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Nuestro bebe esta creciendo

En Wayne manor se vivía un momento de verdadera tensión, más precisamente en la mesa que se ubicada en la sagrada cocina de Alfred Pennyworth, tres hombres se miraban de forma penetrante y con una seriedad inigualable, el ambiente estaba tan denso alrededor de los tres involucrados, que fácilmente se podría cortar con un cuchillo.

Que situación pondría de tal forma a tres de los guerreros del murciélago, tan tensos que cada uno de sus músculos lucía rígido, hasta el punto que parecía que en cualquier momento sus venas estallarían, guerreros que han luchado con los psicópatas más grandes que han pisado este mundo, que han enfrentado a la muerte a la cara, ido y regresado del mismísimo infierno, que sobreviven cada noche batallando en las pútridas calles de la ciudad maldita y abandonada por los dioses, pues nada más, ni nada menos, que las palabras antes dichas por el más joven allí presente, Timothy Drake.

El cual en la mañana de ese mismo día, se tuvo que enfrentar de cara con un hecho para el cual el afanado Red Robin, el que es reconocido como el más grande detective del mundo, no estaba preparado en lo absoluto, ni poseía a su disposición ningún plan de contingencia, tomándolo por sorpresa y dejándolo paralizado en el acto.

Era una mañana normal para el segundo más joven de Batman, y se dirigía a la cocina de su hogar, desaliñado, usando pantalones cortos, y una gran playera de color negro con la icónica S del hombre de acero adornando su pecho, portando un inigualable peinado de almohada, se encontraba bostezando y luciendo su mejor look mañanero, y mientras sus pies descalzos se deslizaban por las frías baldosas negras del pulcro piso de la mansión, nada, absolutamente nada, lo preparo para lo que encontraría esa mañana de sábado, en la sala de su casa.

Su hermanito menor, el más joven de los aliados del imponente Batman, el más fiero de los Robin, se encontraba bajo completa sumisión, postrado en el costoso sofá de la mansión, bajo el pesado, y a comparación del más bajo, bastante más grande cuerpo del menor de los hijos de Superman.

El de mirada jade se encontraba con los ojos completamente cerrados, mientras el moreno más joven propinaba una serie de besos para nada inocentes en el cuello y clavícula del mayor, dejando a su paso visibles marcas oscuras en la piel canela del más bajo.

El Wayne mayor no supo que hacer, víctima del shook de ver al más joven de su familia, siendo parte de ta caliente sesión de besos, con el que hasta ahora, pensaba que era el más inocente de sus aliado.

Sin embargo, fue cuando Jonathan coló una de sus manos bajo la amplia playera que el actual Robin usaba como pijamas, la cual portaba en su pecho el símbolo inequívoco del murciélago, deslizándola por la impoluta piel besada por las cicatrices del menor, provocando el resoplido de un gemido.

Fue ese, el exacto momento cuando el mayor de ojos azules lo perdió, soltando un muy masculino chillido, y ahogándose en su propia saliva, fue también, con lo que alerto a los menores de su presencia en la habitación.

Los más jóvenes se detuvieron para alzar la mirada y esperar la siguiente acción o las palabras que seguirían, de su recién descubierto interlocutor.

Pero este decidió que seria más prudente retroceder y ejecutar un plan de acción más elaborado, solicitando asistencia de alguien más capacitado, fue un acto táctico, el no estaba huyendo de la escena por encontrarse perdido ante la idea de haber encontrado a su hermano menor, en una sesión de besos calientes que se dirigía rápidamente al sur.

Por supuesto que no, Timothy Drake no huye, mucho menos por algo tan banal como el hecho de que su bebé de un hermano, su pequeño e inocente, puro y casto hermanito, estuviera a punto de ser corrompido por ese demonio de un ser humano, o alienígena para el caso, que osaba disfrazarse de cordero degollado, no, por supuesto que no.

Y es así como llegamos a esta cómica escena, luego de que el más joven de los presentes, soltara la bomba de una frase.

-"Alguien tiene que darle la charla a Damian"

El gran y poderoso Batman quedo petrificado en medio de la mordida de su sándwich de un desayuno, y Nigthwing se ahogo con su cereal en seco.

- ¿Que? No, Damian es aún muy pequeño para semejante cosa, ¿Lo quieres traumatizar al pobrecito?

Le reclamo completamente alterado el mayor de los hijos de Wayne.

- Bueno, Damian ya tiene dieciséis años, ciertamente ya no es un niño, pero no veo la razón de tan repentino deseo Tim, Damian no ha mostrado interés en tal cosa

Cuestiono el patriarca de la familia.

- Pues la sesión de besos calientes que me encontré hoy en la mañana, me dice lo contrario Bruce

Menciono el joven detective como quien no quiere la cosa, sin atreverse a ver a ninguno de los mayores a la cara.

- ¡Que!

Grito horrorizado el mayor de los Robins, comenzando a entrar en histeria.

- En ese caso supongo que alguien tendrá que dársela

Hablo Bruce como quien no quiere la cosa, tratando de restarle importancia al asunto, pero luciendo completamente incómodo ante la idea.

- Yo digo que tienes que ser tu Bruce, eres su padre después de todo

Señalo Tim, con obviedad en su voz.

- ¡Que, no! ¡Dick es más su figura paterna, que lo haga él!

Expreso alterado el "O gran inquebrantable Batman".

-¡Que, no! Tim fue quien los vio, además eres el más listo, tienes que ser tú

Señaló Dick entrando en pánico ante la idea de tener que hablarle sobre tales barbaridades a su inocente y casto angelito.

- ¡Que, ni hablar! ¡Yo no lo estoy haciendo, que lo haga Jason!, Él es el que tiene mayor facilidad para hablar de estos temas, que él  se la de

Contraatacó completamente nervioso Tim.

- No, definitivamente eso no puede ser una buena idea, no creo que Jay sea el mejor para dar una charla de sexo seguro, y me preocupa las palabras que pueda usar frente a Damian

Expuso el actual Nigthwing.

- Si, es obvio quien debería ser el que hable con Damian

Hablo esta ves Bruce, recibiendo dos afirmativas de inmediato.

El tema fue olvidado rápidamente, y el desayuno siguió de forma tranquila, y una vez más en Wayne manor reino la paz y serenidad que tanto la caracterizaba.

El tema fue zanjado y rápidamente olvidado, Bruce con el pensamiento que Dick había entendido la indirecta y aceptado la responsabilidad de informar a Damian.

Dick con la certeza de que Tim se haría responsable de tal tare.

Por parte de Tim, este estaba convencido de que Bruce se haría cargo de tal asunto.

Y así, pasándose la batuta no deseada unos a otros, al final, ninguno tuvo tal charla con Damian, y seis meses se pasaron volando, mientras múltiples veces la Bat Family se topaba con escenas donde Jonathan y Damian, protagonizaban a la pareja de adolescentes calientes que no pueden mantener sus manos fuera del cuerpo del otro, que incluían, pero no se limitaban, a sesiones de besos acalorados, juegos de manos y coqueteos nada discretos.

Y fue luego de que Dick los encontrara en una de esas sesiones en medio de la zona de entrenamiento, una particularmente fogosa, que se atrevió a preguntarle a Tim, quien hablaba con Bruce en la zona de la cueva donde se encontraban las computadoras, como le había ido con su charla informativa a Damian.

- ¿Que, de que estas hablando? Fue Bruce quien se la dio

Menciono confundido Red Robin.

- Yo pensé que Dick se la había dado

Regreso igual de confundido Batman.

- Ni hablar, Tim fue quien acepto dársela

Hablo Dick, dirigiendo su mirada al más bajo.

- ¿Que, cuando hice yo eso?

Reclamo el aludido.

- Esperen, esperen, ¿eso significa... ?

Cuestiono Batman a los presentes.

- Que en realidad nadie hablo con Damian

Menciono sonando derrotado el protector de Bludhaven.

- Esta bien se la daremos juntos entonces, mañana en el desayuno, el que falte tendrá que decirle a Damian que su pez dorado, Florentino, en realidad no se fue de vacaciones a Hawái y que ya no va a volver

Los otros dos asintieron de inmediato a lo dicho por Tim, ninguno queriendo informar al menor de la familia del trágico final de Florentino, y su cruel altercado con el inodoro.

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A la mañana siguiente, en el desayuno compartido por los Waynes, se podía respirar la tensión presente en el lugar, claramente se podía notar el nerviosismo en los tres mayores, y el sudor se deslizaba por la frente de más de uno, esto intrigo al más joven, que no se resistió a preguntar que tenia tan alterados a sus mayores.

- ¿Que?

Fue el cortante argumento que utilizó el poseedor de ojos jade, esto provocó que los dos hermanos restantes le dirigieran a su patriarca una mirada  que gritaba que él era el que debía comenzar.

Aclarándose la garganta el vigilante mayor comenzó, con lo que seria la tortura más grande enfrentada por los murciélagos ahí presentes.

- Damian, hay algo de suma importancia de lo que debemos hablar

- ¿Si, y eso seria?

Lo cuestiono el menor, continuando con la ingesta de su desayuno, ignorando de forma olímpica el malestar de los demás en la mesa, hoy tenia una cita con Jonathan, y nada de lo dicho aquí podría arruinar su buen humor, ante la expectativa de pasar todo el día junto a su amado.

Bruce observo con súplica a su hijo mayor, quien con un suspiro se resignó a su cruel destino, a ser quien corrompería de tal vil manera la mentecita casta de su hermano menor.

- Mira Dami

Se aclaró la garganta para continuar, tratando de encontrar las palabras correctas.

- Cuando dos personas se aman mucho, mucho... Pues... Ellas quieren demostrarse su amor... De una forma más especial... Y entonces ellas... Bueno ellas... Ellas... ¡Tim te dirá lo que ellas hacen!

- ¡Hey!... Quiero decir...

Detuvo su queja el ojiazul al ver que la mirada jade ahora se encontraba posada en él, corrigiéndose, trato de continuar.

- Es decir que, llega un momento donde una pareja desea dar el siguiente paso, y ese paso es...ammm... Bruce te lo dirá...

Al final Tim tampoco logro terminar la frase, y le boto al mayor la responsabilidad, este abrió y cerro la boca un par de veces, sin saber que decir, miro a su segundo hijo menor con traición, para luego erguir su espalda y tratar de continuar.

- Veras Damian, cuando uno llega a tu edad, el cuerpo comienza a presentar ciertos cambios, y se te presentan ciertas necesidades, esas necesidades... Bueno... Necesitan ser tratadas de forma correcta... De forma responsable... Aammm... Y veras... Lo que trato de decir es... Es... Ammm

- ¿Sexo?

Pregunto de manera despreocupada el menor de ojos jades, poniendo a los otros tres realmente tensos.

- Tranquilo padre, esas "necesidades" de las que hablas ya se me presentaron hace ya un año, no te preocupes, hable con Todd sobre ello, el me explico todo lo que debía saber sobre el sexo seguro y  como no hacerme daño cuando le dije que era el de abajo en una relación de dos chicos

Explico como quien habla del clima el menor de la casa, mientras se ponía de pie y tomaba una manzana del centro de la mesa, votándola en el aire y volviéndola a atrapar, continuo como si no estuviera hablando de su novio de quince años y su vida sexual.

- No hay de que preocuparse, llevamos un año ya de una saludable vida sexual, Todd es bueno dando consejos sobre el tema, gracias a su ayuda nuestra primera ves fue una muy grata experiencia, pero en fin, ya me voy, tengo una cita con Jonathan hoy, quien sabe tal vez podamos tener un buen polvo en la casa del terror

Menciono el "bebé" de la casa con una brillante sonrisa, mientras se despedía con una mano de su familia, tomaba su chaqueta negra de donde esta descansaba en el respaldo de una de las sillas, y salia de la cocina con un caminar alegre y tarareando por lo bajo, mientras disfrutaba de su manzana, totalmente ajeno al shook que sus palabras produjeron en el resto de los presentes, y del hecho que obligo a tres de las mentes más brillantes del mundo a hacer corto circuito, debido a un exceso de información, la cual no eran capaces de procesar.

Al final del día, resulto que Bruce decidió que le dejaría de ahora en adelante, todos los temas relacionados con la paternidad a Dick.

Que Dick llorara como magdalena descosida, la perdida del la castidad de su bebé.

Que Tim decidiera que ya no quiere ser parte de esta maldita familia y sus desmadres.

Que Jason si es un buen hermano con sabios consejos.

Que Jonathan y Damian son una pareja felizmente enamorada.

Y que nadie jamas volverá a mencionar en Wayne manor, la palabra Sexo o Florentino, nunca más.





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Dedicado a mis pequeños pajaritos  del grupo de facebook Damian Wayne Prettybird, porque amamos mucho a la bolita de odio y se merece un poco de felicidad en su vida.

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