Hoy me levanté temprano, por lo que pude despedirme de mi mamá antes de que saliera a trabajar. Encendí la Play Station para jugar un rato en línea, mi mejor amigo Gary es de mejor situación económica que yo por lo que puede darse los lujos de irse de vacaciones donde quiera por el tiempo que quiera y claro, llevarse sus consolas para jugar de paso.

El Skype es la alternativa más sencilla a reemplazar el ir a su casa, así que no era un gran problema.

Dejé de jugar al COD por un rato, como no se podía pausar, dejé el mando tirado y me asomé por la ventana. Entre mi casa y el asilo hay un muro, pillé al sujeto raro en la cima de éste, queriendo impulsarse hacia mi ventana.

Abrí el ventanal y pegué un grito pidiendo ayuda, del interior del hogar salió una señora a ver qué pasaba y se percató del tipo que no dejaba de mirarme fijo, por lo que le llamó, reaccionó y se devolvió a movimientos torpes, la mujer lo cargó como a un bebé y se lo llevó al interior, cerrando la puerta detrás de sí.

Suspiré en alivio.

Regresé a donde estaba antes, no me dejaban de preguntar cosas sobre qué onda, porqué grité. A mi amigo le recordé lo que le contaba antes, del loco en mi ventana y expliqué lo que pasó recién.

¿Cómo no cuidan bien de la gente internada?

Ok, otro episodio feo más, debo seguir adelante, seguro que ahora pondrán mayor seguridad.