Habían pasado ya dos meses, Taehyung ya tenía dos meses y dos semanas y sus cambios de humor eran muy notorios. A veces está feliz, triste o enojado.

Se enojaba cuando algo no le salía o le quedaba bien, se podía sentir triste cuando Jungkook se iba a trabajar o cuando no recibía besos por parte de Jungkook y estaba feliz cuando estaba junto a Jungkook y recibía mimos por su parte.

– ¿Tae, no hay algo de comer? – preguntó Jungkook quien ahora estaba comiendo unas galletas.

– No, kookie – respondió parándose de su lugar – ¿Quieres que te cocine algo? – pregunto acercándose a Jungkook.

– No, no – respondió – ¿Quieres ir de compras? – pregunto dejando las galletas en la mesa para dirigirse con Taehyung.

– ¿Podremos comprarme algo de ropa para mi, es que ya no me quedan mis pantalones? – pregunto emocionado.

– Claro y hacemos la despensa – dicho eso se fueron a cambiar.

[...]

– Jungkookie es un tonto – dijo un omega de cinco meses de embarazo.

Oh, el omega embarazo estaba enojado pero muy muy enojado, la razón Jungkook tenía más de veinte minutos de retraso el ya tenía que estar ahí, con él acostado a su lado y dándole mimos y muchos pero muchos besitos.

– ¡Bebé ya llegue! – Grito desde la planta de abajo Jungkook.

Taehyung se dio la vuelta, dándole la espalda a la puerta, él no quería ver a su alfa.

– ¿Bebé? – entro a la habitación – Bebé te estoy hablando.

– No quiero hablar con alguien que no puede llegar a tiempo – comentó con un puchero.

Jungkook quedó de cuclillas, y acarició la mejilla de Taehyung.

– Lo siento por haber llegado tarde, bebé – se disculpó – Es que me distraje ya que vi una tienda de bebé y encontré un trajecito y me gusto, mira  – le enseñó el trajecito.

Taehyung vio el trajecito y le pidió ayuda a Jungkook para sentarse en la cama.

– Es muy bonito, me encanta – agarro el trajecito – ¿Jungkookie, para cuando vayamos otra vez al hospital para ver cómo está nuestro bebé, podríamos preguntarle al doctor que es, si es niña o niño? – preguntó con un puchero.

– ¿Pero no me dijiste que no querías saber que era, hasta que naciera? – pregunto algo divertido.

– Si, pero yo quiero decorar ya el cuarto, por favor Jungkookie – pidió con un puchero.

– Está bien, cuando vayamos le preguntaremos – le dio un beso en los labios, para después darle un beso al estómago ya más grande de Taehyung.

[...]

Jungkook y Taehyung estaban felices, la razón se habían enterado que iban a tener dos hijos, una niña y un niño. Como se habían enterado después de meses era muy fácil, el niño estaba escondido atrás de su hermana.

Taehyung lloró mucho cuando se enteró que iban hacer una parejita.

En estos momento Taehyung se encontraba viendo cosas por una página web, ya que Jungkook se encontraba trabajando el se encargaba de ver las cosas que iban a ir en la habitación de sus hijos y cuando llegaba Jungkook le preguntaba si les gustaba o luego elegían los dos juntos.

Solo le faltaban dos meses para que sus pequeños hijos nacieran.

Si alguien le preguntaba si estaba feliz él claro que estaba feliz.

El cuarto de sus pequeñitos ya estaba listo y eso lo tenía feliz y su Jungkookie lo trataba como un rey; lo consentía, lo mimaba y le daba muchos besitos.

Lo único que le faltaba para hacer feliz era que su niña y su niño nacieran.

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