
22.
La comida fue bastante agradable para las dos partes. Nayeon no dejaba de mirar la sonrisa tímida que soltaba Mina al ver a Chaeyoung y como Lisa acariciaba el cabello de Rosé con delicadeza, como si fuera una muñeca de porcelana.
Jeongyeon le pasaba la comida y las cosas para acompañar, pero no se atrevía a tocarla, ni siquiera de mirarla. Nayeon suspiró molesta por lo que se levantó, sorprendiendo a las dos parejas y a su acompañante.
- Ven Jeongyeon.- La coreana de cabello azul mordió el trozo de pan en sus manos y se limpio la boca para salir. Mina miró confundida a Nayeon, quien solo desvío la mirada, la japonesa sonrió coqueta y probó la comida sin dejar de ver a su mejor amiga.
Nayeon y Jeongyeon salieron a un callejón al lado del restaurante. La joven Im, impaciente, acorraló a Jeongyeon a la pared y la miró molesta.
- ¿No te apetezco sexualmente?.- Jeongyeon se sorprendió y sonrojo al instante, sin embargo Nayeon no la dejó decir nada.- ¿No te gustaría tenerme en tu cama? ¿Por qué no coquetas? Sería una oportunidad de oro para ti...
Jeongyeon tragó saliva y recordó el plan que ideó con Bambam.
"Rómpele el corazón a Im Nayeon"
Pero la mafiosa no podía hacer eso, ahora menos que comenzaba a ver a Nayeon con ojos distintos. Lentamente, quitó la mano de Nayeon de sus brazos y suspiró.
- no soy así, Nay.- Jeongyeon miró los ojos de Nayeon, lo que hizo temblar a la joven Im de arriba a abajo.- Yo no me voy a acostar contigo solo porque me pareces sensual, quiero tomarme mi tiempo.
- No te comprendo, en serio.- Jeongyeon soltó una pequeña risa y besó la frente de Nayeon.
- Entremos, no lo comprenderás.- Jeongyeon comenzó a caminar sin darse cuenta el rostro rojo que dejó en Im.
[°]
Mina miraba como Chaeyoung hablaba de sus obras con su madre quien, aunque tenía a su novia al lado, le daba la mayor atención que cualquiera le pudiera dar a alguien.
No quitó la vista cuando alguien tocó su hombro, ya que seguía en su burbuja mirando a Chaeyoung, pero cuando el toque se volvió insistente, se volteó para mandar a la mierda a la persona que molestara.
Grande fue su sorpresa cuando Wonho, su amigo, la miraba sonriendo.
- Hola Mina, pasé un tiempo de vacaciones en Corea.- Mina sonrió levemente.
-Oh, así que tú eres Wonho ¿Verdad?.- Chaeyoung miraba con una sonrisa al extranjero que alzó su ceja confundido.
- ¿Y tú eres...?
- Son Chaeyoung, la novia y futura madre de los hijos de Mina.- Chaeyoung sonrió con inocencia, pero Mina la miraba con vergüenza y un enorme rubor en su rostro.
- Ella es mi novia, te platiqué cuando hicimos esa... Videollamada.- Dicha videollamada que desató una noche de sexo sin frenesí entre Chaeyoung y ella.
- Disculpe joven, pero esta mesa está reservada solo para la familia Son.- Lisa actuó lo más cordial que podía, no le gustó para nada que un niño cualquiera fastidiara su momento de reconciliación.
- Lo lamento.- Wonho hizo una reverencia y se fue, dejando a una Mina curiosa.
Wonho no era de viajar ¿Para qué habría venido?
Todos sus pensamientos se esfumaron cuando Chaeyoung tocó su muslo disimuladamente. Su pequeña estaba celosa y eso solo significaba una cosa.
Sexo.
[°]
La tarde se había pasado volando, Jeongyeon y Nayeon fueron a otro lugar a pasar tiempo juntas mientras que Lisa y Rosé se quedaron en el restaurante por la gran demanda de clientes.
Chaeyoung y Mina regresaban a su departamento. La japonesa podía sentir la mirada de Chaeyoung en ella y no sabía que hacer pese a querer lo mismo que su novia.
- ¿Sabes? Ese tal Wonho, no me cae bien.- Los celos de Chaeyoung siempre eran bastante notorios pero Son sabía como esperar su oportunidad de decirlo.
- Es solo un amigo, lo sabes.- Mina sonrió al ver como Chaeyoung remojaba sus labios con enojo.
- Pues ese idiota te mira como si estuvieras soltera, sino se controla entonces voy a romperle la cara.- Mina rió levemente y abrazó a Chaeyoung.
- Aún si él fuera el último hombre en este mundo, te buscaría a ti Chaeng. Te amo mucho.- Ambas se besaron tiernamente. Mina abrió el departamento y sintió las manos de Chaeyoung en su abdomen, haciéndola gemir.
La coreana comenzó dejando besos suaves en el cuello blanquecino de su novia. Como pudo, Mina pateó la puerta para cerrarla.
- E-Espera Chaeng, deja que ponga agua para poder tomar después...- Chaeyoung siguió con las caricias, comenzando a desvestir a su novia con cuidado.- Chaeng...
- Me encanta que seas mi novia, solo mía.- La coreana quitó su camisa y besó a Mina con deseo. La japonesa no dejó pasar la oportunidad y abrazó con fuerza el cuerpo de Chaeyoung.
"A la mierda el té".- Pensó Mina.
La japonesa empujó a Chaeyoung hacia el sillón, donde comenzó a bailar sensualmente frente a su hipnotizada novia. Sus caderas eran seguidas por los ojos de Chaeyoung como dos imanes.
- No me gusta que me dominen.- Susurró Mina, pegando sus labios en el cuello de Chaeyoung que comenzó a soltar leves jadeos.- Me encanta tenerte abajo mío, porque tú eres mía Son Chaeyoung... Solo mía.
Mina besó salvajemente a Chaeyoung que, como pudo, siguió el beso acariciando el trasero de la japonesa que tanto le encantaba.
Mina recorrió el cuerpo de Chaeyoung con besos, hasta que vio el enorme problema en los pantalones ajustados de Chaeyoung.
El cierre duró menos que la ropa de Mina dentro del departamento. La japonesa miraba el grueso falo de la mafiosa y saborea a sus labios con deseo.
Una lamida hizo que Chaeyoung apretara el tapiz del sillón, Mina comenzó a saborear el pene de Son como si fuera un enorme caramelo de Navidad.
Su lengua recorría todo el largo, haciendo caricias a los testículo con sus manos. Chaeyoung mordía sus labios y soltaba jadeos excitantes, que hacían a Mina moverse y lamer más rápido.
- Eso es... Mina Agh... Disfruta de tu postre.- La japonesa sacó el miembro de su boca y se sentó en la ingle de Chaeyoung, moviendo sus caderas lentamente.
La coreana soltó un jadeo con una sonrisa tenue.- Dios... Nunca te cansas de jugar con mi gran polla ¿Verdad?
- Nunca lo haré, así que más te vale que no te canses ahora. Mínimo tendrás que durar unas 5 rondas seguidas, sino voy a masturbarte y te volveré a montar.
Mina sacó el condón de su cartera pequeña y Chaeyoung cerró los ojos al escuchar como rasgaba el paquete.
[°]
La noche era un lugar perfecto para hacer fiestas o cenas románticas y eso lo sabía Jeongyeon. Por eso llevaba a Nayeon a un parque cercano a su casa.
- Nay, no te duermas o tendré que abrazarte mientras conduzco.- Nayeon cabeceaba lo que preocupó a Jeongyeon que como pudo, agarró la cintura de Nayeon y estaciono un poco lejos del destino.- Caminemos desde aquí... No creo que podamos seguir el motocicleta.
Nayeon asintió y comenzó a caminar con Jeongyeon, que la ocultaba del frío de la noche con su chamarra.
- ¿Sabes Nay? Tenía que enamorarte y romperte el corazón, así serías un blanco fácil y podríamos extorsionar a tu padre pero... Me terminé enamorando de una chica de sonrisa de conejo.- Nayeon no sabía si era el frío o la confesión, pero las mejillas de Yoo estaban teñidas de rojo pálido.- Sé que no soy lo mejor que puedes pedir, eres una sociedad completamente diferente a mi pero aún así quiero estar contigo.- Jeongyeon tomó la mano de la joven Im y la besó.- No quiero que respondas ahora, pero ten presente mis pensamientos.
- Jeongyeon yo...
- Si solo me vas a rechazar, no digas nada.- Nayeon mordió sus labios y Jeongyeon suspiró.- Te voy a enamorar Nayeon, caerás rendida a mi y estarás tan loca por mi como lo estoy yo por ti, lo prometo.
Nayeon sonrió y besó la mejilla de la mafiosa, que se exhalto y retrocedió un poco.
- Entonces te esperaré. Veamos si puedes enamorarme, Yoo Jeongyeon o debería decir Jeong...- Yoo sonrió y acarició la mano de Nayeon con sus dedos.
-Dime como quieras Nay, igual yo te cree un apodo y nunca me dijiste nada acerca de él.- Im solo rió y abrazó a Jeongyeon.
- Está haciendo frío, vayamos a tu casa Jeong.- Yoo se tensó pero al sentir los leves tirones de Nayeon, accedió sin chistar.
La noche era milagrosa y Jeongyeon lo confirmaba.
No puedo escribir más, la vacuna me dejó sin mano izquierda. 😭
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