71
Cuando te despertaste, estabas algo aterrada.
Con tu cabello apuntando en todas direcciones, y tus ojos como platos.
Seguías pegada a mi como un pulpo, como si nunca quisieras dejarme ir.
No pude evitarlo: sonreí.
Y puede que te haya besado.
Aunque solo por unos segundos, eres asquerosa en las mañanas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro