El joven de pelo blanco se quedó mirando... Pensativo... ¿Qué clase de persona sería capaz de comprar una granja para regresársela al dueño sin un pago extremadamente grande... Sospechoso?

Samuel.— ¿Dime tus motivos para ir tras ellos? — expresó el pelo blanco ante la duda de aceptar el trato.

Dirceu.— Chico listo... bueno si quieres saber mis motivos te invito a un café ahí podemos hablar y debatir si esta idea puede funcionar o si solamente es una completa estupidez — dijo el oficial.

Samuel aceptó dudativo... después de todo por lo que había pasado tenía sus motivos para sospechar así que subieron al auto del oficial y se dirigieron con rumbo al poblado, una vez que llegaron al pueblo, el auto se detuvo en frente de una vieja casa rodante la cual si bien no se veía destartalada pero ya se le veían con varios años encima.

Dirceu.— No soy de tomar alcohol no tengo tolerancia pero tengo café y refresco por si quieres — dijo mientras detenía la marcha del vehículo y sacaba la llave del inicio para luego bajar de la patrulla.

Samuel sin decir una palabra bajó del auto y siguió al oficial hasta la casa rodante, una vez que el oficial tocó la puerta salió de ahí una mujer de pelo castaño con los ojos color gris.

Dirceu.— Muchas Gracias Beatriz... te avisaré si necesito que la cuides — dijo el policía mientras sacaba su cartera y le daba unos billetes a la mujer.

Beatriz.— De nada Dir... ya la bañé y está durmiendo la siesta tarde o temprano tendrá que despertarse para su merienda pero por lo demás no hay nada que no esté fuera de su lugar — dijo la mujer mientras se despedía del oficial y caminaba alejándose de ambos.

El oficial le indicó al chico de pelo blanco que entrara al camper, sin bajar la guardia Samuel entró quedando sorprendido de que el lugar estuviera relativamente bien conservado claramente se notaba la presencia de un niño pequeño, pero lejos de las historias tradicionales en donde el camper apenas puede mantenerse únicamente siendo unido por cinta adhesiva este estaba muy bien cuidado, hasta el fondo podía verse una cama la cual tenía unos pequeños barandales que impedían que la bebé que estaba ahí se fuera a caer.

El tipo simplemente vio como aquel oficial se acercaba hacia donde estaba la niña y comenzaba a mirarla con una sonrisa, de la nada es actitud seria que tenía se borró y ahora tenía una especie de aura cálida y de alegría, eso era raro pues a pesar de medio vivir un poco aislado del poblado había escuchado las historias de terror del policía sobre cómo era capaz de asesinar a sangre fría a los miembros de la mafia, incluso algunos llegaban a exagerar las historias de que había hecho un pacto con el mismísimo diablo para obtener la inteligencia y la fortaleza con el propósito de deshacerse de la mafia y el crimen organizado en todo Perfection.

Mientras el oficial vigilaba a su hija Samuel revisó el resto del camper y se percató de una pequeña foto en la que se veía al oficial en una apariencia mucho más joven y acompañado de una linda mujer con la bebé en brazos, instintivamente intuyó de que se trataba de la madre de la niña, pero eso solo dejaba en su cabeza más preguntas que respuestas.

Samuel.— Es muy bonita — dijo el mafioso.

Dirceu.— Heredó la belleza de su madre — explicó con una sonrisa mientras servía en 2 tazas café — ahora siéntate Samuel... escucha no soy un estúpido sé que te estás preguntando en este momento por qué carajos estoy viviendo en una casa rodante con un bebé que necesita su madre... es por la misma razón que te doy la oportunidad de vengarte de ese maldito — dijo captando la atención del joven de pelo blanco.

Samuel.— Muy bien te escucho soy todo oídos — expresó mientras agarraba su taza de café y le daba un sorbo.

Dirceu.— Te lo voy a explicar de una manera muy sencilla yo antes no era policía... — dijo tomando por sorpresa al chico — solía ser profesor de arqueología de hecho no tenía problemas con la mafia solamente era un tipo aburrido con una familia común que trataba de ganarse el pan de cada día para llevarlo a la mesa y darle de comer a su esposa y a su hija... el asunto es que por alguna maldita razón ellos querían algo que yo estaba estudiando en ese momento y en lugar de robarlo o amenazar con quitármelo o que se los diera los malditos quemaron mi casa con mi familia adentro — dijo e inmediatamente Samuel se le quedó mirando — oh tranquilo no te estoy culpando sé que tú no estuviste ahí el asunto es que mi esposa murió mientras intentaba sacar a mi hija no puedes salvarla una viga en llamas le cayó encima... yo sé que tú lo entiendes de perder a algo ese sentimiento de ira y furia fue por eso que me hice policía la única razón que tengo es encontrar a los malditos y hacerles pagar por lo que me hicieron a mí y a mi familia — dijo mientras apretaba los dientes.

Samuel.— Escuché esa historia... no era mi amigo pero alguien dentro de ese lugar solía contar que intentaron matar a un profesor pero ese maldito era más rudo de lo que aparentaba logrando matar a varios de ellos después de que quemaron su casa con su esposa aún adentro decían que le habían matado a la niña también y que lo hizo volverse muy violento — dijo e inmediatamente el oficial lo miró y si las miradas pudieran matar este ya estaría muerto 50 veces.

Dirceu.— En ese momento temí por la vida de mi hija... era obvio que no dejaría que le hicieran daño — dijo muy enojado el oficial.

Samuel.— Oye oye tranquilo viejo yo solamente te estoy diciendo lo que hoy además ese tipo era un completo pendejo... siempre decía ser alguien bastante capaz y malo para hacer proyectos pero cuando llegaba el momento solamente era un cobarde que se escondía y esperaba que los demás hicieran el trabajo sucio por él — dijo con algo de irritación después de recordar a ese compañero.

Dirceu.— La situación es que no sé cómo operan pero tú estuviste con ellos así que debes saber algo y ese es el pago yo te regreso tu propiedad y me aseguro de que la policía no interfiera en tus asuntos siempre y cuando esto se mantengan afuera de mi ciudad — explicó.

Samuel.— ¿Déjame ver si lo entiendo? ¿Le pides ayuda a un mafioso para localizar a otros mafiosos y hacer justicia por tu cuenta? ¿Te molesta la delincuencia de tu ciudad, pero estás dispuesto a ayudar a un delincuente a seguir con sus acciones a cambio de la ayuda y no solo eso le permites conservar su base? Un poco hipócrita de tu parte — dijo.

Dirceu.— ¿Hola? ¿Hola? ¿ Hay alguien en casa? Por favor ese mito de que puede existir una sociedad idílica sin crimen o sin delincuencia es un mito algo dicho por los políticos para ganarse el voto de los ciudadanos... la única forma de lograr eso sería fusilar en público a cada delincuente para dar el mensaje de que no se tolerará ningún delito... no soy un estúpido aunque también desearía eso es humanamente imposible pero yo sé que puedo hacerlo en mi ciudad y mientras sea un lugar seguro para mi hija así será y tiene suerte de que no sea un agente federal porque cuando fases ese límite que divide Perfection de Bixby o Lindel County ya no es mi asunto — dijo mientras le daba un par de golpes en la cabeza con el puño.

Samuel.— Vuelves a hacer eso anciano y te romperé los dedos de la mano uno a uno — dijo molesto por la acción del oficial.

Dirceu.— ¿Anciano? Anciano tu abuelo yo solo tengo 20 años — dijo tomando por sorpresa a Samuel — esto... es solamente por enfrentarse a la mafia — dijo.

Por los gritos de ambos la bebé al final termino despertándose lo que obligó al oficial al levantarse e ir a doler la para que se volviera a dormir aunque eso no solamente fue la principal razón sino porque ya era la hora en la que la bebé debía comer su merienda, una vez que el oficial le dio de comer a la niña y después de arrullarla y hacer que se durmiera para ponerla en la cama el oficial le indicó al mafioso si podían venir.

Dirceu.— Esta es la razón por la que estamos aquí — dijo mientras sacaba algo — este es el el invaluable objeto que mandó tu jefe a robar y que le costó la vida a mi esposa — dijo mientras sacaba un libro viejo.

Samuel.— ¿Un libro? Así que toda esta estúpida guerra fue por un libro... por Dios y pensaba que él era un completo estúpido esto lo cambia lo vuelve un reverendo pendejo... en serio si fuera a matar a una familia sería por algo que no tuviera valor alguno que se pueda calcular este libro ni para reciclaje me lo aceptarían — dijo.

Dirceu. — Que dices... hay trato — dijo.

Samuel.— Trato hecho — dijo molesto porque la muerte de su hermano fuera por un libro.

C O N T I N U A R Á...