"Diciéndonos adiós y sonriéndonos mutuamente repetimos nuestros solitarios ARIA,
dime, ¿Cuánto tiempo las personas solitarias anhelan compañía?
Tu precioso futuro, acaba de empezar "

Pesadillas en una noche fría, desperté entre la penumbra de mi habitación, me llevo ambas manos al rostro, esta vez no es la sombra de la oscuridad lo que me aqueja tratando de llevarme a ese lugar donde aquel otro yo se encuentra encerrado, es tú recuerdo Atem el que acecha en mi mente, una despedida, cientos de palabras que jamás me atreví a decirte, la cobardía que tanto tiempo me acompaño.

Miro hacia a un lado de mi cama, él, tú propio fantasma en un mundo que parece haberse creado de la melancolía de mi corazón me muestra la risible visión de lo que alguna vez tuvimos, me acerco hacia él, pero sin importar que haga no puedo tocarlo, no eres tú Atem y jamás lo será, ni yo soy aquel que busca con desesperación, suspiro ante mis actos, engañar a mi corazón con tu viejo yo ¿Puedes odiarme por ello? Porque yo lo hago ahora mismo, me siento en la mullida cama mientras abrazo mis piernas.

"Solo quiero volver, volver a donde no era tan complicado, donde había una oportunidad de poder superarte" en mi mente se pronuncian las palabras que no me atrevo a decir porque temo que las escuches, sin embargo su sonrisa me invade, Atem, te he mentido ¿Sabes?, alzo mi rostro mientras sonrió tristemente, sé que ya no estás en este mundo, y este mundo no me pertenece, aun así por un tiempo corto finjo ser quien no soy tratando de encontrar la verdad de esta distorsión, ¿Acaso alguien se compadeció de nuestra trágica historia que jamás podría ser? Si es así, que amable de su parte, pero el amor no se puede borrar de una forma tan lastimera y entre mis propias palabras el recuerdo de su sonrisa aprisiona mi corazón.

"Te esperare hasta que estés listo, sé del vínculo que ambos tenían, pero no por ello debes condenarte a ser solo el portador del alma del faraón, Yugi, tu naciste más que solo por esta misión, debes mirar hacia el futuro y crear tu propio destino" sus palabras resuenan en mi mente, escucho su voz a lo lejos, la única que había visto a través de ambos, ¿Rebeca cuanto más esperaras por que supere lo que se ha fusionado con mi corazón completo? Desvió la mirada ante su fantasma que aparece frente a mí, se acerca y toma mis manos, una de ellas toca mi mejilla, —¿Cómo hasta en mis delirios eres tan cálida? —Pregunto y ella solo se limita a sonreírme, aquellos ojos que me invitan a un futuro que jamás pensé tener brillan cual luceros, invitándome a levantarme.

Giro hacia a un lado, el espíritu de tu otro yo ya no está, solo el rompecabezas aun lado de mi cama.

Me levanto de la cama, pero antes de dar el primer paso mi bolsillo y el rompecabezas empiezan a brillar, su fantasma asiente, suelta una de mis manos mientras me mira fijamente, miro su pelo rubio translucido, su mirada entusiasta, al final meto mi mano en el bolsillo, la llave que parecía estar muerta ha despertado, brilla iluminado la habitación, jala mi brazo hacia la puerta, volteo a ver el rompecabezas, pero ella insiste en que la siga, al final lo dejo en la mullida cama.

La miro a un lado de la puerta —¿Quieres que la abra con esta llave? —pregunto, pero solo asiente, suspiro, no puedo escuchar su voz, pero lo cierto es que ese fantasma no es ella, ella esta tan lejos como tú lo estás Atem, ¿O tal vez soy yo quien se alejó de ambos?, acerco la llave al frente, la puerta se abre, la luz dentro de la puerta ciega mis ojos, ante ello los cierro, siento una mano en mi espalda "Yugi, anda, debes regresar" escucho su voz mientras soy empujado, para cuando abro los ojos observo su fantasma despidiendo con aquella amable sonrisa que solo yo le conocía, trato de volver pero solo caigo en el abismo, escucho sus voces, los murmullos y aquellos ojos observándome entre la oscuridad ¿Cómo puede haber tanta oscuridad entre la luz?