Holaaa lo siento por desaparecer, pero aquí está el capítulo.

Por cierto, tengo Twitch. Por si gustan ir y apoyarme, hago Stream cuando puedo. Pueden ver el link en mi perfil.

Samantha: Creo que esto no va a funcionar.

Rosalie: -Me miró sorprendida- ¿De qué hablas?

Samantha: De esta cena... Con tu mal humor y tus comentarios hacia mi hermana, esta cena va a ser, lo siento por la palabra, pero va a ser una mierda para todos. -Le entregué bruscamente el ramo de rosas rojas que había elegido especialmente para ella- Son para ti, espero que no te gusten. -Gruñí-

Todos me veían sorprendidos por mi forma de actuar y los entendía. Nunca me había comportado así, al menos con ellos.

Alice, junto con Jasper, entraron por el balcón, terminando el incómodo momento.

Alice: Hola Samantha. -Me abrazó- Hola Bella, soy Alice. -Abrazó a mi hermana- Oh. -Se alejó de ella- Sí, hueles muy bien.

No pude evitar reír un poco por la cara de Edward.

Edward: Alice, ¿qué haces?

Alice: No te preocupes. Bella y yo seremos grandes amigas.

Todos miramos a Jasper, quien estaba incómodo manteniendo su distancia.

Carlisle: Disculpa a Jasper. Es nuestro nuevo vegetariano, es algo difícil para él.

Jasper: Es un placer conocerte.

Alice: No te preocupes, Jasper. No la lastimarás. -Abrazó a Jasper-

Edward hizo una cara algo incómoda y luego miró a mi hermana.

Edward: Yo voy a llevar a Bella a ver el resto de la casa.

Alice: Bien. Nos vemos pronto.

Bella: Ok.

Los dos se fueron, dejándome con el resto de la familia.

Esme: Es tan simpática.

Carlisle: Creo que eso salió bien.

Esme: Limpia eso. -Le dijo a Rosalie y señaló los cristales en el piso- Ahora.

Samantha: Toma. -Le entregué el último ramo a Alice-

Alice: ¡Aw, gracias, Samantha! -Le dio un codazo a Rosalie y me hizo un gesto con la mano-

Rosalie: -Suspiró- ¿Me ayudas?

Samantha: No.

Salí de la cocina y me senté en el sofá de la sala. A los pocos minutos, alguien se sentó a mi lado.

Jasper: Sabes que pude sentir tus celos desde que llegué. -Se rió un poco-

Samantha: No son celos. -Me crucé de brazos- Solo me molesta que Rosalie haga esos comentarios.

Jasper: -Se levantó del sillón y me sonrió- También son celos.

Samantha: Que no son celos.

Le lancé una almohada que atrapó y dejó en el otro sillón, para luego irse y dejarme sola con mis pensamientos.

Samantha: No son celos... -Susurré para mí misma-

Me sumergí en mis pensamientos. Realmente eran celos ver a Rosalie tan cerca de Emmett, hizo que me dieran ganas de arrancarle la cabeza al grandote.

Una mano en mi hombro me sacó de mis pensamientos.

Rosalie: Edward y tu hermana se acaban de ir.

Me levanté del sillón y busqué el latido de mi hermana, pero no lo escuché por ningún lado.

Samantha: -Suspiré- Creo que debería irme ya.

Rosalie: -Negó y agarró mi mano- Hablemos antes.

Me llevó por la casa hasta que entramos en una habitación y cerró la puerta detrás de nosotras, soltando mi mano.

Miré a todos lados, viendo las paredes de un tono rojo rubí, la cama king size con sábanas del mismo color que las paredes, con una mesita de noche en cada lado, cada una con su lámpara. En las paredes había un par de cuadros, cerca de un cuadro había un librero; la mayoría de los libros eran de autos. Cerca de la ventana se encontraba un escritorio de madera oscura, donde estaba una laptop y un par de revistas de moda y una de autos. En la esquina de la habitación, había un tocador donde se encontraban sus joyas y un poco de maquillaje. No muy lejos estaba su armario y un espejo de cuerpo completo.

Samantha: Linda habitación.

Rosalie: Gracias, Esme y Alice me ayudaron a decorar.

Asentí y me senté en la silla giratoria de su escritorio.

Rosalie: Escuche tu conversación con Jasper

Samantha: -Gruñí y me crucé de brazos- No son celos.

Rosalie: Emmett es como un hermano para mí.

Samantha: Tu hermano. -Sentí un alivio en el pecho-

Rosalie se acercó, pasó sus manos y luego sus brazos por mi cuello, terminando abrazándome y sentándose en mis piernas.

Rosalie: Ahora sabes cómo me sentí. -Beso mi mejilla-

Sonreí, pasé mis manos por su cintura acercándola más, besé su mejilla y luego dejé un rápido beso en su boca.

Samantha: Nunca dejaré que te sientas así de nuevo... Se siente horrible tener celos.

Rosalie: No que no eran celos.

Samantha: ¡No lo son!... Bueno, tal vez sí lo son.

Rosalie rio y me besó la punta de la nariz, haciéndome reír.

Rosalie: Esme nos está llamando.

Dejó un beso en mis labios y se levantó, yo la seguí hasta la cocina donde un olor delicioso nos recibió.

Samantha: ¿Esa pasta es para mí?

Esme: Sí, espero que te guste.

No esperé más, me senté y agarré el tenedor rápidamente, metiendo el primer bocado en mi boca.

Samantha: Mmm. -Gemí al saborear el primer bocado- Dios, esto es delicioso. Dime cómo lo hiciste.

La sonrisa de Esme creció y comenzó a hablar emocionada de cómo preparó la pasta. En un par de minutos, el plato estaba vacío, pero aún seguíamos hablando. En algún punto, Emmett, Alice y Jasper también se unieron a la plática.

Me reí de la historia que estaba contando Carlisle y miré por la ventana, viendo el bosque ya oscuro.

Samantha: -Suspiré- Gracias por la cena, pero ya debería irme.

Rosalie: ¿Por qué no te quedas esta noche?

Samantha: -Negué- Mi padre se preocupará... Tal vez la próxima vez me quede.

Rosalie: -Sonrió- Bien, pero te acompañaré.

Me despedí de todos, salimos de la casa y comenzamos a caminar tomadas de la mano por el bosque en un cómodo silencio hasta llegar a la puerta de mi casa.

Samantha: Bueno, aquí nos despedimos.

Rosalie: O podría subir por tu ventana.

Samantha: A mi padre no le gustaría eso.

Rosalie: Charlie no se va a enterar.

Acercó su rostro al mío y cuando estaba a punto de besarme, alguien abrió la puerta, asustándonos.

Charlie: Yo siempre me entero.

Rosalie dio un par de pasos atrás, sonriendo avergonzada.

Rosalie: Hola, Señor Swan.

Charlie: -La miró y después a mí- Entra que ya es tarde.

Samantha: Sí, papá.

Me despedí con la mano de Rosalie y entré a la casa mientras mi padre cerraba la puerta detrás de mí.

Charlie: Espero que no se repita lo que pasó con Cheryl.

Samantha: ¡Papá!

Charlie: Solo no quiero quedar más traumado.

Me reí y abracé a mi padre, luego subí a mi habitación y descansé por hoy.

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Charlie: Pasas mucho tiempo en la reserva.

Sam me había traído a la cafetería luego de patrullar.

Samantha: Sí, Sam me pidió ayuda para arreglar su auto. -Mentí-

Mi padre solo asintió y siguió leyendo su periódico justo cuando mi hermana llegó.

Bella: Lo siento, llego tarde. Proyecto de biología. -Se sentó enfrente mío-

Samantha: Ese proyecto tiene nombre y apellido.

Bella me pateó la pierna justo en la espinilla, haciéndome estremecer por el dolor.

Charlie: Te ordené la ensalada de espinacas. Espero que te guste.

Bella: Deberías pedirte una la próxima vez. Dejar de comer tanta carne.

Cora dejó nuestra comida en la mesa y se puso detrás de mí.

Charlie: Estoy tan sano como un caballo. -Dejó su periódico al lado de su plato-

Cora: Oiga jefe, las personas quieren saber si encontró algo cerca del río Queets.

Los señores de la mesa de al lado voltearon a mirar a mi padre esperando su respuesta.

Charlie: -Miró a los señores y luego a Cora- Sí, encontramos la huella de un humano descalzo. Pero sea quien sea, se dirige hacia el este. El Jefe de Kitsap se hará cargo ahora. ¿Ok?

Cora: Espero que lo capturen pronto.

Samantha: Todos lo esperamos.

Cora volvió a la cocina y todos comenzaron a murmurar mientras comía mi hamburguesa.

Charlie: Parece que sus amigos las están llamando.

Levanté la vista viendo a Mike haciendo un tonto baile contra un arbusto.

Samantha: No son mis amigos, son de Bella.

Charlie: Está bien, pero pueden ir con ellos si quieren. Yo me voy a acostar temprano.

Bella: Yo también.

Samantha: Igual, estoy cansada.

Charlie: Chicas, es viernes por la noche, salgan. Parece que el chico Newton vino a sonreírte, Bella.

Bella: Sí, es un buen amigo.

Charlie: ¿Y de los otros inútiles del pueblo? ¿Algún muchacho te interesa?

Bella: ¿Quieres hablar de chicos?

Samantha: Por favor, no me torturen de esa manera.

Charlie: Entonces hablemos de Rosalie.

Samantha: Por favor, no.

Charlie: Es solo que siento que las dejo mucho tiempo solas. Deberían socializar con gente nueva.

Bella: Me siento bien sola.

Samantha: Igual, supongo que sacamos eso de ti.

Mi padre sonrió y comenzó a comer mientras hablábamos de nuestro día.

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Salí rápidamente del baño con solo una toalla cubriendo mi cuerpo al escuchar un fuerte golpe del cuarto de Bella y sin pensarlo abrí la puerta encontrándome a Edward pegado a la pared y a mi hermana en su cama sin pantalones.

Edward: No es lo que parece.

Edward se veía asustado, si pudiera sudar, lo estaría haciendo en estos momentos.

Samantha: Edward.

Edward: -Me interrumpió- Lo siento. Ya me voy.

Bella: No te vayas. -Me miró- Samantha, por favor.

Samantha: -Suspiré- Si Charlie se entera, yo no sabía nada ¿Entendido?

Bella asintió y salí de la habitación, cerrando la puerta detrás de mí. Volví al baño y me puse el pijama, para luego ir a mi habitación donde ya me esperaba Rosalie, acostada en mi cama, leyendo una revista.

Rosalie: Te tomaste tu tiempo.

Samantha: Tuviste que ver la cara de Edward cuando entré en la habitación. -Dejé la toalla y mi ropa sucia en el cesto de ropa- El pobre parecía que se haría pipí en cualquier momento.

Me acosté al lado de Rosalie y miré la revista, apuntando a un Chevrolet Camaro 1969 azul.

Samantha: Ese es casi igual a mi auto.

Rosalie: -Levantó las cejas sorprendida- ¿Tienes un auto?

Samantha: Sí, Damon, un amigo casi hermano, me lo regaló en Navidad hace como dos años, pero se arrepintió ese mismo día.

Rosalie: ¿Por qué?

Samantha: No sé conducir.

Rosalie me miró seria y dejó la revista en la mesa, para luego agarrar mi cara, apretando un poco mi rostro.

Rosalie: ¿Cómo es eso posible?

Samantha: -Agarré sus manos y las alejé de mi rostro- Nadie me enseñó. Damon lo intentó, pero no tuvo paciencia y Charlie está ocupado.

Rosalie: Yo te voy a enseñar.

Me abrazó y sonreí, acomodándome en sus brazos, usando su brazo como almohada, me quedé dormida.