bella — bromeó Eros.

Khaleesi negó con la cabeza al escuchar la broma de su padre. La menor acompañó a su padre hasta la puerta donde se despidió de Charlie quien le dio una sonrisa rogando para que cuidara de Bella.

La Swan entró a la casa al haber visto como su tío y su padre se iban.

— ¿A dónde vas? — cuestionó Khal al ver a Bella tomar las llaves de la camioneta.

— Necesito ir a un lugar, necesito dejar ir a Edward.

Kal asintió.

— Iré por mi chamarra — los ojos de Bella miraron a su prima un poco decaída. — No me mires con ojos de cachorro, ni creas que te dejare ir sola, voy por mi chamarra y ya.

La pequeña Swan no mencionó nada en el trayecto hasta el lugar secreto de su prima. Incluso Bella iba en silencio.

Isabella se detiene en el área del bosque que estaba solitario, a su alrededor todo se encontraba seco, parecía estar sin vida.

Los ojos de Khaleesi se dieron cuenta de la presencia de una tercera persona.

— Laurent — murmuró Bella.

— Así que conoces al vagabundo — murmuro Kal.

— No esperaba encontrarte aquí — hablo el moreno mirando a Bella. — Y menos con una buena compañía. — los ojos del hombre cayeron en Isabella nuevamente. — Fui a visitar a los Cullen, pero la casa está vacía, es una sorpresa que las dejarán aquí, solas. ¿No eras una especie de mascota para ellos?

Khal se movió para mirar al intruso.

— Escúchame bien, mi prima no es una mascota, es un ser humano pensante que puede tomar decisiones coherentes y no está a la espera de los Cullen todo el tiempo, ella tiene una vida lejos de ellos también.

Bella intentaba jalar a Khaleesi quien solo miraba de manera desafiante al chico.

— Mientan — habló la voz de Edward.

Era una ilusión y una muy mala para ambas primas, Isabella sabía que debía hacer al contrario de Khaleesi quien se quedó sin habla.

— Definitivamente todo el tiempo — respondió Bella tomando del brazo a Khaleesi.

— Khal— susurró Edward cerca de ella.

La mencionada seguía sin emitir una palabra.

— Les diremos que has venido a verlos, pero tal vez no debería decírselo a todos — murmuro Bella Swan mirando a su prima. — Edward es algo protector con ella.

— Pero Edward no se encuentra cerca ¿cierto? No puede protegerlas.

— ¿Por qué estás aquí? — pregunto Khaleesi. — Probablemente estas lejos de tu hogar.

— He venido a hacerle un favor a Victoria — respondió el moreno. — Pero ha salido mejor venir por una, ganando a dos.

Khaleesi se sentía algo perdida, tuvo que hacer una nota mental en su cabeza para preguntarle después a Bella sobre la tal Victoria desconocida ante sus oídos.

— Ella me pidió que averiguara si seguías bajo la protección de los Cullen, Bella. Le parece justo matar a la pareja de Edward, ya sabes ojo por ojo, una famosa Vendetta que ha sucedido entre siglos por siglos.

— Amenazalo.

— Edward sabrá quien lo hizo y vendrá a buscarte — dice Bella con seguridad en su voz sosteniéndose con fuerza de Khaleesi.

— No creo que lo haga, después de todo ¿cuándo puedes importarle si te dejo aquí desprotegida? — cuestionó Laurent mirando a Bella y después a Khaleesi. — Victoria no se podrá muy feliz si me encargo de ustedes ahora mismo, pero no puedo controlarme se ven demasiado apetitosas.

— Por favor no, por Dios tú nos ayudaste — dice Bella rogando.

Ambas primas retrocedieron asustadas al ver cómo Laurent intentaba acercarse a ellas. Isabella intentaba proteger a Khaleesi, mientras Khaleesi intentaba proteger a Bella.

— No tengan miedo es por su bien, Victoria las matará lentamente con dolor, mientras yo puedo hacerlo de una manera rápida — susurra Laurent.

— Jacob te amo — susurro Bella sorprendiendo a Khaleesi.

— Asher — susurró la menor.

Un gruñido se escuchó a espaldas de ambas y una criatura, un lobo se acercó poniéndose al costado.

Los ojos de Khaleesi se posaron en la criatura observando que tenía una peculiaridad, un pequeño brillo en el pelaje, una marca que ella conocía.

Sería posible que...

— Vámonos, Khaleesi — Bella la jalo para alejarla de los lobos y de Laurent quien intentaba esconderse de ellos sin éxito alguno.

Las dos primas corrieron de regreso a casa intentando no ver atrás, aún cuando Khaleesi quería detenerse y ver si sus ojos habían tenido una mala mirada.

Khaleesi piso una rama que casi la hace caer al suelo, intento no hacer demasiadas quejas, pero había sentido un pequeño tirón en su pie.

Al llegar a casa, Isabella entró rápidamente a la cocina acompañada de su prima quien iba cojeando.

— Khaleesi — habló Eros al ver a su hija.

— Los vimos papá — habló Bella mirando a Charlie.

— ¿Qué vieron? — preguntó Charlie levantándose de su silla al ver las reacciones de las mujeres.

— No son osos los que buscan. Los vimos en el bosque, son lobos — hablo Isabella intentando calmar su respiración.

— ¿Cómo que en el bosque? ¿Qué estaban haciendo?

— ¿Te caíste? — pregunto Eros revisando a Khaleesi.

— Pise una rama de una mala manera — murmuro Khaleesi.

Eros se fue hacia el refrigerador para buscar algo de hielo.

— ¿Están seguras jovencitas? — preguntó Charlie pasándole un trapo a Eros para poner el hielo.

— Acabamos de verlos iban detrás de... algo.

Eros miro a Khaleesi al escuchar las trabas en la voz de Bella, la chica asintió sabiendo que tenían una conversación pendiente.

— Lobos ¿los vieron? — volvió a preguntar Charlie. — Harry, ¿quieres ir de cacería?

— Claro, yo iré... — dijo Harry.

— Me quedaré con Khaleesi — hablo Eros hacía su hermano. — Me informas cualquier cosa, hermano.

— Llévala al hospital, debo ir a la comisaría — dice Charlie dejando su cerveza.

— Si papá, no te preocupes — sé despidió Bella. — Tío, creo que si debes llevar a Khaleesi al doctor, no nos detuvimos y ella pudo lastimarse.

— ¿Puedes quedarte sola en casa o nos acompañas? — cuestionó Eros hacia Bella.

— Me quedaré — sonrió Bella.

— Nos avisas cualquier cosa — dijo Khaleesi siendo ayudada por su padre a levantarse.

Khaleesi se apoyó de los hombros de su padre, tal vez sólo tenía una leve torcedura, pero conocía a su progenitor quien se preocupaba hasta por un pequeño rasguño.

NOTA DE AUTOR:

¿Qué tal? Me disculpo por la tardanza, han sucedido algunos asuntos personales en este tiempo que me he perdido.

La actividad de votos seguirá, lo dejare en el mismo límite que el capítulo pasado por mi larga ausencia, igual veré si les puedo actualizar nuevamente en estos días, les dejo la meta 25 votos y 10 comentarios, no cuentan los puntos o emojis.

Me despido hasta un nuevo capítulo <3