Prólogo
Agua
Tierra
Fuego
Aire
Desde hace mucho tiempo existían las 4 naciones: el reino tierra, las tribus de agua, la nación de fuego y los nómadas aire, coexistiendo en armonía siendo vigilados por el avatar el único maestro que puede controlar los cuatro elementos. Nadie sabe desde cuando existió el avatar, unos dicen que solo apareció, otros que fue creado por los contenían estos elementos llamados los leones-tortugas, otros solo no querían saber.
Desde hace 1000 años antes de que existiera el avatar y su ciclo comenzará, habían muchos leones tortugas resguardando a los humanos en ciudades en sus caparazones, ya que los espíritus habían cruzado de su mundo al mundo físico, y lo habían tomado casi por completo. Debido a que los recursos en las ciudades eran escasos, los leones tortuga solían entregar el poder de controlar un elemento a los habitantes que salían de su caparazón para buscar comida y realizar otras tareas. Este poder se les otorgaba por un período de tiempo corto para que pudieran defenderse de los peligros del exterior, y al volver, el humano devolvía el control al león tortuga.
Sin embargo, el primer avatar, Wan, hizo que los espíritus volvieran a su mundo, los leones tortuga dejaron de proteger a los humanos en sus caparazones, ya que ese tiempo había terminado. Extrañamente, no decidieron exigirle a los humanos que todavía conservaban la capacidad de controlar cualquiera de los cuatro elementos que les devolvieran dicho poder a los leones tortuga, pese a que, con la decisión del Avatar Wan de decretar que los espíritus regresaran al mundo espiritual para prevenir que siguieran produciéndose conflictos entre ellos y los humanos, la principal razón para permitir que los humanos tuviesen la capacidad de controlar uno de los cuatro elementos ya no existía.
Pero solo existía un espíritu cada 100 años en cada era de los antiguos Avatars siendo estos sus ayudantes, amigos y compañeros siendo llamados los maestros de los elementos: bisonte volador, dragones-mangosta, perros-osos polares, renos-yak, tejones-topo. Pero no siempre caían en manos de los avatars, la mayoría de veces estas criaturas nacían con un propósito "ayudar a quien necesite formular sus ideas" en este caso los que tienen problemas de emociones. El espíritu es una reencarnación de un humano que vivió una injusticia convirtiéndola en una criatura para acompañar el viaje de los avatares y de las que necesitan su ayuda. Estos espíritus solo aparecen por los antiguos avatares que le entregan una misión importante, comenzando así un nuevo ciclo.
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