Kim Jiwoo y Jeon Jungkook se separaron del beso y se miraron a los ojos. Se sonrieron con ternura y se abrazaron con fuerza. Se dijeron con los labios y con el alma:

- Te amo.

Y se quedaron así, abrazados, sin importarles nada más.

El público los observaba con asombro y emoción. Algunos los aplaudían y los animaban. Algunos los abucheaban y los criticaban. Algunos los envidiaban y los admiraban.

Pero todos sabían que estaban presenciando algo único y especial.

Los otros seis miembros de BTS los observaban con orgullo y felicidad. Algunos los abrazaban y los felicitaban. Algunos les hacían bromas y les sacaban fotos. Algunos les cantaban canciones y les tiraban confeti.

Pero todos sabían que estaban presenciando algo único y especial.

- Bueno, bueno, bueno - dijo Jin, el líder y el mayor del grupo, interrumpiendo el momento. - Esto ha sido muy bonito, chicos. Esto ha sido muy tierno, chicos. Esto ha sido muy dulce, chicos.

- Sí, sí, sí - dijeron los demás, riendo y bromeando.

- Pero lamentablemente, tenemos que terminar el fanmeeting - dijo Jin, mirando el reloj. - Ya se nos ha acabado el tiempo, chicos. Ya tenemos que irnos, chicos.

- No, no, no - dijo el público, triste y decepcionado.

- Lo siento, lo siento, lo siento - dijo Jin, apenado y agradecido. - Pero antes de irnos, queremos darles las gracias por todo su amor y apoyo. Queremos decirles que son lo mejor que nos ha pasado en la vida. Queremos decirles que los amamos mucho.

- ¡Los amamos, BTS! - exclamó el público, conmovido y emocionado.

- Y también queremos darle las gracias a Jiwoo - dijo Jin, mirando a la chica. - Por ser la inspiración de esta canción tan hermosa. Por ser la razón de esta sorpresa tan increíble. Por ser el amor de nuestro Jungkook.

- ¡Gracias, Jiwoo! - dijeron los demás, abrazando y besando a la chica.

Jiwoo se sonrojó y agradeció a los chicos. Estaba feliz y asustada a la vez. Estaba ilusionada y nerviosa a la vez. Estaba emocionada y ansiosa a la vez.

Porque había conocido a BTS.

Porque había conocido a Jungkook.

Porque había vivido un sueño.

Pero también se preguntaba qué iba a pasar ahora. Se preguntaba si iba a volver a verlos. Se preguntaba si iba a seguir con Jungkook.

Y se preocupaba por la idea.

Jeon Jungkook se acercó a Jiwoo y la tomó de la mano. La miró a los ojos y le sonrió con ternura. Le dijo con los labios y con el alma:

- No te preocupes.

Y la besó de nuevo.

La besó con suavidad y delicadeza.

La besó con pasión y fervor.

La besó con amor y verdad.

Jungkook se separó del beso y le susurró al oído:

- Te llamaré.

Y le dio un papel con su número de teléfono.

Jiwoo lo miró con sorpresa y emoción. Lo guardó en su bolsillo y le dio las gracias. Lo abrazó con fuerza y le dijo:

- Te esperaré.

Y le dio un papel con su número de teléfono.

Jungkook lo miró con sorpresa y emoción. Lo guardó en su bolsillo y le dio las gracias. La abrazó con fuerza y le dijo:

- Te quiero.

Y se despidió de ella.

Jiwoo lo vio alejarse del escenario, junto a sus compañeros y amigos. Lo vio saludar y sonreír al público, con su voz dulce y su mirada tierna. Lo vio concentrado y pensativo, con su expresión seria y su gesto nervioso.

Lo vio todo.

Pero no sabía nada.

No sabía qué iba a pasar ahora. No sabía si iba a volver a verlo. No sabía si iba a seguir con él.

No sabía qué iba a hacer el destino.

Jungkook la vio alejarse del escenario, junto al público y las fans. La vio saludar y sonreír a los chicos, con su voz dulce y su mirada tierna. La vio concentrada y pensativa, con su expresión seria y su gesto nervioso.

La vio todo.

Pero no sabía nada.

No sabía qué iba a pasar ahora. No sabía si iba a volver a verla. No sabía si iba a seguir con ella.

No sabía qué iba a hacer el destino.

Pero ambos sabían una cosa:

Se amaban.

Se amaban con suavidad y delicadeza.

Se amaban con pasión y fervor.

Se amaban con amor y verdad.

Y se ilusionaron con la idea.