Taehyung lo pensó demasiado, mientras regresaba con Yoongi en la motocicleta, luego de obtener la información, por accidente, acerca de esos tipos que podían imitar un poco sus poderes, acerca de decirle a Jungkook que estaba un poco relacionado con la compañía Jung y que Hoseok había sido su amigo por un tiempo. Sin embargo, también pensó en el menor de los Jung; ¿se acordaba de Jungkook? ¿Lo habría reconocido cuando se vieron en la cafetería?

"Tengo algo que decirte" Taehyung murmura, sus dedos se encuentran sobre la frente de Jungkook, yendo hacia su cabello cada que puede.

Dentro del nenúfar, los dos pueden mostrarse como deseen, en ese lugar tan privado y especial, sin miradas ajenas molestándolos. Así que, sabiendo eso de antemano, Jungkook se había dejado caer en el regazo del mayor, quien lo había recibido sin problema, consintiéndole con besos en las mejillas y acariciando su rostro.

"¿Uhm? ¿Qué es?" Jungkook pregunta, abriendo sus ojos que ha mantenido cerrados todo ese tiempo, disfrutando de toda la atención que está recibiendo.

"Jungkook" no sabe como empezar, pero Jungkook merece saberlo. "Tal vez sí era cosa del destino que nos conociéramos."

"¿Por qué dices eso?" el menor no se incorpora, sujetando una mano de Taehyung y entrelazando sus dedos.

"Recuerdas... ¿Recuerdas a tus padres, Jungkook?"

Taehyung intenta ser suave, porque, aunque Jungkook le ha dicho que lo ha superado, es un tema sensible y no quiere lastimar al menor. En realidad, ni siquiera querría hablarle de lo que ha escuchado, pero tampoco cree que sea justo para Jeon no saber nada. Descubrirlo quizá no le afectaría en el futuro, pero al menos, le ayudaría a entender porque lo habían dejado solo a tan temprana edad.

"Muy poco" concede, frunciendo el ceño y llevando su otra mano hacia su frente. "Ellos murieron cuando yo tenía diez, a punto de cumplir los once, pero todo se volvió borroso. Mi jefa dice que seguramente es porque me afectó tanto que solo quise olvidarme de ello para no sufrir más."

El silencio se apodera de él porque está tratando de explicarse porque todo en él acerca de los recuerdos de sus padres es una mezcla entre saber y no saber nada. Recuerda algunos momentos lindos que lo hacen sentirse nostálgico, pero solo están esos recuerdos; Jungkook no puede recordar alguna pelea que haya tenido con ellos, alguna conversación.

"A veces solo recuerdo la comida de mi madre, y los momentos lindos con ellos, pero en sí... en sí no recuerdo sus voces, solo veo sus bocas moverse, no entiendo lo que me dicen cuando intento recordar" sus ojos se cristalizan y toma una honda respiración. "Tampoco recuerdo nada cuando cumplí mis once años, solo recuerdo que... Que de pronto me encontraba en este apartamento, solo y con una mujer enfundada en un traje; una agente del gobierno, explicándome que cada semana llegaría alguien a entregarme comida y a prepararla para mí."

"¿Dejaron de llegar en algún momento? Esas personas..."

"Sí, cuando cumplí dieciséis; les pedí que me enseñaran a cocinar, así que, una vez aprendí, les dije que estaría bien. Ellos me aseguraron que seguirían ayudándome, pero conseguí el trabajo repartiendo. Me sentía un poco incómodo cuando ellos llegaban... Quiero decir, les agradezco por haberme alimentado cuando yo no podía hacerlo, pero eran tan fríos y no... No estoy pidiendo abrazos, pero ni siquiera me daban una sonrisa, era bastante incómodo para mí, sobre todo cuando no tenía nada más que la soledad de mi apartamento."

Jungkook exhala una sonrisa y se cubre los ojos, porque quiere llorar.

"Me sentía muy solo como para que entraran tres personas extrañas con más frialdad a prepararme una comida que me llenaba, pero que no era cálida ni echa de la forma con la que mi madre lo hacía. Yo solo..." su voz se quiebra y Taehyung se inclina hacia a él. "Yo solo pensaba, ¿de qué me sirve que vengan a ayudarme si igual me siento solo?"

"Déjame verte" Taehyung pide con suavidad y Jungkook se destapa, encontrándose con el rostro de Capricornus muy cerca, pero no está nervioso, en realidad, se relaja y más cuando los dedos largos y elegantes se ponen sobre sus mejillas, limpiando las lágrimas que han caído. "Ya pasó, ¿sí? Estás aquí conmigo, con los chicos, ya no estás solo, Jungkookie."

El menor le sonríe cuando Taehyung besa sus mejillas, trata de calmarse bajando de esa nube de recuerdos tristes e incómodos. Suspira fuertemente y luego mira de nuevo hacia el mayor.

"¿Por qué me lo has preguntado?"

Un suspiro fuerte y profundo es lo que Capricornus toma antes de hablar, buscando las palabras correctas.

"Sabes que fui con Yoongi hacia la compañía hoy" Taehyung le recuerda, sin mirarlo. "Al principio, no encontramos mucho, quiero decir, al parecer no son tan idiotas de dejar los documentos importantes fuera. Pero, tuvimos un golpe de suerte, porque la hermana de Hoseok, Joohyun, apareció con un grupo de científicos y confesaron muchas cosas."

"Jung Joohyun" Jungkook murmura y Taehyung lo mira. Tiene la mirada perdida en el techo del nenúfar. "Es la vicepresidenta de la compañía Jung, ella es... Muy interesante."

"¿Sí? ¿Te lo parece a ti?" Taehyung cuestiona, buscando que Jungkook le diga algo que quizá pueda servirle. A lo mejor y recordaba algo, de forma inconsciente.

"Sí, bastante" parpadea un par de veces de manera veloz. "Sus ojos son muy... Fríos. En las conferencias que daba y yo veía en la televisión, puedes sentir esa mirada dura y fría, aunque en su rostro se encontrase una bonita sonrisa. Pero recuerdo que, hace un par de años, cuando Hoseok no había renunciado a la empresa aún, los dos se mostraron junto a su padre, cuando se celebraba otro aniversario de la inauguración de la empresa. La sonrisa y la mirada de Joohyun hacia a Hoseok es completamente diferente."

"Crees... ¿Crees que lo quiera mucho?"

"Bastante diría yo" él asegura. "No lo sé, es lo que ella demuestra, también cuando habla acerca de él."

Taehyung guarda silencio, sin dejar de mover sus dedos en la mata de cabellos rubios de Jungkook y se pregunta si existe un amor sincero entre los Jung. Es decir, ¿podía esta clase de gente amar a alguien? Desde que lo conoce, Taehyung ha descartado a Hoseok como alguien de los Jung, aún cuando su confianza hacia el chico no sea completa, Hoseok tenía esa aura y esa sinceridad en sus ojos que te aseguraba que era diferente al resto de su familia.

Al menos, se había alejado de ellos para seguir sus sueños. Así que, Taehyung creía, muy probablemente, Hoseok no tenía idea de lo que pasaba en aquel lugar. Cuales eran los nuevos objetivos, hacia donde estaban tomando rumbo las investigaciones y las consecuencias de abusar de la Energía Vital.

Quizá Hoseok no estaba en contra, pero tampoco estaba a favor. Por ello es que Taehyung no podía confiar totalmente en él, ni siquiera cuando Namjoon aseguraba que era un buen chico. Claro que lo creía, el problema era que, aunque se haya alejado de la empresa, seguían siendo su familia.

¿Estaría Hoseok dispuesto a traicionar a su familia o traicionar sus principios?

"¿Por qué me has preguntado eso?"

Jungkook repite y lo devuelve a la tierra, sus miradas chocan y el menor no se ve con ánimos de levantarse de su regazo. Tampoco le molesta, en realidad, cree que es mejor; no sabe como vaya a sentarle la noticia.

"¿Qué descubriste? ¿Es algo muy malo?"

"Descubrí dos cosas, pero hay una que... No sé cómo vas a tomarla. Pero quiero decírtelo."

"¿Cómo voy a tomarla?"

El asentimiento de Taehyung es tan escueto que, si Jungkook no estuviese prestando atención, seguro se lo perdía.

"Te preguntaba acerca de tus padres porque..." su mano despeja por completo la frente de Jungkook. "Tu familia, mejor dicho, tu abuelo... Tu abuelo paterno estaba relacionado con los Jung, con el descubrimiento de la extracción de la Energía Vital."

"¿Qué?" Jungkook toma asiento, mirándole con sorpresa e incredulidad. ¿Su familia relacionada a los Jung? Pero si su abuelo había sido vendedor y su padre repartidor, no podía ser... "Mi abuelo era vendedor, él no..."

"Era vendedor de flores, sí, con tu abuela" confirma, no acercando sus manos al menor, aunque quiera hacerlo. "Pero antes, tu abuelo estaba en la ciencia, al parecer, era colega del abuelo de Hoseok, y... Bueno, cuando tu abuelo descubrió las intenciones de Jung, le pareció incorrecto, así que, se retiró. Si tus abuelos y padres se fueron antes, fue porque se negaron a usar las materias, a aprovecharse de la Energía Vital, así que... Siendo esa la única medicina existente, ellos..."

"No, no, no... No podemos estar relacionados."

"Jungkook, sé que es difícil, pero tu jefa también ha estado metida en esto; te han tenido vigilado, y los agentes que llegaban a dejarte la comida eran por parte del gobierno Jung, pero no de la forma en qué crees; el abuelo de Hoseok se sentía en deuda con tu abuelo, así que cuando perdiste a tus padres, decidió entregarte esa ayuda."

"Pero..." Jungkook se queda callado.

"Jungkook, ¿cuántas personas reciben dinero de forma gratuita por parte del gobierno?"

No hay respuesta, porque realmente, no hay nada. Jeon comienza a entenderlo; en ningún medio de comunicación ni en una sola parte de Seúl alguien ha recibido una beca, o ayuda económica. Los Jung no creían en eso, los Jung aseguraban que trabajar, sobre todo para ellos, te ayudaría a obtener una buena vida, con eso atraían más gente a servirles creyendo que lograrían estar a su altura.

"Esto... ¿Esto en qué lugar me deja?" cuestiona mirándole con los ojos cristalizados. "¿Soy malo?"

"Claro que no, Jungkookie. En realidad, me demuestra que tu bondad es hereditaria; tu abuelo habrá ayudado al descubrimiento, pero él estaba consciente que abusar de ello podía ser fatal. Tenía los pies en la tierra, y eso me hace admirarlo. Entiendo que su lucha haya sido silenciosa y pequeña ¿cómo podría a enfrentarse a un planeta entero él solo con una familia que cuidar? Para ese momento todo el mundo estaría viendo solo el lado positivo que la Energía Vital otorga, ¿cómo iban a escuchar a una sola persona?"

Jungkook mira sus piernas largas extendidas en el suelo, sigue procesando la información porque no recuerda de qué murieron sus abuelos y sus padres, es más, había pasado años cuestionándoselo; la esperanza de vida había aumentado demasiado, ¿cómo podía ser que era huérfano porque sus padres murieron? Los huérfanos solo eran abandonados, y por un tiempo creyó que quizá lo habían dejado.

Mas las tumbas en el cementerio le decían lo contrario.

Ahora lo entendía; se habían negado a consumir las materias, y seguro se habían enfermado con algo muy grave, algo que solo las materias podían curar. Entonces, ¿habían muerto con dolor y mucho sufrimiento? ¿Lo habían hecho para que la Tierra no se sintiera tan mal de ser la única sufriendo?

"Jungkookie."

Siente las manos de Taehyung en sus hombros, alza la mirada a su llamado y lo tiene frente a sí con el rostro preocupado. Siente sus dedos limpiarle las mejillas y descubre que está llorando de nuevo.

"¿Ellos saben todo acerca de mi familia? ¿De mí?" Jungkook cuestiona, sintiendo que todo lo que ha vivido desde que está solo es una mentira; todo planeado para alejarlo de alguna manera de los principios y valores de su familia, para que no fuese ningún estorbo.

No tenía sentido para él; ¿qué podía hacer en contra de la empresa siendo una sola persona? ¿Un chico sin más? Jungkook no tenía armas, no tenía aliados, y solo la palabra de su abuelo no serviría de nada, después de todo, los Jung se habían llevado todo el crédito, ¿cómo podría ser una amenaza para ellos? Hubiese sido mejor que lo dejaran a su suerte, quizá ni siquiera estaría vivo.

"Creería que sí, Jungkookie."

"¿Por qué me dejaron vivir? ¿Por qué no me dejaron morir con ellos?"

"No digas eso, por favor" pide.

"¿Qué se supone que iba a hacer contra ellos? ¿Atropellar a sus super soldados con mi bicicleta? ¿Uh?" su respiración se acelera.

"¿Y si, simplemente, solo debíamos conocernos?" Taehyung cuestiona.

"¡¿Para qué?!" Jungkook se siente furioso. "¡Taehyung, eres maravilloso! ¡Pero no vas a quedarte! ¡¿Entonces de qué me sirve?!" Capricornus se queda sin palabras, sin apartar la vista del menor, pero no tiene respuesta. "Te irás... Y yo no voy a obligarte a que te quedes, pero va a ser doloroso y yo solo... Yo no quiero ver las estrellas pensando en ti, quiero verlas contigo a mi lado. ¿De qué me sirve, entonces?"

El dolor de Jungkook crece un poco más, y Taehyung solo quiere consolarlo, dándose cuenta de que el menor tiene razón; se va a ir, y las despedidas siempre son dolorosas. Lo sabía bien por Aquarius; ella seguía siendo su hermana, seguía recordándola, pero, así como la recordaba, la extrañaba en demasía y necesitó millones de años luz para poder vivir sin ella sin sentirse incompleto. Es muy egoísta de su parte pedirle a Jungkook que se quede tranquilo cuando él se vaya.

"Tampoco quiero quedarme" confiesa de la nada y Jungkook se rompe más en llanto silencioso. "No me malentiendas; quiero a los chicos, te quiero muchísimo a ti, pero no quiero... No quiero quedarme porque tendré que verte partir."

Abre las piernas de Jungkook tomándolo de las rodillas y acercándose más moviéndose sobre las propias, toma el rostro del menor y, por la posición, Jungkook tiene que elevar la mirada.

"No estás pidiendo mucho, Jungkook, pero lo es para mí porque no sé qué escoger; ¿es mejor despedirme ahora y no verte morir o es mejor quedarme y verte marchitarte?"

"Entonces... ¿qué se supone que haga?" Jungkook cuestiona, mordiéndose el labio. "Al menos... Prométeme una cosa."

"Jungkookie..." Taehyung ruega, negando.

"Prométeme que la despedida será rápida, por favor."

"Taehyung, ¿están bien?" Pegasus pregunta cuando la llamada de Taehyung entra en su celular. Se alarma cuando escucha un sollozo profundo y piensa lo peor. "¿Le ha pasado algo a Jungkook? ¿No lo has encontrado?"

"Soy muy cruel y egoísta, Jin" Taehyung se queja dejándolo sin habla y sin comprensión. "Jungkook está bien físicamente, pero yo estoy lastimando su corazón... Y también me estoy lastimando a mí."

"Hyung, realmente no estoy entendiéndote."

"Jungkook quiere que me quede" expulsa sollozando aún más. "Quiere que me quede aquí con él; los años que él vivirá no son nada para mí, pasarán volando, y no quiero eso. No quiero soltarlo, no quiero que la Energía Vital se lo lleve lejos de mí, aunque así deba hacer..."

Pegasus se sostiene de la barra, porque se encuentra en la cafetería, con todo el mundo dormido arriba de él, al menos, es lo que él cree. Sin embargo, se ha quedado esperando por Taehyung y Jungkook cuando su hermano mayor ha terminado de hablar con Nari, yendo en busca del rubio con el corazón ahogado en pánico y terror.

Yoongi les ha dicho lo que han averiguado, incluso el secreto que descubrieron de la familia Jeon. Y Pegasus conoce demasiado bien a Taehyung; sabe que le dirá al menor, lo cual es correcto, porque Jungkook no merece secretos, mucho menos cuando no comprende por qué se ha quedado solo.

Sin embargo, no comprende como han llegado a eso: con Taehyung llamándole, llorando, diciéndole que no quiere ver a Jungkook morir, como todo ser humano.

"¿Qué se supone qué debo hacer?"

"Ok, primero, cálmate. ¿Están bien los dos?"

"Sí..."

"¿Le has dicho?"

"Sí, Jin, le dije... Merecía saberlo" responde abrazándose a sí mismo.

"No van a volver esta noche, ¿o sí?"

"Es muy arriesgado, Jungkook ha tenido mucho hoy, es mejor que descanse" Taehyung mira hacia su nenúfar, porque ha salido de él, para poder llamarle a Jin y pedirle ayuda, ayuda con su herido corazón. "¿Qué debo hacer, Jin?"

"Lo quieres mucho, ¿no es así?" cuestiona con una sonrisa triste, y no espera respuesta porque la conoce muy bien. Mira hacia la puerta cerrada y cubierta de la cafetería. "Jungkook deberá morir algún día, TaeTae, y lo sabes bien" aprieta los labios. "Y sé que es difícil porque... Bueno, estamos en la misma situación. Pero yo no voy a quedarme, Tae. Yo regresaré con Madre, porque, aunque me duela dejar a Seulgi, sé que lo logrará."

"¿Entonces? ¿Qué hago, Jin?"

"Hacer lo correcto; dejar la Tierra en cuanto terminemos todo."

Seokjin espera a que Taehyung le cuelgue sin darle respuesta, sabe que es demasiado fuerte porque, aunque Capricornus busque una respuesta, no puede aceptarla fácilmente, aunque sea lo correcto. Deja el celular sobre la superficie de la mesa, pensando en qué quizá Capricornus perderá demasiado luego de esa misión.

"¿Uhm? ¿Estás despierto?"

Se gira ante la voz, dirigiendo la mirada hacia las escaleras encontrándose con Hoseok con el cabello despeinado y Seokjin le sonríe suavemente.

"¿Cómo supiste que estaba aquí?"

"Fui por agua y escuché una melodía desde aquí arriba" explica, acercándose lentamente a Jin que asiente, en comprensión. "¿Taehyung no ha regresado?"

"No, se ha quedado con Jungkook en su apartamento" él miente, y decide que quizá deba cuestionar un poco a Hoseok. "Estaba esperando a que vinieran porque Taehyung me dijo que se verían en su apartamento, pero, al parecer, van a quedarse ahí porque el toque de queda los ha agarrado antes de que entraran al sector."

"Oh, eso es horrible. La verdad es que es mejor que se queden en el apartamento de Jungkook" comenta, sentándose al lado de Jin, frente a frente. "Quiero decir, la ciudad ahorita es una locura con los ataques a los reactores. No lo entiendo, y estoy asustado, pero no quiero preocupar a Namjoonie."

"¿Tu familia no te informa de lo que podría estar pasando? ¿No te han dicho si saben quiénes son los autores?"

"No; desde que me negué a manejar la empresa con Joohyun, me hicieron a un lado."

"Eso debe ser horrible para ti" Jin lo mira con compasión.

"Lo fue, pero ya lo he superado" se encoge de hombros. "No lo sé, Namjoon me ha ayudado a comprender que seguir mis sueños y no el de mi abuelo está bien porque, al final, mi abuelo ha vivido su vida, ha logrado muchas metas que se propuso, y yo debo vivir mi vida. No sería justo para mí."

"Eso es verdad; Namjoon siempre tan sabio" Hoseok se sonroja, asintiendo con una gran sonrisa.

"Sí, lo amo mucho, así que... Así que pensé en ayudarle a relajarse un poco."

"¿Sí?"

"Me preguntaba si mañana lo necesitarán aquí en la cafetería."

"¿Por qué?"

"Quiero llevarlo a ver películas en mi apartamento" Hoseok murmura. "Cenar y luego, se los regresaría. Desconectar le ayudaría a no estar tan tenso con todo esto de ese grupo terrorista."

Hoseok deja caer su idea, y no dice nada cuando Seokjin guarda silencio, sopesando la idea. Lo mira dudar por un largo momento y aprieta los labios esperando que le diga que sí, ¿por qué no lo haría? Taehyung y Jungkook no estaban ese día, ¿por qué no dejar que Namjoon no trabajara mañana? Después de todo, la clientela ha bajado por el pánico colectivo que cubre a toda la ciudad y, en sí, a todo el mundo.

Las noticias de los ataques se han expandido por los continentes, aumentando la seguridad en las entradas, en los Reactores y, de paso, vigilando a las personas en contra del gobierno Jung, aquella que se quejan del uso excesivo de la Energía Vital. Mientras ahí, en Seúl, el gobierno no se presentaba y guardaba completo silencio ante los ataques, solo abriendo las vacantes a Soldado, en otras partes había protestas, arrestos y bajas, tanto de soldados como de civiles.

Podía decirse que la falsa paz en la que habían estado viviendo se había acabado ahora que Taehyung y los chicos habían dado los primeros ataques.

Y el mundo se estaba dividiendo en dos; los que estaban a favor del gobierno, y los que no. Siempre habían existido, pero ahora era aún más notoria esa línea que marcaba la diferencia de pensamientos. Porque, de cierta forma, la baja de los tres Reactores había tenido un impacto (¿Negativo o positivo? No podría decirse) en la gente en contra del gobierno, en esas personas que se habían mantenido escondidas y calladas ante el miedo de ser brutalmente asesinados por los soldados y luego desaparecidos, como si fueran nada, decidieron salir alzando la voz, gritando y luchando contra soldados, pregonando algo que no era mentira:

¡El Gobierno Jung es un asesino! ¡Los Soldados no nos protegen!

"Está bien" Jin responde, luego de un momento, dándole una sonrisa. "Pero, por favor, tráelo antes del toque de queda; me sentiría más tranquilo si durmiese aquí."

"No hay problema" Hoseok asegura, agradeciendo con una gran sonrisa.

Por la mañana, el día tiene un progreso normal, tranquilo. Nari se ha despertado, intentando alegrar a todos que se mantienen un poco tensos, y se entristece cuando Namjoon le dice que la verá por la noche. Seulgi alza ambas cejas interrogando a Seokjin, pero él le informa los planes de Hoseok, ella considera que necesita despejarse, así que acepta.

"¿Y si no abrimos la cafetería por hoy?" ella propone en cuanto Namjoon y Hoseok se retiran, despidiéndose de todos, asegurando que regresarían antes del toque de queda.

"Sería muy sospechoso" Seokjin dice, mirándola mientras preparan la apertura de la cafetería. "Quiero decir, la gente nos ha visto convivir con personas que han gritado a los cuatro vientos estar en contra del gobierno; no sería prudente cerrar la cafetería."

"Tienes razón, además, eso nos tiene un poco distraídos de todo en general" Jin asiente ante sus palabras y Seulgi se acerca a él, abrazando su ancha espalda y suspirando.

"¿Qué pasa?" cuestiona el mayor, acariciando sus manos.

"Nada, solo quería abrazarte" la sonrisa que le da luego es brillante y preciosa, da un par de saltos. "Iré a abrir la cafetería."

"Antes dile a Jimin y a Yoongi que bajen a ayudarnos, junto a Nari."

"¡Entendido!" Seulgi dice, corriendo hacia las escaleras y Jin la pierde de vista, cerciorándose que todo esté donde debe estar.

Enciende la televisión, porque estos días ha estado muy pendiente de las noticias y, honestamente, le preocupa que el gobierno Jung se mantenga callado, sobre todo, porque han perdido tres Reactores y hay terror y rumores por todas partes.

"¿No íbamos a tu apartamento?"

Namjoon está tomado de la mano de Hoseok mientras caminan por las calles levemente revoltosas por todo lo que ha estado pasando, con la gente corriendo a sus casas, alejándose lo más que pueden de los Reactores, asustados a cualquier cosa.

El chico no se detiene, aumenta el paso, mirándole de soslayo y dándole una sonrisa.

"Claro, pero quiero comprar unas tazas" informa como si realmente fuera importante y Namjoon frunce el ceño.

"¿Tazas? ¿Para qué?"

"He encontrado unas muy bonitas y quiero tenerlas a como de lugar. No está muy lejos de la ruta que nos lleva a mi apartamento, así que, no tienes que preocuparte."

"Lo decía porque tenemos hora límite y si nos atrasemos no veremos más de una película."

Hoseok lo dirige hacia otros callejones, unos más despejados que el otro. Parece un poco laberinto el lugar, pero, Namjoon piensa, que es un atajo; Hoseok conocía demasiados atajos, así que no estaba preocupado.

"Tú sabes que te quiero mucho, ¿verdad, Joonie?"

La pregunta llega a los oídos de Namjoon que se detiene cuando su novio, a quien adora con todo su ser, se ha quedado de pie, sin mirarlo.

"Sí, claro que lo sé. Tú también lo sabes, ¿no es así?"

"Es así" asegura, girándose y mirándolo con una linda sonrisa, junto a esos ojos dulces. "No estaba de acuerdo, pero tampoco quería perderte."

"¿Uhm? ¿De qué estamos hablando ahora?" Namjoon tiene el rostro confundido, y Hoseok se acerca a él, soltando su mano, llevándola hacia su abrigo, sacando una materia de un color rojo y lo confunde, ¿qué era eso? "¿Por qué es roja? ¿Es una materia?"

Hoseok sujeta su rostro, asintiendo y le muestra la materia.

"No es nuevo, pero solo los soldados las usan."

"Nunca me hablaste de ellas" Namjoon comenta, mirándola con admiración. "¿Qué hacen?"

Jung no le responde, al menos, no con palabras, porque lo próximo que Namjoon sabe es que la materia es introducida en su frente sin previo aviso y se queda congelado porque la sensación es completamente diferente a usar una materia normal.

"No podía salvarlos a todos, Namjoonie, espero que puedas perdonarme" dice con los ojos apagados y Namjoon lleva una mano hacia su frente tratando de comprender qué está sucediendo.

Unos motores rugen, y el callejón ya no está tan vacío, porque los autos negros, elegantes y blindados aparecen detrás y adelante, abriéndose para mostrar unos cuantos soldados que los rodean y Kim se queda sin palabra cuando Jung Joohyun sale del lugar, mirándolos a ambos.

"Hoseokie, hay que irnos, mi abuelo está por moverse" ella comenta, sin mirar a Namjoon.

"¿Qué demonios está pasando?" Namjoon cuestiona y esta vez, Joohyun lo mira con sus ojos fríos e inexpresivos.

"Mi abuelo los ha descubierto."

Y es lo último que escucha antes de perder la consciencia, la materia de desvanecimiento funcionando. Su cuerpo es sostenido por los soldados que se encuentran cerca y mira a la vicepresidenta, o quizá ¿exvicepresidenta?, para acatar sus órdenes.

"Súbanlo a mi camioneta y vámonos de aquí" ella murmura, sin mirar siquiera el cuerpo inconsciente de Namjoon.

Hoseok, temeroso, se acerca a ella, mirándola preocupado.

"¿A qué hora?" cuestiona. "¿Qué hará? ¿Namjoon está involucrado?"

"He hecho lo posible para que mi abuelo descarte a Namjoon como cómplice de ellos" asiente, cruzándose de brazos. "No hay una hora en específico, pero de hoy no pasa. Has hecho bien informándonos todo lo que iban a hacer."

"¿Qué harán?"

Joohyun conecta su mirada con la de él, con el silencio del callejón y los soldados esperando pacientemente, sin inmutarse ni interesados en la conversación de los herederos Jung, ella no cree que Hoseok no pueda entender su mirada.

"Es pena de muerte."

"¿Para todos? ¿Nari, Jungkook?" su voz se hace pequeña.

"Para todos; han atentado contra el mundo entero" ella explica. "¿Kim Nari? Ni siquiera es Kim, ella no pertenece a esta ciudad; pertenecía a una de las ciudades marginadas. Su muerte será irrelevante para todos. Jungkook será la excepción."

"¿Por qué? ¿Por qué van a dejarlo solo?"

Joohyun se encoge de hombros, mirando sus tacones antes de responder.

"Nuestro abuelo le tiene cierto cariño" murmura, no muy segura. "O quizá solo quiere burlarse de su colega, mostrándole que su nieto está usando la Energía Vital como todo el mundo" ella lo mira. "Sabes lo orgulloso que llega a ser."

Ninguno de los dos dice nada, pero Joohyun puede escuchar el llanto silencioso de su hermano menor.

"Hoseok, te lo advertí; no te enamores de alguien que está en contra de tu familia."

"Noona" él escupe con la mirada dura. "Yo te amo a ti, y también amo a mi familia, pero ¿sabes qué si odio? Esta maldita empresa, porque eso es lo que es: una maldición. Lo único que ha hecho es destruir nuestra familia y, al contrario de lo que pensamos, nos hemos retrasado más que avanzar" se acerca a ella de forma intimidante, pero Joohyun no teme.

Ella alza su barbilla, sin abandonar la mirada de Hoseok, sosteniéndola.

"¿Algo más o ya terminaste?" cuestiona.

"Vas a cumplir tu parte, ¿verdad?"

"Vas a estar en la división de América en un par de días, el avión les está esperando, con los pasaportes nuevos" acepta. "Pero vas a arrepentirte de irte y dejarme atrás."

"¿Te arrepientes tú de haber aceptado el puesto, presidenta?"

"No."

"Entonces, yo tampoco lo haré."

No hay clientes en la cafetería durante toda la mañana, es algo que Jin pasa desapercibido y quizá no debería hacerlo, pero ahí estaba; comiendo un sorbete con la pequeña Nari que agitaba sus piernas de adelante hacia atrás mientras le preguntaba acerca de los animales y las flores.

Yoongi y Jimin han desistido por completo de estar en la cafetería, diciéndoles que les llamaran si se daba el caso de que se llenara el lugar, cosa que no iba a suceder. Ambos se encontraban en la cama de Min, comiendo papitas fritas, mirando el techo de la habitación, en completo silencio.

"¿Qué vas a hacer cuando tu madre despierte?" Jimin pregunta luego de un momento, masticando las papitas. "¿Vas a regresar con tu familia?"

"Supongo que sí" se encoge de hombros mirándole y Jimin le devuelve la mirada. "¿Qué harás tú?"

"¿Honestamente?" Min asiente. "Irme a explorar."

"¿Sí?"

"Sí, quiero ver todo lo que nunca hemos podido ver, todo lo que se encuentre fuera de esta ciudad basura" asegura con una gran sonrisa. "Si había flores en la iglesia de Daegu, seguro habrá algo más maravilloso y majestuoso más allá."

"¿Cuánto tiempo estarás fuera?"

"¿Por qué la pregunta?"

"Creo que es obvio que me gustas" Yoongi comenta y sonríe cuando las mejillas de Jimin se colorean suavemente de un rosa. "Y sé que te gusto, ¿vas a dejarme aquí?"

"Iba a llevarte conmigo, en realidad, pero deberías recuperar tiempo con tu familia" se encoge de hombros. "Quiero decir, durante estos años, hemos estado juntos; ¿por qué iba a robarte por más tiempo cuando seguro ellos te extrañan? Ya habrá tiempo para que viajemos sin restricciones."

"Entonces, ¿volverás por mí?" pregunta.

"Volveré por ti, viajaremos, y regresaremos."

"Eso suena bien" Min dice, cerrando los ojos, sonriendo con sus encías mostrándose. "Ya quiero que todo esto termine, para ser verdaderamente libres."

"Pronto, hyung" asegura, acercándose para besar su mejilla. Yoongi abre los ojos ante el contacto, mirándolo de forma profunda. "¿Es este el momento en el que nos besamos y decimos cosas cursis?"

"O donde nos besamos y luego follamos salvajemente, todo depende de la clasificación de la película" Yoongi comenta y la sonrisa que comparten es genuina y bonita.

"Bueno, podemos solo besarnos y ver qué sucede después."

"Eso suena bien, también" Yoongi comenta, posando una mano en la mejilla de Jimin que se acerca a su rostro suavemente y los dos van lento porque quieren atesorar ese momento, guardarlo en sus mentes y soñar despiertos.

Son interrumpidos por el celular de Min que comienza a sonar de forma incesante.

"Oh, se me había olvidado esa opción" Jimin bromea, separándose de Yoongi porque la melodía la conoce; solo la usa para su padre, que no le llama muchas veces, pero lo hacía.

"¿Está todo bien, papá?" es lo primero que Yoongi suelta mientras sostiene el celular contra su oreja. Jimin vuelve a acostarse en el colchón, tomando las papitas, decidido a acabarlas.

"Hijo, tienes que volver."

Yoongi suelta un suspiro frustrado. Ahí iban de nuevo.

"Papá, ya hemos hablado de esto muchas veces; no voy a volver hasta que..."

"Tu madre ha despertado" termina la frase. "Lo ha hecho, Yoongi, tienes que que volver, quiere verte."

"¿Qué? ¿Cuándo lo hizo?" le tiemblan las manos de pronto, sujetándose con fuerza al colchón y el celular. "¿Papá?"

"Hace un par de días, pero hasta hoy ha salido del hospital. Está ahorita aquí en casa, tienes que volver."

Jimin se preocupa ante la tensión y el silencio de Yoongi, ladeando el rostro y acercándose suavemente.

"Vale, iré ahorita mismo" promete con los ojos llenos de lágrimas. "Denme una hora."

"Te esperamos, Yoonie."

En cuanto cuelga, Jimin lo sostiene de los hombros, exigiendo respuestas y Min no ha dejado de temblar ni sentir que es todo un sueño y se siente demasiado contento porque él realmente ha extrañado a su mamá.

"¿Qué? ¡Eso es increíble!" Jimin celebra en cuanto le explica porqué se encuentra como se encuentra. "¿Vas a ir ahorita?"

"¿No vienes conmigo?" cuestiona, sosteniendo la ropa de Jimin.

"¿Quieres que vaya?" Yoongi asiente repetidas veces. "Iré contigo, entonces. Hablemos con Jin, seguro que lo entiende."

"Oh, pero la cafetería... No podemos dejársela solo a Jin y a Seulgi" detiene, pero Jimin se levanta, estirando todo su cuerpo.

"Pero si ni siquiera hay nadie" Jimin le resta importancia. "Además, Jungkook y Taehyung vienen en camino, estarán bien. No nos estamos yendo por nada; se trata de tu familia, es importante. Te llevaré en motocicleta y tendrás una entrada fenomenal."

"Vale, tienes razón, ellos lo entenderán."

Yoongi extiende su mano y Jimin la toma, halando de él. Lo suelta para que se vista de forma rápida y lo incentiva a hacer una mochila porque quizá desee quedarse a dormir para compartir más tiempo con su madre. Jimin le asegura que él estará bien regresando solo antes de que den el toque de queda.

Cuando lo hablan con Seokjin, él acepta, totalmente feliz porque Yoongi esté recibiendo buenas noticias. Seulgi les prepara tartas para que las lleven a los Min y los compartan durante la plática. Nari se despide de Yoongi con un abrazo y les desea lo mejor.

Quizá debió deseárselo a ella misma. 

Tengo 2k de palabras del otro cap ya escritas, si me organizo bien podría traerles el próximo el martes o miércoles wiuu.

Los amo, abejitas uwu.