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--Necesitas un macho urgente—

--Oh por Dios, Tae deja de decir estupideces y mejor ayudame a ordenar la mochila de Mark—

--Si, si, lo que digas—

Jimin estaba atareado con toda la clase de documentos que había ordenado. Simplemente se desentendió de su labor como padre y amo de casa gracias al trabajo. Su lindo hijo era cuidado por su vecino y mejor amigo Kim Taehyung. Por suerte, este estudiaba solo los fines de semana. Con todo lo loco que se puso su vida y horario… fue inevitable no dejar a su hijo al cuidado de alguien mas.

--¡LISTO!--…--Grito de alegría cuando todo yacía perfectamente arreglado en su pequeño maletín--…--Al fin termine de acomodar todo—

--Yo también acabé con la mochila de Mark—

--¿Metiste la tarea de lenguaje?—

--Si—

--¿la carpeta de dibujo?—

--Si que si—

--¿Y su guía de matemáticas?—

--Jimin, cuando dije que guarde todo es todo--…--Agrega obstinado—

--Si, lo siento amigo mío--…--Se pasó las manos por el rostro colocándolo rojo en el proceso--…--Pero no quiero que Mark este afectado en nada con su escuela. El hecho de estar clavado de cabeza en una maldita empresa, sentado frente a un escritorio y corriendo de aquí para allá haciendo múltiples cosas como si fuera un pulpo… ya me tiene muy mal--…--De solo ponerse a analizar todas las cosas que hace al día a día se deprime levemente--…--Como para tener que cargar con que mi hijo la pasa mal en la escuela por mi falta de tiempo—

--Hey…--…--Taehyung se acerca colocando ambas manos en los hombros de su amigo--…--Tranquilo, Jimin que me tienes a mi. Ya lo sabes, soy el tío Tae—

Jimin se ríe con ganas.

--Uy eso si que me queda claro--…--La sonrisa de pronto desaparece--…--Pero tienes una vida propia, vida amorosa, un perro, padres y yo…

--Tu tienes un hermoso hijo, me tienes a mi y un coraje del tamaño del universo--…--Le anima lo mas que puede. Jimin tiene cinco años pasando trabajo, humillaciones y un sin numero de malas acciones por ser un “padre soltero”. La cuestión en realidad no era que fuera padre soltero lo que pasaba era que Jimin les decía que su novia le había dejado a su hijo en la puerta de su casa y nunca mas apareció. O bueno, esa era una versión que Jimin creó para hacer que todo el mundo creyera--…--Te admiro muchísimo—

--¿Por ser un padre soltero o ser un secretario?--…--Jimin le mira de reojo con cara de poker—

--No, es porque no creo que un hombre que no tenga un gran corazón haga con Mark lo que tu hiciste.—

--Y-yo creo que cualquiera estando en mi lugar hubiese hecho lo mismo—

--Pues crees mal--…--Alejó sus manos de sus hombros--…--Estar caminando por la carretera hasta la casa de tu abuela, encontrarte un bebé abandonado en la hierba con varias picadas de hormigas y mosquitos… solo en el mundo y tu lo adoptas, haciéndolo pasar por tu hijo al cual su mamá le dejó contigo para desaparecer del mapa. Perdóname Jimin, pero eso es lo más admirable que conozco—

Jimin suspira.

Aún puede recordar con gran claridad el llanto de Mark aquel día. Estaba desnudo en la hierba, con su cuerpecito encima de una fina tela amarilla y varios insectos cerca. Ademas que en su suave piel yacían picadas.
No podía dejar allí a ese bebé desamparado y hacer de cuenta que no lo vio. No podría vivir con esa culpa.
Por ello, inventó toda esa historia de la novia que los abandonó y eso.

Jimin era mas virgen que el aceite de oliva.

Y para completar es gay.

--De cualquier modo creo que…

--¡PAPÁ!--…--Fueron interrumpidos llevando su atención a un castaño muy sonriente--…--¡Ya estoy listo!—

Jimin se acercó a su hijo. Porque eso era, su hijo.

Siempre le decían que Mark y él no se parecían en nada pero él les aseguraba que salió idéntico a su madre. Sus padres hicieron tanto revuelo que cuando Mark cumplió sus dos años de edad a él no le quedó de otra que irse de casa emprendiendo una vida con su hijo, haciéndose independiente sin tener que hacerlo aun.

Fue muy duro tener que desprenderse de su vida tan cómoda. Pero su amor por Mark fue mas grande.

Jimin acaricio con cariño el cabello del infante sonriente.

--Bueno, ya que estás listo es hora de ir a la escuela.—

--¡Genial!—

Tae se acerca con la pequeña mochila colgada en su hombro.

--Vamos, pequeño—

A Jimin le gustaría tanto poder llevar a su hijo todos los días a su escuela pero su forzado y mañanero trabajo se lo impide.

--Adiós, papi--…--Mark abraza su pierna derecha aferrandose a ella antes de alejarse yendo con Tae fuera del departamento—

Jimin suspira con tristeza.

(…)

--La empresa necesita mas reconocimiento—

--¿Mas?--…--El piel pálida pregunta con una ceja arqueada--…--Amigo, tienes la empresa de publicidad mas grande y reconocía de Corea del Sur. Deja de ser tan ambicioso—

--No es ambición, Yoongi--…--Se cruza de brazos--…--A veces es bueno probar tus límites; los personales y mucho mas los de toda la empresa y su trabajadores--…--Jungkook era de esos interesados en poder llegar cada vez mas alto. No importaba si estaba en la cima porque existía un cielo y asi el cielo fuera el límite, existía un universo--…--Sabes como soy—

--Me queda super claro--…--Silva alzando las manos y una semi sonrisa adorna sus labios--…-- Pero no crees que la campaña de este peluche es algo… ¿complicada? Es decir, siempre la empresa ha sido dedicada a la publicidad de artículos de aseo personal, perfumes, ropa cara. Hacer una publicidad extensa de colección completa basada en un peluche ¿no te parece muy arriesgado?—

Jungkook niega.

--De eso se trata. La gente se cansa de ver siempre lo mismo, yo me canso de patrocinar siempre lo mismo—

--Claro, lo que no estamos seguros es que vaya a funcion…

El timbre de la puerta de la oficina suena interrumpiendo a ambos hombres de traje y porte elegante.

--¿Puedo pasar?--…--Se escuchó por la grabadora—

Jungkook hizo una mueca de asco al saber que aquel secretario suyo venia a ofuscarlo con su deplorable presencia.

--¿Quién es?--…--Yoongi se gira un poco en su asiento para lograr ver a un chico con lentes redondos, una camisa rosa de ¿mujer? Y pantalon blanco ancho. Supone que no es muy alto—

--Mi secretario--…--Contesta sin ganas—

--Oh--…--Anteriormente Jungkook le había mencionado sobre cierto hombre--…--Es mas feo de lo que pensé.--

--Concuerdo contigo--…--Jungkook se acerco a la bocina que tenia a la derecha en su escritorio presionando el botón de encendido--…--Entre, Park—

Jimin se tomo la libertad de abrir la puerta de vidrio entrando con una carpeta delgada en la mano. Yoongi y Jungkook le miraron de arriba abajo con odiosidad por su apariencia. Un bufón estaba mas bonito sin duda.

--Aquí esta lo que me pidió, jefe--…--Jimin deja la carpeta encima del escritorio sin querer mirar al acompañante de Jeon. Por alguna rara razón sospechaba que no iba a dar una buena impresión o algo parecido y por ello se encargo de mantener distancia entre los hombres, sin mirar aunque sea por cortesía--…--Sus citas siguen en pie como dijo, nadie ha llamado y la reunión con los trabajadores la pasé al martes que viene como me pidió—

Jungkook hizo un gesto raro con su boca.

--Esta bien, puedes retirarte—

--Gracias. Permiso—

Jimin se dio la media vuelta y salió de la oficina sin mirar atrás. Maldito hombre guapo de nombre Jeon Jungkook que lo ponía tan mal así hiciera sus gestos raros cuando hacía las cosas bien. Jimin no quería darle el gusto de verlo caer tan rápido.
Sabe que su trabajo nunca ha sido fijo con un jefe tan amargado.

Yoongi alza su cabeza hacia su amigo soltando una risa que tenia contenida todo ese rato. Jeon aun no encuentra la repentina gracia.

--¿De que te ríes?—

--Tan atento y feo nos ha salido tu secretario--…--Vuelve a reír ante lo dicho—

Jungkook suspira cansado.

--Si, si… va a ser difícil despedirlo si no comete ningún error—

--Mmm pues ya qué. Lo contrataste… mejor deja de buscar maneras de sacarlo de aquí y ve acostumbrándote a él--…--Jungkook se frotó la frente con sus dedos--…--No creo que sea tan difícil por que sea hombre y no se arregle, es eficiente y solo eso importa—

--Pueda que tengas razón pero yo simplemente no lo quiero como secretario, punto—

--¿Y por qué lo aceptaste entonces?—

--Tiene un hijo pequeño, es un padre soltero y supongo que eso me hizo ablandar—

--Pero deja de molestar al pobre hombre y ya vete haciendo a la idea de que será tu secretario. Fin—

Jungkook se arrecuesta en su silla. Prácticamente desparramado se da la vuelta en la misma para admirar desde su ventanal de cristal la ciudad. Ok, aceptaría a Park Jimin como su secretario oficial pero su trato con el no cambiaría en lo absoluto, menos la esperanza de que cometa faltas para despedirlo.
Eso sin contar que le gustaba mucho verlo atareado, sudando por correr sin parar para hacer todo correctamente y al tiempo acordado para luego llegar jadeando ante su presencial con... con todo bien hecho, joder.

No habría mas sabotaje pero si diversión .