Dallas, Texas
1960

Todo parecía ir normal en el tranquilo estado de Dallas, la noche era más cálida de lo habitual, eso indicaba un buen clima. Pero en aquella noche tranquila, un gigante rayo azul se hizo presente en el cielo estrellado, lanzando a dos personas fuera de el, para su buena suerte, ambos cayeron en un callejón donde no había nadie que los hubiera visto.

—a la próxima no dejes que Cinco tome el control de los viajes en el tiempo—dijo Atlas sobando su cabeza por el intenso golpe que se dio

—Atlas, ¿Dónde están los demás?—pregunto su hermana al no notar la presencia de los demás Hargreeves, incluso de Ben

—no deben de estar lejos, será mejor ir a buscarlos—ambos se levantaron y salieron del callejón, pero al llegar a la acera, se detuvieron en seco

—dime que estás viendo lo mismo que yo—dijo Hydra mirando a su alrededor con total asombro

—estoy viendo lo mismo que tú—comento el chico mientras observaban las tiendas que había frente a ellos

Todo el lugar parecía sacado de una película de los años 60's, había cosas antiguas que sólo habían visto en tiendas de antigüedades y en el despacho de su padre.

Caminaron unos metros por la vacía calle, pero mientras más veían, menos entendían que estaba pasando, Atlas se acercó a una tienda de ropa que había cerca, y vio extrañado como todo lo que había ahí, eran trajes formales para caballero y vestidos largos para las chicas, eso realmente era una vestimenta muy distinta a la que ellos ocupaban.

—¡Atlas!—grito Hydra hacia su hermano, cuando el chico volteó, vio a su hermana con un periódico en las manos

—¿Qué pasa?—pregunto Atlas confundido por la reacción de Hydra

—creo que ya se donde estamos—dijo Hydra dándole el periódico a su hermano

El chico lo tomó y vio el encabezado en letras grandes y de color negro que había en primera plana.

"El movimiento por los derechos civiles se transforma en un movimiento violento para las personas negras"

—¿El movimiento civil?—pregunto Atlas confundido

—mira la fecha de publicación—dijo Hydra pasando su mano por su cabello

Atlas miró donde venía la fecha de publicación, y al leerlo, soltó el periódico preocupado.

—¿Ahora entiendes?—dijo Hydra a su hermano—estamos en 1960, Atlas

—algo debió de salir mal durante el viaje, debimos de estar en casa antes del Apocalipsis—Atlas se detuvo de la pared que había cerca, era difícil de procesar que habían caído 59 años en el pasado

—¿Y por qué sólo nosotros somos los que están aquí?—dijo Hydra en voz alta y los mellizos se miraron, imaginando lo peor

—No estarás diciendo que...—a Atlas le costó terminar su oración—los demás están muertos ¿O si?

—solo hay una manera de averiguarlo—dijo Atlas mirando a Hydra

Cuando eran niños, los mellizos absorbieron el poder de Ben, lo hacían sentir mejor cuando debía de usarlo para las misiones, lo hacían sentir que no estaba solo. Pero cuando murió, el poder de Ben dejo de funcionar en los mellizos, no pudieron volver a ocuparlo, y ahí supieron que cuando alguien de quien habían tomado sus poderes fallecía, el poder en ellos desaparecía instantáneamente.

Esperaban que ese no fuera el caso ahora, realmente anhelaban que aún pudieran tener esos poderes, porque eso les daba una esperanza con sus hermanos.

—comencemos por orden—dijo Hydra a su hermana—número uno, súper fuerza

Atlas se acercó a la pared que había ahí, con el poder de Luther podría romper una parte de una pequeña patada en ella, el chico se preparó, y dio una patada a la orilla de la pared...

Pero esta no se rompió.

—número dos, manipulación de cuchillos—dijo Atlas

Hydra sacó uno de los cuchillos que llevaba en su cinturón y fijo su vista a un árbol que había cerca de ahí, lo lanzó con la dirección en su mente...

Pero el cuchillo no llegó a más de dos metros de donde los mellizos estaban

—número tres, manipular a la gente con rumores—dijo Hydra

—escuche un rumor—Atlas empezó a hablar hacia su hermana—de que te sentarías en medio de la calle

Pero la orden que dio Atlas, no fue hecha por Hydra...

Ya en ese punto los mellizos estaban en un estado de desesperación y angustia absoluta, solo quedaba un último poder para efectuar, ya que al no estar Ben con ellos, era imposible poner a prueba el poder de Klaus. El de Vanya tampoco podían ocuparlo, ya que nunca supieron de la existencia de sus poderes, y cuando lo hicieron no hubo oportunidad de tomarlos.

—y número cinco, viaje a través del espacio/tiempo—dijo Atlas

Hydra cerró los ojos deseando con todas sus fuerzas que tan siquiera el poder de Cinco funcionará, poder saber que estaba vivo y que no lo había perdido otra vez.

Proyecto el lugar donde quería estar, en la academia con su familia como todo era antes, así que dio unos pasos para poder generar un portal que la llevara a su destino...

Pero eso no pasó, ningún portal se abrió.

—esto no es real—Hydra se hincó mientras sus lágrimas aparecían

—vamos a salir de esto juntos Hydra, te lo prometo—dijo Atlas mientras abrazaba a su hermana

Les dolía demasiado el hecho de que sus hermanos ya no estaban, podían tener diferencias como todas las familias, pero eran sus hermanos, y ahora, estaban solos otra vez, como hace algunos años lo estuvieron.

Hydra había perdido a sus hermanos, pero perdió dos veces al amor de su vida y ahora no había manera alguna de poder volver atrás para salvarlos.