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Quiero hablar contigo

Había pasado un mes desde que les dirigí una palabra a las tres personas las cuales confiaba plenamente. Estábamos en época de parciales difíciles, además de que empezó el mes de agosto.

Mi rutina era levantarme, bañarme, desayunar, ir a la universidad con Dahyun, Momo y su grupo, dormir la siesta y trabajar. En ningún momento me paré a pesar si estaba en lo correcto hablarles a esos tres, esas mismas personas que me mintieron en la cara y jugaron con mi inocencia.

También me hice muy amiga de BamBam, es un chico muy inteligente y siempre me saca risas en momentos donde estaba triste. Obviamente que siempre estaba con Dahyun y el grupo de Momo pero en algunos casos iba y hablaba con BamBam.

Hablando de Dahyun... ella ya ha confesado sus sentimientos y ahora tiene novia. Sí, me había pedido consejos (al igual que la tonta de Momo) y esas cosas para no estar nerviosa al intento, cosa que fue difícil pero al fin y al cabo ahora es felíz junto a Momo. Y admito, ellas hacen una bonita pareja y ver a mi Dubu felíz es como despertar y que haya sol todas las mañanas. Realmente me alegro por la parejita oficial, lo que si me molesta es que se besen y se hagan cariños frente a mí, asi que con una sonrisa las separaba y Dahyun me retaba por ser mala persona.

Fue una semana divertida entre amigos, olvidandome de todo lo malo que pasó. Porque sí, siempre me ponía triste cada vez que pensaba en las mentiras que Chaeyoung me decía o en las cosas que mis dos hermanos me ocultaban, se suponía que teníamos suficiente confianza para contarnos mutuamente las cosas. Sin olvidarme de Yugyeom, él me llamaba todos los días para ver como me encontraba y de vez en cuando salíamos a tomar café juntos, charlar de nuestras cosas y desahogarnos, porque a este paso nos confiabamos en ambos lo suficiente. Y sí, Yug (como quiere que lo llame) era un lobo, pero no me dijo más que eso ya que si hablaba de más iba a ser "asesinado" por la estúpida de Chaeyoung, quien supuestamente es la que me tiene que contar las cosas que estuvieron pasando.

Y hablando sobre cosas... esa chica es una maldita insistente. En las dos semanas que quise tener paz y tranquilidad se posaba en mi ventana, pero claro, sin decirle una palabra la empujaba, cerraba la ventana y luego la cortina. Y por si acaso la puerta de mi habitación, ahora que Solar también me insiste en contarme tengo que estar preparada.

Siempre decía "Lo hacemos por tu bien". ¿Qué hacen por mi bien? Me dañan, eso es lo que hacen.

Ahora estaba haciendo este maldito parcial y no podía concentrarme.¿Qué era una sinapsis? Oh, mecanismo de comunicación entre dos o más neuronas... creo.

Al terminar el parcial había tocado la campana y me fui rápido a la cafetería, allí me estaban esperando mi nuevo grupo de amigos.

- Hola chicos -Me senté al lado de Irene y Tae. Todos me saludaron amablemente.

- ¿Vieron que salió una nueva película? Creo que se llamaba lobos en el espacio o algo así.-Dijo Hoseok.

- No estúpido era espacio para lobos -Corrigió Momo mientras todos soltamos una carcajada- Y sí, es bastante nueva.

- ¿Les parece ir a verla el próximo fin de semana? -Ofreció Irene- Sería una buena salida, y luego podemos ir a tomar un par de tragos si quieren.

- Oh oh yo quiero eso -Dijo Tae emocionado- ¿Qué opinan princesas? -Nos observó a mi y a Dahyun.

- Yo digo que sería una buena idea, la cosa es que tenemos trabajo y no podemos faltar porque nos despediran.-Hablé con firmeza- Y Dahyun tiene que tener su propio dinero porque vive conmigo y yo sola no puedo mantener.

- Sip, Minari tiene razón. Aunque... la salida si podría hacerse, lo que no es lo siguiente, en eso no podemos asistir.

- ¿Entonces el sábado les parece? -Ofreció Momo- Yo les invito las palomitas a ambas. -Besó la mejilla de Rosé y esta se sonrojo.

Todos hicieron una mueca de asco mientras Irene hizo una mueca tierna.

- ¿Ven con lo que tengo que lidiar todos los días? -Dije mientras les daba una mirada y se estaban besando, ¡maldita sea que rápido van!.

- Mis mayores pésames Mina. -Dijeron Tae y Hoseok al mismo tiempo.

- ¿Podrían parar de compartir saliva? Quiero comer -Dije comiendo mi pollo frito, pero como no paraban las ignoré- Bueno hagan lo que quieran. -Irene rió y me abrazó por el hombro- El amor sin duda apesta.

- Ya encontrarás el amor Mina, verás que es muuuy lindo. -Suspiró enamorada, me dije mentalmente que ella ya tenía novia-

- Lo dice porque ayer tuvo sexo con Seulgi.-Dijo Jihyo muy obvia, Irene le dió una mirada fulminante y le sonrió en tono de disculpa- Aunque te digo que el amor si es muy lindo, cuando encuentres tu pareja ideal dirás lo contrario.

- Yo creo que la encontró, -Comenzó Dahyun- todos los días viene una chica de cabello castaño a tocar la puerta de su casa y Mina como tonta le cierra la puerta en la cara, es muy bonita pero no más que Momo.

- Esa no es mi pareja, es una chica molesta que conocí hace dos meses. ¿Y además por qué siempre dices lo mismo? -Dije enojada recordando a la mentirosa de Chaeyoung pidiéndome y rogandome mi perdón porque no podía vivir sin mi- La odio.

- Pero como dice el dicho, los que se pelean se aman~ -Canturrearon todos y yo solo pude contestar con una risa.

- Los odio. -Una sonrisa se plasmó en mis labios mientras negaba divertida, sin duda amaba demasiado a estos chicos-El tiempo pasó volando y yo ya me encontraba en mi casa, lista para dormir una hermosa siesta hasta la hora de trabajar. 

Últimamente empecé a tomarle cariño a mi trabajo, primero porque no veía a nadie que me pueda arruinar el día y segundo porque de alguna manera alejaba mis malos pensamientos sobre tales personas.Miraba el blanco techo sin ganas de dormir y eso me extrañaba mucho ya que soy una persona que ama la siesta y sin ella no se que haría. Decidí abrir la ventana para que entre el aire porque aquí hacia bastante calor, ¿o era solo yo?Me levanté para agarrar mis auriculares que estaban en mi escritorio pero al ver una persona sentada en mi cama tiré todo lo que tenía en mis manos a la mierda.¡MI CELULAR!

- ¡Maldita sea! -Lo agarré del piso para ver si tenía algún rasguño, gracias a Dios que no, y lo besé muchas veces porque si rompía mi hermoso celular estaba en el infierno.

- Desearía ser ese celular en estos momentos. -Dijo aquella persona mientras se miraba las uñas un poco diva- Buenas tardes princesa.

- Sal de mi cuarto -Dije sin más, no la quería ni ver en figuritas.

- No -Dijo seria al igual que yo.

- Sal de mi cuarto, ahora -Repetí entre dientes.

- Nop -Sonrió divertida, no se por que pero extrañaba su sonrisa, oh no ya voy a empezar.

- Voy a seguir repitiendo lo mismo hasta que salgas de mi cuarto.

- Y mi respuesta va a ser la misma hasta que hablemos pacíficamente.- Solté un grito frustrante y la miré desafiante. Ella seguía teniendo esa sonrisa ladina que me ponía nerviosa. Y tampoco tenía la fuerza para sacarla de mi habitación a menos que le de lo que quiere, maldita sea.- Solo quiero hablar princesa -Se acercó a mi pero a medida que lo hacia yo me alejaba.

- Yo no quiero hablar contigo Chaeyoung, no se cuando lo entenderás de una vez por todas.

- Piensas que soy una mentirosa, te entiendo, ¡pero lo hice por tu bien!.

- ¡Ay no! ¿Tu también con eso? -Dije cansada y enojada de eso, ahora todo el mundo usa esa puta frase como excusa- Estoy harta Chaeyoung, ¡harta de esa maldita frase!

- Si tú lo entendieras...

- ¿Entender qué? ¿que todo el mundo me oculta cosas y me mienten en la cara? Me tienen cansada Chaeyoung, tú y mis hermanos. Se creen que soy una persona que no puede entender este tipo de cosas, creen que soy la débil entre ustedes y no puedo manejarlo por mi misma.Mis ojos de un momento a otro comenzaron a picar y sentía como las lágrimas caían poco a poco.- Y para colmo tú vienes y me mientes en la cara. Una cosa es que me mientas y luego me lo digas, pero enterarse la mentira por medio de otros y que nunca me hayas dicho que me mentiste duele, duele como aguja al ojo Chaeyoung...

- Yo... -Suspiró un poco ¿triste? ¿apenada?- No sabía que lo veías de esa forma princesa...

- Creí que confiabas en mí Chaeyoung. Lo creí...

Y aquí estaba yo, llorando por una persona.Que estúpida me he de ver frente a ella. Pero es la verdad, y desearía que todo esto nunca hubiera pasado. Odiaba sentirme asi tan... traicionada.

Se acercaba a mí con paso lento. Sus manos se posaron en ambas de mis mejillas. Y no pude hacer nada más que observar sus hermosos ojos azules grisáceos, porque sí, siempre me perdía en aquellas dos órbitas universales, donde se ven millones de sentimientos ocultos.

Secaba mis lágrimas con ambos pulgares y yo solo la observaba, ¿por qué estaba haciendo eso? ¿por qué era buena en estos momentos conmigo?Sus labios se posaron en los míos, no podía hacer más nada que moverlos a su mismo ritmo. Entonces le correspondí el beso, donde allí habían un montón de sentimientos mezclados entre nosotras. No quería besarla porque aún seguía enojada con ella, pero tampoco podía odiarla toda la vida, no lo resistiria ni un segundo más.

El beso pasó de algo tranquilo a algo necesitado. Nuestras lenguas se encontraron mientras la mía luchaba para tomar el control, cosa que fallé porque no tenía fuerzas para seguir la batalla.

- Te lo voy a explicar princesa, pero no quiero que te enojes conmigo porque te mentí. -Dijo mientras apoyaba su frente en la mía- Sé que lo que hice estaba mal y te lastimó mucho. Todo lo que tu sientes yo también lo siento Mina, y no creo que sepas de todo lo que me arrepiento de haber dicho esa estúpida mentira, yo de verdad lo hago...

- Quiero no enojarme contigo pero simplemente no puedo, lo que esta roto seguirá estandolo Chaeyoung. -Me solté de su agarre- Perdí toda la confianza que tenía hacia tí.

- Entonces voy a hacer que la recuperes -Habló decidida...ese tono no me gusta para nada.

- ¿Ah si? ¿Cómo? -Dije riendo sarcástica.

- Así.

De pronto sentí unos brazos en mi cadera y me alzó hacia ella por el hombro. Comencé a gritar y patalear cuando estaba por irse de mi cuarto desde la ventana pero me era imposible salir ya que ella tenía más fuerza que yo. Al fin y al cabo el cansancio me superó y me dejé llevar por ella.

Estaba saliendo del pueblo, caminaba y caminaba sin importar cuantas personas la vieran mientras yo... los saludaba con una hermosa sonrisa y que no se preocupen por mí.

Estaba yendo por el bosque, queria saber a donde mierda me estaba llevando (¿quizá a una casa antigua para violarme?), comenzaba a asustarme ya que no conocía esta parte del bosque. Bueno, tampoco es que me sepa de memoria todo bosque, solo que conozco algunas partes de este.

- ¿Chaeyoung a donde me estás llevando? -Pregunté suspirando cansada.

- Ya verás. -Acarició mi trasero y luego le dió un manotazo, di un pequeño grito porque eso dolió, ¡maldita!- Que lindo culo que tienes princesa.

- Cuando me bajes de aquí te voy a dejar sin descendencia.

- Quiero verte golpearme linda.

¿Me estaba retando?

- ¿Qué clase de masoquista eres? -Quise no reirme pero la situación me estaba llevando por mal camino.

- ¿Si sabes que masoquismo se define como 'placer o excitación por el dolor' cuando hay actos sexuales? -Carcajeó. No pensaba que masoquista era a la hora del sexo.... yo pensaba que era cuando te gustaba que te peguen- A mi me gusta ese concepto, claro, cuando se lo aplico a alguien.

Eso no me lo esperaba...

- Eres una enferma y estás loca.

"Si, por tí."

- Puede que loca si pero enferma no, hace años que no me divierto de esa forma.-Detuve mi respiración asombrada, ¿hace años que no tenía masoquismo o que lo aplicaba?- No me refiero a practicar el masoquismo. Lo decía porque hace años que no tengo relaciones asi que estoy un poco oxidada en el tema.

- Leíste mi mente, eso es poder divino.

- No, lo deduje porque detuviste tu respiración.

Dí un gran suspiro, ya no teníamos tema que conversar. Tampoco iba a empezar uno porque aún seguía enojada con ella aunque se haya disculpado, bueno, no iba a estar enojada con ella toda la vida asi que alguna vez tendré que olvidar el pequeño inconveniente.

Observaba mi alrededor desde atrás. Esta parte del bosque era desconocida para mi y se me hacía muy linda, era muy diferente a la que conozco habitualmente.Los árboles tenían más vegetación al igual que los arbustos, ya no estaban cubiertos por nieve o escarcha, eso era lindo supongo. Escuchaba a los pájaros cantar y volar por todos lados, mientras que aquí no había algún otro animal más que ciervos y ardillas.

- Y... llegamos.Me bajó suavemente y observé el lugar cuidadosamente.¿Era una simple casa?Yo pensaba que cuando me tocaba era algo asi como un sentimiento temporal, pero no fue asi cuando su mano se entrelazó con la mía. Mis mejillas comenzaron a arder y los molestos monos bailarines volvieron a mí.

Observé el oscuro y espacioso lugar, se veía un poco abandonado, allí en algunos lados habían telarañas y se podía ver el polvo. ¿Donde mierda esto?

- Bienvenida a mi humilde morada -Me sonrió como bienvenida y fruncí el ceño extrañada.

- ¿Esta es tu casa? -Volví a observar el lugar un poco asqueada- Chaeyoung esto es un chiquero.

- Tal vez está un poco sucio y polvoriento pero sigue siendo una casa. Y ahora te preguntarás por que te traje aquí, bueno... yo quería mostrarte unas cosas.

- ¿No me ibas a traer para "recuperar mi confianza"? -Solté sarcástica. A la vez que solté su mano.

- Obvio que sí, pero también te voy a contar toda la verdad de mi familia.

- ¿Desde hace cuando estás en esta casa? -Dije mientras paseaba observando los cuadros y fotos de Chaeyoung-En un estante había una foto de ella junto a dos chicos sonrientes y dos adultos atrás de ellos. Me supongo que eran sus padres y sus hermanos, o quiero creerlo.

- No vengo muchas veces aquí, solo cuando tengo la necesidad. -Sentía su mirada penetrante hacia mí pero la ignoré por completo- ¿Qué tanto le ves a esa foto?

- Que linda familia tienes -Giré sobre mis talones y le dediqué una media sonrisa.

- ¡Oh! Espera un segundo. -Se marchó rápidamente a una habitación y volvió con dos fotos en mano- Ven princesa quiero mostrarte algo.

Nos sentamos en el sillón (este si estaba impecable) y me mostró dos fotos.

Una de ellas era un poco vieja, pero se veía perfectamente quienes estaban. Habían muchas personas, desde pequeños a ancianos.

- Esta era toda mi manada. Los de la izquierda eran mis tios y mis primos, mientras que mi familia está de este lado.-Señaló- Como puedes ver aquí esta Yugyeom versión adolescente.

- Es muy adorable -Mordí el labio de la ternura, ¡tenía los cachetitos gorditos! ¿cómo no resistirse a eso?- Y me imagino que este chico es tu primo.

- No, de hecho Minseok es mi hermano, un chico encantador. -Miró con ternura- Al igual que Yug en esos tiempos, ahora es un bueno para nada con actitudes molestas.

Cuando terminé de ver por completo la foto me mostró la otra. Era su familia junta a un hombre que al verlo más de cerca de me hacia muy familiar, no solo por su rostro sino por la forma en que esta parado.

- Este es Michael. -Señaló- Él era un gran amigo de papá, de esos que ya no hay.

Michael, mi padre se llamaba Michael... No, solo es una coincidencia que se llame así y que se parezca mucho a él. Por lo que se, él murió hace unos cuantos años por lo que es imposible que haya existido en esa época.

No voy a darle más vueltas a la situación, él no es mi padre, solo es un hombre que tiene el mismo nombre y por casualidad de la vida se llame Michael como él.

- Y... ¿Qué le pasó a tu familia? -Pregunté para desviar el tema, no iba a cavar en profundidad por solo una coincidencia.

Suspiró pesadamente y observó la foto con tristeza. Siento pena por ella, sería horrible perder a los seres que más amas y quedarte sola en este mundo. Yo perdí a lo que más quería en este mundo, el hombre que me enseñó a ser quien soy hoy mismo y del cual no me arrepiento.

- Todo empezó en una noche helada donde estaba pronosticado lluvia, -Comenzó a decir mirando a un punto fijo- toda mi familia, mi novia y yo estábamos en esta casa celebrando mi tricentésimo cumpleaños, luces por aquí, música por allí, todo lo que había en una fiesta normal. Esa noche era una de las mejores que estaba teniendo en mi vida, porque la vida de un lobo no es fácil y más si eres "la leyenda".-Siguió mirando el mismo punto fijo- Había estado bailando un poco con mi novia, quería divertirme con ella también y no dejarla allí para que se aburra. Ella... ella se comportaba muy extraña esa noche, estaba algo así como nerviosa pero lo entendía porque era la primera vez que iba a una fiesta de este tipo. Las horas pasaron hasta llegar a la media noche y estaba peor, ahora se encontraba inquieta y quería irse de la fiesta. No sabía el porqué pero acepté llevarla a su casa, Yugyeom me había acompañado porque no quería que le haga un rasguño al auto. Entonces cuando regresamos.... -Tragó forzosamente y sus ojos comenzaron a cristalizarse. Tomé su mano y con mi pulgar acaricié el dorso para que se relaje- ya no había más música ni luces, todo estaba oscuro. Nosotros nos preguntamos donde estaba nuestra familia y que pasó con la fiesta. Cuando decidimos entrar había manchas de sangre por todos lados, empecé a preocuparme por ellos. Traté de olfatear la sangre de ellos hasta un poco lejos de bosque, -A medida que iba hablando su voz se quebraba, mientras que mis lágrimas no iban a tardar en salir- corrimos lo que pudimos pero al llegar... allí estaban, todos y cada uno de ellos degollados. Mis padres, mi hermano mayor, mis tios, mis abuelos, mi prima...Algo que me pareció raro es que mi hermano mayor no estaba...Quise creer que era una pesadilla, pero no fue así cuando la ví a ella. Mi propia novia me había traicionado y había llevado a mi familia a la muerte. -Sus lágrimas caían como cascadas, me daba mucha tristeza verla tan destrozada- Ambos atacamos a aquellos lobos, pero yo quería matarla a ella, y en un abrir y cerrar de ojos su alfa nos ganó porque era un lobo fuerte, de allí nos fuimos muy heridos. Cada uno tomamos caminos distintos. Me sentía tan destrozada en ese entonces, porque no tenía a alguien a mi lado, ya no más. Los años pasaron y cada vez me fortalecia más, mataba a cada quien que se encuentre en mi camino y lo usaba de cena. Para ese entonces los cazadores de lobos ya existían, uno de ellos me hirió mientras caminaba por las rutas. Traté de correr hasta llegar a un lugar a salvo, una niña me encontró y con su hermano me curaron en el patio de su casa. Nunca les dió miedo que yo sea un lobo gigante que tranquilamente los pueda devorar. Y sentía que estaba en deuda con aquella niña que me trató como si fuera una persona, le dije que era un lobo gigante y ella prometió guardar el secreto, como amigas. Como ella salvó mi vida, yo le entregué la mía pero se negó y dijo que un día me pediría el favor...

No sabía que ella había vivido esta trágica historia. Ahora me sentía tan triste por haberla odiado, porque ella estaba sola en este mundo y confiaba en mí para contarme todo, pero yo creyendo que me había mentido cuando todo este tiempo lo estuvo ocultando porque es doloroso para ella. No podía evitar sentirme culpable cuando ella quería estar conmigo y yo lo eche todo a perder con mi absurdo enojo.

¿Por qué soy tan estúpida?

Con todas mis fuerzas la abracé. Me sentía una persona horrible por hacerle eso mientras sufría, cuando solo quería tener una amiga para pasar el tiempo. Mis lágrimas seguían cayendo, ella correspondió mi abrazo y estuvimos así por un tiempo.

Soy una mierda de persona.

- Lo siento mucho Chae. -Intenté no quebrarme al hablar pero me era imposible.

- No tienes que disculparte, son cosas que pasan.-Me observó con una bella sonrisa en sus labios- No me gusta verte llorar princesa.

- Es que Chaeyoung... me siento culpable por todo esto. Pensaba que me habías mentido, pero todo este tiempo lo ocultabas porque era doloroso. Todo este tiempo quisiste una amiga para no estar sola, mientras que yo lo arruiné con mi torpeza y estupidez. Perdóname por favor.

- No te sientas culpable linda, entiendo lo que es que te mientan en la cara. Pero ya pasó, no se puede hacer nada para revertirlo.-Limpió mis lágrimas con su pulgar- Sé que estabas molesta porque te mentí, lo siento mucho por eso Mina, pero era algo...doloroso hablarlo con alguien cercano a mí.

- Perdón Chae, de verdad no puedo dejar decirlo porque me siento mal... perdón perdón perdón soy una persona muy idiota.Quería volver a llorar, pero ella me lo impidió besando mis labios. Lentamente comencé a mover los mios y dejarme llevar por el hermoso sabor de los suyos.

El beso se tornó más apasionado y suavemente se colocó encima mío tratando de que no me aplaste con su peso. Nuestras lenguas se encontraron en una batalla por el mando, la cual ganó ella. De a poco fue bajando sus manos hasta mi muslo, acariciandolo lentamente por encima de mis jeans como si fuera un tesoro muy preciado.

Su lengua recorrió todo mi labio, yendo cada vez hacia abajo para buscar a mi cuello. Allí lamió de arriba hacia abajo una vez que levanté mi cabeza para darle espacio, dejando algunos chupones y mordidas fuertes me provocaron varios gemidos roncos, me encantaba sentir esta sensación.

- Mmm... Chaeyoung... ¿n-no crees que vamos muy rápido? -Intenté decir entre gemidos mientras su mano se colaba por debajo de mi blusa y acariciaba mi estómago.

- Yo creo que vamos perfecto princesa -Susurró a mi oído para luego lamer el lóbulo de la oreja, haciendo que suelte un gemido ronco- Mmmm música para mis oídos.

Pero de pronto Jennie dejó de besarme. Frunció su ceño y me observó de una forma extraña, la miré de la misma forma. ¿Por qué se detuvo?

- ¿Que pasa Chae? -Me tapó la boca con su mano-¡Mmmbvnvnnjjhmdjgggmnn! 

¡Claramente dije que me saque la mano de la boca!

- Hay personas aquí.-Habló a lo bajo y me destapó la boca- Mina debes irte ya mismo.

- ¿Qué? -Esta vez empecé a escuchar las voces, no estaban tan lejos para que pueda oirlas- ¿Jen por qué quieres que me vaya? -La miré preocupada, no estaba entendiendo nada de lo que pasaba.

- No lo se, no puedo reconocer muy bien su aroma pero se me hace familiar.

Se acercó a la ventana que estaba en la puerta, pude ver que cerraba sus puños con mucha fuerza hasta que sus nudillos quedasen blancos, su mandíbula se tensaba lentamente y fruncía su ceño.

Ella estaba furiosa.

Se acercó a mí y me tomo del brazo rápidamente, me arrastró por toda la sala hasta llegar a la cocina y me señaló una puerta.

- Mina sal por allí y ve a casa de Solar o a la tuya. Cuando llegues a alguna de esas dos, asegurate de bañarte bien.

- ¿Chaeyoung que esta pasando? -Tomé su brazo y la obligue a que me mire.

- Luego te diré pero ahora debes correr a casa.-Mientras hablaba me empujaba hacia la puerta- Te veo luego en cualquiera de las dos.

Sin pensarlo salí de allí, pero no sabía que estaba pasando. 

La curiosidad es una debilidad para mí, necesitaba saber en este instante que mierda estaba pasando aquí. Caminé hacia la entrada y me asomé sobre la madera para ver de quien se trataba.

Dos figuras estaban de espaldas, una color pelinaranja y la otra rubia que se me hacían muy familiares. Una de ellas de agarraba la cadera y la otra estaba cruzada de brazos.

- Juro que escuche gemidos extraños por aquí -Dijo una voz super conocida... era la voz de Irene... ¿que mierda hacia en este lugar?

- Te juro que yo también lo escuche, hasta puedo oler su aroma.

¿Oler? ¿Aroma? ¿De qué estan hablando?

La madera estaba mojada, por lo que se me dificultó un poco mantenerme estable y me caí, captando la atención de ambas quienes ahora me miraban sorprendidas.

Maldita sea son Irene y Momo.

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