Las primeras tres horas de la tarde Jimin no se encontró con su jefe pero mejor así, pues había mucho que ordenar y gracias a los encargados de las diferentes decoraciones todo estaba listo antes de las cinco de la tarde. Jimin agarra sus cosas y se va a su departamento lo mas rápido que puede para arreglarse y llegar a tiempo para hablar con el señor Seokjin. Tae y Mak estaban viendo películas por lo que saludo a ambos y fue en busca de su atuendo para una fiesta tan "elegante y refinada", pero no tenia nada mas allá que camisas de mangas largas, pantalones anchos de tela y sacos una talla mas grande que la suya propia. Se decidió por una camisa mangas largas blanca, pantalón negro de tela y zapatos del mismo color. Se puso todo esto después de darse una ducha algo rápida, se peina lo mejor que puede y limpia sus anteojos sonriendo romántico ante los cristales que yacen en sus manos.

Se toma sus vitamínicos, saliendo al living se despide de su mejor amigo y de su hijo prometiendo que no llegaría tarde, pues Tae tenia una práctica mañana por lo que debe dormir temprano.

Sale de su departamento rumbo a la empresa casi a las siete de la noche, no tan tarde como pensaba y lo necesario para discutir el misterioso tema con el estilista.

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Los invitados empezaban a llegar y con ellos, también el secretario del señor Jeon. Todos con sus costosos trajes, las mujeres con vestidos elegantes llenos de brillo desde la punta inferior hasta la superior, peinados raros y maquillaje llamativo. Jimin era el mas sencillo de todos aunque no le importaba del todo, solo estaba preocupado por lo que el señor Seokjin tendría que decirle o pedirle. Se toparon una vez y estaba muy extraño eso de conversar con él que era un simple secretario que fue de ayuda para que la sesión de fotos no fuera un desastre.

Rodeó el medio del salón para no ser visto por lo invitados, subió las escaleras con destino al segundo piso porque estaba seguro que allí se encontraba el señor SeokJin, moderando cada detalle fallo de la decoración pues, Jimin se encargo de recibir todo y que lo montaran pero Seokjin debía darle el "toque" de belleza. Según él.

--¡JIMIN!--...--SeokJin apenas divisa el pequeño cuerpo de Park lo llama sin vergüenza de que su grito se haya escuchado hasta el salón de baile.--...--Waa ven aquí.--...--Si que estaba animado el estilista.--...--Hola.--...--Lo saluda una vez que el secretario se acerca.--...--Llegas justo a tiempo, todo empezará oficialmente dentro de unos veinte minutos.-

Mira el entorno algo desordenado con muchas prendas tiradas por aquí y por allá. En una mesa que estaba a su lado esta lo que parece ser un traje dentro de un forro de tela brillante.

--El señor Jeon me dijo que usted quiere hablar conmigo pero no me dijo sobre qué.--...--Seokjin no dio tiempo para saludar debidamente así que bueno, de una vez al grano.--...--Me gustaría saber sobre que quiere hablar conmigo, tengo que bajar al salón.-

--Tranquilo.--...--Agarró sus hombros sin dejar de sonreír. Jimin traga duro, no esta acostumbrado a que lo toquen y menos un "desconocido".--...--Es mas bien una propuesta pero puede esperar, mejor ¿ya te vas a cambiar?-

--¿Cambiar?-

--Si, ¿no pensarás bajar vestido así? ¿o si?--...--Lo mira de pies a cabeza con obviedad.-

--P-pues si.--...--Jin abre sus ojos lo mas que puede ante la respuesta del mas bajo. Jimin lo mira asustado.--...--¿Qué?--

--¿Es una broma verdad?--...--Jimin niega.--...--No, no. No puedo permitirme que el modelo principal de Chimchim baje vestido tan... común, es una fiesta, no un día normal de trabajo así que vamos al baño. Tienes suerte de que Kim Seokjin salva patrias esté aquí y también que mi primer traje no me quedara.-

Ni tiempo de protestar le da ya que está sintiendo un deja vú cuando el estilista lo lleva a rastras al baño, y este en su mano libre tenía el traje. Era el que estaba en aquella mesa.

--N-no creo que...

--Shhh.--...--Llegan al baño y lo empuja dentro lanzándole el traje luego.--...--Vístete, buscaré mis herramientas y vuelvo.-

--Pero yo...

--Luego me lo agradeces.-

Se va. Jimin saca el traje con mucho cuidado y sorprendiéndose por lo que encuentra. Ni con la paga completa de tres meses podría obtener un traje tan bello como este, era demasiado. Iba a irse pero en eso entra el estilista con dos bolsos en su mano notando sus intenciones de escapar y cierra la puerta para obligarlo a cambiarse.

Jin no dejaría a este niño así, debe ser llamativo. Es el modelo principal y él, como estilista y dirigente de la imagen no puede dejar a esta pobre alma suelta, sin sentido de la moda deambulando por aquel salón. No, su profesión no le permite aquello.

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Jungkook no tenia mucho de haber llegado procediendo a saludar a los invitados con falso entusiasmo, conociendo a cada uno de ellos esperando la hora para hablar detrás del pequeño podio al fondo y luego poder librarse de la estúpida fiesta.
A esta edad el tendría que estar estudiando para sus trabajos de universidad, planeando con algunos amigos una salida al cine, la playa, centro comercial o esperar a que llegue el fin de semana para ir a la disco, dormir hasta tarde en vacaciones, hacer locuras de adolescente... las cosas que hacen los de su edad.

Pero no, Jungkook tiene ganado diez años máximo por las responsabilidades que le fueron obligadas a tomar, forzando su mente a madurar, moldeando su comportamiento para ser un adulto. Si tan solo Namjoon no se hubiera enamorado y revelado ante Joonhyun él... él no tuviera este yugo encima.

Estuvo toda la tarde recordando el sorpresivo beso que Jimin le dio; fue tímido como ninguno, tan suave como una caricia y vaciando memorias, buscando recuerdos entre todas sus parejas pasadas no hubo ningún beso de ese tipo. Con las personas que llego a tener relaciones eran tan experimentadas que iban a su pene antes que ir a su boca y cuando lo hacían eran completamente sexuales, sin una sola pizca de timidez, sin dudarlo y pues... él tampoco se quedaba atrás para lograr devorar los labios de sus amantes con fuerza.

¿Besos castos? Nada que ver.

Pero eso no quiere decir que el beso de Jimin no le haya agradado, es mas, le agrado más de lo que pensaba y se reprocha por eso y pudo haberlo echado lejos, reclamar su atrevimiento pero no lo hizo y en lugar de eso esperó a que se fuera de su oficina para reaccionar.

Sinceramente, le gustó porque era cálido y desde que era niño no recuerda un roce tan delicado como el beso de su secretario.

Pero... ¿Por qué lo besó? Jungkook no puede gustarle a su empleado ya que siempre le trató mal... eso seria muy masoquista por parte de Park. ¿Pero por qué lo beso mientras lo creia dormido? Y lo que mas le martilla la cabeza es lo que Park dijo antes de besarlo :

"-Si tan solo supieras Jungkook-"

¿Si tan solo supiera qué?

Arregló mejor su traje negando leve alejando esos pensamientos y recuerdos que lo tuvieron distraído la mayor parte del día para así, ir hasta el podio a saludar al publico en general, dando detalles amplios sobre lo que se basaba su nueva publicidad y unas cuantas palabras de agradecimiento a los trabajadores. Claro, tampoco pudo faltar un tanto de historia Jeon para recalcar los logros y sacrificios hechos por su "padre" para tener ahora lo que son "empresas Jeon" a todos le gustaba oír un poco sobre el señor Joonhyun y Jungkook a final de cuentas no se los negaría. No puede tampoco pasar por alto el esfuerzo de su padrastro que, sin duda es admirable... pero nada mas.

Al bajar de aquel podio fue directamente en busca de una copa de champán en la mesa central notando que su secretario no se apareció en la fiesta. De tan solo pensar en lo molesto que se pondría Seokjin mas tarde su cabeza daba vueltas.

Pero por otro lado ¿para que quiere Jin a su secretario con tanta urgencia? Cuando le pidió llamar a Jimin parecía desesperado, histérico incluso.

Y si, estaba buscando a Jimin con la mirada entre todos los invitados pero no podía encontrarlo así que supuso que no vino. Ya mañana hablaría con él sobre eso, fue muy claro al pedirle que no faltara porque ...

--¡Jungkook!--

La voz animada de Jin llego a sus oídos.

--Mierda...--...--Siseo en voz baja tomando de un solo trago la mitad de champán que yacía dentro de la copa.--...--¿Qué hice para merecer tal castigo?--...--Pregunta mirando hacia arriba, queriendo que algún ser celestial le responda por su mala suerte. Aunque pensándolo bien, debe preguntar abajo la causa para estar metido en tantos embrollos cargados de drama e histeria.-

La respuesta que busca no debe dársela un ser celestial, sino uno infernal.

¿Acaso hizo pacto con el diablo en una vida pasada y no cumplió con su parte? Eso sonaba mas convincente.

Respira hondo. Sus dedos se encargan de cerrar su saco justo con su botón y rodando los ojos, se da la vuelta preparado mentalmente para los gritos de Jin por no haber traído a su secretario para sea lo que sea que necesitara. Encuentra a su amigo a solo medio metro de distancia, Jin estaba vestido con un traje gris apegado al cuerpo, camisa blanca debajo y una corbata rosa para acompañar el atuendo elegante pero sexy del estilista. Su cabello castaño bien peinado como siempre.

--Te tengo una sorpresa.--...--Sorprendido, Jungkook frunce el ceño. Estaba preparado psicológicamente para los reclamos de su amigo.--...--Te va a encantar.-

¿Jin dando sorpresas? Eso no es tan novedoso pero dejó de ser constante hace algún tiempo.

Su amigo se hace a un lado dejando al descubierto a su secretario, esa figura baja con cabello dorado algo alborotado pero nada parecido al "peinado" que trae todos los días al trabajo y puede decir con certeza que es la primera vez que ve su cabello arreglado, no lleva sus gafas por lo que puede apreciar los colores oscuros que decoran sus ojos, sus labios llevan un poco de labial morado que no pasó desapercibido para Jungkook que relamió los suyos ante el recuerdo del beso de la tarde queriendo darse a si mismo unas cuantas cachetadas por no poder ver esos labios mas de cerca horas atrás.

Y eso que una vez imaginó los labios rodeando la textura de su pene... pero solo eran fantasías que nadie debe saber.

Su recorrido siguió por su cuerpo; lleva puesto un con saco oscuro con brillantes abundantes, camisa blanca y una tela del mismo color rodeando su cuello, pantalón negro apegado al cuerpo, nada de holgado en ninguna parte, todo bien colocado sin ninguna arruga. Jimin estaba diferente.
Sus ojos vuelven a su rostro, esta vez impactando de una sola vez contra los contrarios y Jimin a pesar de parecer otra persona no es así; su mirada sigue teniendo brillo, timidez y esa forma única que usa para mirarlo siempre.

Mirada que adora pero no entiende.

--¿Y que tal?--...--Habla Jin.-

Jimin frunce sus labios y rompe contacto visual con su jefe mirando al suelo. Quién sabe si Jungkook le consideraba ridículo con maquillaje encima y ese traje costoso que no debía verse bien en él.

--Hermoso.--...--Sus palabras salen casi en un susurro, sin poder detenerlas. Es lo que estaba pensando pero su cerebro le hizo una inoportuna jugarreta. Jimin se sonroja violentamente.--...--Digo, está muy guapo.--...--Pasa desapercibido.--...--Pensé que no vendrías, Jimin.-

--Vine temprano como me lo pidió.--...--Un picor conocido invade su nariz haciéndolo estornudar tapando su nariz.--

--¿Y de que hablaron?--...--Estaba curioso y bueno, también sacando conversación para entretenerse sobre cualquier tema y no en la apariencia deslumbrante del rubio.-

--Aún no me ha dicho nada el señor Seokjin.-

Jin estaba retocando su maquillaje con un pequeño espejo de mano. Al escuchar su nombre lo guarda y presta atención a los menores.

--¿Qué ocurre?-

--¿Para que citaste a mi secretario?-

--Oh si, cierto lo cite porque...

--Señor Jeon.--...--El trío de hombres aprecia la presencia de un hombre alto, fornido, de piel blanca y cabello negro azabache. Viste de negro a excepción de su saco blanco.--...--Cuanto tiempo, amigo mío.-

--Jackson.--...--A continuación tenemos un apretón de manos y sonrisas amables por parte de ambos empresarios. Jin y Jimin solo se quedan esperando por alguna señal.--...--Cuanto tiempo-

--Si. Veo que tu empresa va de viento en popa. Estoy ansioso por la reunión del próximo miércoles.-

--Yo igual, me enteré que vendiste el veinticinco por ciento de tu empresa a los Lee.-

--Si, nuestro contrato es beneficioso para ambas partes.--...--Jimin conoce a ese hombre. Si su memoria fotográfica no falla es el dueño de una gran empresa de Joyería. Es quien lo llamó esta mañana para confirmar su presencia en la fiesta, junto al otro señor. Hansol, si.--...--Se vienen cosas muy buenas.-

Bueno, Jimin no va a negar que el hombre de saco blanco tiene una sonrisa encantadora.

De repente Jungkook recuerda que tiene a su amigo y secretario a sus espaldas por lo que se gira y hace ademán para que se acerquen.

--Ellos son Kim SeokJin y Park Jimin. Él es Jackson Wang--...--Los hombres se saludan, uno mas animado que otro.-

--Wow, qué hombres mas guapos.--...--Halaga. Jackson suele ser muy coqueto con cualquier persona que se le pase por enfrente y mas si son hombres debido que su filosofía es clara pero algo peculiar: "-Un hoyo es un hoyo-". ¿raro verdad? un bisexual destacado entre los demás que no lleva su balanza de preferencia desigual. Le encantan las mujeres tanto como los hombres, cincuenta a cincuenta, ni mas ni menos.--...--¿Eres un modelo o algo así?--...--Le habla a Jimin-

El rubio niega lo mas cerca de Jin posible.

--Pensaba que si, un hombre tan precioso como tu debería estar en todas las revistas del país.-

Jungkook observa todo atento. Ya sabe por donde va Jackson y no le agrada.

--¿Verdad que si? es lo mismo que pienso yo.--...--Apoya Jin y Jimin no puede sentirse mas avergonzado por la situación. Nunca le habían dicho "precioso" de forma tan directa, menos compararlo con un modelo en primera impresión.--...--De hecho, eso quería hablar contigo Jimin. Quiero que seas el modelo de una línea de perfumes que lanzará mi agencia dentro de unas semanas. Dime que si.-

Pucherea exagerado y Jimin se queda sin palabras buscando ayuda en su jefe que también está un poco sorprendido.

--Yo digo que deberías aceptar, con tu bello rostro como imagen de los perfumes todos van a comprarlos.--...--¿Se puede estar con el rostro mas rojo? Al parecer no.--...--Es que con todo respeto, eres un hombre muy bello.-

*Con todo respeto ¿Por qué no te largas de una vez, Jackson?*

Jungkook no es de pensar esas cosas Y es mas, cuando estos sucesos pasan suele alejarse para que sus amigos coqueteen con gusto pero ahora no lo consideraba una opción. No puede moverse de ese lugar hasta que Jackson se fuera porque pues... Wang es un lobo en busca de diversión con corderos solitarios como Jimin.

--Jackson, creo que Wendy anda buscándote.--...--Miente colocándose frente al pelinegro.-

--¿Enserio? Esa hermana mía si es fastidiosa. Bueno, debo irme pero volveré pronto.--...--Se aleja y Jungkook agradece que se haya tragado el cuento.-

Jimin aún esta con Jin mientras este sigue insistiendo. Todo es sorpresivo y esto era lo último que se imaginaba pero aún así era probable. Su jefe sembró la duda desde la mañana.

--Y-yo no sé, no me veo como un modelo.--

--Fuiste el modelo principal del peluche que promete mucho en el mercado.-

--Eso fue por improvisación.-

--De verdad que eres el único que considero adecuado para esta sesión, pensé en ti desde el primer momento y esta es una gran oportunidad para ti. Promete que al menos vas a pensarlo.-

--Lo prometo.--...--Jin asiente y se aleja dejándolo solo, ja ¿modelo? Qué buen chiste.-

Jimin mira la hora en su pequeño reloj, iban a dar las nueve de la noche así que su presencia en la fiesta tiene que acabar ahora.

--Mmm, sospechaba que Jin iba a proponerte algo así.--...--El rubio se gira ante la voz tan conocida.--...--Tanto misterio para algo tan simple.-

--S-si.--...--Para Jimin no estaba siendo ni una pizca de simple. Todos los modelos que ha visto en revista o televisión cumplen con un estándar de belleza mas allá de la imaginación, con un rostro y cuerpo demasiado cautivador. Él no tiene nada de lo que el mundo de la fama pide.--...--Debo irme.-

--¿Tan rápido?--...--Estaba a punto de insistir para que se quedara un poco mas pero al ver a su amigo Wang como ventilador buscándolo por todo el salón cambio de opinión.--...--Yo te llevo.-

Lo agarra de su muñeca y empieza a abrirse paso entre la multitud de invitados con la única meta de salir de la empresa sin ser visto por Jackson, sin importarle que la fiesta quede desamparada, importándole mierda los entrevistadores que deben estar buscándolo ahora mismo con tal de conseguir un poco de información.

Jimin solo mueve sus pies prácticamente corriendo, percatándose de como sus compañeras de trabajo lo miran pasar, como si no pudieran creer que sea él y mentiría si dijera que no se siente bien, además de las habladurías: "-¿Es él?-" "-No, ese no puede ser Park-"

*Pues si soy yo, desgraciadas*

Pero claro, todo sus deseos son guardados.

Salen y van directo al estacionamiento para adentrarse a la camioneta del menor en silencio.

Jimin confundido y Jungkook preguntándose una y otra vez: *¿Qué estoy haciendo con mi vida?*

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Jungkook detiene la camioneta frente el edificio donde Jimin vive, los dos están en silencio por aproximadamente veinte segundos.

--¡Achú!--...--Estornuda el mayor Rompiendo el silencio.-

--¿Sufres de alguna alergia? no has dejado de estornudar desde la fiesta.-

--No que yo sepa pero desde que el señor SeokJin roseó algo en mi cabello no he parado de estornudar.-

--Pueda que seas alérgico a ese tipo de productos. Otra cosa; ¿Aceptarás el trabajo que te ofreció Jin?--....-Jimin lo mira fijo.--

--Debo pensarlo, soy tu secretario. Ya tengo un trabajo.-

--Lo mas difícil del año ya ha pasado, puedo otorgarte tiempo libre, reducir tu horario sin que afecte tu salario-

--Gracias, pero no me considero apto para ser un modelo.--...--Su mirada no se despega del parabrisas.--...--Creo que no lo haré.-

--No deberías dejar pasar esto, Jin no le insiste a nadie y si lo hace contigo es porque ve potencial en ti.--...--Jimin se tensa cuando la mano de su jefe agarran suavemente su barbilla, girando su rostro para que le mire.--...--Tienes unos lindos ojos detrás de esos cristales, tu nariz es de botón, tus mejillas son algo rellenas pero no exagerado, hacen que tus labios abultados se vean muy bien, tu boca mas llamativa. Muy lindo-

¿Por qué su jefe anda diciéndole estas cosas?

--No mienta.-

--No estoy mintiendo.-

--Es raro creerte cuando consideras de mi un hombre feo.-

Jungkook aleja la mano de la barbilla ajena. No le molesta que lo diga Jimin, sino que eso ya es pasado pero igual sigue jodiendole el presente, todo por la lengua chismosa de Suga. Si estuviera ahora mismo frente a él no dudaría en lanzársele encima y molerlo a golpes a ver si así sujeta su problemática boca.

Park ansía mas de aquel toque maravilloso que le quema la piel de forma mágica y gustosa pero no, por otra parte agradece la lejanía ya que mientras mas lejos su jefe esté de él mejor. Jimin puede acercarse a su jefe porque se conoce y sabe lo que siente, mientras que desconoce las intensiones de su jefe y le asusta. A estas alturas no puede confundirse mas.

--Eso era antes.--...--Sale del auto y lo rodea para abrir la puerta del copiloto.--...--Igual debes pensarlo.-

--Y-yo...

Iba a responder pero su mirada quedó ida en el suelo, tragó duro, sus ojos se expanden de puro susto.

--Jimin ¿Estas bien? ¿Qué sucede?-

--H-hay... hay una...--...--No puede hablar bien.--...--¡UNA ARAÑA! ¡ES ENORME ME VA A MORDER!--...--Apenas Jungkook se da la vuelta para ver a la "enorme" araña Jimin se lanza a su espalda preso del pánico buscando seguridad. Jungkook se tambalea un poco pero logra mantener el equilibrio, aún si Jimin lo abraza como si su vida dependiera de ello, pataleando y haciendo todo mas difícil.--...--¡MÁTALA! ¡JUNGKOOK MÁTALA YA!--...--La araña era tan pequeña como un palillo de fosforo. Claro, pero como Jimin les tiene miedo para él es una "araña enorme". Si algún día llega ver una verdaderamente grande no duda en que se pueda desmayar.-

Jungkook solo patea a la arañita lejos de ellos.

--J-jimin... m-me estás ahorcando.--...--Habla como puede.-

El rubio se baja con miedo, sus piernas temblando. Apenas reacciona de su gran atrevimiento por montarse encima de su jefe de tal forma. Se coloca erguido sin poder evitar el sonrojo potente de sus mejillas.

--Di-discúlpeme, yo... hasta mañana.-

--Jimin.-

El nombrado hace puños con sus ojos cerrados para girar después de dos respiraciones profundas.

--¿Qué?-

--¿Si tan solo supiera qué?-

Jimin deja que la vergüenza se vaya lejos y reemplaza ese sentimiento por confusión. Su ceño se frunce y ladea su cabeza un poco.

--¿De que hablas?-

--Nada, hasta mañana--...--Se despide agitando su mano para dirigirse a su auto.-

Al parecer Jimin no recuerda lo que le dijo en la tarde o por lo menos eso es lo que demuestra.

Es decepcionante y frustrante no poder tener respuestas de quien lo ha llenado de preguntas.

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