Hace tres años aproximadamente...

Tenía unos nervios impresionantes, si fuera Ink ya hubiese vomitado su famosa tinta, si existiese una competencia de quien era más directo, Blard ganaría el primer puesto de inmediato.

— ¿Q-Qué dices?

— Lo que acabas de escuchar... Geno. —Contestó de forma calmada, sonriendo por la reacción tan nerviosa del contrario, éste tenía en sus manos una caja envuelta en papel de regalo— Esto es para ti y espero que lo aceptes como muestra de mi atracción.

— Yo... Yo no puedo aceptarlo... —Susurró, apenado— No creo que sientas eso por mí... Mírame, Blard, apenas estoy vivo, ¿Cómo te fijarías en alguien como yo? ¿Por qué...?

El de bufanda quiso devolverle el obsequio, pero Blard sin desfigurar su expresión pacífica, tomó sus manos impidiendo su movimiento, le regaló una suave sonrisa.

— Porque para mí estás lleno de vida. —Explicó— Quizás ha sido muy rápido, apenas ocho meses, no puedo responderte de una manera clara, porque cada pequeña parte de ti me parece perfecta a su modo. Tus imperfecciones te hacen perfecto. No obstante, no quiere decir que busque una respuesta inmediata, puedo esperar todo el tiempo que necesites para que lo proceses, lo pienses, no quiero presionarte.

— Blard...

— Me quedaría más tiempo, pero Stave me está esperando, ¿Nos vemos en unos días?

— Claro... 

Blard tiró el frasco de tinta algo lejos para poder irse, dejando a Geno con el paquete en sus manos, lo abrió, sorprendiéndose, era un pequeño frasco de perfume con un olor increíble.