III
"Dentro de esta oscuridad sin fin la hoguera que me obsequiaste
me ilumino y así nació la vida en el vacío de mi corazón"
Encontrarme de nuevo en el laberinto del rompecabezas me trae tanta nostalgia, pasearme entre la oscuridad que me sumerge entre el subir y bajar las escaleras que conozco de memoria para llegar a tu habitación, niego con la cabeza mientras una sonrisa melancólica se asoma de mis labios, no, esta no es tu habitación, aquí no estás tú Atem, mi Atem descansa en paz, este lugar le pertenece al "tu" de este mundo, suspiro ante la verdad y aun me lamento por hacer algo que no me corresponde hacer a mí, veo la sombra por entre la tenue claridad que se asoma y me deja proseguir mi camino, me observa con recelo y me hace preguntar si así actuaste cuando logre completar el rompecabezas, sin embargo no hay respuesta, nunca fuimos tan sinceros con el otro, aquel sentimiento siempre se quedó dentro sin poder salir, siendo tú, tan valiente sabía que lo habrías dicho, pero como no lo dijiste pude darme una idea sobre este amor unilateral.
Me detengo ante la puerta que la sombra de tu otro yo de este mundo reguarda colocándose al frente, al final no puedo evitar sonreír, aunque aún no tenga forma y solo sea una sombra para mi aquel otro tu es hermoso.
La conversación entre ambos comienza, de una forma de lo más peculiar, al principio me ataca, pero al final deja de hacerlo al escuchar que le ayudare, observo el ojo de Horus brillar, poco a poco su forma cambia, la diferencia de estaturas se hace notar, esta vez soy unos centímetros más alto, era lo más natural, tu habías muerto en tan joven edad, yo en cambio había vivido de la forma más normal que se podría decir, después de todo tu llegada había concebido al viaje más extraño que había vivido.
Sonrió al ver su forma, en mi mente se escapa la frase; "otro yo" pero al final no puedo nombrarle así, no eres tú, no es mi otro yo, sino de él, quien entre la oscuridad le vi sumergido.
Me llena de preguntas, de tantas que ni yo puedo contestar ¿Si no eres el dueño de este articulo cómo pudiste armarlo? ¿Eso no te confiere con la capacidad de ayudarme? ¿Quién es el portador real? ¿Quién eres tú? ¿Cómo es que has llegado aquí?
—No soy el dueño de este articulo —comienzo— no el de este mundo— sigue en silencio viéndome a detalle— en mi mundo yo ya complete la misión de ayudarte A... —me detengo, no debería develar lo que pasara ¿Verdad?— a saber quién eres —me mira inquisitivamente, como sabiendo que oculto algo de por medio, mas no pregunta o dice algo, solo se limita a mirar y espera a que continúe, le miro y la nostalgia me invade, en el inicio siempre fuiste demasiado frio— Quiero ayudarte —prosigo— No sé cómo llegue aquí, pero fue por algo que debo hacer en este mundo —aseguro— en este mundo la persona que debía ayudarte, mi otro yo de este mundo ha desaparecido —le cuento la tragedia, aun en mi mente las palabras de cómo me réferi al "Yugi" de este mundo resuenan, sin embargo el ensimismamiento que tengo al pensar en ello se va ante su voz.
—¿Cómo sabes que está vivo? ¿Y si lo mataron después de llevárselo? —pregunta.
—Él está vivo —le aseguro guardándome la imagen que observe cuando llegue a ese mundo, cierra los ojos y al final estira su mano, su tacto es diferente, no es igual al tuyo, se siente frío, demasiado frío ante mi gusto, Atem, dime ¿Cuándo te volviste tan cálido? Mas no hay respuesta alguna, sin embargo, me atrevo ante un impulso descarado abrazar al tú de este mundo, perdóname por favor...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro