Rosé se sentó a la mesa y esperó una respuesta de Jennie, quien bebió su último sorbo de té.

-Rosé, tu hermano me secuestró, me trató como basura, casi tres personas me violan, se me cayó la carrera de cabeza y me dices que trate de hacerlo mejor?
No, no estoy loco y no sueño con convertirme en un ángel. Tan pronto como escape de este infierno, tu hermano será castigado por todo.-

Dijo Jennie con severidad y no le importó que sus palabras pudieran haber lastimado a la niña.

-Espero que cumplas tu promesa, ahora me voy a la habitación a dormir.-

Rosé solo asintió con la cabeza y no dijo nada.

¿Qué se debe decir?

Jennie tenía razón, tenía razón en casi todo... excepto que V ya no tenía remedio.

La niña creía que Jennie podía salvarlo.

La propia Rosé no entendía de dónde venía esta idea, por qué confiaba en el futuro de la chica casi desconocida de su hermano...

Como si Jennie fuera como una vela en la oscuridad.

Una luciérnaga que ilumina a la ardilla.

Pero Rosé no sabía que Jennie también estaba atrapada en la oscuridad, y la última luz abandonó el cuerpo de la niña cuando cortó a V con un trozo de vidrio...

Jennie estaba esperando que se cumpliera la promesa, pero V no había aparecido para el segundo día.

-Yo también voy Rose.-
Jennie se envolvió el abrigo.

-No, no Jennie.-
Sonó la voz de la chica.
-Si V entendiera…..-

-No me voy a escapar. Él mismo me dijo que soy residente del Hospital Kimtan y tú también prometiste ayudarme a retomar mi trabajo.-

-Jennie, por favor.-

-Voy contigo o sin ti, elige.-

Rosé no tenia otra opcion
-Esta bien, vamos.-

...

En unos 20 minutos, las chicas estaban de pie en la entrada del Hospital Kimtan.

-Probablemente sepa que tiene que asistir a conferencias antes de poder asistir a la operación. Encuentra al doctor principal Joon. Por supuesto, este no es su nombre completo, pero todos lo llamamos así y le decimos que eres un nuevo residente.-

Jennie no dijo nada mientras su rostro brillaba por el pasillo hasta que conoció al Dr. Joon.

Jennie imaginó al doctor como un anciano. Se equivocó porque el hombre tendría menos de 30 años, alto y delgado, con rasgos faciales afilados y anteojos que hacían que sus ojos azules parecieran más pronunciados.

-¿Señorita?-
Dijo el hombre y miro a la chica.
-La enfermera me dijo que me estaba buscando.-

-Si, hola. Soy la nueva residente, Jennie Kim.-

El hombre no dijo nada. Miró a la chica como si una criatura fea estuviera parada frente a él.

-No entiendo por qué te trajeron a nuestro hospital.-

Jennie no esperaba tal respuesta aunque no expresó ninguna tensión.

-De acuerdo, Jennie Kim, tu único propósito es seguirme dondequiera que vaya, memorizar las historias personales de los pacientes y verificar en detalle todas las mañanas y noches. Al final de cada semana, haga una presentación a todos los médicos sobre uno de los pacientes que prescribió durante la semana. Los profesores realizarán pasantías en laboratorios. Es cierto que usted es el único residente ahora, pero ya se están dando conferencias para que los médicos graduados entren. ¿Está listo?-

Jennie asintió con la cabeza, este hombre tenía tal aura que se sentía como una niña frente a él.

-Hay operación ahora. No sé si se lo dijeron pero soy cirujano general. Lleve al paciente de la sala 329 para una tomografía. Obtenga información sobre mis pacientes, las enfermeras y conozca a cada paciente.-

El hombre habló sin emoción, lo cual era lógico porque si quieres llegar a ser un buen cirujano tienes que aprender a bloquear las emociones.

Joon volvió a mirar a Jennie, sacudió la cabeza con frustración y dejó a la chica en el pasillo.

Por supuesto, no era desconocido para Jennie, los médicos superiores atormentaban a sus estudiantes, pero ella nunca aprendió a trabajar con tanta carga.

La chica corrió por los pasillos todo el día, revisando pacientes, recitando historias, asistiendo a conferencias en el laboratorio.

Aunque no estaba cansada, la chica se sentía como si hubiera nacido de nuevo.

La alegría de vivir volvió, no más recuerdos y no más villa de pesadilla.

Era como si se hubiera convertido de nuevo en un ser humano ordinario.

El turno de Jennie terminó cuando llamó la enfermera.

-Querida, el jefe del hospital te está esperando en su oficina.-
La enfermera le sonrió a Jennie y le puso la mano en el hombro.

El rostro de la chica se cubrió de aburrimiento nuevamente, por alguna razón no quería ver a su jefe pero la desobediencia tendría peores consecuencias.

Jennie llamó a la puerta y entró en la habitación.

-Un día tranquilo para la señorita Jennie. Siéntese por favor.-
Dijo formalmente el hombre y con una sonrisa socarrona se ofreció a sentarse en la silla.

-Bueno, esperaba una mirada más sorprendida.-
El hombre sonrió.

-Ya lo sabía. Desde el día que seguí al camarero moribundo al hospital desde la fiesta, tuve dudas. Luego escuché la historia de Rose y ella también mencionó las palabras "mi hermano"-

Jennie habló con calma pero en su corazón estaba feliz porque dijo la verdad de forma independiente.

-Y ayer escuché que el hermano de Rosé eres tú, el Sr. Kim Taehyung.-

-Creo que eres más inteligente de lo que pensaba Jennie.-
V sonrió irónicamente.

-Tengo algunas condiciones.-

-Y yo ¿Tienes que escuchar tus términos.-

-Por supuesto, antes que nada quiero ver a Lisa y necesito ir a mi compañía de ropa.-

V miró a la chica con asombro.
-Tú pones condiciones de las cuales sabes que no estaré de acuerdo. ¿Tienes algo contra mí, me estás amenazando?-

-¿Sabes qué V?, creo que tu mente no puede apreciar lo suficiente. Rosé me cae bien, es una chica muy buena y sabes muy bien que por alguna razón depende de mí y en pocos días se a encariñado demasiado, más de lo necesario.-

-Dilo directamente Jennie, de lo contrario créeme, los resultados solo te harán daño.-
La voz de V sonaba enojada, porque odiaba cuando alguien de alguna manera insultaba a su hermana menor.

-O cumples con mis demandas o le digo a Rosé que tienes una herida por mi culpa y ambos sabemos que le romperá el corazón.-
Dijo Jennie sin emoción y miró a V a los ojos.

La chica no sabía si realmente sería capaz de decirle la verdad a Rosé pero tenía que convencer a V, tenía que ponerlo nervioso.

Jennie fue capaz de encontrar el punto débil del hombre, no iba a perder una oportunidad.

El hombre sonrió.
-Puedes ir ahora y decírselo.-

Jennie se sorprendió mientras esperaba otra respuesta, pensando que Rosé era más importante para él.

-O acepto que puedas ir a ver a tu amiga y, a cambio, nunca jamás le contarás a Rosé esta historia.-

-Puse dos condiciones.-

Jennie se quedó en silencio cuando V golpeó la mesa con todas sus fuerzas.

-Escúchame pequeña niña. No olvides tu lugar, acepta o ve y dile a Rosé todo.-

Lo que Jennie no pensó mucho antes de aceptar.

-De acuerdo.-
Dijo ella ignorante y se dispuso a irse.

-Cruzaste la línea, y me amenazaste, lo cual te costará amargamente y te advertiré.-

El hombre muy enojado miró a los ojos de Jennie.

-Si te atreves a usar a mi hermana en mi contra, tú y tu amiga serán torturadas hasta la muerte.-

Jennie sintió sus pelos de punta y que su odio por el hombre se intensificó, solo lo imaginó y la chica se apoderó del miedo.

Sin embargo, por alguna razón, sin saberlo, creía que V no iba a matarla.

-Ahora sal de mi habitación y mañana hablaremos de cómo serás castigada por ir al hospital sin mi permiso.-

-Antes de irme quiero decirte que te ves horrible, no salgas de la oficina o alguien lo hará perderé el conocimiento cuando te vea.-
Dijo Jennie con sarcasmo.

-Fuera.-
Susurró V y escondió la cabeza por enojo o vergüenza.

-¡VETE AL INFIERNO!-
Jennie le gritó a V y cerró la puerta.

-¿Cómo se atreve? Niña loca.-
Pronunció V y luego se dio cuenta que por unos minutos estuvo sonriendole a la puerta.

-¿Ahora quien esta loco? ¿Jennie anormal o yo que hemos estado sonriendo como idiotas durante unos minutos?-

...

La chica salió del edificio del hospital y se paró en el patio. ¿Dónde iba a ir?

La gente se va a casa cuando termina de trabajar, pero Jennie ya no tenía casa.

¿La Policía?

Ve y di todo, pero, por supuesto, todos los policías de la ciudad son sus esclavos.

Ella también odiaba el reconocimiento pero estudiar y trabajar en este hospital siempre fue su sueño incumplido…

Además Jennie no pensaba que vivir con Rosé fuera terrible.

Es cierto que odiaba estar cerca de él y extrañaba la vida anterior, pero tal vez todo era una oportunidad para comenzar una nueva vida...

Por supuesto, no solo iba a estar bajo la dominación, pero Jennie sabía que ese momento era necesario.

Es hora de conocer mejor a V y explorar mejor sus debilidades.

Jennie se quedó congelada frente al hospital y pensó sin parar, pensando en los pasos a seguir...

Cuando un pensamiento aterrador pero de lo más lógico le vino a la mente.

-Kai.-

...

Nota de la autora:

Gracias por leer 💞💞💞💞 por favor dime tu opinión y vota 🌟

Nota mía:

A Jennie a veces se le olvida con quien habla 👁👄👁 como es que le habla así a un asesino!?

Bueno, todos estamos de acuerdo en que no va asesinarla xd.

Weno hasta el próximo capítulo 😗🖐

[Traducción♤♡]