Capítulo 3:

Y como lo supuse. Algo tenía que pasar..

-Hey Saori, ¿porque no nadas?

Sonrió Komaeda.

-Emmm, yo...

Susurre.

-Oh vamos.

Sonrió jalándome.

El agua era profunda, y era mi gran debilidad.
Apreté la mano de Nagito nerviosa.

-No te atrevas a soltarme o...

Susurre tomando su mano.

-Oops.

Me soltó repentinamente haciendo que me hundiera.

Abrí mis ojos tratando de salir, pero me era imposible.

Todo mi respeto se iba al caño, al igual que mi dignidad, estas dos cosas se hundían al mismo tiempo que yo lo hacia.

Estaba mareada, ¿acaso este es mi final?

...

Unos brazos me sujetaron fuertemente sacándome del agua arrastrandome.

-Hey, Hey... ¿Estas bien?

Trate de abrir mis ojos, los cuales ardían.

-Tranquila...

Trate de calmarme, pero incluso sin ver, podía sentir las miradas de todos, y ese incómodo silencio.

Abrí mis ojos algo molesta y mis deducciones eran correctas.

-Si no sabías nadar, no debiste venir aquí, ¿o si?

Sonrió Komaeda.

Me levanté para golpearlo pero Fuyuhiko (quien me había salvado) me detuvo.

Tome aire y salí corriendo de allí.

Me detuve cuando estuve lo suficientemente lejos para que nadie pudiera verme, aunque no me detuve voluntariamente, durante la desesperación de salir del agua pise una roca afilada, y mi pie estaba sangrando.

Suspire cerrando mis ojos.

-No debiste huir así.

Fuyuhiko me tendió su mano. La acepte y este me ayudo a llegar a lo que suponía era mi cabaña.

-Entra.

Me dijo abriendo la puerta.

-Pero es tu cabaña.

Susurre nerviosa.

-Tengo algunas vendas allí adentro.

Insistió.

Entré y me caí del dolor.

-Bien, déjame ayudarte.

Corrió por una toalla y me la puso alrededor del cuerpo.

Me ayudo a levantarme y me dejo caer suavemente en su cama. Tomó mi pie y comenzó a vendarlo.

-Nadie va a respetarme ahora que me vieron tan miserable.

Susurre algo triste.

-Tendrás que ganarte su respeto de nuevo, yo se que lo lograrás.

Me sonrió.

Asentí enternecida.

Mientras me vendaba aproveche para observarlo bien, usaba su traje, que estaba todo mojado.

¿No había ido a nadar? ¿Quien nada con traje?

-¿Disfrutas mirarme?

Me sacó de los pensamientos.

-Emmm, yo... Yo no..

Rasque mi nuca, él rió cortamente.

-Un lado que no conocía de ti Saori. Sabía que había algo más detrás de ese rudo cascaron.

Terminó de vendarme y se lavó la sangre de sus manos.

-Gracias.

Susurre bajando mi cabeza.

-Hasta la persona más cruel tiene un lado tierno.

Se sentó a mi lado sonriente.

-Si bueno, a veces necesitas desconectarte de todo y dejar de ser un puerco espín con todo el mundo.

Sonreí.

Él rió tiernamente.

-Extraña metáfora. Pero linda, supongo.

Se sonrojó mirando hacia otro lado.

-Creo, creo que debería irme..

Susurre bajando mi mirada.

-Todavía no estas bien, no piensas ir a la playa, ¿cierto?

Lucía preocupado.

-Para que Nagito se burle de mi, no gracias.

Susurre bufando.

-Defiéndete.

Suspiro.

-Lo intento pero siempre me detienes- Me cruce de brazos y lo mire fijamente -¿Porque lo haces?

-Sólo trato de protegerte- Susurro rascando su nuca, suspire mirando sus ojos -Komaeda luce algo inestable y...

-Si se me acerca no duraré en partirle todo en su cuerpo.

Él rió.

-¿Eres fuerte?

Se levantó mirándome.

-¿Lo dudas?

Me levanté.

Él iba a decir algo pero lo tome de la mano y lo jale derribándolo al instante.

-Ni siquiera lo pensé...

Susurro sonriendo algo adolorido.

Hola.. Ya se que todo se ve muy tranquilo y todo eso pero falta xD.. Y bueno.. De nuevo nada que decir :v
Espero que les haya gustado y todo eso jejeje, gracias por leer y.. Cuídense ^w^