Al parecer el plan maestro que se nos ocurrió a Yoon Gi y a mí no funcionó...

Jin me llamó como a las tres y pico de la madrugada, llorando e insultándome. Intenté calmarlo y pedirle que explicase lo ocurrido, cosa que enseguida soltó. Después de escuchar su mala racha con Nam, se lo conté a Yoon Gi.

—No puede ser— se quejó —.Me resulta increíble que Nam lo echase del auto, es decir... Ya vomitó sus zapatos y eso sólo fueron mocos.

—¿Si yo hubiese estornudado en tu cara habrías hecho lo mismo?

Puso una cara de asco que trató de disimular. Me di cuenta que dije algo bastante desagradable, lo volví a repensar y negué con la cabeza. Yoon Gi estaba tratando de ser un buen novio, pero yo y mis preguntas no ayudábamos mucho. En fin, volvimos a retomar lo de Jin y de buscar una explicación, porque según Yoon Gi, su amigo era sumamente respetuoso y un tipo que podía entender y comprender al otro.

—Puede que Nam estuviese también borracho pero supo disimularlo tan bien que no nos dimos cuenta y... Quizás cuando estuvo en el auto y vio los mocos de Jin pensó que serían radiactivos.

—Kook, nada de lo que dices tiene sentido, ¿te das cuenta?

—Pero... Es que una vez cuando bebí mucho empecé a alucinar. Puede que los moquitos de Jin le empezaran a hablar y decir cosas como "Échalo, échalo".

Yoon Gi tocó mi frente, pensando que tenía fiebre. Y la verdad es que sí, estaba un poco resfriado porque lo que restó de la noche me paseé descalzo por la casa capturando pokemones. Cuando me encontraba mal podía decir una sarta de estupideces.

—Estás caliente—dijo apartando su mano y empujándome para que me acostase—.Te traeré algo.

—Pero...—lo observé marcharse y luego toqué mi frente —¡Wow, estoy que ardo!

Al rato Yoon Gi trajo un trapito húmedo y me lo puso en la frente. Me acomodé entre las almohadas y me tapé un poco. Que me cuidara de ese modo me hacía pensar en lo buen esposo que sería en un futuro no muy lejano.

—Yoon Gi...—le hablé, sintiendo algo extraño—¿No será el trapo de la cocina?

—No.

Que maldito mentiroso... Aquel trapejo debía ser de esos amarillos que usaba para limpiar la encimera.

—Esto huele al vino que trajo Nam.

—Ya estás delirando, vamos mal...

—No, estoy totalmente bien, mira, ¿que no ves esa cabra parada en la ventana? Te está diciendo que van a venir los marcianitos a bailarte una cumbia.

Le hice gestos con las manos, ¿qué acaso no hablaba en idioma cabresco? Bueno, no sé cómo se llama el idioma de las cabras, me lo inventé, ¿está bien? No sé cómo quien estoy hablando, en fin... Lo importante es que al ratito me dormí y empecé a tener sueños muy bizarros. Yoon Gi era mi mujer y me preparaba la cena mientras llevaba un vestido de cenicienta. Después de eso muchos Jin aparecieron con un bate y me persiguieron por la iglesia donde estaba el Papa dando misa.

—¡Kook!

Escuché mi nombre y abrí los ojos asustado. Frente a mis narices estaba Jin. No sabía si era real las parte del sueño, pero por la dudas le pegué.

—¡Auch!—se tomó la mejilla y abrió la boca—¿Qué te pasa estúpido? Vengó aquí a las siete de la mañana porque Yoon Gi me avisó que estaba enfermo y me recibes así. Encima Nam Joon... Me debe odiar y...

Se largó a llorar de repente. Me sentí tan mal amigo en ese momento. A pesar de que estaba un poco confundido lo abracé y consolé. Jin era tan sensible como yo, me daba lástima saber que estaba maldito el pobre.

—Lo siento, no quise golpearte— acaricié su cabeza—.Y siento mucho lo que te pasó con Nam. Con Yoon Gi creímos que todo saldría bien.

—Bueno, en realidad no es culpa de ustedes, sólo es mi desgracia— Jin se limpió las lágrimas y se alejó —. Ahora lo importante es tu salud, ¿cómo estás?

—Oh, no... Lo importante sigue siendo tu plan de conquista, creeme que no nos rendiremos. Tú y Nam van a estar juntos porque yo lo digo.

—Kookie...

Y así, a las siete de la mañana, Jin y yo hablamos sobre dar un paso más hacia Nam, buscando el perdón por el accidente e involucrando nuevas ideas.

A Jin en verdad le gustaba Mal, y para eso estaba yo, para darle una mano amiga, no enemiga, aunque en realidad seria mejor decir algo como "para no cagarla".

JJK: 26/06/2017