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Los Fragmentos

Bueno, parece que esta historia recibe mucho amor! Eso alegra mi corazón, por lo tanto...

Disfruten!

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En el antiguo Japón de la época feudal, un suceso fantástico y sin presentes sucede. El pasado y el presente se unen, donde el encuentro inevitable de una joven de la época moderna y un mitad demonio sellado en el pasado se lleva a cabo.

Kagome Higurashi e Inuyasha se unen y con eso da el inicio de un viaje lleno de aventuras y peligros.

La perla de Shikon era el objetivo.

Pero antes, luego de una serie de eventos desafortunados (de los cuales no se hará mención porque ya todos conocemos como sucedió) podemos ver cómo una escena un tanto extraña llevaba lugar en ese momento.

A la orilla del rio el joven de rojo conocido con Inuyasha corría con rapidez tras una extraña ave negra similar a un cuervo. Lo más extraño, sin embargo, era que en la espada del joven había una chica con un uniforme de colegiala la cual apuntaba con un arco y flecha a dicha extraña ave.

Que se sepa que el ave es un demonio, por lo tanto, lo que sucederá a continuación no es considerado maltrató animal.

Después de varios intentos infructuosos y patéticos (ella nunca había usado un arco y flecha, de acuerdo!? No es su culpa ser mala en eso) Kagome decidió usar su inteligencia superior del futuro (bueno, quizás no superior pero ella era inteligente y del futuro por lo tanto es casi lo mismo) y usando una de las patas del ave demonio que intentaba unirse al cuerpo la ató a su flecha esperando que dicha pata la guiara y así poder acabar de una buena vez con esa cosa rara.

Y oh! Sorpresa, sorpresa. Su plan funcionó, el ave demonio fue exterminada, ahora solo debían conseguir la perla y ella podía regresar a casa, el grosero chico perro pediría su deseo y todos felices.

Pero todos sabemos lo que sucedió realmente.

La poderosa perla de Shikon se rompió en cientos de pequeños fragmentos que se esparcieron por todo el Japón antiguo, completamente de forma aleatoria.

Y cuando el pobre, pobre inuyasha se enterara de este desafortunado evento... bueno.

Sobra decir que no estaba feliz.

Pero todos sabemos esto. Y lo que nos importa es un pequeño hecho.

La perla debía ser rota, un evento que debía hacerse y se hacía en todas las líneas del tiempo. Una acción que obligaría a Kagome e Inuyasha a emprender un viaje en busca de los fragmentos y donde se reunirían con otros amigos que los ayudarían en su viaje.

Pero hubo uno, un fragmento, diminuto en comparación de los otros; que no cayó en donde se suponía que debía hacerlo.

Como si algo más lo guiara, este fragmento emprendió un viaje directo al pozo de los huesos, un lugar que estaría conectando al pasado y al futuro durante mucho tiempo.

Y esa acción lo cambió todo.

En su reino sin luz, la guardiana del tiempo vio este pequeño suceso, sus ojos gránate observando los acontecimientos que esta variable ocasionaría.

Porque ese pequeño fragmento viajaría al futuro, pero no a 500 años del futuro donde Kagome habitaba, el fragmento viajaría aún más años.

600 años después de que la perla de Shikon fuera dividida; Kiryuu Zero encontraría el fragmento que había caído en el pozo.

Porque la barrera que dividía el pasado y el futuro estaba rota por los continuos viajes de Kagome, y ese fragmento aprovechó la oportunidad.

La guardiana de las puertas del tiempo frunció el ceño un poco molesta, por la alteración de aquello que había sido establecido.

Pero ella no intervendría, porque así como eso fue una acción imprevisible también fue inevitable.

—Ten mucha suerte, Kiryuu Zero. Espero que logres salvar a Midoriko...

Dejando que los sucesos que pasarían en el pasado siguieran su curso, la guardiana del tiempo se dio la vuelta. Ella tenía trabajo que hacer.

Su princesa la necesitaba.

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600 años después, un solitario Zero entraba al abandonado templo. Su plan era simple; buscar toda la información que pudiera y luego...

Luego ya vería que hacer.

Aún no sabía cómo exactamente encontraría algo que se supone ya no existe, era el problema mas grande, porque en serio. No es como si pidiera viajar al pasado justo cuando esa Perla existía y salir a buscarla. Cierto?

...

Regresando con Zero, en ese momento él se encontraba explorando el lugar. A pesar de que el lugar era viejo, aún estaba pie; había tres lugares principales se dio cuenta.

El templo principal, la casa y una pequeña bodega.

Zero eligió ir primero a la casa.

Entrar no fue difícil, podía ver que el polvo y el tiempo habían hecho mella en el lugar, pero tampoco eran ruinas. Su él subía al segundo piso estaba seguro que aguantaría.

—Y si me caigo no moriré... los beneficios de ser un vampiro.

El lugar no era grande, no le tomó mucho tiempo encontrar todas habitaciones, había cuatro habitaciones esparcidas en el primer y segundo piso, un baño, la cocina y el comedor. Y sorpresa, sorpresa, la tubería aún funcionaban y había servicio de agua.

Interesante.

Obviamente el lugar había sido desalojado, ya no había muebles pero si había un ático y...

—Diarios...— al menos cinco tomos de libros llenos de polvo pero entendibles aún.

Pero ya era muy tarde para leerlos y Zero aún debía arreglar un lugar para dormir por lo que solo tomó la caja con los diarios y fue a la sala a limpiar un poco y poder dormir.

Vampiro o no, Zero necesitaba descansar.

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"K. Higurashi" se leía en la portada de los  libros, seguramente quien escribió los diarios. Comiendo una barra nutritiva como desayuno Zero comenzó a leer.

Y rápidamente se decepcionó cuando al notar que solo era el diario de un anciano común y corriente.

—Porque el hombre tiene una gran lista de enfermedades raras?— en la soledad del lugar Zero no entendía.

Estaba a punto de rendirse con estos diarios e ir a buscar más libros cuando de repente el dueño del libro comenzó a mencionar la Perla de Shikon.

Bueno.

" Mi nieta se fue de nuevo en busca de la perla de Shikon, ese amigo suyo de cabello blanco se fue con ella.

Aún me es increíble darme cuanta como ella puede viajar hacia el pasado en ese viejo pozo, pero Kagome está determinada a encontrar los fragmentos de la perla con su amigo Inuyasha. 

Estoy muy orgulloso de ella.

Pero ahora debo investigar nuevas enfermases para excusar su ausencia en la escuela. Encontré esta nueva enfermedad del occidente... Dengue creo que se llama, creo que será la próxima que usaré"

Zero frunció el ceño...

Viajes en el tiempo. Eso... eso no era posible, Zero estaba seguro que ni siquiera Kuran (quien era el vampiro más poderoso que conocía... aunque odiará admitirlo) podría realizar tal hazaña.

Y esta niña... Kagome podía?

Siguió leyendo los demás diarios sin darse cuenta del paso de las horas. Y mientras más leía más preguntas tenia.

Al día siguiente y logrado leer todos los diarios, Zero decidió ir a ver este "portal del tiempo" que el diario hablaba. Aún escéptico de que sea real, porque, si algo como eso existiera.

Seguramente algún vampiro o cazador lo habría notado, no? Si la chica hacía viajes en el tiempo regularmente en ese lugar, debería haber algún tipo de energía de la cual alguien se daría cuenta. Cierto?

Pero de nuevo... vampiros y cazadores podían ser muy entupidos a veces.

—Que vergüenza realmente.

El lugar donde estaba este dichoso pozo, se encontraba cerrado con fuertes cadenas, nada que su fuerza no pudiera romper. Frunciendo el ceño y arrugando su nariz, Zero entro.

—Este lugar apesta.

Zero miro ese pozo y realmente no encontró nada fuera de lo normal, a pesar de los encantamientos que lo rodeaba, parecía algo común y corriente.

—Como funcionaba esto? Ella saltaba al pozo y cuando salía estaba en el pasado?— extraña manera de viajar si se lo preguntan.

No es como si Zero supiera de algún método normal para viajar al pasado. Pero él había pensado que al menos, algún hechizo estaría involucrado.

Zero se acercó, mirando al pozo tratando de ver el fondo pero no lográndolo. Todo lo que miraba era oscuridad, insectos que se arrastraban por las paredes y una extraña luz al fondo.

Espera...

—Que es eso?— parecía un tenue resplandor de alguna joya pero... no había luz para reflejar y que hubiera dicho resplandor.

Sin darse cuenta Zero se inclinó más y más dentro del pozo en su búsquedas para poder ver mejor ese resplandor.

Y repente sintió un llamado...

"Ven..."

Algo susurro cerca suyo. Zero parpadeo, queriendo responder al llamado, pero luego sacudió la cabeza y se alejo del pozo.

—Que mierda fue eso?

Fue como si... como si algo lo llamaba y obligara a su cuerpo a actuar por si mismo.

Francamente aterrador.

Zero odiaba que su cuerpo hiciera cosas que no se suponía debía hacer, demasiado traumatizado con el control de los purasangres quizás pero eso no quitaba que lo odiaba.

No, no, no. Nadie iba a controlar a Zero de nuevo.

Frunciendo el ceño, Zero se alejo de ese lugar y regreso a la casa, tal vez debería buscar más inflación antes de alejarse.

Dentro del pozo el brillo continuó. Esperando... llamado.

Solo un poco más.

Al tercer día de su llegada Zero regreso al pozo, mochila en mano y más terquedad que determinación. Él iba a hacer esto, jodidamente  lo haría y condenadas sean las consecuencias.

Y si moría?

Se convertiría en un puto fantasma y atormentaría la bastado de Kuran por la eternidad.

Su venganza sería terrible, temible.

Tomando una respiración profunda, Zero se acercó de nuevo a ese pozo, el llamado que sintió el día anterior ahora más claro que antes.

Y mas intenso.

—Me siento ridículo, más vale que esto funcione. Midoriko...

El brillo de antes aún estaba ahí, esta vez Zero no espero sentir ni un llamado, si iba a entrar a ese lugar, lo haría por su propia cuenta.

Así que... salto.

Y el brillo se intensificó rodeando a Zero y abrumando sus sentidos.

Es familiar...

Y luego una voz.

"Estas aquí..."

Zero cerró los ojos el brillo de repente demasiado intenso para él, hubo un rugido en sus oídos y luego la sensación de ingravidez, como si florara un momento.

Y luego?

Luego todo fue oscuridad y Zero ya no supo más.

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Y que les pareció? Nada de diálogo pero hey! Había cosas que debían hacerse XD

Quien notó el pequeño cameo que hice? Si lo hicieron son de las mías.

Si no, es que quizás son muy jóvenes XD 😂

Gracias por leer y su amor a la historia.

Nos vemos!

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