El amor es... Raro, como pocas cosas en la vida sin resolver.
Uno cree que lo entiende. Se ve una que otra película romántica, se lee un libro o que sé yo. Pero la verdad es que, cuando se quiere llevar a la realidad todas esas cosas que se ven.

Simplemente no funciona.

Tal vez sea que el romance haya muerto, que la persona no sea la indicada. O la estupidez primigenia de cada persona.

Pues bien... Después de pensarlo con la almohada, de tratar de recordar todos los momentos al lado de ella, de mis sentimientos cerca de ella y esas cosas.

Es que llegue a la conclusión de deber admitir lo que siento.

Me gusta Merlina Addams. Lo suficiente como para saltar al peligro sin pensarlo, como para desear abrazarla sin descanso y miles de cosas estúpidas más.

Lamentablemente...

-No estoy de humor- dice apenas revisando su casillero. Mis brazos están abiertos y ella los negó. Admito... Que al llegar vi algo diferente en ella, y eso es mucho. Se ve más ¿Muerta?

-¿Pasa algo?- pregunto bajando los brazos y acercándome al casillero -¿Mer?-

-Es. Bueno...-

-Vamos- pido moviéndola lo suficiente como para verle mejor, de cerca. Tiene ojeras, ojos irritados y una cara bastante larga y apagada. Incluso su cabello se ve algo desordenado a otros días -Puedes decirme- aconsejo jugando con uno de sus largos mechones negros.

-... Ayer, no. Es estúpido Enid-

-¡No lo es! Si algo te hace sentir mal entonces no lo es, vamos. Dime-

Dejo de verle. Me centro en mi mano jugando con su cabello. Uno tan negro y oscuro que parece no reflejar luz alguna... Espera Enid. Acabas de hacer un claro coqueteó.

-Ayer estaba leyendo él, estúpido cómic de Superman-

-¿El de All..? Algo-

-All Star Superman- ataca quitando mi mano de su cabello -Si, ese-

-Oh ¿Y eso es malo?-

-No. Es gratificante llegar al final de una historia, sobre todo si son buenas. Pero, bueno... El final hizo que sintiera cosas y...-

-Merlina- llamo tomando ahora sus manos. Ella las mira, juntas. Pero no dice nada o las aparta -Estas en confianza. Te recuerdo que ya viste a la loca de mamá-

Una sonrisa aparece. Comienza a "jugar" con nuestras manos, meciéndolas apenas.

-Llore. Recordé cosas malas que hice a Pericles, que él me quiere y yo lo trato mal. Solo, no sé. Por alguna razón al ver cómo Superman salvó a todos me hizo pensar: "Mira, incluso en su lecho de muerte ayuda a la gente ¿Y tú qué?" Eso me hizo cuestionar-

-¿Qué cosas?-

-... ¿Por qué seguimos haciendo esto, el ir por el Hyde y Rowan? Dime Enid, la verdad y solo la verdad ¿Por qué me ayudas?-

Recuerdo le respondí algo parecido hace poco. En ese entonces la situación era igual de delicada si no que más.

¿Amistad, justicia? ... "Venganza" Puedo decir varias cosas, unas más creíbles que otras. Pero, si realmente quiero seguir el consejo de papá y finalmente ser libre de mi misma.

-Yo, bueno. Al inicio es porque no quería ser un blanco para ti, luego te hiciste mi amiga y esa era la excusa necesaria, incluso me dije que para protegerte. Bueno, es estúpido. Es... Yo, tú. Tú haces que sienta cosas. Me confundes, me asustas y quiero llegar a la fuente de esto, solo déjame estar a tu lado en esto-

-Enid...-

-Lo sé, es tonto. Pero es lo que siento. Tú y yo, bueno. Quisiera-

-Ya besala- escucho la amargada voz de Bianca detrás de nosotras. Ambas la miramos molesta, sin soltarnos de las manos -Creí ya eran pareja-

-Callate Bianca-

Tyler llega al poco, está agitado y sudando. Pone su mano en alto como si pidiera pausa y las tres lo vemos.

-Me dormí, papá no llego y por eso no me despertó... Vaya... ¿Son novias?- apartamos las manos, Merlina vuelve a su casillero mientras el ardor se apodera de mi cara -¿Y tú?- señala a Bianca.

-Quieren descubrir quien es el Hyde y el Telequinetico ¿Cierto?- Merlina cierra de forma estruendosa su casillero, se le queda viendo a Bianca y se acerca.

-Nos quieres ayudar. No por "ayuda a la comunidad" dime, Bianca Barclay ¿Qué pasa en esa mente de pez?-

-Esto- responde señalando su hombro y cortadas -No puedo animar, me ven como un bicho por esa maldita cosa. No sé que tengas tu Addams, pero esto es venganza-

-¿Venganza? Te recuerdo que esto no es una de esas series de adolescentes-

-¿Importa? Tú querés saber quién atacó a tu hermano mientras dudas sobre lo que sientes por Enid-

-¿Qué, que dices?-

-No soy idiota Addams-

-Tyler me estoy asustando-

-Yo igual Enid-

Merlina y Bianca llevan un duelo de miradas. La molestia por la otra es más que evidente, aun así... Podríamos usar el canto de sirena de Bianca si algo se sale de control.

Un seguro que, ahora recuerdo. Podríamos usar con Ajax... No, ya es mucho.

-¿Puedes usar tu canto?- indaga Merlina, sí. Pensó lo mismo que yo.

-Si ¿Por qué?-

-Tyler, Enid y yo vamos por Xavier. Es nuestro principal sospechoso del Hyde, o al menos nos dará mejor información. Mi abuela es una bruja y nos dará un "suero" de la verdad el cual usaremos con él-

-¿Y eso que?-

-Si es el Hyde. Cantarás para tranquilizarlo, así de sencillo-

-... ¿Cuándo harán eso?-

-Apenas tenga el suero en mis manos. Te odio Bianca, eres una copia y calca de todo estereotipo de adolescente popular. Sin embargo, tu ayuda podría ser beneficiosa ¿Tregua?- pregunta tendiéndole la mano a la sirena.

-Igual te odio- estrechan las manos justo al tiempo en dónde el timbre suena -Pero prefiero atrapar a esos cabrones-

Bianca se aleja, Tyler señala nervioso a las dos y luego el pasillo.

Miro a Merlina, ella no dice algo.
Bueno, básicamente me le declaré... Creo.

-Tú... ¿Quisieras ver una película en mi casa?- pregunta finalmente.

-¿¡Yo!? ¡Claro! Digo, no... ¡Si!-

-Bien. Entonces película-

Comienza a caminar. Alejándose entre la multitud estudiantil...

-O.M.G.-

.......

El día fue raro, Enid y yo tuvimos... Algo.

Y ese "algo" basto como para que los nervios crecieran cada vez que nos acercamos a la puerta de mi habitación.

Ella va sonriente. Risueña como tantas veces, y yo. Bueno, muriendo.

-¿Qué vamos a ver?- pregunta saltando a mi cama, se quita los zapatos y se extiende por toda ella -Mer-

-Para ser honesta. No sé- admito apartándola de la cama para entrar en ella, me acomodó a su lado. Me ve de costado con una sonrisa -No sé que tipo de películas ves-

-La que tú quieras-

-Sí... Dudo bastante que quieras ver algo así-

-Bueno. Entonces, en lo que se nos ocurre algo. Hablemos-

-¿Hablar?-

-Sí. Dime... ¿Cuál es tu color favorito?- una risa sale de mí al escuchar eso. Enid se ve confundida -¿Qué?-

-¿Preguntas eso?-

-... Oh-

Y así iniciamos una lluvia de "ideas" que no llevaron a nada. Cada pregunta era más tonta que la anterior.

Desde: ¿Día o noche? O ¿Volver al futuro 1, 2 o 3?

Cada pregunta es un sin sentido. Sin importancia, nada relevante en cada aspecto. Pero, cuando Enid está cerca. Cuando nuestras manos se rozan en la cama y las dos juntas.

Bueno. Lo sin sentido lo recobra, la estupidez se vuelve inteligencia y lo vago algo importante.

¿Película favorita, canción favorita, almohada abajo o arriba?
¿Importan estás cosas? No, lo dudo. Son al azar, aun así es un conocimiento que atesoro, agradezco.

-Enid- llamo tomando finalmente su mano -Yo... Diablos- tomo aire, lo dejo salir. Paso saliva, nerviosa ¿Merlina Addams nerviosa? Vaya vida -Es. Tú, ..-

-¿Sabes que siento al verte?- pregunta risueña. Niego -Todo. Es como si la tierra para y yo fuera disparada a miles de kilómetros... ¿Qué sientes tú?-

Sentir... Sentimientos.

Ayer lloré, ayer me hice de menos y me acosté deseando ser diferente. Todo por esos malditos sentimientos.

Sentimientos que iniciaron todo esto ¿Lógica? Vamos, no manejo eso desde siempre. Soy una criatura curiosa, pero nada lógica.

-No sé. Solo... Todo y nada, siempre. Está ese algo y la nada-

-Eso me basta- dice sonriendo. Se acerca, besa mi frente y vuelve a verme dejándome perder en esos ojos cristalinos.

-Enid, yo-

La puerta es abierta, a diferencia de la vez pasada no nos separamos.

Madre tiene dos paquetes en ambas manos. Camina con normalidad hasta mi escritorio dejándolos y, antes de irse. Pone seguro a la puerta.

-¿Qué es?- pregunta saliendo de cama.

-Ni idea... Ábrelo-

Emocionada saca sus garras, abre las cajas. De una sale un tomo y del otro la poción.
Salgo de mi comodidad y le arrebato el elixir color rojo.

-"Un trago bastará"- Lee Enid una nota -¿Es eso?-

-Sí.  Es eso, sabremos quién es el Hyde y obligaremos a Rowan a confesar-

-Vamos por ti enano cabrón- celebra Enid -Oye, mañana todo acabará- dice mirando el tomo -Kingdome Come... ¿Lo leerás?-

-No. Lo leerá Pericles y después yo, así es como será-

-Así será Mer. Lo prometo-