Liv y Derek llegaron juntos a la base para encontrar a un Price diferente. Era tanto el cambio que cuando lo vieron, estaba cantando y bailando. Ninguno de los dos tenía idea de quien podría ser el artista que tanto emocionaba a Price. Cantaba entre dientes y sus balbuceos impedían la interpretación de la canción, pero era genial ver que por fin se encontraba bien. Liv se acercó lentamente para sorprenderlo por la espalda y, cuando logró su cometido, Price dio un salto del susto. 

—¡¿Qué diablos pasa contigo estúpida?! —gritó Price del susto. Liv y Derek soltaron una carcajada que se escuchó en toda la base.

—Nos alegra verte bien Price—dijo Derek un poco más tranquilo y con los ojos hechos lagunas a causa de la risa.

—¿Qué escuchabas? —preguntó una intrigada Liv.

—Música—respondió Price sarcásticamente.

—Dios mío, eres tan gracioso Price—dijo Derek.

—Es "Sleem".

—¿En serio? Es genial, lo oigo todo el tiempo.

—¿De verdad?

—No, ¿quién es?

—¿Cómo es que no lo conoces? Ponte esto—Price le colocó sus auriculares y lo hizo escuchar un pedazo de una canción. Derek solo veía como Price movía la cabeza de emoción tratando de animarlo. Derek trataba de concentrarse en la canción, pero le fue inútil ya que Price lo distraía.

—Pues, está bien.

—¡¿Bien?! ¡¿Eres idiota?!

—¿Por qué?

—Este tipo es un genio, esta es verdadera música.

—En lo que va de canción ya me dijo con cuantas chicas se ha acostado y todo lo que hizo con ellas.

—No aprecias la esencia de la canción, debes prestar más atención.

—Si, creo que el problema soy yo.

—Como sea, ¿de dónde vienen?

—Del centro, estuvimos juntos todo el día.

—¿Y eso? No será lo que creo, ¿verdad?

—Si, es justamente eso Price. Me di cuenta de que lo amo y no puedo vivir sin él—dijo Liv mientras tomaba el brazo de Derek para después darle un beso muy largo en la mejilla.

—Tampoco me lo presumas así—dijo Price con una sonrisa en el rostro.

En ese mismo instante, Arlet llegó a la base mostrando su liderazgo. Los observó a los tres y se puso frente a ellos.

—Ha pasado un buen tiempo—dijo Arlet. Parecía reclamar el tiempo que había pasado.

—Supongo que nos merecíamos un descanso—dijo Price tratando de justificarse.

—No hay descanso en esto Price, creí que te había quedado claro—dijo Derek.

—Necesitamos reflexionar lo que había pasado. Es claro que las cosas se nos escaparon de las manos—agregó Liv a la conversación un tono serio en su voz.

—Derek me dijo que debíamos vernos, ¿qué ocurre? —dijo una resentida Arlet.

—Tenemos que retomar el trabajo—Price trataba de hacerla entrar en razón.

—¿Tú crees, Price? No me digas que fuiste tu quien tuvo la idea de volver a reunirnos.

—Eso no importa.

—¿Ya viste como está la situación en las calles? —dijo Liv.

—"Agros" no va a tardar en aprovechar la situación y será Vatra quien comience todo el caos—dijo Derek.

—Además, las personas quieren que volvamos, nos necesitan—agregó Price.

—¿Qué seguridad tienen de que no pasará lo de la última vez? —preguntó Arlet.

—No vamos a enfrentarnos ahora, ni mucho menos mañana o pasado—le respondió Price. —Tenemos que estar más unidos y aprender a pelear juntos. Derek lo dijo, no peleamos juntos en aquella ocasión. Pasemos gran parte del tiempo entrenando e incluso hay que distraernos juntos, como lo hacíamos antes.

—Derek ya lo dijo, no podemos simplemente hacer eso y ya.

—Entonces busquemos la manera de estar juntos y aprender a trabajar en equipo.

—Creo que podríamos intentarlo—dijo Derek. —Algo se nos ocurrirá.

—Trata de ver el lado positivo. Noxius dijo que nos habíamos metido en algo del que nos saldríamos vivos. Tenía razón sobre que no podremos salir de esto, pero aún estamos vivos—dijo Liv. Los ánimos habían vuelto a relucir en estos cuatro muchachos.

Price y Liv se miraron y ambos sonrieron. Ya nadie dijo nada más y, después de despedirse, el dúo se fue de la base. Arlet se dio la vuelta mientras Derek la observaba detenidamente. El joven se acercó, rodeó su cintura con sus brazos y Arlet tomó sus manos. 

—¿Qué ocurre? —le preguntó un preocupado Derek.

—No confío—dijo Arlet con desánimos.

—Sueles ser misteriosa a veces, pero en esta ocasión sé que no te refieres a nosotros.

—No confío en mí.

—Ten en cuenta que eres la líder de esto, quizás tu no confíes en ti, pero yo sí.

—¿Por qué?

—Eres más de lo crees, solo te falta notarlo.

Arlet lo miró fijamente y Derek le devolvió la mirada. Ambos se dieron un largo beso y, cuando terminaron, ambos sonrieron mientras tenían los ojos cerrados.

Vatra empezó a notar la ausencia del equipo en las calles y del terror que "Agros" ocasionaba. Pensó que quizás se habían rendido, pero no iba a subestimar a los jóvenes esta vez. Después de cuestionarse unos minutos, este ser de fuego se dirigió ante "Wolf" para comentarle una idea.

—Señor—se dirigió Vatra con respeto hacía "Wolf".

—Vatra, ¿qué te trae ante mí, joven heraldo? —le preguntó "Wolf" sentado sobre un trono en una sala enorme donde la única iluminación era una luz rojiza muy tenue y dándole la espalda a Vatra.

—"The Poker's". Han dejado de operar.

—Debes estar más tranquilo, supe de tu último enfrentamiento con ellos.

—Ellos eran quienes se interponían a nuestros planes, señor. Ahora que dejaron de operar, podemos seguir adelante e incluso dejar de escondernos.

—Ten cuidado con ir muy rápido, seguiremos tal y como lo hacemos ahora.

—Pero señor, ¿se da cuenta que podemos dejar de estar ocultos?

—Presiento hostilidad en tus palabras Vatra.

—No estoy de acuerdo con su decisión.

—Por suerte, tu opinión no es importante aquí.

—Señor debe darse cuenta de que...—"Wolf" se levantó del trono y se dirigió hacía Vatra. Su imponente presencia no atemorizó a Vatra y le plantó cara.

—Tu insolencia es irritante, Vatra.

—Debiste anticipar eso cuando me secuestraste y me convertiste en esto.

—Derrotar a esos cuatro sujetos te han dado aires de grandeza y eso mismo te llevará a tu perdición.

—Soy Vatra y nadie está por encima de mí. Ponte de mi lado ya que de todas formas haré que esos cuatro vengan a mí y los haré que me rueguen la muerte.

—Ya he hablado y si aún tienes esa idea, haz lo que quieras.

—Ahora sí nos entendemos.

—Más te vale tener éxito, no tendrás el apoyo de nadie si fracasas.

Vatra salió de la habitación y pidió reunir a cuantos soldados se pudiera. Habían reclutado a más personas después de la desaparición de "The Poker's". Los secuestros habían aumentado y los experimentos que hacían con las personas, fueron destinados para crear soldados. Las personas, reportaban a diario más desapariciones de familiares y amigos.

Los soldados fueron reunidos en una plaza en la base de "Agros". Decenas de escuadras fueron formadas y esperaban la orden. Vatra se paró frente a todos y los observó por unos segundos.

—Hace mucho tiempo, desde que nuestra gloriosa orden se forjó, hemos pensado mejorar este mundo. Nuestros ideales siempre fueron los mejores y siempre poniendo el beneficio de nuestro mundo por delante. En antaño, existió una orden que se oponía a nosotros y no querían este cambio. Cambio el cual traería paz y prosperidad a todos. Por suerte, fuimos superiores y pudimos contra esos rebeldes malvados que pusieron en riesgo nuestro cometido. Ahora, de las cenizas de esa asquerosa orden, ha surgido un pequeño equipo que cree poder contra nosotros. Un equipo retorcido y con intenciones negativas, al igual que "Vex" hace años. Nuestras capacidades serán puestas a prueba y ninguno cederá ante esta plaga. Vamos a estar juntos y unidos vamos a levantarnos gloriosos una vez más. 

Los soldados, alzaron al aire un estruendoso grito de batalla. Vatra había aumentado el ánimo de todos y ahora, que todos tenían el mismo objetivo, saldrían a infundir el terror a la ciudad. El tiempo se acababa y "The Poker's" no parecían estar listos aún. La posible batalla final por la supervivencia de la ciudad ya se acercaba y no había nadie que pudiera frenar a "Agros" y a Vatra.