La señora Han canta girando por la pequeña cocina de su apartamento en Corea, preparando el desayuno con energía para el momento en el que se despierten los otros dos ocupantes del lugar.

Jisung no tarda en despertarse, acunado por la suave melodía del canto de su madre. Aún medio adormilado se levanta de su cama, encaminándose a la cocina con pasos lentos en un intento de desperezarse antes de entablar la primera conversación del día con su madre.

-Buenos días, cariño.- lo saluda la mujer en cuanto oye la puerta del cuarto del chico ser abierta, sin siquiera girarse a mirar si en verdad es él el que se encuentra a su espalda.- Haz tu el café, que yo estoy ocupada con las tostadas.

Encima de la mesa ya hay colocados tres platos y tres tazas, con una montaña de magdalenas de chocolate justo delante. Su madre se afana en untar mantequilla en el pan recién tostado mientras mueve las caderas de manera graciosa, todavía murmurando la canción que tarareaba unos segundos antes.

-Tienes demasiada energía ya por la mañana, mamá.- suspira Jisung, estirándose para coger el café del estante a un ritmo de tortuga comparado con el que lleva su madre.- Creo que necesito dos cafés bien cargados para poder despertarme.

-¿Hasta que hora te quedaste ayer estudiando?- pregunta la mujer, echándole una mirada de reojo a su hijo, preocupada por la salud del chico. Este presenta unas importantes ojeras y bosteza de manera amplia, atontado por el sueño.- No te oí entrar a la habitación.

-Creo que eran las cuatro cuando me fui a dormir.- suspira el chico, evitando la mirada de su madre.- Intenté no despertarte porque era tarde.- no le hace falta mirar para saber que la mujer lo está mirando con desaprobación.- Necesito estudiar para mis exámenes, si no saco buenas notas mi beca se acabará. Ahora mismo no pagamos nada, pero una carrera universitaria sin beca es demasiado cara para nosotros.

-No quiero que dejes lo que te apasiona, pero aún así tienes que cuidar tu salud.- murmura la señora Han, arrugando el ceño en un gesto infantil que hace sonreír a su hijo.- No quiero que enfermes ahora que al fin has empezado algo serio con Minho.

-Estás pesada con eso.- ríe Jisung, feliz por el ambiente familiar que su madre lleva implícito.- No me voy a enfermar precisamente porque Minho hyung me obligaría a parar antes de que eso pasase.

-Deberías invitarlo a comer.- propone su madre, como hablando consigo misma.- Desde que he llegado casi no lo he visto.

-Lo haré, no te preocupes.- promete como respuesta el chico de mejillas regordetas.- Ahora vamos a acabar de preparar el desayuno antes de que Seungmin se despierte.

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-Entonces acabo esos dos puntos y te llamo para hablar de la redacción del último.- repite Jisoo, memorizando las instrucciones que le da su, ahora, amigo.- Con eso ya habremos acabado todo y estaremos liberados del trabajo más pesado del trimestre.

-Eso va a ser genial.- suspira Jisung, girando la vista para mirar a su sonriente amiga mientras caminan.- Después de eso solo nos quedan los exámenes finales y tendremos unas pequeñas vacaciones. Espero sacar todo con nota.

-No te preocupes, oppa, eres el mejor de clase sin dudas.- responde Jisoo. Ambos han cogido confianza a medida que el trabajo iba avanzando, y ahora se consideran buenos amigos.- Y eso es genial porque ahora tengo a quién preguntarle cuando no entiendo algo.

-Solo me utilizas para sacar buenas notas.- dice Jisung, arrugando la nariz con exagerada decepción.- Pensé que de verdad me querías, Kim Jisoo.

Los dos se echan a reír, divertidos por la pésima actuación del chico.

La gente que los mira pasar sonríe, pensando que hacen una linda pareja por el ambiente cómodo y cercano que procesan. Incluso la cercanía con la que caminan podría ser señal de que son algo más que amigos.

Lo que no saben es que ambos se encuentran camino a encontrarse con sus verdaderas parejas. A él lo espera su chico y a ella su hermosa novia.

-¿El que está hablando con Jennie no es tu novio?- pregunta Jisoo, parando de reír extrañada.

Jisung dirige la mirada hacia donde observa su amiga, y se encuentra con que tiene razón. Minho habla animadamente con la novia de Jisoo cerca de la entrada de la institución. Esta sonríe, cosa que Jisung la había visto hacer muy pocas veces.

Ambos amigos se miran sorprendidos, echando a caminar en dirección a la extraña pareja que sigue hablando, sin percatarse de que ambos se acercan.

-Hey.- saluda Jisoo, llamando la atención de Minho y Jennie.- ¿Vosotros dos os conocéis?

-Hola cariño.- responde Jennie, dejando un beso sobre la mejilla de la chica con dulzura. Minho imita a la chica, pero él deja un beso en los labios de Jisung para después pasar un brazo sobre sus hombros y quedarse en una especie de abrazo, quedando de frente a las dos chicas.- Conozco a Minho oppa desde hace un par de años.- responde con sencillez.- Solía salir con Ungjae algunas veces de fiesta, y él nos presentó.

-Espera. ¿Él es el famoso Minho del que no para de hablar Ungjae?- pregunta con sorpresa Jisoo.- Me lo esperaba más chungo, la verdad. No creí que fuese el novio guaperas de Sung.

-Esto es lo que hay.- dice Lee con una sonrisa, divertido por la actitud de la chica. Sabe de sobras que es la amiga de la que tanto le ha hablado Jisung.- Ungjae me pinta como a un mafioso de película, pero no lo soy.

-Creo que voy a tener que hablar yo con ese tal Ungjae para saber que hacías para que te pinte como un mafioso.- suspira Jisung, entrando a la conversación con algo de miedo, al ser el que menos parece saber de lo que hablan. El brazo de Minho sobre sus hombros le da algo de seguridad.- Seguramente nada bueno.

-Es genial conocer al novio de Minho al fin.- dice Jennie, sonriéndole al notar su apreciable tensión. La chica parece ser algo más que esa coraza fría que Jisung había notado desde lejos.- Cuando Ungjae apareció un día diciendo que había asentado la cabeza fue difícil de creer. Pero me alegro de que haya vuelto a encontrarse con esos amigos de la infancia de los que tanto hablaba.

-¿No conoces a Ungjae?- pregunta Jisoo, cortando las sonrisas corteses que se dedican su novia y su amigo. Jisung niega con la cabeza, algo desconcertado.- Por lo que sé Minho y él son muy amigos, es raro que no hayas oído hablar de él.- explica con tono amargo fingido de manera casi perfecta, cruzándose de brazos con el ceño arrugado.- Algo me huele mal y no es la comida de la cafetería.

-Es verdad, es raro que no haya oído hablar de ese tal Ungjae.- repite Han, consciente de que el objetivo principal de su amiga es molestar a su novio.Imita su acción y se aleja un paso de Minho, cruzando sus brazos sobre su pecho.- ¿Algo que quieras decir en tu defensa, hyung?

-Ungjae es un amigo que conocí en el tiempo en el que estuviste en Malasia y cuando no me hablaba con el resto de chicos.- explica el chico, hablando lo más rápido posible para librarse de toda duda, no muy seguro de si la pareja está tomándole el pelo o no.- Desde que vuelvo a estar con vosotros a penas lo veo, así que no hay demasiado que decir a cerca de él ultimamente.

-¿Se lo damos por bueno?- le pregunta Jisung a Jisoo, mirando a la chica de reojo con compicidad. Ella hace como que se lo piensa unos instantes antes de asentir con una sonrisa, conteniendo una carcajada ante la cara de alivio que pone Minho al ver su gesto.- Te lo damos por bueno.- confirma, ahora dirigiendo su mirada a Minho, que los mira divertido.

-Deberías traerte a tus amigos algún día a alguna de las fiestas de Ungjae.- apunta Jennie, que sonríe al ver la complicidad que parece tener su novia con ese chico de lindas mejillas y linda sonrisa.- Estará bien tenerte de vuelta por allí algún día, además de conocer a esos chicos tan increíbles de los que hablabas siempre.

-Se lo propondré.- informa Minho sonriendo. Revuelve el pelo de la chica con confianza, ganándose una mirada asesina por parte de esta.- Nos vemos, Jisung y yo vamos a comer con mi suegra.

Ambas parejas se despiden con la promesa de seguir en contacto para hablar sobre lo de la fiesta. Una vez han acabado la conversación cada uno sale en su dirección, que resultan ser las contrarias.

Minho no ha traído su moto, por lo que les toca volver andando hasta su barrio. El chico no duda en coger la mochila que cuelga de uno de los hombros de su novio, sorprendido por el peso de esta, para llevarla y dejar descansar la pobre espalda de Jisung. Tampoco duda en agarrar la mano de este con delicadeza mientras caminan.

Jisung se encuentra como en un sueño. A pesar de que al principio se resiste un poco a la idea de que Minho cargue con su pesada bolsa, al final cede a los encantos de novio cariñoso del chico. No puede evitar disfrutar de caminar de vuelta a casa de la mano con su hyung.

Es tal y como ambos imaginaban desde hacía tiempo. Son la viva imagen de una pareja feliz y cariñosa en una escena cotidiana.

-¿En serio les hablaste a tus amigos de mí y de los demás?- pregunta Jisung, rompiendo el cómodo silencio que los envolvía.- Jennie parecía saber quien era yo sin que me presentase.

-Le dije que estaba esperando a mi novio, así que era cuestión de lógica. Hasta Hyunjin lo hubiese adivinado.- el chico de mejillas regordetas le lanza una mirada desaprobatoria a Minho por su respuesta irónica, una mirada casi asesina.- Y claro que les hablé de ti y de los chicos. Ellos eran amigos, pero vosotros sois mi familia. A parte, no sé de que te sorprendes, Mingyu dijo que tú les habías hablado de nosotros. ¿Por qué yo iba a ser diferente?

-Realmente pensé que todos os habíais olvidado de que un día fuimos nueve. Por eso me sorprende que esa chica sepa de nosotros.- suspira Jisung como respuesta, consciente de que ya debería haber superado esos miedos estúpidos hacía meses.- Pero me alegra que no nos hubieses olvidado.

-Sería imposible olvidaros, Sung.- murmura Minho, ralentizando el paso para retrasar el momento de llegar a casa y alargar su conversación.- Por si no lo recuerdas, llevas gustándome años, así que menos te iba a olvidar a ti.- le recuerda, alzando una ceja de manera socarrona al ver como el rostro del chico se colorea por sus palabras.- Si no os hablé a vosotros de Ungjae o de Jennie, es porque cuando salía con ellos acababa fumando medio borracho en cualquier sitio esperando a alguien que se quisiese pelear conmigo. No es algo de lo que esté orgulloso ni algo que ellos no me hubiesen advertido miles de veces que no estaba bien.

-Me sigue costando mucho imaginarte así.- susurra Jisung mirando a sus zapatos mientras intenta que Minho avance más rápido.- Y eso que vi tu cara echa una mierda y que te separé antes de que te metieses en una pelea con BamBam.

-Sigo sin estar orgulloso de nada de eso.- dice Minho.- Por eso intento no meterme en más líos, por vosotros.

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-¿Queréis que vayamos a una fiesta?- pregunta Chan, extrañado por lo que proponen Minho y Jisung. Hanse pasa un brazo por sus hombros, y enarca una ceja, apoyando el escepticismo de su novio.- ¿A qué se debe ese repentino interés en salir y tener vida social?

-Nos han invitado.- responde con simpleza Minho mientras se encoge de hombros.- Nos han invitado a todos.- aclara.

-¿En casa de Ungjae?- pregunta Hyunjin, suponiendo ya por donde va su amigo. Este asiente, ya teniendo previsto que el boxeador sabría de lo que hablaría.- ¿Ya echan de menos nuestros hermosos culos por allí?- ríe el pelinegro, sacándole una sonrisa a Minho.- Seguro que no es lo mismo desde que no vamos. Esos tontos no saben lo que es la diversión.

-¿Ungjae no es un tío que hace boxeo en el gimnasio?- pregunta Changbin extrañado. Hyunjin asiente, dandole a entender que está en lo correcto y de que hablan del mismo Ungjae.- Es el chico con el gancho de izquierdas que casi parte un saco.

-¿Por qué todo el mundo sabe quién es Ungjae menos yo?- se lamenta Jisung.

-¿Vamos de fiesta o no?- interrumpe Félix, ansioso por conocer la respuesta.- Appas, hablen.

-Supongo que vamos.- suspira Chan con agotamiento, planeando como sobrevivir a una noche de fiesta con esa panda de niños hiperactivos.

Ya no sé ni lo que escribo. Estoy estructurando lo que va a pasar a partir de ahora en la historia, pero en serio dudo de que esto tenga calidad suficiente. Siento que en Tatoo todo estaba más claro y que esto solo es una historia más.

Aún así la voy a acabar, y luego puede que empiece con algún otro proyecto.

Creo que no tengo nada que poner en Hye cuenta su vida.

Bueno, las fotos teaser de SKZ, pero es que esos niños son hermosos siempre. Espero con ansias el comeback. 

También debo decir que estoy enamorada de Tattoo de The Boyz y Love Talk de WayV.

Tardé un poco en escuchar las dos canciones, pero es que Love Talk me enamoró a la primera y Tattoo me acabó de enamorar al buscar la letra en español, es preciosa.

También estoy enamorada de la relación de Hyuna y Dawn, son más que perfectos juntos.

Menos mal que no tenía nada que contar XD

Os amo <3