Capítulo doce
Apenas entró a su casa, vio a Kohaku esperando por él, ahora sola, y ella se lanzó a abrazarlo de inmediato, con lágrimas en sus ojos.
Tic... tac... Tic... tac...
Él sonrió con frialdad, dejando que lo abrazará.
Tic... tac... Tic... tac...
—Senku, necesitamos hablar. —Se apartó de él con su mirada llena de preocupación.
—Claro. Hablemos. —Caminó hasta la cocina y ella lo siguió rápidamente.
—Yo... debo decirte que me he dado cuenta de que tenemos problemas, y sé que te preocupas por mí, pero necesito que me hables de eso, Senku. Sé que tengo muchos problemas, pero quiero que enfrentemos todo eso juntos. —Se acercó más a él y tomó su rostro entre sus manos—. Quiero ayudarte con todo, tal como tú me ayudas a mí. —Unió sus labios en un beso.
Tic... tac... Tic... tac...
Por supuesto, Senku no le correspondió y ella se apartó, confundida.
—¿Qué pasa? —Una vez más sus ojos se aguaron.
Él volvió a sonreír, de forma tan retorcida y carente de emociones que Kohaku retrocedió de inmediato. Esa no era una de sus sonrisas emocionadas por un proyecto científico, esa era la sonrisa de alguien que había perdido por completo la cordura.
—Te diré lo que pasa. —Tomó su muñeca bruscamente—. Pasa que ya te descubrí, a ti y a ese hijo de puta mentiroso. —Sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas de odio, pero mantuvo su sonrisa oscurecida de rabia.
—¿De qué hablas? —Ella sollozó—. Me estás lastimando...
—Como si pudieras sentir dolor. —Rio con frialdad—. Te lo demostraré. —Abrió un cajón y sacó un cuchillo de cocina, el más afilado que tenían.
—¡¿Qué haces?! —Se zafó de su agarre y retrocedió, totalmente espantada.
—Te demostraré... que tú no puedes sentir nada.
—Senku, te amo, no hagas esto, no... —Sus palabras fueron reemplazadas por un grito desgarrador cuando él enterró el cuchillo en su pecho.
Cayó de rodillas al piso y él sacó el cuchillo, mirando con indiferencia la sangre que lo bañaba.
—Debo admitir... que es muy realista. Diez billones de puntos para ti. —Rio mientras lloraba—. Malditos hijos de puta... —Se arrodilló frente a ella y volvió a apuñalarla—. ¿Dónde está? ¡¿Dónde está el maldito reloj, pedazo de mierda?! —La apuñaló una y otra vez, moviendo el cuchillo de un lado a otro.
—Sen... ku... —Ella extendió una mano hacia él, con el rostro bañado de lágrimas y sangre.
Él la apuñaló con más fuerza, hasta que finalmente perdió la paciencia y uso sus manos para romperle la ropa, romperle la piel y apartar "huesos" destrozados, mirando hasta que encontró lo que buscaba.
Tic... tac... Tic... tac...
Metió su mano entre los trozos de metal y sacó el reloj que tanto lo había atormentado, luego miró a "Kohaku", o la maldita máquina que estuvo fingiendo ser ella todo este tiempo. Un puto robot.
—Sé que estás escuchando, Xeno... —habló con voz vacía—. Sé que con esto nos espiabas... y déjame decirte, que te odio más de lo que nunca pensé que podría odiar a nadie. Te veo en el infierno.
Estrelló el reloj en el piso y lo pisoteó con fuerza, luego fue a buscar el arma que tenía escondida en una caja fuerte. La cargó y volvió con el robot, que ya se estaba levantando como si nada hubiera pasado. De inmediato le apuntó con el arma.
—Por favor, Senku... te amo, yo... —Senku le disparó sin pensarlo dos veces, a lo que cayó al suelo, y él descargó todas las balas del arma en destrozarle el cráneo, donde tenía todas sus funciones más avanzadas y más vitales, para que no pudiera engañar a nadie más.
Usó todas las balas menos una. Porque los robots serían más duros, pero bastaba una bala para matar a un ser humano, un humano que de todos modos ya estaba muerto por dentro.
Llevó la punta del arma a su garganta.
Quizás, por más ilógico que pudiera ser, solo quizás existía esa locura del "otro mundo" o bien la oportunidad de vivir otra vida. Quizás y solo quizás Kohaku lo estuviera esperando allí, o quizás podría volver a reencontrarse con ella... su verdadera Kohaku...
Sonrió al pensar en ella, en esa mujer que perdió hace tantos años atrás, antes de jalar el gatillo.
Fin.
Holaaa :'D
Emm... lo siento por esta cosa horrible x'D
Se me ocurrió y no resistí escribirlo xP
Aunque todavía queda el capítulo 13 que es más bien un epilogo, lo subiré mañana u hoy si quieren, solo pidanlo uwu
Es más bien un cierre sad a esta historia tragica :')
Yo se los advertí... pero lo siento x'P
Alguien logró adivinar el secreto detrás de Kohaku antes de este cap? Creo que ya varios se lo esperaban X'D
Diez billones de puntos a los que lograron adivinarlo! TwT
En verdad muchas gracias por todo su apoyo! No olviden q se les ama!~ :'3
Me despido!
CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!
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