Hace tres años aproximadamente...

Geno estaba bastante nervioso, pero allí estaban, a solo unos pasos para pasar a aquel universo alternativo donde provenía aquel curioso esqueleto alto. Temía bastante, pero sabiendo que su hermano Error estaría vigilando de vez en cuando sus códigos le tranquilizaba, ahora su problema era la reacción de la gente del pueblo donde vivía Blard, ¿Sería aceptado? Todo daba vueltas...

- ¿Estás listo? -Preguntó el responsable de sus sonrojos, asintió tomando su mano, y así ambos entraron por el portal- Bienvenido a Sandtown.

Sintió la calidez de la arena y lo primero que vio fue el bosque sin ninguna hoja, pero lo que más llamó su atención fue el cielo, todo era artificial según el mayor le contó, pero parecía tan real que el sol que se estaba ocultando lo cegaba pero enamoraba.

- Es tan bello... -Susurró, de todas formas, hace mucho tiempo no salía de la pantalla de guardado, todavía estaba inseguro, pero al no sentir dolor alguno, se aseguró que seguía vivo apretando la mano de Blard.

- No tanto como tú.-Guiñó una cuenca- No tenemos mucho tiempo, así que solo te presentaré a los del pueblo y caminaremos un rato hasta que se oscurezca mientras te cuento todo lo que quieras.

- Sí, realmente quisiera saber todo lo de aquí.

Se tuvieron que soltar de las manos por comodidad del de bufanda ante nuevos monstruos, era impactante ver todo tan distinto pero a la vez melancólico, hasta tuvo que respirar un buen rato antes de seguir explorando junto a Blard cuando su Papyrus apareció, era distinto de algún modo, más consciente de la situación, maduro pero aún con su espíritu en alto. Es más, sintió sus cuencas escocer, siempre había sido un tema muy delicado para él.

Ambos terminaron alejados del pueblo, en medio del desierto mientras miraban las estrellas.

- ¿Cuánto les costó aceptar la pérdida...? Todos se ven motivados, sonriendo pese vivan muy distinto a como era antes.

- Es lo hermoso de este lugar. -Indicó Blard- Ellos mismos fueron los que me motivaron a seguir adelante, yo... estuve muy perdido cuando todo se echó abajo, además de culpable; yo me rendí en ese entonces, pero al ver que ya tenían un sistema previo al actual, que avanzaron pese yo les hubiese arruinado la vida... Salí de las sombras por su motivación, hice lo que pude para evitar que todo se destruyera otra vez, ayudando como podía.

- Igualmente no fue del modo correcto estar acabando con tu propia vida con tanto trabajo...

- Lo sé. Pero he estado dejando un poco mis malas costumbres, y eso debo agradecértelo, a ti por quitarme de la cabeza solo el trabajo. -Tomó ambas manos ajenas, mirándole con una ternura que Geno no podía explicar, se sintió atrapado en sus ojos- Pienso en ti, en tu felicidad, en todo lo que puedo hacer para que dejes atrás el dolor que te atormenta.

- Blard, no tienes que...

Sintió la necesidad de también tomar sus manos, solo apretando a la par que miraba al mayor iluminado por la falsa luna, se sentía querido por él, un cariño sincero.

Antes de que pudieran hacer algo más, Ink apareció frente a ellos, asustando a ambos.

- ¡Lo siento por interrumpir! Pero Error te puede hacer pedazos si Geno se queda un rato más acá ~, ¡Dile adiós a tu pareja, Geno!

- N-No somos pareja. -Se quejó, mas, suspiró aceptando a regañadientes su retirada- Buenas noches, Blard.

- Nos vemos, eres bienvenido aquí cuando gustes, cuídate, Geno.

Se sonrieron, y así caminos separaron, solo por unos días.