¿Qué es la vida?

--de Patricio Aguilar--

“¿Qué es la Vida?

La vida es

una gota de rocío

al amanecer;

que se desvanece

en el cielo

al mediodía.

Cae en lluvia

al atardecer;

para fundirse

con el mar

al anochecer”.

Esa voz también la reconocía por lo menos daba gracias a que no era Ray si no que en cambio era....

- No-Norman?! - exclama la rubia dandose la vuelta topándose con aquel chico albino quien le estaba lanzando una mirada de "te atrape, a hora estas en problemas" eso era lo que sonaba en la preocupada cabeza de la rubia quien tragaba pesado tratando de no verse como una cría asustada forzando una sonrisa - hehe que haces aquí? -

- Te estábamos buscando - suelta el albino cruzado de brazos de forma autoritaria ante la menor.

- Oh vi-vienes con Ray? - pregunta en un tono nervioso.

- Y con Emma -

- Hola Anna - habla la pelinaranja quien venía con el azabache aun sosteniendo el libro que Anna había dejado en la mesa.

- Emma tu también?! - exclama sorprendida la ojiazul quien no noto la presencia de Emma.

- Shhhh - suelta la encargada para que los chicos no hagan ruido después de todo estaban en una biblioteca.

- Le parece bien si hablamos afuera? - sugiere el azabache quien se acerca a la anciana - me llevaré este libro prestado -

- Claro jovencito, venga conmigo para que le de la fecha la cual tiene que regresar el libro - dice la anciana amablemente a lo cual Ray hace caso, mientras que Norman saca a las chicas del local y esperan a Ray afuera.

Ya estando ahí los tres se quedaron parados ahí fuera del local aun que Norman y Anna se estaban dando cuenta que la gente que pasaba junto a ellos se les quedaban viendo raro, eso ya era algo común que la gente se le hacía raro y extraño ver a niños y jóvenes con dígitos en alguna parte de su cuerpo, aun así no estaban acostumbrados, se les hacia grosero y discriminatorio para los niños ganado que los miraran así como si de criaturas raras se trataban, eso le molestaba a Norman y a Anna le incomodaba, Emma no tenia problema pues ya no tenía su número aun así se daba cuenta tarde pero eso no quitaba el hecho de que le desagradaba y disgustaba que les miraran así a su familia.

- Anna cubre bien tu cuello - dice Norman en tono serió.

- Si... - responde la rubia en voz baja cubriendo su cuello con su bufanda.

Luego de un rato Ray salió del lugar dirigiéndose a sus hermanos.

- Por que tardaste tanto? - aventura el albino.

- Lo siento me tome la molestia de traerles algo - responde sacando de una bolsa un libro para dárselo a Emma - toma Emma esto es para ti y para Phil -

Emma toma el libro que era uno de cuentos infantiles, una sonrisa salio de los lindos labios de la pelinaranja pues le gustaba la idea de leer el libro con Phil y tal vez con los demás niños, su mirada esmeralda se dirigió al emo frente a ella - gracias Ray -

- Y que nada para mi? - dice Norman en un tono de burla pero algo celoso.

- Tranquilo, obvió también traje algo para ti - el azabache saca de la bolsa un bonito llavero de búho y se lo da a Norman - vi los ojos saltones que tenía y me acorde de ti -

- Ja ja que gracioso, pero aun así gracias, veré en donde lo pongo - le responde con un tono divertido, tomando el regalo de Ray que admite si le gusto y le tendría mucho cuidado.

- También traje algo para Anna - Ray se acerca a la rubia quien reacciona ante el acercamiento de él mirándolo confundida, de la bolsa saca un bonito bolígrafo azul rey adornado con una estrella de cristal siendo esta la tapa del bolígrafo que se veía muy bonita, los ojos de Anna se abrieron por tal regalo tan lindo que le acaba de dar ese chico que hace unos momento no quería ver, pero a hora su rostro comenzó a teñirse de un leve rubor rojizo acompañada por una sonrisa.

- Gracias.... - agradece Anna tomando el bolígrafo en sus pequeñas manos, en esos momentos quería abrazar a Ray pero trataba de contenerse, pero algo que no se esperaba era que ese chico le plantara un pequeño beso en la frente haciendo que su rubor se expandiera por toda su cara, Ray al verla le dieron ganas de reír pero mejor se contuvo aun así se le llegó a escapar una que otra risita.

Emma y Norman viendo aquella escena también se les llegaron a escapar unas risitas viendo la tierna pero a la vez graciosa interacción de esos dos.

- Es mejor que nos vallamos o Gilda nos regañara si llegamos tarde para comer - sugiere Ray, pues no quiere que su día tranquilo se arruine por los incesantes gritos de mamá de aquella chica con lentes.

- Tienes razón, vámonos - apoya el albino a las palabras de Ray, púes tampoco quería ser regañado por Gilda, este es seguido por Emma quien camina a su lado y atrás de ellos están Ray y Anna quienes solo guardan silenció entre ambos hasta que este es roto por unas palabras del azabache dirigidos a la rubia.

- Por cierto ese bolígrafo te lo compre para que sigas escribiendo tus poemas -

Se escuchó un clic en la cabeza de Anna ante esa oración que no se esperaba, "Como demonios se entero de mi pasatiempo secreto?" se preguntaba en su cabeza, sin poder evitarlo miro con sorpresa al chico a su lado con una mirada suplicante de "no le digas a nadie por favor" el cuál logro captar Ray, coloco su mano en la cabeza de la rubia para calmarla acariciando esta con cariño -tranquila no le diré a nadie, con una sola condición -

- Cual? - aventura nerviosa.

- Que hablemos a solas después de comer en mi habitación - suelta el chico de forma tranquila.

- Eh? T-tu habitación? - pregunta aun con mas nervios que antes - a solas tu y yo? -

- Si, descuida sólo vamos a hablar - comenta en un tono de burla, Ray no se esperaría que dentro de esa mente tan angelical que tenia la menor se le fuera a pasar pensamientos impuros que no son propios de ellas.

Anna capto la indirecta burlona de Ray y es que si era una chica inocente pero no tanto y entendía ciertas cosas de adultos, pero si de algo esta segura es que jamas en su vida dejaría que su mente se ensuciarán de cosas pervertidas así que vuelve a su semblante de chica dulce y amable, y solo se imagina una conversación incómoda con el mayor con respecto a su actitud de ayer y hoy en la mañana, solo le quedaba prepararse mentalmente para aquello.

Mundo de los Demonios

Mujika decidida en ir con aquel supuesto Dios que tenían su gente es acompañada por Sung-joo hasta los Siete Muros y tal como dijo la pequeña demonio ella sabia la forma de llegar hasta halla, debido a la información que le saco al azabache antes de marcharse y no tuvieron muchos problemas, incluso Sung-joo se dijo mentalmente "bastante fácil no se por que a ese par de niños se les hizo complicado" teniendo en su rostro un semblante de orgullo por su capacidad de llegar a aquel lugar, luego de un rato de recorrido llegaron a aquel lugar donde estaba exactamente ahí un Demonio pequeño flotando en la casi nada.

- Los estaba esperando - dice el pequeño Dios.

- En cerio? - aventura Mujika curiosamente acercándose a él seguida de su compañero quien no se apartaba ni un segundo de ella.

- Tenía el presentimiento de que tal vez ibas a venir hasta aquí, aun que no pensé que sería con compañía - dirige su mirar al Demonio grande pelirrojo - pero no importa, a que se debe su visita su majestad -

- Mmm? Emmm vengó a preguntar por algo importante para mi -
Responde en un tono insegura.

- Adelanté, pregunta lo que guste -

- Bueno......verá es sobre.....la promesa que rehizo con una niña llamada Emma......lo que quiero saber.....es..... -

Sung-joo solo se limita a observar las acciones y palabras salidas de la boca de su amiga, admite que se siente preocupado por ella y que no esta seguro si seguir con esta situación, pero prefiere no decirle nada y espera a que lo que le de como respuesta ese Dios no sea grave, por que aun que también debe de admitir es que se siente preocupado por esa niña ganado quien se gano su amistad a pesar de todo.

- Es.....pues....quiero saber que le pidió a cambió de rehacer la promesa? - suelta Mujika juntando sus manos como si tratara de rezar para que lo que le diga el demonio no sea lo que ella teme.

- Aquella niña, de cabellos naranja atardecer, semblante determinada y valiente, ojos esmeralda y una mirada decidida a dar lo todo por aquellos que mas ama, lo que le pedí a cambio, con tal de que su gente viviera en paz en el Mundo Humano fueron sus recuerdos, su vida no le podía pedir, menos quedarse aquí para siempre ya que su promesa involucraba a todos los humanos y ella siendo un humano tenía que estar en ese "todos" así que lo que hice fue quitarles sus recuerdos de aquellos momentos que paso con su amada familia y amigos, y que al momento de llegar al Mundo Humano ella jamas llegue a ver los de nuevo, quedarse sola sin una vida pasada la cual recuerde ese fue el preció que tubo que pagar por el bien de aquellos humanos ganado -

Mujika quedo estática, no sabía si sentirse aliviada o destrozada el hecho de saber que su querida amiga estaba con vida era reconfortante para ella pero el saber que aquella niña tan radiante de felicidad esta en el Mundo Humano probablemente sola, sin saber nada, confundida y asustada, completamente pérdida sin saber que hacer, lo podría tomar como un castigó peor que la muerte con tal de darles felicidad a los demás a coste de la suya, y que también su familia este sufriendo desesperados por buscarla sin éxito alguno, ni una sola pista de su hermana, su imaginación no paraba de darles imágenes tristes y dolorosas.

- Mujika - le habla el demonio pelirrojo a su amiga quien no mostraba movimiento alguno, estaba preocupado por ella, se coloco en frente de su persona sacudiéndola ligeramente mirándola en su rostro todo shokeado siguiendo llamándola.

- Esto.....esto es mi culpa.... - suelta al fin una palabra la demonio con ganas de llorar.

- Esto no es tu culpa, la chica tomo su decisión -

- PERO A CAMBIO DE QUE?! ELLA ENTREGO SU FELICIDAD POR LOS NIÑOS!! ESO NO ME PARECE JUSTO.......ella es mi amiga....no, es como una hermana para mi al igual que los demás pequeños de Graces Field, ellos son lo único a lo cual conocí como una verdadera familia para mí.....de a ver sabido esto no le hubiera contando sobre los Siente Muros, hubiera preferido que yo..... -

En eso la demonio cambio su semblante como si se le estuviera viniendo algo a su mente, una idea a la cual Sung-joo le provoca preocuparse mas y a la vez tener curiosidad sobre lo que planteaba, a lo cual pensaba "esto no sera bueno".

- Sung-joo -

- Mujika lo que vallas a hacer, dudo que - en eso su compañera se aparta de él acercándose al pequeño Demonio - disculpa....crees que tenga la oportunidad de cambiar la promesa? -

- Mmm....cambiar la promesa? -

- Si, yo me ofrezco a dar cualquier cosa con tal de cambiar la promesa que Emma hizo -

- Cualquier cosa eh? Bueno de todos modos tu pequeña humana rompió una parte del trato que hice con ella, planteaba castigarla a ella y a su familia por eso de alguna forma, pero viendo esta situación puedo hacer otra cosa, durante el tiempo que llevo aquí me e sentido algo aburrido me vendría bien algo de entretenimiento sabes -

- Entonces.... -

- Dejare que cambies la promesa de los niños ganado y los demonios pero a cambio deseo dos cosas una por parte tuyo y otra por parte de no de tu amiga si no de toda su familia y ella incluido -

- Bien, que quieres de mí? -

El pequeño Demonio le hace una señal con su dedo para que se acerque a él y le susurré sin que el compañero de Mujika escuche, diciéndole lo que le tiene que dar a cambio, en eso Mujika mira a su amigo y le da una sonrisa queriendo decirle que no tenía de que preocuparse pero eso no le convence del todo a Sung-joo.

- Hecho, y en cuanto a mis niños? -

- De parte de ellos solo quiero que me entretengan con lo que hagan, Demonio de la sangre maldita para que pueda cumplir con rehacer la promesa tienes que tomar en cuenta dos cosas, la primera para que pueda devolverle los recuerdos a esa niña y traer de regreso aquí a esos niños me tendría que ver obligado a retroceder el tiempo, llendo en contra de las leyes del espacio y tiempo en una determinada época antes de mi trato con tu amiga y lo segundo si hago esto tu tendrás que hacerte cargo de cambiar los acontecimientos que ocurrieron antes para que pueda cumplir la promesa -

- Bien estoy lista, yo me haré cargo -

- De acuerdo, solo necesitó saber hasta donde quieres que retroceda el tiempo -

- Mujika - le habla su compañero acercándose a ella - estas segura de esto? Si lo haces y se entera Emma o los niños sobre lo que hiciste -

- Disculpe cuando retroceda el tiempo los niños recordaran lo que pasaron antes? -

- Te puedo asegurar que sus memorias serán borradas, no recordaran nada solo tu y tu compañero serán los únicos con recuerdos sobre la línea de tiempo original, dependerá de ustedes que es lo que harán para cambiar las cosas -

- Estaremos bien compañero, deja me esto a mí - habla confiada y determinada Mujika.

Sung-joo no tuvo de otra que unirse le en su loco plan a su querida amiga, no pensaba dejarle toda la carga a ella aun pensando que esto les traería consecuencias mas adelante junto con los demás niños, pero no la podía convencer, aveces esa pequeña e indefensa pero linda Demonio podía ser una terca por completo cuando se lo propondría, un gran dolor de cabeza para él pero no tenía de otra que seguirla a donde quiere que valla, y en lo mas profundo de su ser le decía una voz curiosa "esto podría llegar a ser divertido" como si lo animara a jugar con la historia reseteada de eso niños como si se tratara de un juego, podía sonar algo mal pero quería divertirse un poco con la nueva promesa impuesta y cambiada de Mujika.

El Demonio pelirrojo soltó un suspiró derrotado ya decidido a unirse a su amiga - no es necesario pequeña, yo te ayudare en esto -

- De verdad Sung-joo? - aventuró con curiosidad.

- Claro, viéndolo desde otra perspectiva esto podría ser entretenido para mi -

- Esto no es un juego querido amigo, pero me alegra ver que estas conmigo -

- Entonces esta decidido? Cambiaras la promesa de aquella humana su majestad? - pregunta el Dios Demonio.

- Si - responde decidida Mujika.

- Entonces empecemos, a que año quieres retroceda majestad? -

De vuelta al Mundo Humano

Ya era la hora de la comida de la gran familia de nuestra antena disfrutando un gran banquete preparado y dirigido por Ray que era un maestro en la cocina, durante la cena los niños no solo se limitaban a degustar de la comida también integraban sus charlas y risas que se contagiaba por todo el lugar y por todos los individuos, menos una que era Anna quien fingía estar de buen humor pero en el fondo se sentía estresada y nerviosa por lo que le dijo el azabache, trataba de que no se notara enfrente de quienes estaban junto a ella comiendo siendo siempre Gilda y Nat, aveces la vista azulada de la chica se dirigía a esos tres chicos a quienes tanto admiraba, no negara que en el fondo ella quería formar parte de su "grupo" estar con ellos hablando y riendo pero no estaba a su nivel, se sentía inútil así que mejor prefirió dejar de ver a ese trió y se limito a comer aun que no tenía tanta hambre.

Al terminar Anna se fue a su habitación para en cerrarse y estar sola o eso pensaba hasta que el sonido de su puerta tocando le recordó que tenía una "cita" con aquel azabache, estaba en un dilema mental en si abrir o no la puerta, lo pensó por 1 minuto hasta que por fin abrió su puerta pero no se encontró con ese pirómano si no con su amigo pelirrojo.

- Nat? Que se te ofrece? - pregunta en un tono amable y una sonrisa fingida.

- Vine a preguntarte si te gustaría venir con Gilda, Don y conmigo a dar un paseó, Gilda pensó que como te la pasas estudiando todo el tiempo te haría bien tomar algo de aire fresco -

«Ufff que alivió por un momento pensé que era Ray, no es que me desilusione pero a hora prefieron ver a Nat que a ese chico.»

- Salir con ustedes? -

- Si Anna, sera divertido, entonces que dices? -

- Pues....si - antes de que contestara la rubia a la petición de su amigo de cabellos rojos estos fueron interrumpidos por la llegada del azabache.

- Lo siento Nat, Anna y yo quedamos de leer un libro interesante que vimos en la biblioteca del pueblo, verdad Anna? - comenta Ray mirando fijamente a Anna quien se puso nerviosa y roja.

- Oh en cerio Anna? Por que no me dijiste que tenias planes con Ray? - le reclama el pelirrojo.

- Y-yo eh.....se....se me paso? - se excusa la chica.

«Por que a mi?!»

- Bueno no importa hermanita, es bueno que pases tiempo con alguien mas que no seamos solo Gilda o yo - felicita Nat feliz por su mejor amiga - entonces los dejo, le dire a Gilda y Don que estas ocupada, nos vemos Ray te la encargó y que se diviertan -

- Claro Nat, nos vemos - se despide del pelirrojo viéndolo irse ya dejándolo solo con Anna - puedo entrar? -

- Eh claro....Ray adelante - se hace a un lado la rubia para darle paso al chico, este entra a la habitación seguido de ella quien cierra su puerta tomando una bocanada de aire para calmarse y sentirse lista para hablar con Ray esta vez esperando a que no vuelva a armar una discusión con él.