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ꕤ「capitulo 1O」


Ambos estaban sentados en una mesa muy alejada de todos, con una vista preciosa, ya que esa noche la luna brillaba.

Cabe recalcar que Jungkook pagaba un poco más de dinero en aquel restaurante cinco estrellas para mantener en secreto su cita con su ministro y que ni una palabra salga de aquél restaurante.

— Buenas noches, ¿Qué van a pedir?. — Un mesero se acercó a ellos para llevar sus pedidos mirando de más a Taehyung.

El mencionado seguía viendo la carta, pues la variedad de comida era sorprendente, no sabía qué escoger exactamente.

— Oye.— Jungkook chasqueó los dedos.— ¿Me vas a tomar el pedido o no?, deja de mirarlo. — Espetó con molestia llamando la atención de Taehyung y de aquél mesero.

— S-Si, perdón, ¿Qué va a ordenar señor?. — Cuestionó nervioso mientras el pelinegro lo fulminaba con la mirada.

— Brochetas de carne con papas fritas, ensalada y un vino dulce. — Dijo exaltando al mesero pues su voz había sonado un poco grave.— ¿Y tú qué vas a querer cari- Taehyung?. — Se corrigió a tiempo y le habló de manera suave.

— Bueno, mmmm, pollo frito con papas fritas bañadas en queso, una ensalada arcoiris y de postre quiero un pedazo de pastel de tres leches, eso es todo, no tengo tanta hambre. — Dijo sonriendo inocentemente haciendo que el mesero suelte una risita totalmente enternecido por él menor.

Jungkook lo miró de nuevo y el chico puso su rostro serio, hizo una reverencia y se fue.

— Parece que le agradaste mucho al mesero, un poco más y se te tira encima. — Se quejó el mayor.

— No exageres, sólo estaba siendo cortés Koo. — Aseguró sonriendo pues sabía que el mayor se había puesto celoso.

— Cortés, ajá, cortés mis pe-

— Jeon Jungkook, estamos en un restaurante, no en un puesto de hamburguesas en carretilla, comportate. — Exigió el castaño mirándolo seriamente.

— Pero cariño....— Hizo un puchero lastimero.

— Cariño nada, comportate, el mesero sólo fue amable, es todo. — Dijo seriamente pero por dentro en realidad se estaba matando de la risa.

El mayor sólo suspiro y asintió resignado, después de un par de minutos el mismo mesero se acercó a la pareja trayendo la comida qué habían pedido, sólo que en el pedido de Taehyung venía algo más qué él claramente no pidió.

Jungkook se percató de eso y abrío sus ojos de par en par mirando esa caja de cartón tamaño mediano para después mirar fijamente a Taehyung.

“¡¿Es qué no lo vez!?, ¡Te dió un postre gratis!.”, la cara del pelinegro era todo un poema.

Taehyung le dió una mirada de advertencia, “Callate”.

Y siguieron mirándose fijamente como si hablaran mentalmente.

— Es cortesía de la casa, es un pastel mediano de tres leches. — Habló el mesero con una sonrisa de suficiencia.

— Gracias, qué amables. — Respondío él castaño con una pequeña sonrisa.

— Usted es el amable aquí por dejarnos ver su hermosa belleza, provecho, me retiro, linda noche. — Se despidió para después marcharse.

— Imbe-

— Jungkook, ¿No puedes comportarte?, parece que estuviera saliendo con un niño de cinco años al cual le han robado un dulce.

— Me lo quieren robar....— Murmuró por lo bajo pero un poco audible para el menor.

— ¿Qué dijiste?. — Arqueó una ceja.

— Nada, dije que mejor empezemos a comer. — Jungkook empezó a comer mientras pensaba en cómo sería la forma más sutil para hacer que despidan a ese estúpido mesero.

— Tienes razón, mejor comamos. — Respondió suavizando su voz.

Tres horas después ambos salieron del restaurante casi rodando, Jungkook abrió la puerta de su auto para que Taehyung entrase en él y así lo hizo el menor.

— ¿Mi casa o tu departamento?. — Preguntó el mayor un poco resentido por lo anterior con aquél mesero.

— Mi departamento. — El castaño sabía que el mayor estaba un poco molesto o bueno, mucho quizás.

Admitía que aveces le gustaba ver ese lado posesivo y infantil del mayor, pero esta vez se le salió de las manos, él no esperaba el pastel de cortesía ni los cumplidos, sólo esperaba una que otra sonrisilla y nada más, pues eso es lo más común, pero al parecer el mesero tenía otros planes.

Ahora, ¿Qué debía hacer?, tenía que contentar al mayor, Jungkook era muy difícil de contentar cuando algo lo hizo enfadar.

¿Taehyung en qué te has metido?, no sabes lo qué te espera.

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