Camino
Kamal ayudó a Derek a sentarse sobre la camilla y ordenó a Yannick a que busque a alguien que pueda atender a Derek.
—Lo que puedes hacer ahora que estás sentado es quitarte el traje—le dijo Arlet a Derek.
—Eso se escuchó muy mal, es entendible, pero se escuchó mal—dijo Kamal avergonzado.
—Lo siento Kam.
Derek se retiró el traje y se quejó un poco del dolor que aún sentía. En ese mismo instante llegó Yannick con una joven enferma de rasgos latinos al igual que Derek.
—Hola Derek—la saludo amablemente la joven.
—Hola Verónica—le respondió Derek aún adolorido.
—¿Qué pasó ahora? Usualmente el que siempre viene aquí para que lo atiendan es Elm.
—Tuvo un mal día—dijo Arlet quien estaba parada al lado de la camilla en la que estaba Derek.
Verónica empezó a revisar a Derek detenidamente mientras tomaba algunos apuntes en una tableta electrónica. Comenzó a tocar diferentes partes del cuerpo de Derek y notó que cerca a sus costillas este empezó a hacer gestos de dolor.
—¿Qué sientes? —preguntó Verónica.
—Como si estuviera estocándome algo—le respondió Derek.
—¿Es un dolor controlable o lo sientes muy fuerte?
—Es controlable.
—Por un momento pensé que podían ser las costillas.
—¿Se pondrá bien? —preguntó preocupada Arlet.
—Por supuesto, además Derek siempre se recupera rápido.
—Genética—dijo Derek.
—Te voy a recetar estos fármacos, si tienes suerte no tendrán misiones en los próximos tres días—dijo Verónica. —Eso si te lo encargó a ti Arlet, cuídalo estos tres días para que pueda recuperarse.
—Lo tendré bien vigilado—respondió Arlet mirando a Derek con una sonrisa en el rostro.
—En estos días evita hacer mucho esfuerzo físico: ejercicios, cargar paquetes pesados, quizás la actividad sexual también tendrá que esperar.
—Por suerte no tienes pareja, ¿verdad? —dijo Kamal burlándose de la situación.
—Alguien tendrá que responder eso por mí—le respondió Derek.
—Muchas gracias Verónica—dijo Arlet satisfecha con la atención otorgada.
—Cuando quieran chicos, siempre es un placer ayudarlos—le respondió la joven para posteriormente salir del pequeño consultorio.
—Gracias también ustedes chicos—le dijo Derek a Kamal y a Yannick.
—Como sea, solo ten cuidado—le respondió Kamal dándose la vuelta y dejando solo a Yannick.
El joven lo vio marcharse y regresó la mirada hacia la pareja, sonrió y movió la mano derecha en señal de despedida para después salir corriendo con dirección hacia Kamal.
—¿Seguirás el consejo de la abstinencia sexual? —le preguntó Derek a Arlet algo preocupado.
—Todo sea porque estés mejor—le respondió Arlet con una sonrisa.
Ambos terminaron su conversación con un beso muy largo y al terminar ambos se rieron de los nervios.
En la base de "Agros", Xia estaba en la oficina oculta tratando de sacar más datos sobre Capricornio. Los datos más relevantes habían sido expuestos, pero era esencial dar con la joven para poder llevar a cabo el plan de "Wolf".
Xia se había desvelado varias noches para obtener toda la información posible y, cada vez que sentía que estaba cerca, algo fallaba y debía empezar todo de nuevo. Xia ya estaba estresada y muy cansada, pero algo dentro de ella la hacía pensar que estaba haciendo lo correcto. Tomó un descanso al ponerse las manos en el rostro y echarse para atrás mientras gritaba de la desesperación. Golpeó el escritorio con fuerza y fue entonces que una pila de carpetas cayó al suelo. Muy furiosa se levantó de la silla y comenzó a levantar los folios. En ese instante, notó que una de las carpetas había caído mal y todo su contenido estaba en todo el suelo. Lo recogió todo, lo revisó todo y descubrió un factor importante que podría ser fundamental. Había un patrón entre las coordenadas que se veían en las cámaras de seguridad. Xia continuó desencriptando más archivos y notó una similitud con algunos datos, al juntar todo se formaba una nueva coordenada que al rastrearlo dio un establecimiento de comida rápida en una calle transitada y suele ser muy recurrida. Xia estaba confundida, no era posible que Vatra haya realizado sus experimentos en un lugar así. En ese momento, "Wolf" irrumpió en la oficina para comprobar el progreso de Xia y fue tal su sorpresa al ver los papeles por el suelo y a Xia sentada frente al computador totalmente desesperada.
—Más te vale que tengas una buena razón para este desastre Xia—le dijo "Wolf" con ceño fruncido.
—Lo siento señor, pero creo que descubrí algo.
—Espero sea importante.
—No sé si lo sea, ese es el problema.
—¿Qué ocurre?
—Estos archivos tienen ciertos datos similares con estos documentos, todos los datos son sobre las cámaras de seguridad. Tenía claro que la joven se encontraba en California, pero al revisar los archivos note que existía un patrón entre los documentos de esta carpeta y este archivo encriptado. Cuando lo uní todo se formó una nueva coordenada y cuando la rastreé me llevó a este establecimiento de comida rápida en esta calle totalmente transitada y a la vista de todos.
—Vatra solía ser extraño en ocasiones, pero esto es diferente a todos los aspectos.
—¿Cree que sea posible que Vatra haya hecho sus experimentos en este lugar?
—Definitivamente no, pero algo más debe haber ahí.
—¿Qué hará?
—Tú vendrás conmigo, mañana temprano partimos hacía California.
"Wolf" salió de la oficina sin decir más nada, dejando a Xia totalmente confundida y muy emocionada al mismo tiempo.
Al día siguiente por la mañana en la Universidad de los muchachos, Liv se encontraba en clase muy concentrada tomando apuntes a lo que dictaba su profesor. En ese instante, Price se acercó cuidadosamente procurando no hacer ruido para desconcentrar a Liv.
—Oye Liv—le susurró Price al oído.
—Un segundo—le respondió Liv levantando su dedo índice de la mano izquierda.
Liv siguió escribiendo y mantenía su concentración en la clase; sin embargo, iba contando en voz baja y, cuando llegó al número treinta, se escuchó la campana que anunciaba el fin de la clase.
—¿Qué demonios? —dijo Price muy sorprendido.
—¿Qué ocurre? —le preguntó Liv mientras recogía sus cosas de su pupitre y las guardaba en su mochila.
—Necesito un consejo.
—Te escucho.
Los pasos de cada uno eran muy rápidos. Liv quería llegar a su casillero lo antes posible y Price no quería perderla de vista.
—Conocí a alguien y no sé como iniciar una conversación con ella sin que me tiemblen las rodillas.
—¿Price conoció a una chica y quiere algo con ella? Cuanto has cambiado.
—Por favor, estoy muy nervioso.
—¿Cómo es ella?
—Pues... Se podría decir que... No sé cómo explicarte.
—Por Dios Price, ¿crees qué no he notado lo que pasa entre tú y mi hermana?
—¡Hazel! Por favor, ella es la última en la que pensaría, no siento nada por ella—respondió Price muy rápido, su habla iba a la velocidad de un guepardo y su rostro se torno de un rojo intenso.
—Tal parece que no necesitas estar cerca de ella para que tus rodillas tiemblen, solo con hablar de ella basta.
—No puede ser, lo siento Liv.
—¿Por qué te disculpas?
—Sé que es tu hermana y no sé como tomes esto que te cuento.
—Oye, sé muy bien como eres, sé lo que hacías con las chicas y la fama que tenías. Pero, si te fijaste en mi hermana, tu actitud cambió para solo buscar algo con ella y encima fue ella quien logró eso, no podría estar más feliz de ayudarte con ello.
—¿Lo dices en serio?
—Claro que sí idiota, eres mi amigo y nos damos la mano en estas situaciones.
—No me lo puedo creer, gracias—Price se abalanzó sobre Liv y le dio un fuerte abrazo. Liv se quedó inmóvil sin saber que hacer y algo avergonzada.
—De acuerdo fue suficiente.
—Lo siento.
En otra parte del país, "Wolf" y Xia ya estaban de camino a Los Ángeles con las expectativas por los aires. Para evitar levantar sospechas, Xia sugirió que el viaje debía realizarse por carretera. "Wolf" se encargó del auto en el que irían y Xia fue manejando mientras trataba de mantener la calma. El silencio era de ultratumba, nadie decía absolutamente nada. "Wolf" estaba demasiado concentrado en la misión como para hablar y Xia tenía miedo de dirigirle la palabra a su jefe.
—Señor—dijo Xia en voz baja y muy tímida.
—¿Qué quieres? —preguntó "Wolf" de mala gana.
—Lo siento, ya no lo molesto.
—Ya arruinaste mi concentración, di que ocurre.
—Solo tenía curiosidad de saber como es que usted llegó al mandato de todo "Agros".
—Eso no es asunto tuyo.
—Tiene razón, lo lamento.
"Wolf" volteó a ver a la avergonzada joven que iba manejando con la vista puesta en el camino y con un nudo en la garganta.
—Fui escalando, llegué como todos y fui escalando hasta llegar aquí—le respondió "Wolf".
—Debió haber sido muy complicado teniendo en cuenta la naturaleza de "Agros".
—Fue cuestión de acostumbrarme.
—¿Recuerda quién era el líder antes de usted?
—Yo siempre fui el líder.
—Entonces no fue escalando, solo tomó el control y listo.
—¿Qué fue eso?
—Lo siento señor, trató de comprender y de conocerlo un poco.
—Deja de hacer eso entonces, ¿qué me dices tú?
—Sinceramente no recuerdo nada de mi vida antes de "Agros".
—¿Nada?
—Quizás fui una chica normal, puede ser que estudiará algo o tal vez trabajaba, probablemente tenía un novio, no lo sé.
—Ordinario.
—No me importa, lo más probable es que a nadie le importaba porque jamás vinieron a buscarme. No debí ser muy unida a mi familia y tampoco debí tener muchos amigos. La única familia que tengo está en "Agros", es todo lo que conozco.
—Que bueno que sepas el lugar al que perteneces.
—Gracias señor.
—¿Cuánto tiempo tardaremos en llegar?
—Llegaremos mañana al anochecer.
—Podríamos hacer una parada en unas horas para descansar.
—No tengo problema con manejar sin descanso señor.
—Pero yo sí, cuando te diga que te detengas para descansar, lo harás.
—Como lo ordene.
"Wolf" estaba a horas de poder conseguir otra pista más sobre la ubicación de Elise o, directamente, encontrarla por fin. Las ideas de "Wolf" en base a Capricornio eran muy claras, era su llave para acabar con ese equipo estúpido que puso de cabeza todo lo que él conocía. Estaba decidido a hacerlo pagar por los daños que causaron y Capricornio se haría cargo de ello.
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