Jimin Pov:

Me estoy esforzando lo más que  puedo. De verdad que sí.

 
--Coloca mis citas para dentro de un par de horas, quiero los planos en mi escritorio ahora mismo. Llama al señor Minho para que esté al tanto de que me interesa su propuesta--
 
Quiero sacarle los ojos y tirarlos en un lago lleno de cocodrilos.

¿Pero cómo? Ese jefe mío es demasiado hermoso como para atreverme a gritarle (toda mi inconformidad) no puedo. Mi religión no me permite rebelarme ante tanta belleza (y circunstancias dónde si comento un error terminaré despedido)

Debo trabajar en eso.

Ni siquiera se digna a mirarme.

Estoy con una pila de carpetas en mis brazos esforzándome para que no me falle la fuerza y todo termine en el suelo regado por todos lados. El señor Jeon tiene toda su atención en una carpeta en el escritorio. Sus manos a cada lado con un plumón en la derecha. Presiento que está un tanto indeciso en firmar aquel papel.

--Eh... ¿Señor?--

--Ahora no, Park--...--Responde sin moverse--...--¿Que no ves que estoy ocupado?--

Uy pero qué genio tan asqueroso.

--¿Qué hago con esto?--...--Por fin sube su cabeza centrando su atención en las pesadas carpetas que tengo encima--...--Son las carpetas que me pidió hace rato-

--Llévatelas. Ya no las necesito--
 

Oh, esto sí que es estupendo.

Me doy la vuelta y salgo con mucho cuidado de no estropear todo.

Lleva y trae, quiero esto y ya no lo quiero, date prisa, deja la lentitud.
Solo llevo aquí una semana y siento que ha pasado un siglo... Qué digo siglo, ¡un milenio!

Tener un jefe tan exigente como Jeon Jungkook es de verdad muy agotador.  Por si fuera poco ni trata de ser amable.

Tampoco deja que tome un respiro. Me la paso todo el día corriendo de aqui para allá teniendo que soportar las malas miradas de los demás trabajadores. En especial las secretarias.
Al parecer no les ha caído muy bien eso de que su "amado" jefe... Tenga un secretario.

Dejo los edificios de carpetas en sus estantes siendo lo más veloz que mi cuerpo lo permite. Salgo trotando a mi escritorio sentándome (prácticamente caí de trasero en la silla por el maratón) hago la llamada a aquel señor Minho, señor que al hablar conmigo no creyó que fuera el secretario de Jeon Jungkook.

Pero después de explicarle un poco lo que ocurría y darle el mensaje del jefe lo convencí.

Creo.

Cuelgo el teléfono pasando mis manos por mi rostro. Tengo un poco de sudor en mi frente. Oh Dios mío, esto es tan cansado que creo que moriré.

Todo sea por el dinero para mantener a mi hijo.

--Hola, don secretario--...--Levanto mi cabeza sonriendo al ver a aquella tonta--

Soffia.

Soffia es una de las encargadas de crear publicidad. Aunque si no mal recuerdo me dijo que tenía título como profesional en diseño gráfico. Algo muy raro pero hace dos días me enseñó su trabajo y era magnífico.

Además de que tenía unas grandiosas ideas.

--Hola, soffia--

Ella es la única que se acercó a mí sin ofenderme, mirarme mal o burlarse de mi trabajo o vestimenta poco masculina.
Ella es más de mente abierta y piensa que este trabajo lo puede ejercer cualquiera. Ojalá todos pensaran como ella.

--¿Cómo te va con estas cosas?--...--Señala con su pulgar hacia atrás. Capto rápidamente--

--Mas o mierda--

Ella suelta una carcajada. Le hago señales de que se calle porque pueden llamarnos la atención.

--Uy, qué risa nene--...--Regula su respiración--...--Son unas tontas. No les hagas caso--

--No entiendo su odio. Es algo sin explicación--

Es cierto, esas desquiciadas mujeres no dejan de mirarme mal como si tuviera algún tipo de plaga.

--Pueda que si haya una explicación--...--La miro de reojo--...--Hay cosas sobre el jefe que es un tipo de tabú para la empresa, sin embargo ese tabú, mito o leyenda circula desde el año pasado--

De repente me es imposible pasar por alto este supuesto suceso.

--Si me explicas quizás pueda entender--

Quisiera poder ver a los ojos a Soffia mientras habla pero debo arreglar unas diez carpetas antes de que el jefe tenga su cita de medio día con esos tipos calvos que dentro de poco mascarán el agua.

Terrible, recemos.

--Pues desde hace un año se rumora que el jefe le tira al mismo bando--...--Mis manos dejan de moverse en la labor con los documentos--...--Nunca nos hemos enterado que ha tenido novia o siquiera una "amiga con derechos"--...--Hace comillas con sus dedos--...--Es algo super raro, teniendo en cuenta de que el jefe podría estar con cualquier mujer. Pero estos rumores se hicieron más que simples rumores cuando hace un año llegó un chico que a mí calcular no tenía más de veinte años. La cuestión es que se encerraron en la oficinas del jefe toda la tarde hasta caer la noche. Luego los guardias dicen que vieron salir a aquel chico con marcas en su cuello y una apariencia física digna de haber terminado con una alocada faena--

Me digno a mover mis manos lo más rápido que puedo.

Imaginarme al jefe en pleno acto sexual con un chico... Créanme que no estoy bien.

No sé que me sorprende más:

Que haya la posibilidad de que sea gay.

O que haya metido a un chico a tener sexo en su oficina.

Sin darme cuenta estoy recogiendo unos papeles que ni siquiera tienen que ver con lo que me toca ordenar.

--P-pero... ¿Eso qué tiene que ver con que todos me odien?--

--¿No es lógico?--...--Rie negando divertida--

--¿Qué cosa?--...--Aún no encuentro en mi cabeza una buena razón para que eso que me ha contado Soffi tenga que ver conmigo--

--Tú si que estás tonto--...--Bufa con notorio fastidio. Se acerca a mi oído--...--Están celosas porque si los rumores llegan a ser ciertos tú serías un blanco perfecto para el jefe--

Susurró tan bajo que casi no la escucho. Pero lo hice, y me dió un gran terror.

Siento mi cara caliente. ¿Por qué tengo que dejar que este tipo de cosas me pongan tan sensible?

Bueno, ha de ser porque rondan al jefe Jungkook y estoy seguro que todo lo que tenga que ver con él y conmigo me va a poner de esta forma.

Súper tenso, nervioso y ansioso.

--No hay que suponer cosas estúpidas--...--No quiero alzar la cabeza y que la enana esa mire mi cara toda roja de pura vergüenza--...--Si ellas me odian por eso muy mal de su parte--

--Eso lo sé--...--La escucho suspirar. Un suspiro de clara resignación--...--Estamos rodeados de puros mediocres--...--Asiento aunque quizás no haya visto mi acción--...--Por eso tu me caes bien, eres el único con sentido común en todo este piso y hasta me atrevo a decir que de toda la empresa.--

Sonrío ladino levantándome de la silla para ir directo al estante en busca de todos los planos del piernas de yunque.

Siento la mirada de Soffia en todo momento.

--Hay personas profesionales en este edificio, graduadas y con su profesión muy bien planteada--...--Cargo con todos los planos en rollos--...--Creeme que hay más personas con sentido común que yo. Un rato largo, Soffia--

--Eso no cambia lo que dije. El título es solo un papel bien arreglado que se te puede perder o romper, pero esto...--...--Señala hacia su cabeza con el dedo índice--...--No. Creeme cuando te digo que las personas más inteligentes a veces están en la calle sin empleo por falta de título, mientras que mediocres adinerados elegantes están dando órdenes a diestra y siniestra--

Suspiro ante las palabras de Soffia.

--Pueda que tengas razón, pero eso no aplica en mi.--

--Eso dices--...--Rueda los ojos--...--¿El jefe necesita tantos planos?--

--Si, creo que si los pidió fue por algo. Es una conferencia y no creo que haya pedido todo esto para molestarme--

--Quien sabe--...--Se encoge de hombros--...--¿Y qué más debes llevar?--

--Las diapositivas de la empresa, los volantes de la propaganda actual, como diez carpetas, la agenda general y repartir el café--...--De tan solo decirlo me canso--

--Uy pobre cosita fea--...--Niega frunciendo sus labios--...--Espero que te vaya bien, nene--...--Pasa por mi lado pegándome un par de palmadas en mi brazo dándome ánimos--

Soffia ya se ha ido y solo me queda hacerme a la idea de que debo correr para hacer mis labores bien.

Suena el teléfono de mesa y con cuidado de no hacer caer los planos, alargo mi brazo hasta tener el celular en mi mano llevándolo a mi oido. Sé que es el jefe porque se supone que ese teléfono es para llamada de su oficina hasta mi escritorio.

--Park--...--Cómo me gustaría que me llamara por mi nombre. Me siento en la milicia--...--Necesito que traigas los planos rápido--

--A eso iba, señor--

--Necesito que te apresures para que te encargues de pasar el proyecto del comercial de shampoo en archivo digital y físico--...--Como si no tuviera suficiente con lo asignado hace rato--...--También encárgate de recibir las telas para los nuevos productos de ropa. Vienen a las dos y arregla lo que quede pendiente para la conferencia--

--Eh-e... Si per...

Y solo escucho los pitidos del teléfono anunciando que el guapo y mala sangre de mi jefe ha colgado la llamada.

Tengo tantas cosas que hacer en un día que no sé si pueda resistir. Pero debo hacerlo.

.

Jungkook Pov:

¿Firmar o no firmar?

Este documento me tiene la cabeza revuelta desde la mañana.

Pero es que este contrato no me convence para nada. Se supone que es para hacer una publicidad de un muñeco con diseño de perro. Debemos encargarnos de darle un nombre y presentación.

Lo que no me convence de todo esto es que debemos prestar modelos de la empresa, será lanzado en Japón dentro de un mes y debe ser una publicidad con propaganda en televisión, consiguiendo que salga en la portada de la revista "Sun"

Es difícil conseguir un lugar en su revista.

Pero, por otro lado, sería una gran oportunidad para llevar la publicidad de la empresa al exterior y más con un país tan conocido e influyente como lo es Japón.

Conviene y no conviene.

Recuesto mi espalda a la silla arreglando un poco el cuello de mi corbata.

Mi secretario entra a la oficina, o bueno, intenta porque los planos en sus brazos chocan contra los marcos de la puerta .

Muerdo el interior de mi labio inferior para no reírme porque de verdad la escena me resultó muy cómica.

--Aqui...--...--Lo sigo con la mirada hasta que deja los planos en la otra mesa--...--Están sus planos, señor. Ya arregle las carpetas con los documentos que serán utilizados para la reunión--

A veces es tan torpe y eficiente que me aburre. También me jode que no cometa errores teniendo en cuenta su nulo historial empresarial.

Me gustaría que mis empleados no fueran tan rectos, pero tampoco es como si les pudiera permitir hacer un relajo por toda la empresa y dejar que me traten como si fuera su amigo. Soy su jefe y deben respetarse los roles que cada quien cumple.

Es algo que debo hacer más no que deseo.

Conforme a Park Jimin.... el hecho de que sea mi secretario no me molesta del todo (cincuenta y cincuenta) lo que me molesta es que no cuide de su apariencia y pues, es mi secretario, pero la forma tan descuidada en la que anda me provoca es echarle del trabajo.

--Muy bien puedes retirarte--...--Trato de no mirarle mucho. Cuando se da la vuelta y sale de la oficina es que puedo mirar su figura. No se interesó en siquiera arreglar el pantalón que le di, es como tres tallas más grande y ni hablar de su camisa. Está abotonada hasta el cuello.--

Parece un ratón de biblioteca.

¿En qué estaba pensando exactamente cuando le di el trabajo?

Tengo que deshacerme de el lo más rápido posible.

.
.
.