Coral es el tipo de chica callada, que no se mete con nadie, que le vale un pedo la vida de los demás, y que evita a toda costa tener contacto con el resto del mundo. Mientras no se metan con ella, todo es amor y paz, a de quién sea tan estúpido de cruzar esa línea...

Dos semanas ha transcurrido desde que empezó a trabajar aquí. Su presencia es casi invisible, y aún siendo así, a la señora Kang no le había agradado tanto el desempeño de sus empleadas, como lo ve precisamente en coral. La ha puesto a prueba repetidas veces, tanto así, que llegó al punto de darse por vencida. No importa cuánto lo intente, la nueva, siempre resulta haciendo algo sin querer que le gusta a la anciana; sobre todo, que no refunfuña así la ponga hacer lo mismo, mil veces.

Es como si le diera la impresión de que está niña no conoce más expresiones en sus rasgos faciales. No sé le ve molesta, triste, estresada, naada. Tampoco se le ve feliz, simple y sencillamente, no demuestra lo que lleva en su interior.

Yanmin, una de las chicas se le acercó a Coral al comienzo tan solo para advertirle que Yuna, es la más vieja trabajando aquí en la mansión Min. Cuando no está la señora Kang presente le gusta mandar al resto de las empleadas como si fuera la mandamás, y si no hacen lo que dice, conseguirá meterlas en un gran aprieto para remarcar su dominio. A más de una la ama de llaves ha despedido por culpa de Yuna; es que esa chica es realmente mala, y como todo lo hace bien, ¿Quién va a sospechar de esa carita Angélical que aparenta?

No es que Coral le haya tenido paciencia durante este tiempo, tan solo no ha encontrado el momento exacto para dejarle claro que con ella no se meta. Yanmin no se equivocó en advertirle, e inclusive, antes de que le dijera aquello, Yuna ya la estaba irritando con tanta observación de arriba abajo; con esa mirada de odio, pero que no se preocupe, que Coral sintió la misma pesadez que ella, y cuando algo no le gusta, fácilmente se deshace de lo que le estorba.
No ha encontrado, ¡Corrección!, ya lo encontró. Hoy es la noche perfecta, o el encuentro perfecto para quitársela de encima de una buena vez por todas. Ya está harta de que Yuna le tiré la comida encima y se disculpe con ese discurso barato que fué sin intención, ya está cansada que cada vez que va al baño ella la encierre bajo llave, y que sino es por Yanmin que la ha ayudado durante esas repetidas ocasiones, tiene problemas con la señora Kang.

La tiene hasta aquí, que cuando la ve caminando por el pasillo o por cualquier otra parte, le ponga el pie para que se caiga, la estruje, la empuje, le jale el cabello, le esconda el uniforme o se lo eche a la basura. Hasta aquí, hasta aquí la tiene y ya no la va a soportar más. El vaso ya se llenó hasta el tope, pero este ya se está regando...

Siendo tan solo cuatro chicas del servicio, les asignaron una sola habitación para ellas. Cada una con su respectiva cama, pero con el suficiente espacio de tener sus cosas retiradas la una a la otra. La señora Kang las manda a descansar a la misma hora, y exactamente a la misma hora las levanta. Tienen derecho a un día de descanso a la semana, y les pagan quincenal, también mensual con todos los derechos de la ley. Hoy fue un día realmente muy agotado para todas, pero con la paciencia que se caracteriza, Coral esperó a que Yuna se levantara.
Cómo sospechó, la chica de greñas negras con bata blanca larga hasta las rodillas, no fue al baño, salió del cuatro seguramente con rumbo a la cocina. Son más de la una de la mañana, y no desperdiciando más tiempo, Coral igualmente se levanta para seguirla con sus silenciosos pies descalzos. Encontró a Yuna bebiendo un vaso con agua en medio de la oscuridad; lo metió bajo el grifo, y después de dejarlo dónde lo tomó, se dió vuelta tranquilamente para dirigirse una vez más a su acogedora cama calientita.

Se llevó un gran susto cuando se topó con Coral frente a frente y su mirada matadora, aún así compuso su postura para no demostrarlo.

---¡Estúpida!--- masculla Yuna con enfado--- ¿Qué te traes, eh? ¿Acaso me estás siguiendo?, mira tarada, que te quede bien claro que...

No la dejó terminar. Coral la tomó por el cuello casi asfixiandola. Fue rápida, la agarró en una posición mejor cubriéndole la boca para que la cacatúa no hiciera mucho escándalo. Aunque la pelinegra se esforzó por liberarse del agarre no podía, la de tes blanquecina se la llevó arrastras sacándola de la cocina. Lo siguiente que sucedió, fue una zambullida en el agua fría de la piscina. Ahí cayó Yuna, y cuando logró salir a la superficie, respirando agitada mientras tosia, sus ojos buscaron con desespero la presencia de Coral afuera de la pileta, pero no la halló.

Con el agua hasta el cuello, y la boca abierta , la buscó con pavor pero no la vió. Sintió movimiento bajo el agua, eso más la atemorizó; nado un poco hasta llegar a la orilla, quiso salir de ahí lo más rápido posible, pero la regresaron de vuelta hundiendola. Yuna trago agua, y aún estando debajo en medio de esa poca luz que había, sus ojos captaron claramente a un monstruo con escamas y agallas. Coral abrió su boca en un grito amenazador dejando ver sus dientes en forma de serrucho; su aspecto había cambiado por completo, un aspecto nada agradable, que marcó a la pelinegra para siempre.

Aterrorizada Yuna salió de la piscina, más de una vez se tropezó en sus mismas torpes pisadas. Temblaba como una idiota en lo que sus ojos se cubrían por lágrimas...

Cayó arrodillada, y para empeorar la situación, Coral se paró detrás de ella.

---A la próxima no tendrás tanta suerte, niña bonita---- Yuna cubrió su boca con ambas manos---- Me vale una mierda lo que hagas con las demás, pero si te vuelves a cruzar por mi camino, obtendrás más que pesadillas conmigo.

****

Un convertible blanco cruza la puerta principal de la mansión y con mucha dificultad se estaciona dónde debe ser. Uno de los vigilantes que le tocaba trabajar a esa hora, es espectador de la ridícula escena de Yoongi y su mejor amigo park Jimin. Ambos salen del coche totalmente ebrios y riendo sin parar mientras no eran capaces ni de sostenerse por sí mismos. Abrazados, ambos jóvenes llegan donde el hombre se encontraba.

---Ey Yang, como tú me caes taaan bien, ¿Adivina el regalito que te traje?--- Yoon se abraza al vigilante por el cuello dónde este evita a toda costa tener que oler su desagradable aliento--- ¡Shuu! No le digas a nadie y toma--- pega la botella de alcohol casi vacía contra el pecho del tipo--- Ahí queda un poquitito para ti, solo para ti, no le des a nadie, y menos a Jimin, que es un tacaño fanfarrón.

---Joven Min, lo recomendable es que se vaya a dormir ya, está demasiado ebrio.

---¿Ebrio? ¿Qué ebrio? ¡Mírame!--- se aparta y extiende los brazos ---Si estoy como nuevo.

---Sr. Yang--- habla de pronto la anciana apareciendo en el lugar en pijama--- Hágame el enorme favor, de llevar al jóven Park Ji Min a su casa, yo me encargo de Min Yoon Gi.

---Si señora --- obedece sin ningún problema.

---¡Nana! Mi Nana bella, cuánto te amo--- la señora Kang sostiene como puede a su niño alcohólico mientras fue bombardeada apunta de besos en la mejilla.

El hombre de traje elegante se encarga del pelirrojo acostandolo en la parte trasera del coche ya que se queda dormido como si fuese un bebecito. Así se le hará más fácil conducir..

Las incoherencias de Yoon Gi estaban apunto de volver loca a la señora Kang de camino a su habitación; le sorprende encontrar a Coral en el pasillo a esta hora, pero más le sorprendería a la mujer saber la causa del porqué.

---Coral--- Gi chorrea la baba por ella, se aparta de su Nana y tambaleando se acerca a la muchachita ---Dime tu secreto, es que eres tan bonita, pareces una sirenita encantada...---- sonríe. Coral inevitablemente le devuelve el gesto--- Así sonriendo te ves más preciosa, ¿No te gustaría ser mi novia? Sé mi novia, yo te haría muy feliz... hasta dejaría el trago por ti mi amor, enserio..

---Ya basta, niño degenerado--- su Nana lo sujeta por el brazo con fuerza--- Vamos ya para la cama, ni creas que me tienes muy contenta ----al pasar por el lado de la chica, la señora Kang posa sus ojos en ella--- ¿Tu que haces levantada a esta hora?.

---Solo fui a la cocina, tenía sed señora Kang ---se excusa. La mayor le creyó, pues no le encontró ningún problema.

---Déjala Nana, no la regañes, ¿No ves que ella va a hacer la madre de mis hijos? Si se aburre de tu cantaleta, terminara yéndose y me rompera el corazón en mil pedazos...

---Cállate ya irresponsable, deja de decir tanta incoherencia, y camina ---- de mal modo se lo fue llevando--- Apúrate a regresar a tu cama, Coral, no te quedes por ahí trasnochandote que tienes que madrugar ----recomendo.

---Si Sra.

---Te amo Coral, eres mi vida Coral.

La de piel blanca sonríe, ese Yoon Gi es un loquillo, y lo mejor de todo, es que está consiguiendo lo que vino hacer desde un principio.

*****

A la mañana siguiente.

---Una hembra y un macho, ¿Una sirena y un tritón? ¿Será posible?--- piensa Suga sentado al frente de su computadora. Da dos giros en su cómoda silla con rueditas, hasta que escucha que alguien toca la puerta ---¿Si?.

---Joven Suga, solo vine a traerle su ropa, y a decirle que ya está listo el desayuno--- avisa una voz dulce desde afuera.

---Pasa--- aprueba el chico.

Una vez Coral ingresa con la ropa en sus manos y cierra la puerta tras ella, el hermano gemelo de Yoon Gi le da la espalda para seguir en lo suyo.

---Ponla ahí, encima de la cama, yo después la guardo--- dijo. Coral camina en dirección hacia lo señalado, al dejarla sobre el colchón como recomendó, se devuelve en sus mismos pasos. Miró un segundo la computadora de Suga, e instintivamente frunce su ceño no gustandole nadita lo que vió--- Dile a mi Nana que no tardó en bajar a desayunar ---ella no le contestó, sus uñas se alargaron más de lo normal convirtiéndose en peligrosos garfios--- ¿Oíste lo que te dije?--- Suga se dió vuelta, Coral cambió su expresión rápidamente.

---Si, jóven Suga, disculpe.

---Retirate por favor, y gracias.

La chica sale de la habitación al pasillo, suelta la manija, sus ojos brillaron sedientos de venganza.

Holaaa lindas sirenitas

🧜

Espero les guste el capítulo.

¡Gracias por leer!

Perdón los errores ortográficos.