Xeno y Stanley llegaron a la residencia Ishigami y de inmediato arrugaron sus gestos al ver los dos cuerpos ensangrentados tirados en el piso.

El militar prendió un cigarrillo de inmediato.

—Qué desastre. —Pateó un tornillo ensangrentado—. Te dije que esto no iba a funcionar.

—No entiendo cómo lo descubrió... Sé que me escuchó cuando estuve aquí antes reprogramando a su mujer, por lo que vimos en las cámaras de seguridad, pero hubo algo más que lo hizo creerlo sin cuestionarse nada. ¿Fue por el reloj? ¿Por un detalle tan pequeño? —Xeno se arrodilló frente al cuerpo de su ex pupilo, con su rostro lleno de verdadera aflicción y profunda tristeza.

—El mocoso es como tú. —Stanley le palmeó el hombro con empatía—. Demasiado listo.

—No quería que esto pasará... —Xeno llevó una mano a su rostro, sintiendo sus ojos arder—. Solo lo hice para que fuera feliz... Y ahora murió odiándome...

—Veías al chico como un hijo o algo así, y te arrepentiste de nuestro último intento de poseer este mundo. —Stanley lo ayudó a ponerse de pie—. No podías vivir con el odio del mocoso, así que te esforzarte en darle esto para que te perdonará. —Miró al robot destrozado—. Sabías que nunca podría ser la verdadera, pero hiciste de todo para darle la ilusión de que lo era. Las cosas salieron mal, pero lo intentaste. —Apagó su cigarrillo en una pared—. No lo hiciste por maldad, y yo creo que eso debe servir de algo, es más de lo que nunca hiciste por nadie más. Es una lástima que no terminó bien.

Xeno bajó la cabeza.

Era cierto. Después de haberse acercado tanto a Senku y sus amigos, en su última oportunidad de tomar el mundo decidió que lo mejor era matarlo, pero al ser derrotado una vez más dejó de cegarse por sus ambiciones y se dio cuenta de que en realidad nunca habría podido vivir consigo mismo de haber matado a Senku, porque no podía vivir consigo mismo después de haber sido el responsable indirecto de quitarle a la persona que más amaba.

Intentó traer a Kohaku de regreso, pero era sencillamente imposible, así que, con ayuda de la tecnología que habían robado de Whyman, creó el robot perfecto para reemplazarla, uno que lo amaría de verdad.

La hizo lo más parecida posible que pudo a Kohaku, con todos los datos que pudo recolectar. Piel, cabello y ojos perfectos, a la vista era idéntica. También le dio la capacidad de poder darle hijos a Senku como una incubadora, pero con óvulos congelados de otras mujeres. Y además podía simular el envejecimiento. Iba a ser la compañera perfecta de vida para Senku, y él jamás habría sospechado que era un robot.

Senku hubiera sido feliz...

Por desgracia, no pudo ser, y Xeno solo pudo desear que el infierno realmente existiera, así podría pedirle disculpas allí. Ese era su único consuelo.

El fin.

Holaaaaa :'D

Ahora si, esta historia tragica se ha terminado u,w,u

Veo q varios adivinaron el giro de trama xD Diez billones de puntos para ustedes!

Muchas gracias a los que siguieron y apoyaron este fic a pesar de lo raro y corto de los capitulos, de verdad que los amo muchisimo desde el fondo de mi kokoro!

Como este cap es super deprimente, probablemente les suba un nuevo cap de mi nuevo fanfic llamado Sueños Compartidos más tarde o mañana xD Ese fic es super fluff y tierno! Ojala les quite el mal sabor de boca UwU

Este fic es tragico pero me gusto escribirlo, ojala tambien les haya gustado a pesar de todo!

No olviden que se les ama!~

Me despido!

CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!