Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 17

Capítulo dedicado a @Luisiana por ser su cumpleaños., ¡Felicidades!
      ..........…………..…….….......

Hay algo con las cosas buenas de la vida que te hacen temer tenerlas porque muy en el fondo sabes que en determinado tiempo se te serán arrebatadas.

Esa era una de las razones por las que temía sentir algo por Sam, porque temía que al tenerlo para mi, algo lo hiciera irse de mi lado.

Y pasó.

Fue doloroso levantarme del suelo luego de haber asimilado lo que había ocurrido, fue doloroso caminar hasta mi habitación, fue doloroso recostarme y mirar hacia la oscuridad que me envolvía, fue doloroso despertar hoy y caminar hasta el comedor porque todo seguía siendo real, porque la amenaza de Sam seguía estando latente.

Y lo fue aún más cuando vi su rostro en un mar de personas que comían en sus mesas, lo fue cuando lo vi reírse con algo que Devon dijo y lo peor de todo fue verlo susurrar algo en el oído de una chica morena a su lado.

Mi corazón se estremeció, él lo supo porque al instante levantó su mirada hacia mi pero me ignoró por algo que la chica le dijo.

Con los dientes apretados caminé hacia la mesa en donde estaban mis amigos y sin apetito tiré la bandeja en la mesa.

Ninguno reía, sabía que lo habían visto.

Estaba enojada, enojada y herida.

Una pésima combinación.
-Bueno...- Dijo Lukas.- Hoy me toca hacer vigilancia.- Mira hacia la chica muerte sentada a su lado, no se mira muy feliz de estar con nosotros, pero bueno, ella no se mira feliz y punto.

Va vestida de negro, con una camisa manga larga y guantes, y a pesar de que va cubierta los que está a cada lado de ella dejan un espacio prudente.

- ¿Me estás preguntando algo o qué?- Pregunta ella mordaz.

-No era pregunta.- le sonríe él, petulante.- Vendrás conmigo, Caín dijo que te metiera en uno de los grupos, ya sabes, tienes que hacer algo, ayudar de alguna forma.

-Ni siquiera sé qué hago aquí.- Bufa ella.- Quise quedarme hoy para saber cómo estabas.- Me dice.- Pero no te miras bien.
No, no creo que lo esté.

Miro hacia la mesa de Sam y me arrepiento al instante.

Al estar a poca distancia de su mesa puedo ver cómo la chica tiene una mano en su pierna.

Mierda.

-No he dormido bien.- Miento. Pero creo que todos saben la verdad en esta mesa.

- ¿No quieres acompañarme a vigilar los alrededores? Prometo que lo haré divertido.

En realidad no me apetecía, de hecho, quisiera levantarme e ir directamente a mi litera y no levantarme hasta que llegara el día en que regresáramos al pueblo para averiguar lo que ocultan ahí los Primeros.

Pero sé que quedarme aquí, en el mismo espacio que Sam estando tan amable con esa chica va a asfixiarme.

-Sí, claro, eso me gustaría.

- ¿Han visto a Caín?- Pregunta Sabrina acercándose a nosotros con Jordy detrás de ella.-No lo he visto en ningún lado.

-Probablemente está con Elis, tampoco la he visto.- Le digo yo.

-Espero que si está con ella sea para sacarle información.- Dice Elías sentándose en la mesa al lado de la nuestra porque ya no cabe nadie más. Su hermano y Sabrina lo acompañan.

-No está con ella.- Asegura Lukas.- Está encerrado en la oficina, planeando el viaje.

-Bueno, al parecer tendremos que decidir pronto, sabemos que no puede ir y cargar con todo eso solo.- Dice Natalia.- Yo no he estado ahí, creo que no me molestaría ir.

Zack se tensa a su lado.

-Yo... no pensaba ir pero si tu irás...- Sé el final de la frase.-Yo también iré.

-No, no te pediría tal cosa.- Le dice ella preocupada.- No tienes que ir.

-Veremos eso después.- Le contesta con rostro decaído.

-Yo iré.- Dice Jesse con tono decidido.- Tengo que enfrentarlo, ese lugar ha atormentado mis pensamientos por todo un año, es hora de hacerle frente.

-Pues eres muy valiente al pensar eso.- Opino yo.- Porque incluso yo tengo miedo de pisar esos suelos otra vez, creo que por eso los Primeros decidieron reunirse cerca, porque sabían que ninguno de nosotros tendría el valor de volver ahí por nada.

-Y fue una buena estrategia.- Concuerda Zack.

-Yo iré.- Dice Lukas.- Aunque estoy seguro de que Caín no querrá. Me mira.

-Podría hablar con él aunque dudo que tú obedezcas si dice no.

Se ríe.

-Ya me conoces.

-Entonces Natalia, Jesse, Lukas y yo.- Murmura la chica muerte.- ¿Alguien más?- Me mira de reojo.

-Yo.- Dice Maggie.

Jesse se tensa.- No, no te quiero ahí, es demasiado peligroso.- Parece preocupado. Me pregunto qué estará pasando entre él y Maggie, solo espero que por fin haya dejado de ser un idiota con ella ya que sin querer, vivía rompiendo su corazón con algunas de sus palabras y acciones dirigidas a mi. Era momento de que Jesse avanzara y Maggie es una buena compañera de viaje.

-Tú no decides por mi.- Le responde ella un tanto enojada.- Iré.

Jesse rueda los ojos pero no insiste más.

-Anótame en la lista, no puedo dejar a mi chica sola.- Le dice Zack a la chica muerte.

Natalia niega con la cabeza un tanto sonrojada.

-No haces caso nunca.- Le regaña ella.

-Y me amas por ello.- Le dice él antes de besarla castamente.

Por acto reflejo miro hacia Sam, pero no está en la mesa con Devon, Cam y Drew y se me hunde el estómago cuando me doy cuenta de que tampoco lo está la chica.
No lo pienso, sólo me muevo.

-¡Hey! ¿A dónde vas?- Me pregunta Natalia cuando me levanto hecha furia.

-A castrar a alguien.- Le digo entre dientes antes de casi correr a fuera.

Salgo de la cafetería y veo a ambos lados del pasillo, no hay nadie.

El corazón me late de manera dolorosa.

Si Sam se acuesta con alguien más, el hecho de que no me recuerde no interferirá en el desagrado que me causará.

Voy hacia las duchas y los baños, azoto las puertas y veo por debajo de ellas, parezco una loca y no me importa en estos segundos

Termino de revisar los baños, ellos no están aquí...
- ¡Ay!.- me quejo cuando al girarme me golpe con una dura pared.

Levantando la mirada me topo con unos ojos verdes que me miran entrecerrados, retrocedo dos pasos y soy incapaz de ocultar mi alivio al verlo ahí y solo.

- ¿Buscabas algo?- Pregunta con una ceja alzada y su voz cargada de molestia.

-Uh... No.

- ¿Entonces qué haces aquí?- Se cruza de brazos. Miro sus manos, no puedo evitar pensar en que estuvieron en mi cuello no hace menos de veinticuatro horas.

- ¿Que no es obvio?- Pregunto con sarcasmo y señalo con la mano los baños.

-Pero estás en el baño de hombres, a mi parece que no estabas aquí por casualidad.

-Lo has hecho a propósito.- Le reclamo incapaz de seguir con la mentira.- Te he visto, sabías que lo haría.

Se me queda viendo.

-No te creas tan importante, si quiero tener sexo con alguien no es porque me importa si me ves o no, hay algo que se llama placer, por si no lo sabes y lo hubiera tenido si tú y tus insoportables cambios emocionales no me golpearan como una roca.- Parece irritado. Es cuando me doy cuenta de que él en verdad iba a hacerlo con esa chica, pero por la conexión ha sentido toda mi rabia y disgusto. No sé cómo sentirme al respecto. Pero cualquiera de las opciones no son buenas.
-Entonces deberías bloquear la conexión.- Digo en tono neutral, el disgusto y el enojo me gritan que mantenga la dignidad intacta. Sam se odiará por esto cuando recupere la memoria.

-Sí, debería.- Me contesta con voz plana.- Pero pasa que sentir tu disgusto, enojo y desesperación hace que mi día mejore, así que no, prefiero arriesgar un buen polvo en vez de perder mi oportunidad de verte infeliz.

-¿Sabes? Habrá un momento en que recuperes tus recuerdos y entonces vas a odiarte por eso.- Le espeto enojada.

-Tú actúas como si me conocieras.- Dice enojado.- Pero en realidad sólo te mostré la parte que quería que vieras.

No lo soporto más, le doy un puñetazo en el pecho con fuerza, él retrocede y hace una mueca.-¡Idiota!¡Yo conozco cada una de tus partes! No lo recuerdas pero ya hemos pasado por esto, ya me has odiado, ya me has intentado matar, ya me has amado¿Y sabes qué es lo más irónico de todo?- No me contesta y vuelvo a arremeter contra él pero me detiene el puño en el aire y lo sostiene con fuerza, me mira por debajo de sus pestañas entre sorprendido y enojado.-¡Te hice una pregunta, baboso!  

Su mirada penetrante me escudriña.- No, no lo sé.- Espeta con fuerza y me aleja de un tirón. Yo retrocedo pero no lo suficiente como para evitar sentir su olor.

-Lo irónico fue que al querer romperme en realidad me reparaste. No voy a darme por vencida contigo Sam, no importa si no me amas ahora, haré que te enamores de mi otra vez.

-Jamás me enamoraría de la asesina de mi amigo.- Ruge con furia y sus manos se aprietan en puños.

Me le quedo viendo.-Soy más que sólo la asesina de Isak, tú te diste cuenta de eso y por eso te enamoraste de mi.- Digo en voz baja, sé que si me quedo más tiempo aquí romperé a llorar frente a él y probablemente se  sentiría bien con eso.- Fuiste quien me hizo aceptar quien realmente soy, con mis demonios incluidos, no serás ahora el que me haga sentirme culpable por mis acciones pasadas.- Camino hacia la salida pero su cuerpo la bloquea.- Con permiso.- Digo con la rabia contenida, no rabia sino frustración por no poder hacer que él entienda que nuestro amor pudo con todo el odio en nosotros. Pero ni siquiera lucha, se hace a un lado y me deja pasar. Salgo del pasillo pisoteando con fuerza y luego paro de golpe al recordar algo y regreso al baño, parece sorprendido de verme ahí otra vez.- Y por cierto, si vuelvo a darme cuenta que buscas tener sexo con alguien que no sea yo¡Te castro!- Doy media vuelta y salgo de ahí con el corazón en la boca.

Espero que eso no pase porque en realidad no me importaría tener hijos con él...

Ni siquiera supe lo que hacía hasta que choqué con él.

No pensé en lo que haría si los encontraba enrollándose en el baño, sólo supe que tenía que evitarlo.
Y ahora estoy en el mismo lugar que antes, con Sam odiándome hasta los huesos.

Me negué a ir a mi habitación y llorar por él,  así que en su lugar busqué a Lukas y decidí iniciar con las lecciones que le había prometido.

Estuvimos en la sal de entrenamientos por horas, ambos teníamos de qué huir y al parecer el lugar perfecto para hacerlo era este.
Perdí la noción del tiempo y en su lugar me concentré en afinar los golpes de Lukas.
El chico tiene buenos ganchos, sin embargo no me golpeó lo suficiente como para sacarme a Sam de la cabeza.
Así que empecé a hablar, cada vez que él golpeaba yo decía algo al azar y recibía un golpe como respuesta.
Yo me estaba conteniendo, no quería golpearlo, ahora que mi fuerza estaba bastante aumentada también estaba fuera de control, justamente estaba pensando en Caín y cómo podría ayudarme cuando lo vi entrar en toda su gloria vestido de negro.
Lukas paró de tratar de interceptar un golpe en mi traquea cuando lo vio a través del espejo.
-Veo que están ocupados.- Nos saluda con un asentimiento.- Ni siquiera quiero preguntar cuánto tiempo llevan metidos aquí porque quizá no quiera escuchar la respuesta.

Lukas se quita la camiseta remojada y la tira al suelo, en su búsqueda por una botella de agua revisa su reloj.- Sí, probablemente no quieras.
Caín rueda los ojos y me señala.-Necesito hablar contigo.
-Dime.
-No es que quiera presionarte al respecto, sólo saber la respuesta.- De inmediato sé de qué va esto.-¿Vendrás con nosotros al final de la semana para ver lo que Mauro hará en ese pueblo?
-No he pensado en mi respuesta.- Hago una mueca. De hecho sí lo he hecho pero cada vez que lo hago termino recordando todo lo que pasé ahí, termino por pensar en otra cosa a propósito.- No tengo respuesta aún.
-Es que estuve pensando, probablemente no quieras ir y todos aceptamos eso, por eso quería proponerte que te quedaras. Los dos sabemos que no todos podemos ir.- Y no todos queremos.- Y si no vas podrás encargarte del búnker, sólo estar por si algo sucede.
-Pero no sería justo y no sería correcto, ya nos hemos separado antes y ves cómo terminó todo.- De tan sólo repasar los hechos se me hiela la sangre.
-Ya no hay nadie quien nos rete aquí adentro Abbs, todos nos respetan. Si no vas el mundo no se acabará, sólo te ahorrarás la molestia, además, no es que vayamos a atacarlos, sólo queremos ver lo que hay ahí y si es algo que nos interesa, volveremos por él incluso podríamos utilizarlo en su contra pero no es nada oficial, no es necesario que vayas.

Miro a Lukas que está haciendo flexiones a pesar de que no las necesita.

Todos irán, incluso él.
Y si me quedo aquí sin hacer nada me sentiré culpable si algo les sucede, se supone que somos una familia¿Cómo podría abandonarlos con esto?

Caín sacude su mano frente a mi y me hace volver al lugar.

-Lo siento, lo estaba pensando.

-Si decides ir, tienes que decirme con tiempo, tenemos cinco días para ir, utilizaremos el portal para llegar más rápido.

-¿No serían seis días?¿Acaso piensan irse un día antes?

-Pensamos acampar en el bosque una noche antes, así cuando lleguen estaremos listos par colarnos.

-Yo... te lo diré en la noche ¿Sí? Realmente necesito pensar en esto.

-Por cierto, no te he querido preguntar por ello pero me ha dicho un pajarito...
-Yo lo he dicho.- Dice Lukas con la voz forzada cuando hace otra flexión.
-Como sea, Lukas me dijo lo que sucedió hoy en la mañana ¿Estás bien?
-Por supuesto que no.- Me siento en la banca, la misma bendita banca en la que él me encontró la noche anterior.- No se suponía que esto sucediera, pero así son las cosas, no se supone que sucedan.- No me sorprende que mis palabras estén cargadas de veneno.- Un día éramos felices, yo había sabido la verdad sobre Isak y me odiaba tan profundamente que él pensó que estaría mejor sin él y entonces lo persigo para arreglar las cosas y todo está bien...- Pienso en esa noche y lo perfecta que fue, me duele el pecho de tan sólo recordarlo.- Y entonces Mauro aparece y nos separa y yo... yo simplemente no esperaba esto, cada día desde que él se fue esperé a que me hablara a través del vínculo.- Cuando levanto la mirada no me enfoco en el de Caín que me mira entre compasión y tristeza sino en el que me observa desde la entrada con el rostro tenso y serio. Lo siguiente que digo lo hago mirando directamente hacia Sam.- Y luego me doy cuenta que la razón por la que él no se comunicaba conmigo no era porque estaba infiltrado y fingiendo ser un soldado, sino que se había convertido en uno y me habían borrado de su mente y su corazón.

Miro hacia otro lado para que no vea cuán llorosos están mis ojos y cuando vuelvo a mirar el lugar en el que estaba me doy cuenta de que se ha ido.
-Así que no Caín, no estoy bien y hasta que mi Sam no regrese, no lo estaré, porque la parte que él perdió cuando su memoria se borró, se llevó una parte mía, porque eso es lo que hacíamos, nos complementábamos.
-Recuerdo cuando lo odiaba por amarte.- Caín se ríe de sí mismo y negando con la cabeza se sienta en el suelo frente a mi, Lukas decide descansar en una banca del otro lado de la sala de entrenamientos.- Fui tan egoísta por eso.

-Sólo querías protegerme.- Le recuerdo.

-No, realmente fui egoísta, sólo quería que me miraras como lo miraras a él, no me di cuenta del error que cometía al no dejarte ir de esa manera. Pero cuando abrí los ojos, cuando me di cuenta de que merecías a Sam y él te merecía a ti, te dejé ir y empecé a ver cuán bueno era él para ti. Todo ha sido como un juego con niveles  ¿Sabes? lo que pasó entre tú y él.

-¿A qué te refieres?

-A que todo lo que ha pasado te llevó hasta él. Desde ir a ese pueblo, librar esa batalla, Isak... Todo te llevó hasta él, si nada de eso hubiera pasado, probablemente no se habrían conocido, él nunca tu hubiera conocido y amado y tú probablemente seguirías con Thompson. Pero ninguna de esas cosas parecen opciones ahora¿Verdad?- Niego con la cabeza, porque soy incapaz de murmura nada.- Sólo piensa en esto. Estás en uno de los niveles más difíciles, uno en el que todo está mal, donde tú llevas la desventaja, y cuando pienses que ya no puedas más, sólo piensa en lo que ganarás al final del juego. ¿Puedes imaginarlo?¿Lo que quieres ganar?

Algo viene a mi mente. Un pensamiento.
Una casa con vistas a un océano, música suave de fondo, reconozco la melodía como la que me trajo de regreso la vez que casi muero, una risa a mis espaldas y unos brazos que me rodean desde atrás y mientras yo sigo viendo por la ventana, a ese océano implacable, siento su risa hacer cosquillas en mi nuca.
Y sé quién está detrás, porque no quiero a nadie más ahí, sólo a él.
-Sí, sí sé lo que quiero ganar.

-Entonces no te des por vencida en el juego, tienes que llegar a tu premio.

-¿Y cuál es tu premio?- Le pregunto curiosa.

Caín se queda pensativo.- Creo saberlo pero no sé si será posible ahora.
-¿Y por qué si yo puedo tú no? 
-Porque no estoy seguro si es un premio que me destruirá o me hará vencedor.
-Eso sí es triste.- Se burla Lukas.- Yo sólo quiero chocolate¿Por qué ustedes no sólo piden chocolate como premio? Haría todo más sencillo.- Niega con la cabeza.
-Es que no lo sabes aún.- Me río entre dientes.
-No lo haz sentido aún.- Me sigue Caín girando su cabeza para poder encontrar a Lukas con la mirada.
Este frunce el ceño.
-¿El qué?
-El poder del amor.- Le digo yo, al instante dejo de sonreír.
-Ese que te da vida o te la quita.- Dice Caín y parece sentir las palabras que dice tanto como yo.
-O el que te rompe o repara.

Tal vez el amor sea una cosa y la otra, que unos sean los obstáculos  y los otros sean la compensación por tanto dolor.

Luego de que Caín se va, Lukas y yo nos quedamos entrenando. Sé que es hora de parar cuando Lukas empieza a arrastrar los pies.
Nos vamos a la cafetería y nos comemos todo el chocolate que podemos, ganándonos malas miradas de mi mamá por robarnos las provisiones.

Cam y Devon nos interceptan en la mesa y se sientan con nosotros. Le lanzo una barra de chocolate a Cam que casi lo golpea en el rostro y le paso amablemente otra a Devon.
Cam por supuesto, refunfuña por ello.

-Ehhh, eso es favoritismo, me dueles Abby.- Se toca el pecho supuestamente herido.

Me río de él, tratando de ocultar el chocolate entre mis dientes.

-No te pongas celoso cabeza de pollo porque empezaré a creer que de verdad tienes sentimientos.
Cam me lanza el envoltorio de su chocolate riendo.

-Eres perversa.

Cuando se hace de noche no he tomado una decisión todavía y estoy consciente de que no lo he hecho a propósito.
Tal vez lo mejor sea no ir.

No es el lugar el que me aterra, son los recuerdos que regresarán del cofre en el que los he guardado junto con el dolor que me dejaron.

Ese pueblo está tan manchado de sangre que en los mapas podría aparecer como una mancha roja.

Y sólo me pongo a pensar en que si hubiéramos sabido lo de los Primeros desde que llegamos ahí, nos habríamos ahorrado tantas muertes.

Me encierro en mi habitación para evitar que alguien vea la frustración en mi mente.
Caín lo dijo, todo está conectado.

Si Jesse no hubiera decidido traicionarnos, James hubiera podido advertirnos y tal vez las muertes serían menos o nada, pero el padre de Jesse hizo su jugada y lo desvió del camino.

Si no hubiera estado cegada por el odio hacia los cazadores entonces tal vez hubiera reconocido al chico joven que asesinaba con mi espada.
No eso no, no puedo pensar en que no lo hubiera hecho, ya dejé ese barco.

Isak me habría matado, incluso sé que Sam lo habría hecho ese día si yo no me hubiera defendido. 
Por eso dejo de pensar en ello.
Todo pasó como debía pasar, todo pasó por una razón.

Incluso que Sam perdiera la memoria, todavía no sé la razón pero seguramente algún día seré capaz de hacerlo.

Y entonces algo hace click en mi cabeza.

Todo pasa por una razón.

Y la razón por la que Sam no me mató fue porque se dio cuenta de quién era.

Y es justo lo que debo hacer ahora, ser yo misma, demostrarle por qué se enamoró de mi.
Porque si algo es cierto es que no se enamoró de la guerrera que todos afuera creen conocer.
No, él se enamoró de la chica con problemas, fuerte y sensible a la vez que se encontró en su edificio una noche.

La chica que no pudo amar porque le pareció algo más.
Algo que valía la pena conocer.

Seré esa chica otra vez, le demostraré por qué decidió amarme.  

Hola mis lectores, sé que muchos quedaron en shock por el capítulo anterior y les pido disculpas, sé que les duele ver a Sam así pero prometo que como siempre, todo pasa por un razón.

Déjenme en los comentarios qué piensan sobre Sam y su falta de memoria y comportamiento malvado.
Los estaré leyendo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro