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Capítulo 12: Un descanso luego de la carrera.

Unos momentos antes de que la carrera comenzará, Take explicó su plan para pasar sanos y salvos hacia el otro lado.

-Bien, había pensado que podríamos hacer una formación como si fuera una flecha.

-¿Una flecha?

Preguntaba Nirvan.

-Sí, quiero decir, sería bueno si tuviéramos una formación en la cual la punta sea como una barrera entre los primeros ataques de bestias o demás aspirantes, así mismo los lados laterales se encargarían de la defensa y contraataque después de la primer táctica; y por último estaría la colaboración y los de en medio, quienes tratarían de emplear sus ataques de Gendar en direcciones traseras y hacia arriba. ¿Y bien?

Take sonreía mientras mostraba su estrategia plasmada en el papel, sin embargo, no esperaba recibir una respuesta tan pronta.

-Yo estoy de acuerdo con su plan.

Confirmaba Rion tras la propuesta de Take.

-¿Estás seguro de eso, Rion? No creí que tú fueras el primero en aceptar el plan de Take.

Cuestionaba Hima ante la respuesta inmediata del chico.

-Sí, no siento que sea un mal plan, y a comparación de la forma en cómo hemos estado peleando desde el inicio de esta prueba, supongo que es lo más factible en cuestión de daños y evitar perder a más miembros.

-No lo digas como si esto fuera una guerra.

Suplicaba la chica rubia al escuchar esas palabras tan secas de su compañero, no obstante, la mirada de él era fría y serena, y buscaba analizar a detalle el plan propuesto.

Mientras tanto, Guno también levantó su mano para aceptar el plan de Take, seguido de Hima, quien al ver tales respuestas, no tenía nada más que perder; ya suficiente suerte había tenido con haber sido ayudada por los chicos de aquella alianza, así que ahora tenía que demostrar parte de sus habilidades como investigadora.

Luniel fue el quinto en aceptar el plan de Take, no podía dudar del plan de su amigo, sobre todo porque le había ofrecido el ser parte de la alianza mientras duraba el examen, así que se sentía en la obligación de mostrarse abierto ante cualquier alocada idea que su amigo decidiera tener. Por ende, Aslan e Isa accedieron de igual forma que más podían hacer si su jefe ya había tomado una de decisión para futuras acciones.

Nirvan dudo, y negó el seguir el plan. Algo que dejo sorprendidos a todos, sin embargo a Take le pareció emocionante el hecho de que su rival comenzará a tomar cartas en las decisiones del grupo.

-¿Podrías decirme Nirvan, porque te niegas a realizar la estrategia?

Preguntaba Take, mientras tras la observaba con una mirada de curiosidad y ante la cual se podía sentir un aura de reto.

-Claro, tengo mis motivos para pensar que esto podría ser una mala idea, en primera instancia, si una persona de adelante será nuestra primera línea de defensa y ataque, eso quiere decir que le estaríamos dejando toda la carga a uno de nosotros, así que no podemos esperanzados en una sola persona.

-Bueno, de todas formas alguien tendría que hacer ese ataque, de otra forma, los demás miembros de la formación que lleguemos a tomar, quedarían expuestos ante cualquier daño que tuvieran un recibir por parte del enemigo.

-¿Y sacrificando a alguien de nosotros será la mejor forma de evitar ese futuro?

-Si las circunstancias lo ameritan, quizá habría una oportunidad de que esa persona no tenga que sacrificarse.

-No puedo creer que hables enserió. Creí que eras del tipo de personas que no abandonaría a alguien a su suerte...

Nirvan comenzó a dudar de la táctica de Take, pero le desconcertó un poco más aquel hecho de falta de empatía por parte de su rival, sobre todo por que vivió de primera mano cómo este último daba todo de sí para salvar aunque sean los cuerpos inmóviles en aquel accidente ocurrido en la mazmorra.

Por su parte, Take contestó ante lo cuestionado por Nirvan, puesto que no quería que su plan se malinterpretara para los demás y se terminará viendo como un sacrificio por otros.

-No... en eso te equivocas Nir.

-Entonces explícate cómo quieres conseguir aquel resultado sin tener que sacrificar a las defensas de tu formación.

Nirvan esperaba que el rostro de su amigo se volviera serio al momento de dar una respuesta concreta para convencer a los otros. No obstante, una sonrisa llena de euforia fue lo que le sorprendió al observar la mirada de Take, esto acompañado de una leve risa.

-Jeje, ¿Acaso crees que sería capaz de enviar a personas a morir para cumplir mi propósito? Por qué de ser así... la respuesta es sí...

Nirvan quedo atónito ante tal respuesta, al igual que Lidney y su grupo; quienes dudaban un poco del chico, puesto que su compañera les había comentado que él era alguien sumamente agradable y amigable, pero ante su vista, este parecía ser un lunático sin frenos.

Hima y Guno también comenzaban a espantarse tras lo mencionado por Take, sin embargo, el leve toque de Rion a los hombros de ambos los tranquilizo, este toque fue acompañado de unas palabras.

-No se espanten ja, porque no lo dejan terminar.

Luniel, Aslan e Isa, se encontraban confundidos sobre qué tan malo habría sido las palabras dichas por Take; sin embargo, Luniel, al observar la tranquilidad con la que Rion esperaba el resto de la respuesta, decidió aguardar antes de sacar conclusiones.

Nirvan seguía esperando una respuesta que le saque de esa gran duda que habían dejado las palabras de su amigo, y lo que le dijo a continuación, cambió el panorama de inmediato.

-Jajaja, lo siento, creo que me exprese mal al hablar de esa forma, cuando me refería a "mandar a personas", no me refería a ustedes, si no que me refería de manera general. Además, aunque quiero cumplir mi sueño, jamás faltare a mis ideales de pelear por otros que hayan estado en mi camino como un apoyo.

Take tomo su espada y con ella destruyo la hoja donde había puesto su estrategia. A lo que de inmediato procedió a levantar las dos mitades para posteriormente, lanzar una pregunta al aire.

-Entonces, ¿Quién viene conmigo para ejecutar este plan? Jiji.

Nirvan de inmediato comprendió todo, la estrategia no había sido lanzada al azar, si no que tenía una finalidad que aquellos pintos que había marcado estuvieran de esa forma; por lo que una vez que había entendido todo aquello, comenzó a reírse hasta no parar.

-¡Jajajajaja, ahora entiendo! Eres un desgraciado Take, así que solamente te has hecho el idiota para no mostrar tu verdadero rostro jajajaja.

-¡Jajajajajaja! Al fin de diste cuenta de eso, ¿No es así?

Take también comenzó reír, a lo que de inmediato las dudas comenzaban a surgir.

-¿Por qué se están riendo de esa forma tan grotesca? Expliquen de una vez, que esto solamente nos está retrasando.

Exigía Lidney, cuyo rostro reflejaba molestia y algo de inconformidad.

-Ten, porque no le hechas un vistazo a la estrategia de Take nuevamente y ahora te fijas en los puntos, más no en la forma.

Nirvan le paso los dos pedazos de la hoja a Lidney, y quien tras analizarlo por unos instantes, pero ahora, solamente fijándose en aquellos puntos, había entendido el porqué de las risas.

La hoja que había sido rota se estaba interpretando algo mal, y es que no se trataba de una forma de ataque y defensa, sino de una forma similar a la de una trampa para osos.

El plan, si bien aún tomaba a las tres partes de la formación, la cual ya había enseñado; lo que cambiaba de forma drástica era aquellas formas en las cuales los puntos se movían. Puesto que no se trataba de una sola defensa por cada uno de ellos, si no que era un conjunto; en dicho conjunto, el primero que iba en la punta, movía sus ataques de tal manera que irían tumbo hacia los enemigos y una vez que llegarán hacia estos, en lugar de atacar directamente, se los pasaría a la siguiente vanguardia de en medio.

Una vez que la vanguardia de en medio los tuviese, estos cambiarían de lugar con la vanguardia lateral, siendo de tal forma que los turnos se rotación y los ataques y dinámicas serían más complejas y menos predecibles. Y ya habiendo acabado con el enemigo en medio de la trampa, la última vanguardia se encargaría de desecharlo y hacerlo añicos, esto aunado con el hecho de cuidar las espaldas de la formación, llevaría a que todo el plan se haga con seguridad.

-Jajaja, ahora entiendo también. Take, eres un tono, me habías preocupado por un momento al haber dicho esas palabras ¡ja ja!.

-Vamos, vamos, todo esto también fue gracias a que Rion me recordó sobre cómo actuaba el Gendar de los demás jajá.

Take contestaba de forma modesta ante los halagos de su amiga, así mismo, Rion era visto por los demás de un forma genuinamente asombrados, y de esa forma y no se les hacía tan raro que él hubiese aceptado el plan en un comienzo sin siquiera protestar.

-Vaya, así que todo ese show por el plan al final si nos funcionará. Pues bueno, será mejor que nos organicemos para el primer ataque inicial, chicos.

Comentaba Rion, mientras tomaba sus cosas y colocaba su hombre junto al de Take, quien de forma alegre iba preparando sus cosas para la pelea.

-Si los puntos ya están marcados, ¿Te parece si soy yo quien da las indicaciones?

-Adelante, por mí no hay problema jeje.

Respondía Take, ante la pregunta de Lidney, la cual, ha habiendo resultado ese revoltoso enredo, se dispuso a ayudar en lo que podía para la toma de posiciones.

-Bien, entonces el plan va así: Rion será la vanguardia principal ya que él tiene un Gendar que le permite defenderse de buena forma, así que habrá más seguridad en cuestión de movilidad. Luego en la vanguardia lateral, necesitaremos a dos francotiradores como defensa de ambos flancos; por lo tanto...

Lidney observo el plan nuevamente y encontró el nombre de Guno y Zeta. Este último era un buen francotirador, ya que incluso llevaba unos auriculares que le ayudaban a sentir la vibración de los proyectiles y le permitía localizar mucho más fácil a sus enemigos, así que solamente tenía que concentrarse en el rango en el cual se encontraba.

Lidney lo observo y comenzó a hablarle con lenguaje de señas; debido a que este último era sordo mudo, he aquí la razón del por qué debía de usar el equipo especial para la localización de posibles enemigos. Tras haberle explicado su posición dentro del plan, este ultimo levanto su pulgar dando a entender que había comprendido perfectamente su trabajo dentro de la formación.

-También requeriremos de tu ayuda Guno, así que tú cubrirás el flanco izquierdo, mientras que Zeta se encargara del derecho ¿Estás de acuerdo?

Preguntaba Lidney.

-Sí, estoy de acuerdo con ello.

Respondía de forma segura el chico; mientras que observaba como su compañero de vanguardia se acercaba a él y levantaba su puño en son de compañerismo, esto mientras le sonreía para afirmar su confianza en él y en la realización correcta de la futura formación.

Guno respondió al gesto al chocar su puño con el de él, así que tras eso ya se había comenzado a entablar una pequeña amistad entre ambos francotiradores.

Lidney entonces continuo explicando parte de la formación. Por un lado, Take, Hima, Rouge, Román y Tay, serian quienes cubrirían la vanguardia lateral derecha; por otro lado, estarían Lidney, Jay, Summer, Xiner y Grima, los cuales se encargarían de la vanguardia lateral izquierda. Para terminar, Jean, Paul y Nirvan serían los encargados de cuidar la parte interna de la trampa; esto aunado al hecho de que Aslan, Isa y Luniel cuidarán el flanco trasero de la formación, ya que como Take hizo el plan mucho antes de conocer a Luniel y a los otros dos, este tuvo que improvisar un poco con la formación final, cediéndoles los lugares de aquellos dos compañeros que aún no habían llegado.

-Bueno, si todo sale bien, estoy dispuesto a disculparme con Take por mi comportamiento de hace un momento, con una fiesta de por medio jajaja.

Reía Nirvan, mientras tomaba su posición junto a Paul y Jean, los cuales tomaban sus respectivas armas y preparaban algunos ataques antes de salir.

-Entonces estaré esperando esa disculpa una vez que terminemos con el examen, así que prepara tu billetera, ¡Por que estaré esperando una gran comida!

-Ja, pues si no hay nada más que discutir, propongo que esta fiesta comience, así que busquen sus respectivas posiciones para ponernos en marcha.


***


Y ahora volviendo al presente, nos encontramos con la formación ya hecha, y con aquel grupo de aliados listos y preparados para correr a toda velocidad rumbo hacia la meta. Fue así que esa formación paso casi una hora entera en una carrera completa; esto mientras que se enfrentaron a varias bestias en el camino, y para sorpresa de ellos, el posible ataque por parte de algún miembro del grupo de nobles no llego a suceder, parecía como si ellos se hubiesen olvidado se seguir con la cacería en contra del grupo.

La formación iba en buena forma, nada malo había ocurrido durante el transcurso; además de eso y sumados a las estrategias implementadas por Lidney y Hima, las diferentes combinaciones permitieron avanzar mucho más rápido, claro que esto era cansado y sobre todo significaría una gran pérdida de energía en cuestión del grupo, no obstante, era necesario que se mantuvieran así para llegar sanos y salvos al otro lado del bosque.

-¡Take, un grupo de abejas de la fruta van hacia tu izquierda!

Alertaba Nirvan a su amigo, el cual de inmediato fijo su mirada en aquel animal y se preparó para el ataque.

-¡Sword of the West: Sharp claw!

El ataque realizado por Take era similar al que había hecho contra el kraken durante su viaje hacia La Capital, sin embargo, ahora en lugar de ser un simple ataque de energía, eran tres cortes realizados en forma paralela.

Aquellos tres cortes cortaron a nueve de las abejas, sin embargo, aún faltaban el resto de ellas.

-¡Iluminos space!

Hima creo una gran burbuja de luz, la cual reventó al hacer contacto con los aguijones de las bestias, mismos aguijones que terminaron provocándoles una ceguera temporal debido a aquel ataque luminoso.

Román fue el siguiente en actuar por parte de la vanguardia, realizando en esta ocasión una técnica proveniente de su isla natal. El ataque consistía en este saltando por hacia las ramas de los árboles, para una vez estando ahí, lanzar un gran aliento de viento lo cual termino llevando a varias de las abejas aturdidas a una gran pared de piedra

-¡Steal earth!

Grito de manera agresiva Rouge, quien choco su escudo con el suelo mientras corría; por lo cual se provocó una gran onda sísmica que impacto de lleno contra la pared en donde se encontraban las abejas que Román había mandado allí hace un rato.

Tay por su parte lanzo un contra ataque al resto de los insectos, este contrataque fue gracias a una habilidad que tenía en conjunto con su hermano Jay. Sin embargo, planeaba usarla individualmente, ya que quería probarle a su gemelo que él era mucho más fuerte y capaz, era una típica competencia entre hermanos.

-¡Madame web six!

Una gran red salió de los dedos del chico, haciendo que este último tuviera que esquivar algunos insectos y dejárselos a sus compañeros del cuerpo.

La red contuvo a varias de las abejas, y aunque querían zafarse para ir tras ellos, les era imposible, ya que no estaba hecha de un material blando, si no que era una aleación de hierro con Slime, producto del Gendar de aquel chico.

Mientras que la vanguardia de Take defendía al grupo de las abejas, la vanguardia del cuerpo, dirigida por Nirvan era quienes veían por la seguridad central de aquella formación.

-¡Chicos, algunas abejas se nos escaparon, se los dejaremos a ustedes!

Gritaba Tay mientras corría y buscaba atrapar a más de los insectos.

-¡Ja, ya me estaba decepcionando de que ninguna amenaza viniera hacia nosotros! Vamos a mostrarles de lo que estamos hechos.

La mirada de Nirvan era parecida a la de Take, sin embargo, su aura era mucho más heroica que la de su amigo, la cual mostraba un aura eufórica y de diversión.

-¡Electric tornado!

Nivan realizo un golpe múltiple de varios ataques eléctricos hacia las abejas que iban por ellos; no obstante la potencia de todas aquellas ráfagas eléctricas que fueron lanzadas por el chico, hicieron que las abejas fueran llevadas hacia las alturas. 

Posterior a ese tornado de ráfagas eléctricas, Paul se dio cuenta de inmediato de aquella acción, y usando su daga, lanzo con tal fuerza su arma, la cual estaba sujeta a unas cadenas. El lanzamiento le dio a uno de los insectos, y tras eso uso su habilidad de Gendar para hacer que esta daga fuera tras las abejas restantes, despedazándolas de inmediato mientras aún se encontraban fuera de su rango.

-¡Multi bite!

Jean solamente observaba los asombrosos ataques de sus compañeros; pero eso no le impidió divisar un ataque que provenía de su otro flanco, el cual iba dirigido hacia los atacantes del grupo de insectos.

-¡Cuidado!

Gritaba la chica; mientras que al mismo tiempo creaba una enorme ventisca hecha con hojas, las cuales creaban una gran cortina de humo color verde, que dejaba aturdidas a las Magostas. Las magostas eran un tipo de bestia similar a las ranas toro; sin embargo, su tamaño era mucho más grande y por ende sus saltos aumentaban mucho más el rango de ataque, así mismo, sus lenguas funcionaban como goma y tenían una habilidad pegadiza que adhería cualquier cosa a sus cuerpos.

Tras esa distracción, Paul se encargó de rematarlas con el mismo ataque realizado hace unos momentos; no sin antes cerciorarse de que Jean estuviera bien. Una situación un tanto penosa para ambos tras ver como Nirvan les reclamaba por estar coqueteando mientras estaban en batalla; así que ambos dejaron de hablar y se concentraron en seguir combatiendo contra el resto de bestias.

No obstante, la vanguardia de Lidney se encontraba combatiendo contra aquellas bestias sapos. Por un lado, Lidney uso un ataque de defensa y ataque; siendo una llamara de fuego que salía con forma de alas de un pájaro, o más bien, similar a las de la majestuosa ave Fénix.

-¡Hellish wings: Shield!

Tras ese ataque por parte de Lidney, Grima se unió a aquella estrategia y procedió a girar su arma en forma de hélice, creando así una ráfaga de cristales de hielo que iban tras los sapos que habían sido bloqueados por aquel escudo incandescente.

-¡Stalactites TMW!

Aquellos proyectiles impactaron de lleno en varios de los animales que iban hacia ello; aun así, un gran grupo de estos quedaban en el aire y justo detrás de ellos, venia el que parecía ser su líder; puesto que un Gran sapo, con un cuerno como de rinoceronte en su cabeza, era el que buscaba ahora la pelea contra la alianza.

Jay, Summer y Xiner eran los que se encargarían de aquella bestia. Por un lado, Jay utilizó un ataque donde una gran ráfaga de clavos salían disparados de sus dedos, como si de bales se trataran, esto mientras se burlaba de su hermano y presumía sus dotes con el Gendar.

-Ja, puede que Tay haya fallado en la realización de su trabajo para mantener bajo control a las abejas, pero yo mostrare que puedo superar a ese torpe.

-¡Menos charla y más acción!

Le gritaba Summer, la cual cargaba con un gran báculo con una esfera naranja, ya que ella era una hechicera de primera clase, la cual apenas había terminado su primer año en su isla natal; por lo que algunos de sus ataques eran realizados de forma un poco errónea pero efectivas.

- Gran luz que da poder a los santos arcángeles e ilumina a las tinieblas, te pido que me des tu poder para poder recrear este ataque con éxito.

Murmuraba la chica, mientras tomaba su báculo y detrás de ella un grimorio naranja la iba siguiendo.

Por su parte, Xiner observaba como su compañera tardaba en recitar el conjuro, así que no se quedó con los brazos cruzados y procedió a interceder en medio del ataque para darle algo de tiempo a su amiga.

-¡Mother control: Swamp thing!

Tras lo dicho, un par de manos salieron de la tierra e iniciaron por frenar a los demás sapos; aquellos dedos comenzaban a convertirse en tentáculos e iban a por el jefe de los anfibios. Este, debido a ser un jefe y por lo tanto poseedor de una mayor experiencia, paso a esquivar una gran parte de los ataques de ese asqueroso ser pantanoso; no obstante y debido a aquella intromisión, había perdido mucho tiempo en esquivar aquellos ataques y perdió su rango de ataque.

Al mismo tiempo, Summer había terminado de realizar su hechizo especial y procedio a lanzar el ataque fulminante.

-¡Strike of nature!

Una vez que esas palabras salieron de su boca, varias de las ramas de los árboles que estaban cercanos a la bestia comenzaron a incendiarse como si de lava se tratasen; y del mismo modo que iban prendiéndose fuego, una fuerte fuerza mágica les hacía divisar al gigantesco anfibio para proceder a darle varios golpes de todas las direcciones.

Aquel ataque por parte de esos árboles parecía una de las peores torturas que se le podía hacer a un ser vivo; no obstante, era lo que debían de aceptar, ya que de no haber sido así, era demasiado probable que ellos fueran los afectados ante el posible ataque violento del jefe.

-No puedo creer lo que acabo de ver...

Comentaba Luniel, mientras observaba desde su posición el como aquel jefe era calcinado por unas simples ramas en llamas.

-No se distraiga, señor. Recuerde que estamos a la defensiva para contrarrestar cualquier amenaza trasera; así que debemos estar siempre al pendiente de cualquier posible ataque a futuro.

Le pedía Aslan a su alteza, ya que este último se mostraba emocionado ante lo visto. Sin embargo, ahora tenían cosas más importantes por las que debían verse preocupados.

-Lo siento Aslan, pero es que me sorprendió como aquella señorita pudo utilizar dos ataques diferentes, no sabía que eso era posible...

-No lo es su alteza, claro, para alguien como nosotros que somos solamente humanos normales eso sería algo inalcanzable. No obstante, aquella chica es una de la raza mágica; por lo tanto, posee atributos de doble Gendar.

-¿Doble Gendar, Isa?

-Sí, señor. Vera, los seres mágicos que viven en la isla Goundor, del archipielago magico, nacen con dos cualidades diferentes, siendo una de estas la magia misma; por otro lado, su segunda cualidad de Gendar es algo aleatorio, tal y como es nuestro caso. Aquel primer atributo les permite el conjurar diferentes hechizos con la ayuda de su grimorio, lo cual les da una gran ventaja al combinarlo con su segundo Gendar, sin embargo, también es perjudicial a futuro, y que ese uso excesivo de dos Gendars puede provocar una caída por falta de "mana".

-¿"Mana"? Discúlpenme si estoy haciendo muchas preguntas, pero es que jamás había escuchado aquellas cualidades de otras razas... la biblioteca podrá contar muchas cosas, sin embargo, en algunas cosas es muy vaga la forma en la cual tratan de solucionar ciertas dudas.

-Comprendo su majestad, y no se preocupe, para eso estamos nosotros aquí.

Luniel sonrió al escuchar tal respuesta de Isa, y se encontraba muy agradecido por el tiempo que había tomado la chica para explicarle de la forma más amable sobre aquellas características propias de la raza mágica.

-Volviendo al tema, aquella fuente de poder que les permite a esos seres mágicos el usar dos cualidades de Gendar, es el "mana", una fuente de energía que se almacena en el cuerpo de ellos y que a diferencia de nosotros, es mil veces mayor debido a le herencia directa que se dice que tienen con el Dios de la magia.

-¿Eso quiere decir que nosotros también poseemos ese mana?

-Claro, el mana es algo que se ha demostrado que existe en todos y cada uno de nosotros, no obstante, el de nosotros es demasiado débil y se requeriría de mucha practica en cuestión de la magia y hechicería para poder alcanzar el nivel de un mago, archimago o hechicero de la isla Goundor.

-Eso explica el por qué algunos de los caballeros guardianes y temerarios que he podido observar en el castillo y en la sala de prácticas se centran mucho en el uso de grimorios.

-En efecto su majestad, aquellos grimorios son lo que les permite usar al máximo su mana, y conforme ese máximo poder sea usado, les permitirá amplificar sus probabilidades de igualar el poder de un ser mágico de Goundor.

La plática de Luniel e Isa concluyo al escuchar un grito de advertencia por parte de Rion, quien se encontraba a varios metros delante de ellos, pero que sin dudas estaba emocionado por recibir a la bestia que iba a por ellos.

La bestia era similar a un babosa gigante, cuyos ojos eran mucho más horribles que los que poseían los peces y cualquier anfibio. Esta de igual forma y pese a su gran tamaño, iba a una velocidad inimaginable, por lo tanto Rion se preparaba para ejecutar su ataque principal.

Guno y Zeta vieron la situación de aquella babosa y procedieron a lanzar cada uno sus respectivos ataques para desviar la atención de aquella cosa. Por un lado, Guno disparo dos flechas, una para servir como distractor, mientras que la segunda iba hacia su ojo, con el fin de disminuir el campo de visión de aquella bestia. Mientras que por parte de Zeta, sus proyectiles eran una clase de balas especiales; ya que estas parecían estar dentro de un tubo de plastico, que al momento de ser disparadas se dividían en cinco y formaban lo que parecía ser una mano con sus dedos, las cuales al chocar con el objetivo, desprendían un aroma similar al que los zorrillos expulsaban en señal de defensa.

Ambos artilleros cumplieron con sus respectivos trabajos; lo cual le permitió a Rion concentrarse más en la ejecución del ataque. Dicho ataque era el mismo que realizó contra la flor madre de hace un rato; sin embargo, el objetivo de ahora era muy diferente al de aquellos momentos, puesto que ahora el tiempo de llegada era cada vez menos, por lo que tuvo que apresurarse para concentrar toda aquella energía y fuerza en su brazo.

Una vez que toda esa fuerza y presión había sido cargada para ser lanzada, este procedio a realizar el acto de ataque y de un momento a otro, el golpe fue ejecutado a la perfección.

-¡Todos a un lado, la babosa ira cuesta abajo, así que podría ser perjudicial si no se dan cuenta de ella!

El golpe que había sido dado a aquella criatura le había movido los órganos internos y por ende perdió la consciencia, incluso se podría decir que algunos de los miembros de la alianza sintieron pena al ver tal acto de ataque, pero como se había dicho, todo eso era necesario para que el plan saliera a la perfección.

Guno y Zeta se hicieron a un lado; mientras que Rion simplemente salto al animal, a lo cual procedio a ponerse nuevamente en posición junto con sus demás compañeros. Por su parte, tanto la vanguardia izquierda, como la central y la derecha, hicieron caso a la advertencia del joven combatiente, por lo que pudieron esquivar con éxito aquella cuesta abajo por parte de la bestia.

Una vez que ese había ocurrido, Luniel, Aslan e Isa se encargaron de hacer que el cuerpo inerte de aquella cosa sirviera como distractor ante las demás bestias, por lo que una vez que lograron esquivar aquel movimiento de la criatura, procedieron a usar sus habilidades a su favor.

Por un lado estaba Aslan, que mediante una pistola de corto alcanza, disparo un proyectil en forma de cadenas, los cuales se afianzaron a algunas partes del animal, las cuales sirvieron como soportes para que este permaneciera quieto y sea como una enorme barrera.

Una vez que esto había ocurrido, Isa fue la siguiente en realizar su parte del bloqueo, ya que implemento su Gendar de "Raíces crecientes", las cuales hicieron que las cadenas lanzadas por su hermano se adhirieran ahora a ellas, permitiendo un agarre mucho más práctico.

Luniel, desafortunadamente no pudo ayudar en esta parte de la eliminación, ya que había sido ejecutada de forma tan rápida y limpia que le fue imposible seguirles el paso a sus cuidadores; no obstante, estaba listo para enfrentar lo que viniese a futuro.


***


Pasaron unos minutos más y tras esa carrera peligrosa, pudieron divisar una figura gigante que se reflejaba debido a la luz del sol, no parecía ser una bestia, sino más bien, era muy parecido a una máquina.

-¡Miren, ¿Es esa cosa un robot?!

Preguntaba Luniel de una forma emocionada, puesto que solamente había escuchado de aquellas cosas mecanizadas por los libros que leía en la biblioteca.

-¿Un robot? ¿Acaso se puede comer?

Preguntaba Take, cuya mirada ahora estaba dirigida hacia aquel golem.

-Tú solamente piensas en comer, Take.

Reprendía Hima al comentario de Take; no obstante, eso no freno la curiosidad del chico, el cual se encontraba mucho más ansioso de saber cómo es que una armadura que pareciera ser hecha de piedras de las minas podía moverse como si nada.

-Veras Take, un robot es una máquina que sigue ciertas ordenes que le son establecidas por su creador, además de eso puede ejecutar diversas acciones según les sea dada por aquella mente que fue su creadora.

-¡Eso suena genial! Necesito si o si pelear contra esa cosa para ver qué tan fuerte soy comparado con esa máquina jajajaja.

-¡Take, espera! Demonios, creo que debí haberle dicho mejor que se trataba de comida...

Comentaba Hima tras ver cómo fue la actitud rebelde de Take ante el golem. No obstante, y para fortuna de ella, un grupo de guardias se encontraban custodiando aquella entrada que cuidaba la máquina, esto con el fin de que ella no atacase a algún aspirante por equivocación.

-¡Espera chico, no puedes atacar a esa cosa!

-¡Detente hijo, esta cosa no es un juego para que lo anden tratando como una atracción turística!

Fue entonces que el paso veloz de Take había sido frenado por las palabras de los guardias, evitando de esa forma que el chico atacase a la maquina; la cual ya estaba preparada para contrarrestar el posible acto hostil por parte del muchacho, y esto se veía reflejado en sus ojos, que pasaron de un color rojo a uno verde.

El grupo corrió de inmediato hacia Take, el cual, debido a que se echó a correr lo más rápido que podía, los había rebasado en un simple parpadeo.

Una vez que estos llegaron hacia donde se encontraba el golem y los guardias; esperaban encontrarse a Take en medio de una riña por su actitud; sin embargo, observaron una escena algo inusual, e incluso quedaron un poco confundidos al respecto.

"¡¿Qué carajos?!"

Era lo que pasaba por la mente de aquellos 18 miembros de la alianza, los cuales estaban demasiado... extrañados... la verdad que incluso la persona más accesible del mundo estaría un poco desconcertado por la escena; puesto que se trataba de Take jugando con el golem.

El juego se trataba de Take haciendo el juego de las manos con aquella máquina, la cual contribuía, puesto que había colocado sus manos en posición de defensa, lo cual hizo creer al muchacho que estaba incitándolo en ser partícipe de aquel juego infantil.

Por su parte, los guardias comenzaron a reírse al ver el acto que realizaba el chico con la máquina, e incluso el otro golem que se encontraba a unos pocos metros, coloco sus manos en aquella posición al ver que el otro también se había puesto en forma defensiva.

Lidney se acero a Take y lo observo extrañada, mientras que este seguía jugando con la máquina.

-Oye... ¿Qué estás haciendo...?

Preguntaba desconcertada, y al mismo tiempo Rion lo tomaba del cuello de su gabardina para sacarlo de aquella situación.

-Ah, ya llegaron.

Respondía de forma amable el chico, mientras trataba de soltarse de la mano de su compañero.

-Nada de "Ya llegaron", ¿Por qué te fuiste corriendo de esa forma?

Preguntaba Rion, mientras que aún lo sostenía del cuello.

-Ah, pues bueno, cuando vi al golem quería ir por él y tener un enfrentamiento, de esa forma sabría si puedo pelear contra un robot o si aún no estoy listo jeje.

-¿Es enserio, Take?

-Sí, pero al final termine haciéndome amigo de él.

Un leve suspiro por parte de la chica pelirroja hizo que el ambiente volviera a la normalidad.

-Que se le va hacer. Al menos fue bueno que no decidieras atacar a ese... "Golem"...

-Descuida jajaja, ya será para otra ocasión la pelea.

-Oye, no me provoques para que te amarre a un poste durante todo el resto del examen.

Decía la chica pelirroja con una mirada penetrante, la cual hizo que de inmediato Take bajara la cabeza y aceptara el portarse mejor para evitar alguna represaría por parte de su amiga. Ya que podemos decir que Take, pese a ser visto como alguien que no le importan las reglas y las leyes, la verdad es que se habían unas cosas a la cual le tenía cierto pavor, y es que aquellas cosas... o mejor dicho, personas, se trataban de Stef, Lidney y Hima, tres de las chicas que ha conocido en su vida, y a las cuales teme ver molestas, aunque eso no cambiaría su comportamiento de rebelde.

Una vez que ya había ocurrido aquel pensó acto con el golem, Lidney se disculpó con los guardias, los cuales y para sorpresa de la misma, no actuaron de forma déspota hacia ellos por las acciones de su compañero, todo lo contrario, ya que fueron de lo más amales ante la disculpa de la chica.

-Descuide señorita, no debe de disculparse jajaja. Además, su compañero nos dio un gran momento de alegría a nosotros, así que no hay ningún problema.

-En verdad se lo agradezco señor guardia.

-No hay nada que agradecer. Por cierto, ya que llegaron hasta aquí déjenme tomar sus nombres para anotarlos en la lista y que puedan pasar a la mansión y esperar las futuras indicaciones.

Procedieron a dar cada uno sus nombres y después de eso se dirigieron hacia la estructura que se hallaba en el centro del terreno. Al mismo tiempo que pasaban por la reja de la entrada para entrar en los terrenos, Take se despidió del golem con su mano, y para sorpresa de este, su compañero de juegos respondió de la misma forma, sin embargo, nadie había notado tal acción de la máquina.

Una vez que llegaron a la puerta principal del edificio, pudieron escuchar algunos gritos, peleas e incluso llantos por parte de los demás aspirante; dichas acciones asustaron a algunos de los chicos de la alianza, mientras que otros se encontraban desconcertado. Y sin más que poder hacer, procedieron a abrir la puerta de madera.

Ya habiendo entrado, se percataron que había muchas peleas entre miembros de diferentes alianzas, así como entre los integrantes de ellas mismas. Take fijo su mirada en una de las salas que estaba frente a ellos, pues veía como salía humo de la misma, así que decidió ir a inspeccionar, sin embargo, Lidney le detuvo para que no realizase tal acto.

Pareciera como si fuera obra del destino, pero de aquella densa nube que había observado Take, salieron disparados varios escombros, entre ellos, los de la misma puerta, y el detonante de aquella explosión, fue una riña entre miembros de dos alianzas diferentes.

Los chicos quedaron atónitos al ver que pese a las luchas que se estaban llevando dentro del lugar, ningún guardia hacia algo para pararlas, todo lo contrario, pues sus miradas estaban perdidas en el aire y no mostraban nada más que simple vista gorda.

De entre los escombros se notaba una voz conocida, la cual hizo helar la sangre de Nirvan, quien de inmediato como su espada por cualquier situación que pudiera presentarse. Aquel acto hizo que los demás se preocuparan por lo que podía ocurrir, así que algunos también habían preparado alguna acción defensiva por si el peligro los abordaba.

-¡Vaya, vaya!... ¡No esperaba que lograras pasar esa primera etapa del examen, conejo azul!

Quien decía esas palabras era Kil, aquel sujeto contra el que Nirvan se enfrentó y que esperaba no volver a ver; sin embargo, parecía que el destino tenía otros planes a futuro.


***


Mientras tanto, en una oficina del Castillo real en La Capital, una escena se suscitaba, haciendo que una secretaria que recién entrara al despacho de su jefe, quedará atónica ante lo que sus ojos divisaban

Lo que aquella señorita observaba, era a su jefe siendo amenazado por la espada del Presidente de los Caballeros; una escena que en primera instancia no podía creer, y eso que ella ya había visto pequeñas discusiones entre ambos hombres, sin embargo aquello de ese preciso momento era único y algo que jamás se le había pasado por la mente que pudiera ocurrir entre esos dos personajes célebres del mundo.

La mirada del Presidente de los caballeros era de enojo, la ira se podía observar más que nada, así como una fuerte aura de despecho y ganas de tomar la vida de alguien, aquella vida que quería tomar era la de su compañero de trabajo, el cual se encontraba delante de él y que solamente se encontraba tomando su taza de café.

-¡Miserable anciano decrepito!

Fruncía de forma molesta y lleno de ira el caballero, quien solamente permanecía con la misma postura amenazadora.

-¡No puedo creer que tu hayas hecho eso por ese niño! ¡¿Sabes lo que podría ocurrir si algo le llegase a pasar a él?!

Maxwell simplemente tomaba su taza de lo más tranquilo, pese a tener una espada apuntando a su yugula; sin embargo, le importo más ver a su secretaria frente a la puerta, así que decidió comenzar a hablar.

-Espera un momento hombre, harás que Sandra se preocupe de más sha sha.

-Señor... ¿Quiere que llame a alguien?...

Preguntaba la joven dama, sin embargo el miedo la carcomía, pues no sabía cómo podría reaccionar el hombre de la armadura ante un posible llamado a otros aventureros.

-No, no, solamente déjanos a William y a mi, solos. ¿Por qué no te tomas el día, hija?

-Pero señor...

-Tómalo como un regalo de mi parte ¡Sha sha!

La chica dudaba en salir del lugar, no sabía que podría ocurrir una vez que esta se fuera del lugar. Aquella preocupación fue vista por el hombre que sostenía la espada, así que para no preocupar a otra persona, simplemente se limitó a guardar su arma.

-Descuida... no le haré daño a este viejo decrepito, así que puedes irte sin el temor de que le corte la cabeza.

-Quiere ver que lo intentes, ¡sha sha sha sha!

Reía el viejo ante la forma en que su compañero de rango guardaba su arma. No obstante, este lo volteo a ver de manera amenazadora, sin embargo, aquello no paro las risas de aquel sujeto, pues simplemente las ignoraba.

Una vez que la secretaria veía que todo podría estar bien, decidió tomar la palabra de su jefe y tomarse el día libre para realizar sus cosas personales; no obstante, le dijo a su superior que podía llamarla en caso de que requiera la realización de alguna otra actividad aunque este fuera de servicio. El presidente agradeció por la oferta, sin embargo, denegó que requeriría de la ayuda de aquella joven.

Y ahora sin que nadie pudiera ver como el conflicto se desarrollaba, William aporreo la mesa del anciano y con su mirada aun llena de ira le hizo una pregunta.

-¡¿Por qué dejaste que Luniel tomara el examen de aventureros, infeliz?!

Maxwell simplemente se levantó de su lugar y con una sonrisa en su rostro contesto a la pregunta realizada por el otro sujeto.

-Solamente lo hice para el futuro, sha sha sha sha...

Esa risa hizo que William se enfureciera mucho más, sobre todo por el simple hecho de que la persona con la cual buscaba entablar una conversación seria, parecía más un niño que un hombre de rango alto.

Por su parte Maxwell volvió a tomar asiento, pero esta vez, le pidió a William que se sentase, sin embargo, la mirada de Max era seria y ya no seguía riéndose. Tras ese cambio repentino de actitud, el caballero decidió ceder ante lo solicitado por su compañero de trabajo.

¿Qué tan buenos serían los argumentos para justificar las acciones realizadas por el viejo? 


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