Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

36~

El ambiente en la guarida es tenso, cosa que extraña a Jisung. Los mayores parecen compartir un secreo implícito en miradas llenas de palabras no dichas que están empezando a enfadarlo. En todo el rato que han estado allí no han parado de mirarse con profundidad, como teniendo una conversación muda importante en la que algunos parecen no estar incluídos.

Hace cerca de una hora que se encuentran en la guarida, pero ninguno parece estar cien por cien presente. Sabe que Seungmin sigue pensando en su cita con Ungjae, pero no tiene ni idea de lo que le pasa al resto. El único que parece igual de desconcertado que él es Jeongin.

Los mayores, por su parte, sienten el peso de la opresión del secreto que guardan sobre sus espaldas con angustia. A lo largo de una semana han ido comprobando que Félix come muy poco cuando está con ellos, y que no parece retener muy bien la comida. Incluso llevaron a los menores a comer a un restaurante solo para ver como reaccionaba, y Lee no tardó en excusarse para ir al baño una vez hubo acabado de comer.

La situación los sobrepasa a todos, que ahora que han confirmado todo lo que les dijo Changbin ya no saben bien que es lo que deben hacer.

-Chicos, hay demasiado silencio.- anuncia el menor de todos con incomodidad.- ¿Pasa algo?

-No te preocupes, cariño.- susurra Hyunjin, dejando un suave beso en su mejilla de su pequeño novio.- Solo estamos algo cansados todos. Están siendo unas semanas muy agetreadas. No le des muchas vueltas.

-Si pones esa excusa tan rápido es que no es verdad.- murmura Jisung, conocedor de las costumbres de sus amigos. Hyunjin suele inventar excusas con facilidad y rapidez, pero cuando dice la verdad suele tardar en contestar. Por la mirada tristemente ofendida de Jeongin sabe que el menor también es consciente de ese detalle.- Todos sabéis algo que Jeongin, Seungmin y yo no. No sé que es lo que pasa, pero me está empezando a cabrear.

-Jisung, hablaremos después.- suspira Minho, consciente de que no pueden retrasar más el contarles a los menores lo que pasa con Félix. Incluso es consciente de que ellos pueden ayudarlos en su bloqueo, pero también sabe que la situación va a dañarlos en demasía.- Solo, no le déis más vueltas de las necesarias de momento.

-Creo que yo debo irme a casa.- murmura Félix. Todos notan las lágrimas rebordando en los ojos del australiano, pero a ninguno le da tiempo a procesar lo que pasa para preguntarle al chico qué es lo que le pasa.- No creo que me pase por aquí en unos días, tengo muchos trabajos para la universidad.- murmura, dirigiéndose con rapidez a la puerta, poniéndo una excusa rápida que todos saben falsa.

-Félix, espera.- dice Changbin, levantándose también para seguir al menor, intentando pararlo antes de que se vaya.- Debemos hablar.

-No quiero hablar contigo, Seo. Ya has hecho suficiente estos días.- susurra el menor, cerrando la puerta con fuerza tras de si.

Changbin los mira a todos con pesadez, viendo como Jisung ya está a punto de saltar sobre él para preguntarle que le ha hecho a Félix de una manera poco amistosa. Se adelanta a sus pasos y sale con rapidez en busca del pecoso, dejándoles a sus amigos la tarea de contarles a los menores lo que pasa.

-¿Qué coño le ha hecho el enano a Lix?- pregunta Seungmin con un tono entre desconcertado y enfadado.- Porque como le haya hecho daño le voy a partir las bolas.

-Cálmate Min.- suspira Chan, mirando a su pareja en busca de algo de fuerza para lo que les van a contar ahora a los menores. El aire se carga de una solemnidad pesada que los pone incómodos a todos.- Creo que tenemos que deciros algo. Solo entended que no os lo hemos ocultado porque no confiemos en vosotros, si no porque es un tema muy delicado.

-Me estás asustando, hyung.- dice Jeongin, mirando los rostros extremadamente serios de todos sus mayores con algo de angustia.- Hablas como si alguien se fuese a morir.

-Realmente puede que eso pase si no hacemos algo rápido.- murmura Minho, creyendo que ha hablado tan bajo que nadie ha llegado a entender lo que ha dicho.

-¡Minho!- exclama Jisung escandalizado, rompiendo la pequeña ilusión de Minho. Se siente realmente enfadado por las palabras que ha dicho su pareja, demasiado fuertes como para ser una simple broma.- ¿Por qué te gusta tanto asustar a Innie?

-Creo que es mejor que se lo contemos por separado.- anuncia Hanse con un suspiro.- Van a tener reacciones muy diferentes. No creo que les haga bien estar los tres juntos cuando se enteren.

-¡No váis a separarnos!- exclama Seungmin, ofendido. Se aferra a Jeongin sobre el cuerpo de Hyunjin, buscando apoyo con la mirada en Jisung. El chico de mejillas regordetas asiente con una mirada desafiante, haciendo que los mayores sepan que van en serio con sus revindicaciones. No van a dejar que los separen sin pelear.- Lo que tengáis que decir nos lo decís a los tres juntos. Ya basta de tanto secretismo. Prometimos estar juntos en todo, pero no le estáis cumpliendo.

-No hay forma suave de decir esto.- suspira Minho, rendido a las demandas de sus tercos menores, decidido a ser él el que empiece a contar la historia de lo que pasa.- En la fiesta de Ungjae, Félix dijo que se encontraba mal y Changbin fue con él al baño. ¿Os acordáis?- los tres menores asienten, desconcertados.- Digamos que Changbin lo encontró intentando deshacerse de lo que había comido.

-Si se encontraba mal es lo normal.- espeta Jisung, descontento con lo que insinúan sus mayores.- Félix nunca haría eso por hacer. Menos sabiendo lo que pasó con Chungha noona. Todos somos conscientes de las consecuencias de lo que pasa cuando te metes en esos pozos.

-Bin dice que le mandó quitarse la camiseta. Dice que está como estaba ella antes de lo que pasó.- explica Hyunjin, intentando tener el máximo tacto posible. Es consciente de lo fuerte que es la noticia y de que la negación es un buen escudo para los menores.- Nos hemos estado fijando estos días y hemos visto que es verdad que siempre se va al baño lo antes que puede después de comer cualquier cosa.

-Eso no significa nada.- lo corta Jisung, sintiendo la ansiedad crecer en su interior.

-Él vino a mi casa una semana antes de la fiesta a probarse ropa.- empieza a contar Jeongin, atrayendo la atención de todos. El pequeño parece en shoock. Gruesas lágrimas corren por su rostro, dejando regueros de desesperación a su paso. Mira sus manos con un aire algo ausente, incapaz de encontrarse con la mirada de ninguno de ellos.- Siempre nos hemos cambiado delante del otro. Cuando éramos más pequeños hacíamos desfiles de moda.- recuerda sonriendo de manera tenue, pensando en aquella época lejana en la que todo parecía más fácil.- Pero esta vez no. Cuando yo me iba a quitar la camiseta él salió corriendo al baño a cambiarse allí. No quiso que nos viésemos el uno al otro en ningún momento. Creo que ya entiendo por qué fue. Debí haberme dado cuenta antes.

-Félix necesita ayuda ahora para poder volver a hacer desfiles de moda, Jeongin.- suspira Chan, sintiendo las lágrimas también picando en sus ojos.

-¡No!- exclama Jisung, levantándose de golpe. Se niega a aceptar que Félix pueda estar haciéndose eso a si mismo.- ¡Félix está bien!

Dicho esto el chico de mejillas regordetas sale corriendo del lugar mientras siente que las lágrimas pican en sus ojos. Siente las miradas de todos en su espalda mientras cruza la puerta con rapidez para alejarse de sus palabras lo más rápido posible. Solo quiere esconderse en su cuarto hasta que le digan que es una broma de mal gusto.

Los chicos que quedan atrás se miran entre ellos. Jeongin y Seungmin lloran en silencio, aceptando poco a poco la idea de que deben ayudar a Félix y sintiendo que el peso que llevan sus mayores posándose también en su espalda. Ahora todos están juntos en lo mismo.

Minho suspira profundamente, sabiendo que es él el que debe ir detrás de Jisung.

---

-Sung, en serio, abre la puerta.- pide Minho por décima vez desde que está parado frente a la puerta de la habitación de su novio.- Debemos hablar bien de esto.

-No quiero, no quiero hacerlo Minho.- llega la voz ahogada de Jisung desde el otro lado de la puerta. Está llorando, y eso rompe el corazón del mayor, que ya se encuentra desesperado por entrar y abrazar al chico.- Félix no puede estar haciéndose eso a si mismo. Es demasiado irreal. Él sabe lo que le pasó a Chungha por hacer esas mierdas, sabe todo lo que sufrió Bin hyung. Él quiere a Bin hyung, no puede estar haciendo que él pase por esto de nuevo.

-Yo también pienso así, Sung.- suspira el mayor, apoyándo su frente contra la superficie de madera que se interpone entre él y su pequeño novio. Quiere echarla ya abajo, pero sabe que eso enfadaría a Jisung.- No me creo que Félix esté enfermo, pero lo está. Y nosotros somos los únicos que podemos ayudarle. Necesita que nos mantengamos estables por una vez en nuestras vidas para poder salir de esta. No solo lo necesita él, Bin nos necesita a todos en este momento. No creo que pueda volver a pasar por toda esa mierda solo sin derrumbarse de la peor forma posible.

Después de unos segundos en los que solo oye a Jisung respirar de manera profunda al otro lado de la puerta, quizás intentado calmarse un poco, esta se abre dejando ver al chico. El pequeño tiene los ojos rojos y restos de lágrimas en sus mejillas, pero en su mirada se refleja la decisión de quien ha entendido que debe ser fuerte. Lleva sus manos apretadas en dos puños temblorosos. Por un momento el mayor teme que quiera pegarle.

Ver el rostro de angustiado de Minho hace que el menor se sienta algo mal por haberlo hecho preocuparse tanto. Se tira a sus brazos, escodiéndose en el cálido pecho de su hyung, intentando no llorar de nuevo, cosa que está a punto de fallar cuando siente los labios de su chico posarse suavemente repetidas veces sobre su cabello, dejando suaves besitos que hacen que la tensión de su cuerpo se relaje un poco.

-¿Puedes quedarte a dormir hoy?- pregunta con su voz ahogada por tener el rostro escondido en el pecho de Minho. Se aferra cada vez más fuerte a la camiseta del mayor, no queriendo dejarlo ir. Nota como las manos del otro también ejercen algo más de presión en su cintura.- No creo que pueda dormir bien si no estás aquí y me abrazas.

-No me iré hasta que tú me digas que me vaya.- responde el mayor, soltando el aire retenido en todo el tiempo que ha estado esperando a que el chico le abriese la puerta. Siente su cuerpo relajarse un poco ahora que lo tiene entre sus brazos.- Es tu casa, tú mandas.

-Entonces te digo que no te vayas nunca.- susurra el menor, trazando con la punta de su nariz la línea de la mandíbula del mayor. Este siente un escalofrío recorrer su cuerpo por culpa de las acciones de Han.- ¿Puedes hacerlo?

-Lo dices como si yo quisiese separarme de ti en algún momento de mi vida.- murmura Minho, sonriendo ladino y dejando un suave beso en la mejilla abultada del otro.- Seungmin se quedará a dormir en la de Chan, así que estamos solos.

-No vamos a hacer nada pervertido, Lee.- ríe el menor, sintiendo sus preocupaciones alejarse poco a poco.- Sabes que no estoy preparado para nada más de lo que ya hacemos.

-¿Quién ha dicho nada de algo pervertido?- pregunta divertido Minho.- Yo me refería a ver nuestra serie favorita sin que Seungmin esté entrando cada dos por tres a molestar o a ver que es lo que hacemos.- explica, viendo como las mejillas de su pequeño se tiñen de un fuerte rojo al oír sus palabras.- Sé que no estás preparado y nunca haría nada que tú no quisieses hacer, así que no debes preocuparte. Puedo esperar conformándome con lo que tenemos.

-Vamos a ver esa serie.- pide Jisung, sintiendo que está a punto de estallar de vergüenza por la situación.- Ya hablaremos de eso otro día.

Nada que comentar sobre este cap a excepción de que me encanta como quedó, idk.

Calculo que como mucho quedarán dos capítulos más y el epílogo. Como muchísimo haré tres capítulos más.

Me da pena acabar esta historia, pero en cuanto la acabe empezaré otra, supongo.

Estoy pensando en hacer una Hyunin, pero aún no tengo muy claro de que iría, solo tengo pensadas algunas escenas que ni siquiera he escrito.

Esta semana estoy de exámenes, así que no sé si me dará la vida para escribir. Lo bueno es que dentro de dos me dan las vacaciones de navidad. Ahí ya tendré más tiempo para escribir.

Supongo que para ese momento esta historia ya estará acabada y empezaré la otra.

Espero veros a tod@s en los comentarios de la otra historia uwu

Os amo <3


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro