Dolió, y la verdad no sé que dolió más, si lo que me dijo o la manera en que lo hizo. Jimin por primera vez me había dicho palabras hirientes y eso había destrozado mi corazón.

– Jimin... – lo miré con los ojos cristalizados y el corazón apretado – ¿Por qué eres así? Deja de decir mentiras, ¡no te creo!

Grité molesta y comencé a llorar. Lo peor era... que sí le creía. Desde que todo esto comenzó siempre me he preguntado por qué le gusto a JungKook y al fin tengo una respuesta convincente.

– Solo intento ayudarte, no quiero que te haga daño SuMin – quiso acercarse a mi pero me alejé.

– Es mentira – dije y me fui.

¿Por qué me miento a mí misma? Si al final yo sé muy bien que es cierto. Todo esto es porque quería vengarse, JungKook nunca ha olvidado a Rosé y me usó. A mi, que lo amo con todo mi corazón.

Caminé despacio de vuelta al campamento mientras seguía pensado en todo. Tonta, de verdad que eres imbécil y estúpida. JungKook tenía razón, soy el ser más estúpido que hay sobre la tierra, y me lo demostró.

– SuMin – alguien dijo mi nombre – JungKook te está buscando, está frente a tu tienda de campaña.

Asentí y seguí caminado hasta llegar, JungKook estaba allí de espaldas a mi. Suspiré hondo para calmar mis sentimientos, él no se merece una lágrima mía.

– ¿Qué haces? – pregunté y se volteó con una sonrisa.

Hipócrita.

– Te estaba esperando – se acercó para abrazarme. Sus brazos me rodearon completamente y su cabeza descansó sobre mi hombro.

¿Por qué no puede ser real? ¿Acaso yo no merezco que él me ame? Cerré mis ojos tragando todas mis palabras, ¿por qué soy incapaz de decirle algo? ¿Por qué mis labios tiemblan al intentar abrirlos para decirle todo lo que tengo por dentro?

– Eres muy buen actor JungKook – al fin me atrevo a hablar. Su cuerpo se separa del mío y sus ojos buscan los mios tratando de entender a que me refiero.

– ¿Por qué dices eso? – parpadea sin comprender, aun sin darse cuenta de mi estado.

– Si tan solo querías venganza... ¿por qué la buscaste en mí? – dejé salir un sollozo – JungKook, soy estúpida como dices. Pero... ¿en verdad crees que puedes hacer esto conmigo? Dime, ¿por qué? Yo te amo de verdad y tú... tú solo me utilizaste para una venganza que ni siquiera tiene sentido.

Mis ojos no se despegaron de los de él, quería ver como se reía de mi y darme cuenta de una vez por todas que este amor tan solo era de mi parte. Que quema y tengo que apagarlo.

Pero no recibí nada de él, tal solo su silencio.

– Lo siento – dijo seco – Tienes razón SuMin, tan solo te utilicé para vengarme de Jimin. Porque quería que el sintiera lo que yo sentí, que sepa cuanto duele que la chica que amas ame a tu amigo.

Hizo una pausa.

– Y sé que no tienes la culpa de nada, pero fuiste lo demasiado estúpida para caer ante mi mentira.

– Basta – Jimin apareció justo detrás de él – ¿¡No tienes suficiente con lo que has hecho!? – su puso frente a él – Ya me has herido lo suficiente termina con esto. No tienes por qué decirle esas cosas. SuMin no tiene la culpa. Y sí, duele que la chica que amo esté enamorada de mi mejor amigo. ¿Sabes por qué? Porque eso significa que tendré que olvidarla, porque JungKook aquí hay una gran diferencia. Yo nunca me metí con Rosé, hice hasta lo imposible para que se alejara de mi. Pero tú, sabiendo que me gustaba SuMin, te acercaste a ella sin pensarlo.

Jimin, ¿por qué no me enamoré de él? La vida es tan injusta para todos.

– Vamos – Jimin me tomó de la mano y me llevó con él lejos de allí.

No podía siquiera pensar en nada, solo quería una explicación. ¿Por qué? ¿Por qué JungKook es tan malo conmigo? Ni siquiera le doy lástima, no me tiene ni el más mínimo aprecio y eso duele. ¡Duele hasta llegar a hacer daño!

– Puedes llorar... – Jimin me habló delicadamente – Estoy aquí, puedes soltar todo lo que tienes dentro. Voy a escucharte, si quieres culparme... puedes hacerlo. Sé que es mi culpa.

Lo miré.

– Jimin... ¿en serio crees que te voy a culpar? – bajé la cabeza – No es tu culpa, es mi culpa por enamorarme de alguien como JungKook. Todos recibimos lo que merecemos.

– Tú no mereces eso – acarició mi mejilla mirándome con ojos cristalizados y llenos de amor – Tú mereces el más verdadero y fuerte amor SuMin, porque eres hermosa por fuera y por dentro.

Si eso es verdad, ¿por qué JungKook no puede darme ese amor?