Jimin Pov:

--"Jungkook, tengo una nueva sesión para Jimin dentro de dos días súper importante. El escritor erótico, Jung Hwan lanzará la primera edición de una nueva trilogía de libros. A pesar de que no los publicará juntos quiere tener la portada de los libros listas y quiero hablar contigo de algo importante. No preguntes… solo puedo decir que esta es una sesión seria, con un interés mas profundo por lo que tendremos un contrato para Jimin. Dios, aún no supero que seas su manager pero en fin, espero tu respuesta lo mas pronto posible"—

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Jungkook me muestra la pantalla de su celular con el mensaje del señor SeokJin.

--¿Es el mismo escritor de distorsión pasional?--…--Preguntó una vez que termino de leer.—

--¿Lo conoces?--…--Alza sus cejas sorprendido. A ver, el hecho de que sea un hombre gay y que no ha tenido una polla enterrada en el trasero no significa que no pueda tener conocimiento del ámbito sexual, mucho menos me impide leer novelas eróticas y pues… Jung Hwan es un Dios para transmitir el pecado de la carne.--…--Por lo poco que se solo hay un solo escritor llamado Jung Hwan en toda Corea del sur. El nombre extraño debe significar eso ¿no?--…--Jeon no desaprovecha ninguna oportunidad para hacerme quedar como un tonto o al menos eso pienso yo.—

--No está de mas preguntar.—

Ha pasado una semana desde que Jungkook estuvo en mi casa, desde aquel día no nos hemos besado de nuevo, ni tocado ni nada fuera de lo laboral ¿por qué? déjenme y les explico:

Mañana es primero de septiembre, el día donde nació este precioso ser que tengo como jefe así que tuve que empezar a centrarme mucho mas en el trabajo, ser menos apegado ya que quiero que crea que estoy haciéndolo por voluntad propia (si es así solo que no por lo que se imagina). La semana ha estado cargada de buenas ventas, nuevos contratos que tienen a Jungkook metido en cuan papel llega, muy aplicado como siempre en su trabajo y por mas que desee sentarme en sus piernas cada mañana y darle castos besos antes de empezar con el largo día de trabajo, me obligo a tener autocontrol para no estropear el plan que he armado.

--No pensé que fueras del tipo de persona que lee libros eróticos. No dejas de sorpréndeme--…--Se sienta en su silla, el escritorio nos separa, no hace intento de acercarse a mi en todo este rato y por mas que odie la lejanía… agradezco eso para mantenerme firme.—

--Las apariencias engañan, Jungkook.—

--Así veo.--…--Sonríe ladino—

--Jung Hwan tiene buenas historias que ofrecer. No porque a la gente le llame más la atención uno de los tantos géneros como lo es erótico quiera decir que la historia no lleva un circulo dramático aprovechable, su forma de escribir es estupenda, mas allá de lo común, se ha vuelto un escritor tan famoso por sus obras llenas de acción, traición, leves porciones de cursilerías que le agradarían a cualquiera y acontecimientos sorpresas que atrapan a los lectores.—

--Vaya, si que te gusta mucho.—

--Me encanta como escribe.—

--Pero no me engañas, sé que leíste sus obras para descubrir el morbo plasmado en esas hojas. Que hayas descubierto mucho mas que sexo leyendo sus libros es otra cosa. A todos nos llama la atención el sexo.--…--Odio cuando dice estas cosas de repente jugando al telepático y acertando como uno. Maldito hombre.--…--Es inevitable, es un tema que debería ser mas normal de lo que debe parecer.—

--No todos manejan el tema del sexo tan bien como tú, hay algo que se llama curiosidad.—

--Pues yo creo que deben empezar a tomarlo con mas calma. No es malo, además, sin el sexo ningún humano respiraría. Es parte de la vida, ya sabes, la reproducción y todo eso hace que estemos vivos justo ahora.--…--Cuando Jeon Jungkook habla así es porque busca de hacerme explotar, hacerme sentir acorralado por un tema que no es lo mío y sin embargo intento mantener conocimiento.--…--Pregunta seria: ¿Por qué crees que muchos no pueden dejar de ver el sexo como un tabú?—

--No lo consideran cómodo o no están acostumbrados a hablar de un tema así, liberal.—

--Te contaré algo que me parece muy cómico; cada vez que hay galas a mitad de año para accionistas me gusta ir. Sin necesidad de que sepan mi verdadera edad sigo siendo el mas joven de los empresarios, por lo que a veces suelen perdonar mis chistes con doble sentido. La cuestión es que ellos pueden estar hablando sobre nuevos planes para el fin de año o las fiestas nacionales, sin embargo, yo no desaprovecho ninguna oportunidad para sacar a relucir el sexo porque vamos, es un tema mas interesante que solo números, estadísticas y papeleos. Al menos no lo considero un buen tema para una fiesta.—

--Por lo que has dicho, ellos son señores que quizás ya dejaron esa etapa hormonal muy atrás como para quedarse enfrascados allí.--…--Me cruzo de brazos en la silla queriendo estar lo mas ajeno de la profunda mirada que me da mi jefe ahora mismo.—

--¿Me estás llamando hormonal?--…--No fue mi intención pero así se ha escuchado.—

Aunque ahora que lo pienso mejor… Jungkook parece un buen adolescente hormonal.

--Si la bota te queda.—

--Pues si soy.--…--Es un descarado. Todo con tal de no verse derrotado.--…--Volviendo al tema anterior; Los empresarios allí tienen mas de tres hijos, significa que follan, están casados, significa que follan ¿Por qué se incomodan con hablar del sexo? no es como si tuvieran que dejar su vida sexual descubierta porque sinceramente, no me interesa. Pero digo que seria bueno que las personas se involucren mas con el tema sexual en lugar de huir. De todas formas, y a mi parecer, es estúpido que no toleres a alguien que pronuncie “follar” cerca de ti cuando al llegar a casa embistes a tu pareja por cada rincón de la misma. Es ridículo.--…--Niega sonriendo como si no pudiera creer las acciones de cierto conjunto de gente.—

Suspiro. Esto es difícil de tratar con Jungkook ya que él es un despreocupado a la hora de actos impuros. Doy fe de ello.

No me sorprendería que fuera a tener sexo en medio de una plaza con toda la gente de Seúl viéndole, pero dado a que es un tipo amante de la adrenalina, seria de los que te acorralan detrás de un árbol en un lugar público.

He sacado varias muchas hipótesis de sus acciones y todas me llevan a la misma respuesta:

Jeon Jungkook es un degenerado.

Joder, y como me vuelve loco.

--Quizás se avergüenzan.--…--Es lo único que puedo decir—

--Si claro, avergüénzate por hacer algo que todos hacen, bueno, a menos que te metas a sacerdote y sin embargo.--…--Hace una mueca rápida.—

--¿Qué quieres decir?--…--No le he entendido muy bien.—

Mueve su mano restándole importancia .

--No me hagas caso, eres muy despistado como para entenderme.--…--¡Es un jodido imbécil!--…--La cuestión importante ahora es saber si quieres posar para la portada de ese libro ¿o qué? ¿muy fuera de lugar para ti?--…--Quisiera tanto borrar esa sonrisa de superioridad que pone cuando me hace este tipo de preguntas, o cuando me lanza un anzuelo sabiendo que voy a morderlo. Pero ahora, esto es solo un reto.--…--No sé, no todos los días pasas de posar para perfumes a posar para un libro erótico, tan fuera de lugar, muy indebido.--…--El sarcasmo es desbordante en cada palabra lanzada.—

--Creo que lo haré.--…--Arquea una ceja. No esperaba que aceptara.--…--Jung Hwan es un escritor al cual admiro mucho, me gustan mucho cada libro que ha sacado por lo que para mi será un honor ser el modelo en su portada. Estoy seguro que este libro y los otros no me decepcionaran.—

--Un lector fiel.--…--Agarra el plumón a un lado del escritorio jugando con este entre sus dedos, tan típico de él, pero no le quita lo hipnotizante. Tiene dedos agiles, su tacto es ágil y lo he comprobado. En un momento tienes ropa y al parpadear estas desnudo, cosas que Jungkook puede lograr con esa “agilidad” que posee.--…--Le avisaré a SeokJin entonces que su modelo favorito acepta.—

Saca su celular tecleando rápidamente encima del táctil.

--También dijo que quería hablar contigo.--…--Algo que me pareció raro ¿será algo grave?--…--Está mas que claro que quiere que vayas con otra intención que la de ser mi manager.—

--Supongo que quiere preguntarme algo, no lo sé.—

¿Saben lo horrible que es estar a solo un metro y medio de la persona que mas amas, no poder besarle y tratar de ser lo mas cortante posible para que no descubra tu plan de sorprenderlo en su cumpleaños? no sé, pero para mi es un jodido infierno.

Pues, Tae siempre salía gritando “El fin justifica los medios” después de chantajear al profesor de filosofía para que le diera dinero para el almuerzo después de verlo besarse con nuestra profesora de Biología.

Ahora debo aplicar lo mismo.

--Creo que iré a seguir trabajando entonces.--…--Me levanto sintiéndome victorioso cuando Jeon no me llama.—

--Espera.—

Bueno, la victoria me duró poco. Me giro

--¿Qué sucede?—

--Estás raro desde el día que fui a tu casa. ¿Fue porque dañe tu olla?--…--No puede ser que aún piense que estoy molesto por la olla quemada (no niego que si me dio un poco de rabia pero no me duró mucho).--…--Podría comprarte otra si quieres.—

Tentador pero no.

--No estoy raro, solo son ideas tuyas.--…--Sonrío procurando parecer creíble.--…--Y sobre la olla... ya quedó olvidado.—

--Entonces ven.--…--Me extiende su mano, clara invitación para que vaya a sentarme en su regazo y besarnos como se nos estaba haciendo costumbre.—

--¿Por qué no vienes tu?--…--Jungkook es muy orgulloso, le gusta que haya adaptación de sus deseos pero no que lo hagan flaquear. Menos usar sus propios deseos en su contra.—

Baja su mano. A pesar de que me niego para mantener mi plan invicto la decepción me llena cuando no viene hacia mí.

--Te veo dentro de cinco minutos en el cuarto de uniformes.—

--Jungkook, tengo varios archivos que guardar antes de la salida, sabes que el señor Lee es muy exigente. Además, no tengo razón para ir al cuarto de uniformes.—

--Por ahora el señor Lee se puede ir al infierno y… ¿no es suficiente con que yo, tu jefe, pida tu presencia en el estúpido cuarto de uniformes?—

Es mas que suficiente pero no debo caer en su trampa.

--Nop.--…--Intento ignorar su presencia mirando al ventanal que dejar ver a la ciudad en todo su esplendor. Jeon se levanta, no lo veo pero sus pisadas suenas claras en mis oídos, está pasando por mi lado ahora mismo. Espero unos segundos antes de girarme, dispuesto a emprender mi caminar fuera de la oficina--…--Si no se te ofrece nada mas entonces yo m-me…--…--No termino de hablar. Jungkook está frente de mi con una botella de agua a la mitad, pues lo demás ha sido lanzado sobre mi pecho mojando mi camisa.—

--Secretario Park Jimin, usted no puede trabajar en esas condiciones; mojado y frío. Es una pena--…--No esconde su falsa empatía, es mas… exagera su tono de voz, intentando sonar lastimero.--…--Así que, esta es una buena razón para que vayas a cambiarte ¿adónde? Pues, esta empresa es tan completa que tiene un cuarto de uniformes muy abastecido para todo el personal de trabajo. Lo esperaré allí.--…--Aún no puedo creer que haya vaciado (literalmente) una botella de agua encima de mi. Lo siguiente que siento son sus labios en el lóbulo de mi oreja.--…--No tardes.--…--Susurra mandando miles de sensaciones placenteras a toda mi espalda, mi piel se eriza y solo puedo respirar con normalidad cuando sale de la oficina sin mirar atrás.—

Es un desgraciado.

Por lo menos no soy el único aquí que aplica el: “El fin justifica los medios”. Estúpido Tae que me pego aquello.

Apenas reacciono salgo de la oficina con destino al jodido cuarto, tapando con mi saco mi camisa mojada porque los chismosos de mis compañeros inventan cada cosa estos días.

Desde que me entere de la “relación” que tuvo la secretaria Katnia con un trabajador de electricidad hace días supe que aquí aprovechan hasta el mas mínimo desliz, aunque, eso no es lo peor de todo… lo peor fue que el tipo de electricidad, que vino a hacerle mantenimiento a los asesores es tío de Katnia, a eso se debían sus conversaciones. La cara de los trabajadores al enterarse fue épica.

Bajo en el ascensor los pisos requeridos y al llegar respiro hondo, salgo de cubículo y me apresuro a ir al cuarto.
Una ves que estoy frente la puerta dudo de entrar, llamar, tocar ¿para que Jungkook me quiere aquí? ¿Cuál es la insistencia de ese malcriado? sea lo que sea, me estoy muriendo por saberlo.

Doy dos toques a la puerta.

Esta se abre al instante dejándome ver a Jungkook de pasada, y digo de pasada porque me jala de la esquina de mi saco para hacerme entrar en el cuarto. Un acto muy “gentil” de su parte.

--Jungkook ¿Qué pasa contigo?--…--La luz está encendida, los múltiples uniformes envueltos en fundas transparentes y ordenados en columnas en las repisas del cuarto.—

Mi única respuesta es mi espalda contra la madera de la puerta, unos labios que se apegan a los míos casi de forma instantánea, unas manos grandes y fuertes apresan mis muñecas encima de mi cabeza. Él no me da tregua y con cada segundo que pasa me olvido de mi, de mi plan de cumpleaños y mi semana de tortura “invicta” fuera de su contacto.
Muevo mis labios torpemente ante el asalto, amoldándome poco a poco al beso exigente y demandante. Es mi única salida y, aún si tuviera miles de opciones ahora mismo, optaría por seguir aquí a su merced.

Nos separamos recobrando oxigeno en nuestros pulmones.

Jungkook sigue teniéndome agarrado de mis muñecas, yace con sus ojos cerrados por un par de segundos hasta que los abre y me observa, su mirada profunda carcomiendo toda mi alma. Mi corazón martillando rápidamente al momento, a su presencia.

--Secretario Park… ¿No se supone que ha venido por una camisa?--…--Tranquilo Jimin, solo es Jeon Jungkook haciéndose el inocente para sacarte de quicio.—

--Eso se suponía que haría si cierto chiquillo no me hubiese saltado encima.--…--La confianza que hemos estado establecido esta semana me lleva a sacar ciertas palabras que no debería decirle. Sigue siendo mi jefe después de todo.—

Pero creo que me preocupo de mas porque si le molestara no estuviera sonriendo como lo hace ahora; amplio y seductor.

--El bulto en tus pantalones es suficiente para saber que el chiquillo del que hablas te vuelve loco.—

Miro hacia abajo y el condenado tiene razón. Estoy erecto. Lo odio.

Por instinto miro hacia su entrepierna donde tiene una situación igual a la mía.

--No soy el único con problemas ahí abajo.--….—Sonríe y suelta mis muñecas.—

--El jefe no puede resistirse al culo grande de su secretario.—

--¡Jungkook!--…--Chillo con mis mejillas a punto de estallar. Él suelta una carcajada que se me hace totalmente tierna, pese a que solo ríe de esa forma cuando me hace avergonzar.--…--Y si, vengo por una camisa.—

--Como gustes.--…--Va hacia el fondo y saca una de las camisas blancas observando la talla y asintiendo en aprobación cuando da con la indicada.--…--Aquí esta.—

--Dámela.--…--Busco de quitársela pero simplemente basta con alzar su brazo y dejarme en ridículo por mi estatura.—

--No tan rápido. Vamos, puedes cambiarte aquí.--…--Niego rápidamente.--…--Si quieres cierro los ojos.--…--Los cierra pero se que no es de fiar..--…--De todos modos no es como que vaya a ver algo que no haya visto antes.--…--Es cierto pero dado a mi plan, debo parecer indignado con la situación. Cosa que se me hace un tanto difícil.-

--Bien.--…--Me doy la vuelta de todas formas.—

Me quito el saco y lo dejo encima de una repisa, luego procedo a sacar los botones de mi camisa desde abajo hacia arriba y cuando termino de quitármela la dejo a un lado.

--Dame la camisa, Jungkook.--…--Pido al estar descubierto.—

Pero lo único que siento es su presencia detrás de mi.
Ambas manos paran en mis hombros, frotando suavemente y yo solo permanezco ido mirando la puerta frente a mi.

--Jungkook.--…--Lo llamo de nuevo pero no recibo respuesta.—

Sus dedos descienden por mis brazos hasta que llega a mis manos, las agarra y extiende a la puerta dejándome inclinado hacia adelante. Su aliento choca en mi nuca que luego procede a besar lentamente

--J-jungkook, este cuarto es muy utilizado por el personal de limpieza, aquí guardan sus uniformes.--….—Su dedo índice se desliza por el medio de mi espalda.—

--Dime algo que no sepa.—

--L-las secretarias también vienen seguido, muy seguido.—

--¿Y eso que?—

--Pueden venir y…

Se apega mas a mi y su entrepierna sobre mi trasero dejándome en claro lo duro que está, las cosas que me imagino ahora solo llevan el titulo de placer. Su tacto pasa por mis costillas y sube para apresar entre sus dedos mi pezón derecho

--¿Quieres que pare?—

Estoy tan caliente ahora. La dureza sobre mis glúteos no me ayuda a pensar con claridad, tanto así, que me coloco de puntillas para frotarme mucho mas contra su polla cubierta.

--N-no.—

No puedo verlo pero sé que está sonriendo.

Jungkook es demasiado rápido para hacerte perder el control, y ágil para sacar tu ropa, pues apenas me estoy dando cuenta que desabrochó el botón de mi pantalón y bajó el cierre. Suelto un jadeo cuando restriega su mano encima de mi bóxer aprovechando mi sensibilidad al máximo.

--Creo que han pasado muchos días desde que estuvimos así de cerca.--…--Mete su mano en mi bóxer y apresa mi pene en su mano fuerte, grande, tan experimentada.--…--Y ya me estaba hartando.—

Me masturba con un ritmo constante y delicioso que me tiene con los ojos puestos en su tarea de darme placer, llevándome a gemir con cada sensación, la vibración de mi cuerpo, el temblar de mis piernas. Jeon pasa su brazo por mi pecho, mi espalda queda apegada al suyo y no deja de masturbarme. Yo no dejo de restregarme contra él, ganándome gruñidos de su parte hasta que aumenta la velocidad de su mano con sensaciones del mismísimo paraíso, pero tan calientes como el infierno mismo.

Mis jadeos aumentan, palabras vagas se escapan de mi boca. Jungkook humedece su pulgar con mi liquido pre-seminal haciendo círculos y vuelve a envolver mi pene entre su mano, casa vez mas rápido.

Me siento al limite, muy cerca del orgasmo.

Alzo mi cabeza para mirar a Jeon por encima de mi hombro, nuestras miradas se conectan.

--Vamos, Jimin… córrete para mi.—

Sus palabras claras, el tono ronco fue lo que necesitaba para que las contracciones se apoderaran de cada parte de mi anatomía liberando mi semen.

--¡J-jefe! ¡Jungkook!--…--Fue lo primero que dije, lo que gemí sin control.—

--Si, si…soy tu maldito jefe.--…--Lo dice con frustración, como si mis palabras hubieran provocado algo en él.--…--Aprendes rápido, me encanta--…--Sus labios succionando mi cuello me hacen suspirar y aferrarme a su brazo sobre mi piel expuesta. Al dejar de atacar mi cuello lo siguiente que veo es el proceder de su mano sobre sus labios, lamiendo la parte superior donde quedaron rastros de mi esencia.--…--Ay Jimin, eres tan dulce.—

No hay manera de que me sienta mas sonrojado, sin embargo solo quiero besarlo por tener esa sonrisa seductora todo el puto día.

Y lo hago, lo beso intentando de no ser torpe, el sabor de mi semen ligándose en nuestros paladares, con nuestras salivas y lenguas en juego. Un juego sucio que me empieza a gustar mas de lo que debería y todo es su maldita culpa. El hecho de que me sienta mas seguro de mis actos impuros, desmedidos, desvergonzados y decadentes de decencia… todo se debe a Jeon Jungkook y, sinceramente, no se como sentirme al respecto.

Nos separamos lentamente con un hilo de saliva que es lo único que une nuestras bocas aún desde lejos.
No soy de empezar los besos y Jeon lo sabe, supongo que por ello está en silencio, mirándome.

--Tienes unos ojos muy hermosos.—

--Ah, gracias.--…--Una vez me lo dijo, pero no con esta intimidad y por primera vez le creo. Sin ninguna duda y se siente bien.—

Rompe el contacto visual, no sé, parece nervioso pero me cuesta creerlo. Jungkook no se muestra nervioso ante nadie. Es un muchacho muy seguro de sus actos.

--Ten.--…--Me entrega la camisa que estuvo a un lado de mi todo el tiempo.--…--Ya puedes ponértela.--…--Aleja su brazo de mi cuerpo y me sorprende la delicadeza con que lo hace.—

--Oh, si.--…--Me coloco la camisa con rapidez y luego mi saco. Jungkook arregla su cabello frente al espejo de cuerpo completo que hay al fondo del cuarto.—

Solo observo sus movimientos por el reflejo. Yo terminé hecho un desastre mientras que él luce impecable y nadie sospecharía que me tuvo gimiendo en este pequeño cuarto. Jeon, pese a ser menor es mas elegante y sofisticado que yo en muchas cosas, ya sea en vestimenta, caminar, hablar, trabajar o simplemente respirar. Lo educaron muy bien y le enseñaron cada cosa de alta sociedad mejor que a nadie. Me siento un poco decaído por eso.

--Bueno, hay que regresar al trabajo, secretario Jimin.--…--Se voltea sonriendo y camina hacia mi para acunas mis mejillas y dejar un casto beso en la punta de mi nariz.--…--Nos vemos arriba.—

Y sale del cuarto.

Suspiro y vuelvo mi mirada al frente viendo mi reflejo completo, nada fuera de lo normal, nada deslumbrante que destacar.

Y es inevitable que las inseguridades no me invadan pero ya no las quiero mas en mi vida, por lo que voy a tener que tomar ciertas medidas, por mi bien y sin dejar de lado quien soy, ni mi comodidad y para eso necesito ayuda.

Y creo que conozco al indicado para ello.

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