🍒 Cuarta parte 🍓
A la mañana siguiente las cosas se vieron un poco distintas en la casa. BaekHyun no había hablado mucho con ChanYeol en la cena; sobre una plática muy tranquila, se la pasaron normal hasta que se hizo tarde y decidieron que sus cuerpos viejos ya estaban acostumbrados al horario madrugador de maestros que no podían resistir quedarse (innecesariamente) despiertos.
"Si necesitas más cobijas o almohadas, puedes decirme, tocar, llamarme por teléfono o lo que sea y que te convenga más. El baño está aquí junto a la entrada. Yo estaré para lo que necesites."
"Claro, muchas gracias, Buenas noches, BaekHyun."
"Buenas noches, ChanYeol."
No hubo imperfectos que los distrajeran. ChanYeol sí se paró muy temprano a pesar de eso. Con su reloj biológico, a las seis de la mañana ya estaba despierto.
"Mierda," no escuchó ningún ruido. Seguramente BaekHyun aún seguía dormido, no creía que él tuviese el mismo reloj. Después de todo, BaekHyun empezaba clases a las 9, y él tenía que estar en la escuela a las 8, sin contar que iba a correr por las mañanas como a esa hora para regresar a las 7 y hacer su rutina.
Hasta entonces BaekHyun ni siquiera habría despertado. Al vivir tan cerca de la universidad, tenía sus privilegios. Podía dormir más horas, y por supuesto que él estaba enterado, si cuando le mandaba mensajes a BaekHyun por la mañana del trabajo siempre respondía pasadas las ocho.
¿Qué iba a hacer ahora?
"Bueno, necesito ir al baño," se dijo con la seguridad de que el llamado de la naturaleza no podía ignorarse nunca. Se paró, y después de hacer unos estiramientos, fue en camino al excusado.
Estaba en medio de su asunto cuando oyó que la puerta de entrada era abierta. Por un segundo se asustó porque olía a alfa, pero en cuanto escuchó las voces de quienes hablaba, bien reconocida la voz de la mamá de BaekHyun y... quien suponía era su papá (ya que no había compartido mucho junto al señor, aparte del pésame indicado), entendió qué era.
Habían regresado. Si acaso era para descansar en su casa o por algún cambio, no lo supo. Más se enfocó en terminar lo suyo esperando no salir en el momento que ellos siguieran por ahí cerca y mostrarse como todo intruso haciendo uso de su hogar como uno propio.
No quería quedar mal con los padres de su amigo.
No escuchó las voces cerca, así que salió rápido y regresó al cuarto que le habían prestado tras cerrar la puerta, cuidadoso para igual hacerse invisible ante los dueños de la casa. Luego, se quedó ahí por un segundo, parado. Y de pronto...
"¡Maldita sea! ¿Cómo se atreve a hacernos esto esa omega?"
"¡JongSuk!"
"¡No me digas que me calme, Omega! ¡No me digas–!"
"¿Papá? ¿Qué está pasando?" Un golpe y los gritos se escucharon como una historia. Una que él no veía, pero se pudo imaginar. Al nivel de la sala, alguien había aventado algo. Un jarrón o una cosa de vidrio. En cualquier caso, eso había traído un grito femenino, y en el arrebato, BaekHyun había abierto la puerta. Se había despertado. "¡Papá!"
"BaekHyun, vuelve a tu cuarto."
"Mamá, ten cuidado."
"Yo puedo, voy a limpiarlo."
"Mamá, no agarres los cristales con las manos, vas a–"
"¡Tu madre te dijo que te fueras a tu cuarto! ¡¿No escuchaste, Omega?!"
El silencio se hizo por unos segundos. ChanYeol se sintió confuso. Había algo en su interior que tenía un poco de miedo, el poder y la fuerza de un alfa se estaba imponiendo y a la vez la forma en la que sabía cómo estaba tratando esa persona a BaekHyun, incluso como su padre, un dominante en toda norma, no le gustó. No quiso enseñar su cuello como acto de rendición, quería ver quién gritaba más fuerte de ellos si acaso se mostraba.
"BaekHyun..."
Acto seguido, BaekHyun respondió. Al abrir su puerta le hizo caso. No abrió la de su habitación, ahí donde estaba ChanYeol parado, apareció. Y al cerrar la puerta corrediza por detrás, quedaron los dos arriba juntos, tan quietos y sin ningún intercambio.
El padre de BaekHyun volvió a gritar algo afuera, y si algo pateó por el sonido que escucharon, ya no hubo nada que hacer. La mamá de BaekHyun se volvió a oír en su preocupación, y BaekHyun a su lado solo se sentó con las piernas hacia el pecho, abrazadas por sus manos.
ChanYeol lentamente lo imitó. Tomó asiento junto a su amigo y ahí se quedó por un segundo.
"¡JongSuk!" En el destrozo siguiente, BaekHyun se le abalanzó por un costado. Lo abrazó muy fuerte y enterró su cara en su cuello en ese lugar tan preciado que tenía todo omega.
ChanYeol debería alejarlo, porque esa parte de su cuello era intocable, nadie más que su pareja era capaz de acercarse a ella. Era zona de una marca, reservada solo para un dominante, mas, la forma en la que BaekHyun pasó su cabello al inclinarse y se acomodó para traer su rostro a ese espacio donde su nariz tocó con dos inhalaciones lo hizo sentir bien.
Ya no sentía miedo por lo que había allá afuera, ni la impotencia o enojo de hace unos minutos. BaekHyun había liberado una cantidad irregular de feromonas que hasta lo podrían marear y, por él, no hubo ninguna queja. Incluso cuando su cabeza decía lo contrario.
"BaekHyun..."
"Por favor," cuando escuchó la súplica de BaekHyun, se rindió. Suspiró hondo. Después rodeó a BaekHyun con un brazo en la facilidad de darle más espacio. BaekHyun no lo desaprovechó, cerró distancias y fue su turno de liberar su olor con feromonas que lo tranquilizaran. Era lo que BaekHyun pedía, ¿no? Lo necesitaba.
Así estuvieron juntos por al menos una o dos horas. El escándalo y conflicto de afuera no duró tanto e igual él no reclamó su espacio. No sabía qué le estaba pasando, el por qué esto le parecía normal, mas, tampoco quiso cuestionarlo mucho.
Ese día solo estuvo ahí consolando a BaekHyun.
Su padre había llegado peleando porque las cenizas de su abuelo tenían que ser divididas.
No era algo que a JongSuk le gustara, al pensar que él y sus hermanos tenían más razón de guardar los restos de su papá ahí en Bucheon en su urna familiar, no le cabía en la cabeza cómo la mujer de su papá había exigido tener la mitad de las cenizas.
"Yo me quedé toda la noche ahí velando, ¡yo estuve ahí en su último aliento!"
"JongSuk, por favor, escucha," su papá se había calmado luego de unas horas. Con las aguas más tranquilas, ChanYeol y él habían podido salir del cuarto. Sus papás se fueron a su cuarto, discutieron dentro, pero ahí ya no los escucharon tanto, aunque las paredes fuesen tan livianas.
Desayunaron en silencio, a ChanYeol le indicó incluso dónde se podía duchar y él hizo lo mismo mientras su huésped se arreglaba. Hablaron tan poco entremedio, tal vez porque la atmósfera no lo propiciaba, y después de la escenita que BaekHyun había hecho con ChanYeol, la verdad el maestro no se estaba sintiendo en confianza de mirarlo ni decirle alguna otra cosa.
Al final, ¿cómo le iba a explicar a su jefecito que lo había abrazado, le había suplicado por tener su olor, su aroma, el perfume que lo podía volver tan loco y a la vez lo tranquilizaba en momentos vulnerables como aquellos? ¿Cómo si lo quiso marcar con su propio olor al pegarse a su cuello en ese hueco que era tan valioso?
No se imaginaba la incomodidad que debía estar sintiendo ChanYeol ahora mismo. Mientras se bañaba y hacía reflexión de todo aquello, se pegó en la pared un par de ocasiones, porque estaba seguro de que en cuanto saliese, ChanYeol ya no iba a querer ni verlo. No le sorprendería si llegaba a decirle que se iba a la central, ya listo en la entrada con sus cosas.
A pesar de tal pensamiento, la verdad fue que cuando se arregló con un gran suéter, pantalones holgados, camisa afelpada debajo y otro gorro para cubrir sus hebras que no podía secar porque no tenía artefactos de belleza ahí en la casa de sus padres, no se encontró a ChanYeol listo para volar lejos.
Estaba ahí parado frente a la gran foto de su graduación con su clase y la universidad detrás como el escenario con las manos dentro de sus bolsillos en la que parecía ser la única chaqueta que trajo para el viaje. Arriba igual estaba la foto de su hermano, y la de su padre mucho más. Era como si fuesen por categoría. Su madre no lo había dicho de ese modo, ella solo los acomodó como fueron llegando, pero parecía que las viejas enseñanzas se arraigaban hasta en lo que menos lo creían.
No era un comentario junto al que quisiera llegarle a ChanYeol para iniciar otra conversación.
Con el grito de su madre y padre en la habitación de junto...
"¡Esa mujer me va a escuchar a mí! En cuanto la vea..."
"¿Quieres salir a pasear un rato?" La cuestión de ChanYeol lo sacó un poco de onda.
"ChanYeol..." él quiso decirle tanto: disculparse, admitir la verdad, dar una excusa; sin embargo, decidió que no podía tomar la pena. No ahora. "Está bien, vamos."
Su sonrisa le hizo creer que todo estaba bien como lo dijo. Al menos de momento.
"No creas que mi papá es un violento," BaekHyun comentó después de un rato de que hubiesen caminado. Ya estaban algo lejos de su casa. A pesar de que ChanYeol no le había hecho mucha plática además de admitir que era un lindo día–probablemente en el agrado que a su jefe le podía dar el tiempo frío y los nublados–, decidió ser él quien rompiera la tensión (si acaso en verdad había una o solo él se la estaba imaginando). Con el interés de ChanYeol ahora en su persona, BaekHyun agachó la cabeza y se enfocó en sus pasos. En sus tenis y la forma en la que bajaban por el área residencial que era la colonia. Muchas casas tradicionales habían pasado por sus ojos, pocos carros de un lado o de otro. Nada más que el aire frío y el sonido de sus pasos corría entre ellos, e igual continuó, porque bien sabía que en su ausencia había sido escuchado. No podía soltar un comentario como ese sin darse a explicar. "O sea, sí lo es un poco. Cuando se molesta es de esas personas que avientan y rompen cosas... pero nunca lo ha hecho contra nosotros. Ni contra mamá, BaekBeom o conmigo. Te grita y se puede desquitar diciendo algo hiriente, mas, no para pegarnos y eso..."
"Entiendo," ChanYeol dijo, y aunque no lo vio, pensó que hubo algo, quizá un asentimiento. Porque tardó un tiempo en decirle otra cosa. "¿Por qué me cuentas esto?"
"Bueno, porque..." se quedó pensando. ¿Había una razón? "No sé, supongo que era necesario."
"Pues... tu padre no me hizo nada a mí, tampoco a ti, por suerte," ¿sintió algo en su pecho en esa afirmación? "Y en realidad, las acciones de tu padre no me incumben si es así. No tendrías tampoco que disculparte por algo que tú no hiciste."
"Sí, pero... o sea..." apretó los labios. Se detuvo en medio de la calle, y cuando ChanYeol lo imitó, BaekHyun aún no pudo verlo, solo... "¿Quieres ir a los columpios?"
ChanYeol miró al lugar donde él dirigió su mirada. El parque estaba justo a la derecha, y aunque el día era nublado, un leve rayo de sol le daba a esa zona. El vaho salió de su boca al respirar, sin embargo, tras meter sus manos a la chaqueta, el susodicho asintió al verse a los ojos.
"Claro."
Rodearon el sube y baja que se atravesó en su camino recto. Subieron y bajaron una pequeña colina de tierra. Todo eso en otra temporada habría estado lleno de pasto verde y lindo, pero con el invierno ya no había nada más que vegetación muerta, medio que una que otra sobrevivía al frío. Las bancas donde (usualmente) padres y ancianos se podían sentar quedaron a su diagonal, y junto a los columpios se veía una casita con resbaladilla y tobogán por dos distintos lados. Una rueda y un caballito se encontraban al frente a unos pasos, mas, ni los pasaron.
Se fueron derechito a los columpios, y encima de ellos, BaekHyun se meció para escuchar su horrible rechinido.
Esos parques estaban casi abandonados, no importaba que las vacaciones estuviesen a la vuelta de la esquina. Ya nadie vivía en el vecindario con la suficiente edad para venir aquí. No había casi niños, si acaso su hermano y sus sobrinos eran los únicos y ellos no vivían en esa calle, sino a la redonda. Vecindario tradicional era sinónimo de viejos. Y si viejos llegaban, este frío los haría alejarse pronto.
ChanYeol y él tenían todo el espacio. Solo para ellos.
"No sé por qué te dije eso. Supongo que fue solo por costumbre, porque eres mi amigo, mi jefe y mi huésped en mi casa," explicó quizá por lo mismo, en la seguridad de que no había nadie más que lo escuchara, solo lo dijo mirando otra vez al suelo, a sus pies que tambaleaban con el poco movimiento que había hecho del columpio.
"Entiendo que lo hagas porque es tu papá y puedas sentir un poco de vergüenza... pero cuando lo haces porque crees que es tu responsabilidad, porque tú eres ese hijo omega que debe tomar las acciones equivocadas de su padre alfa, y justificar un comportamiento que hemos tolerado por años... ya no me parece tan sensato, incluso desde un principio," vio el rostro de ChanYeol con su propio gesto compungido. Suspiró, en el conocimiento.
"Lo sé, no lo es. Solo creo que es justo lo que has dicho. Siempre se me ha enseñado que debo ser yo el que se responsabilice de los actos de un alfa, ¿no? Aun con mi padre... y no sabes cuánto lo aborrezco. Yo solo estoy harto de toda esta mierda de la dominancia. ¿Por qué debemos doblegarnos tanto? ¿Por qué soportar estas cosas y aceptar que hagan eso? Como si estuviera bien que ellos griten, peguen y destrocen, pero nosotros no. Y no estoy diciendo que eso sea adecuado, solo es la hipocresía en su máximo esplendor. En realidad, no entiendo, cuál es esa razón de hacer algo como eso cuando estás molesto, ¿no puedes ser civilizado y enojarte como una persona normal? Oh, no, porque si eres alfa está bien si haces un escándalo, al final, es lo normal, es lo que esperaría la sociedad. Y siempre tiene que estar esa o ese omega que te calmará, ¿no es cierto? ¡Asunto arreglado!"
"Es una basura toda esta jerarquía, ¿verdad?" Resopló todo su disgusto, y en la risita medio deshonesta que escuchó de ChanYeol, lo vio inclinarse un poco atrás en su columpio. "Sé que lo odias mucho, BaekHyun, y lo entiendo, los alfas son un tema complicado, pero no hallo alguna forma en que te pueda contestar. Por desgracia, este es el mundo en el que vivimos, no hay modo de cambiarlo, incluso si la hay, no se va a hacer de inmediato."
"Cierto, pero no tenemos tampoco por qué tolerarlo, ¿no?"
"No. Al menos en mi casa mi mamá alfa nunca me pegó y tampoco aventó algo en sus enojos. Pudo haber gritado, pero siempre se contuvo de algo más... junto a mi mamá omega."
"Gracias a ella."
"No estoy diciendo exactamente eso, pero es posible, sí, tal vez fue gracias a ella. En cualquier caso, eso me enseñó a que no tengo por qué tolerar otra cosa. Cualquier pareja alfa que me aviente un florero aun sin darme, juro que lo demando."
"Mejor no tener ningún alfa, cualquier dominante, solo son un asco."
"¿Querrás decir cualquier pareja?" ChanYeol preguntó, y aunque BaekHyun ya estaba más entretenido pateando algunas hojas de los árboles que nunca se barrieron, cuando lo oyó, frunció su ceño de una. ¿Qué estaba diciendo? "Porque te has cerrado a la posibilidad de tener pareja, ¿no? Si no quieres a un alfa ni a un beta..."
"Sí, bueno... ¿acaso hay otra alternativa aparte de eso?" Lo miró directo a los ojos. Podía estar haciendo aquella cuestión al aire, sin esperar una respuesta. Pero en realidad quería saber qué opinaba ChanYeol, si acaso pensaba que había la más mínima oportunidad de que quizá... ellos...
"No, por supuesto que no," ChanYeol declaró, y al poner sus ojos en el horizonte, desestimó la cosa. Como si no acabase de romper su corazón en miles de pedazos. "No parece que vaya a nevar muy pronto, ¿cierto?"
"¿Cómo?"
"Se me hace extraño, para esta altura de diciembre, ya esperaba que cayera algo. Pero apenas aguanieve ha habido en Seúl, y aquí, aunque esté nublado, no ha habido ni uno ni otro. ¿Qué pasa? ¿Será que no tendremos nevadas hasta Navidad?"
"Oh, bueno..." él también tuvo que desecharlo, todo con su corazón, se fue muy lejos. Esas palabras que hablaron y discutieron no eran nada ya. No existieron, y si aún buscaba una respuesta de lo que había hecho en el cuarto de su hermano, ChanYeol se la dio ahí hace un minuto. No había más. Tenía que entenderlo, él era el único mal y dañado porque no podía existir relación de dos omegas sin importar cuánto pudiera soñarla. "Sí, e-es probable, no lo sé, no he revisado el clima. Ha estado muy loco el cambio climático, ¿no?"
"Será una extraña navidad para mí si acaso no nieva. Aunque en muchos otros lados hasta hace un extremo calor, ¿puedes creerlo? Debe ser raro, intercambiar regalos y ver a todo el mundo usando kilos de ropa cuando ahí se están asando. Eso me recuerda, ¿ya compraste tu regalo?"
"¿Eh?"
"Del intercambio, el de la oficina. Como dije lo de los regalos, recordé de pronto. Y como ayer traías los regalos de tus sobrinos..."
"Oh, s-sí, claro, bueno... sí, ya compré algo. No es... l-la gran cosa, en realidad, pensaba comprar algo más, pero fue cuando tuve el inconveniente de venir acá, y luego..."
"Me incluí yo en tu plan y ahora no vas a poder tampoco ir a comprar nada porque spoilearé mi regalo, ¿cierto?"
"¿Todavía piensas que yo te voy a dar?" ChanYeol lo miró, y aunque él no dijo nada, ni siquiera para hacer un gesto (no podía, estaba medio extraño con la revelación de antes; si ChanYeol creía que iba a estar normal después de un corazón roto, no sabía cómo. Igual, no era que él lo supiese, para él todo estaba chill, tranqui... ¿qué eran emociones, de cualquier modo?), ChanYeol lo expresó todo en su sonrisa, divertida.
"¿Te toqué yo?"
"Ya no sé ni por qué preguntas, si eso piensas."
"Entonces, ¿me confirmas que sí te toqué yo? ¿De verdad?"
"¿Vas a creerme si te digo que no?"
"No."
"¿Para qué preguntas?"
"Solo quiero ver tus expresiones, para ver si leo una mentira en ellas."
"¿Y has tenido un veredicto?"
"Tengo el presentimiento de que podrías estar mintiendo. Mintiendo sobre cómo no soy yo tu nombre sorteado, pero a la vez, ¿no dirás eso solo para despistar y en realidad no lo soy, pero sabes quién sí es mi persona?"
"¿Qué?"
"¿Te he atrapado?"
"La verdad, no entendí nada de lo que has dicho."
"Así que es cierto."
"ChanYeol."
"¡Te he atrapado, Byun BaekHyun!"
No importó que le hubieran roto el corazón hace un segundo. Cuando ChanYeol empezó a molestarlo entre empujones y fingidos golpes en el aire con su boca abierta sobre aquellas risas que no se escuchaban, entendió que no podía escaparse de esto. ChanYeol le gustaba aún y mucho. Eso no iba a cambiar, tal como ChanYeol se lo dijo, el cambio no era inmediato.
Tal vez no estaba mal, se veía bien amando a ChanYeol en secreto, lo había logrado por todo este tiempo, ¿no? Y tener a ChanYeol a su lado, aun como amigo... era algo hermoso, no querría perderlo, ni por sus estúpidos y tan dañados sentimientos.
Al menos gracias a los pleitos que traía su papá con la señora de su abuelo y la asistencia que le dio su mamá como su omega que lo iba a acompañar y quedarse siempre a su lado, ChanYeol y BaekHyun pudieron tomarse el domingo como un día en el que descansar juntos.
Por más que BaekHyun le hubiese dicho a ChanYeol que no podrían tomar ese viaje como uno turístico, BaekHyun sí se permitió en ese día salir y pasear junto a su jefecito para mostrarle algunas cosas lindas que podían mirar y hacer en Bucheon.
Lo llevó al centro a conocer un poco. Desde un principio que salieron al mercado para desayunar de un local conocido manejado por una matrona, ya empezaron a tomar aquello como su primer paso en un recorrido.
"No parece que el tteokbokki sea un gran desayuno. Esto es comida chatarra, BaekHyun."
"¿Y? ¿No estás de vacaciones, acaso?"
"No exactamente, pero... yo debería estar ahora haciendo mi rutina de ejercicio... no comiendo chatarra."
BaekHyun lo ignoró, cuando les trajeron su chatarra como la estaba llamando ChanYeol, no evitó que se le aguara la boca y le diese un gran bocado en el primer momento. Sin importar lo caliente y picoso que podía estar, aunque lo hubiera pedido normal.
"¿Te vas a quedar con hambre por seguir tu vida fit?"
"Bueno... creo que voy a tener que pagarlo con el doble de tiempo en mis ejercicios. ¿Me sirves un poco?" No supo qué lo llevó cuando ChanYeol dijo eso a tomar con su propio tenedor un pedazo y dárselo a ChanYeol directo hasta su boca, él tampoco dio alguna queja. Se comió de sus manos natural aquel bocado. E hizo un gesto de gusto, en sintonía con el suyo.
"Rico, ¿no?"
"Está un poco picante."
"Pero pica rico."
"Sí. No suelo comer cosas picantes porque mi estómago es sensible, sin embargo, siempre que mi celo se acerca, se me antoja algo del estilo y lo tolero mucho mejor."
"Lo sé, lo recuerdo. Soy igual, ¿por qué crees que nos he pedido esto?"
"¿No se suponía que tú tomaste supresores para evadir tu celo?"
No le contestó. En su lugar, se zampó otro pedazo de su orden puesta en un plato para dos sobre aquella mesa de metal en el pasillo de puestos. Más tarde, les pidió dos refrescos, y el hilo de conversación que tenía ChanYeol se perdió sobre su gusto por la comida y continuar comentando al respecto.
BaekHyun lo había querido llevar a algunos parques después. Como no estaban lejos, con un viaje en metro los llevó al parque Sangdong tras pensar que sería una buena idea como atracción turística. Recordaba de chico ir con sus papás y hermano para disfrutar de un tiempo junto al lago haciendo picnic y hasta metiéndose en botes a las aguas en actividades recreativas.
"Cuando tenía doce años, una vez mi hermano y yo nos volcamos en el bote. Casi me ahogo, fue divertidísimo."
"¿Por qué piensas que fue divertido casi haberte ahogado? ¿Querías morir a los doce?" Se rio de la pregunta escandalizada de ChanYeol. Los dos estaban juntos parados en el metro. Era domingo y por tanto un día en el que mucho turismo se movía por esa zona, aunque el andén no venía muy lleno, tampoco hallaron asientos disponibles donde no se apretaran. Prefirieron quedarse arriba sostenidos por los tubos. ChanYeol recargado en la pared a la derecha de las puertas corredizas, y él enfrente tan cerca que hasta sus olores parecían mezclarse en uno en ese aroma de frutos rojos que no se daban cuenta cómo atraía miradas inquietas a su alrededor por cómo se estaban percibiendo. "Hablo en serio, BaekHyun, no creí que fueras un niño suicida."
"No es eso, es que fue una historia tonta. Mi hermano ya tenía como diecinueve en ese entonces y era más grande que yo por mucho. Yo era muy pequeño."
"¿Eras?" Le bufó y al hacer la moción de pegarle (sin llegar a hacerlo, aunque ChanYeol se hubiese encogido), lo dejó pasar al seguir su cuento.
"BaekBeom fue conmigo porque mis papás le dijeron que debía cuidarme. No era mi primera vez en un bote y tampoco en ese lago, pero sí desde que a mi corta juventud había sido declarado como omega cuando tuve mi primer celo, y pues ya no me dejaban estar solo, no al menos sin chaperón que me cuidara."
"¿Tuviste tu primer celo a los doce años? ¿Eso no es muy pronto?"
"Tengo primas y primos que lo tuvieron a los diez, yo creía que era muy tarde," ChanYeol enarcó una ceja. Al pasar a otra estación, las puertas se abrieron y gente subió como bajó por igual. ChanYeol y él pudieron irse a sentar al rápido desplazarse hacia algún espacio que se hubiera desocupado, pero como ninguno se movió y BaekHyun incluso puso una mano en la agarradera junto a ChanYeol encerrándolo con su cuerpo (según él en modo protector al evitar que otras personas lo golpearan por pasar a su lado), no hubo cómo. "Ahora sé que eso es muy pronto, pero yo estaba ansioso porque me llegara el celo. Fui el último en la familia que lo tuvo por ser el más pequeño, obvio me sentía ansioso."
"Pero ya sabías que eras omega en ese tiempo."
"No exactamente, lo sospechábamos porque bueno..." se encogió de un hombro, eso no necesitaba explicación. Los omegas se reconocían muy fácil con sus características tan obvias mientras iban creciendo. Tal vez para ChanYeol y JongIn que eran esos omegas excepción podía haberles costado, pero una que otra cosa siempre los delataba aun antes de los exámenes en la adolescencia que comenzaba a develarlos. Lo que le dio curiosidad–para salirse un poco de su punto. "¿A qué edad tuviste tú tu primer celo?"
"A los quince."
"Ya es una edad avanzada para tener tu celo. Los dieciséis es lo máximo, ¿no?"
"Sí, y como para los alfas su calor es a los dieciocho, creo que mis mamás tenían mucha ilusión de que lo fuera. Las lecturas de mis exámenes biológicos no daban muchas señales obvias, como tenían hormonas un poco disparejas que traté con medicamentos en la adolescencia, tampoco fue notorio que terminara siendo omega. He de ahí mis marquitas del acné que nunca borrarán de mi cara," señaló en su mejilla, aunque BaekHyun rodó los ojos, porque eran meras manchas diminutas. ChanYeol tenía un cutis de envidia, qué pudo haber sido hace años. "Yo nunca me sentí como un alfa igual, tal vez porque incluso desde chico cuando se me alborotó la hormona tampoco me sentí especialmente atraído por algún omega..."
"¿Nunca?" ChanYeol se encogió de hombros, aunque fue un movimiento vago porque el continuar de su viaje lo zarandeó un poco y eso hizo que él se acercara al sostenerse bien de la agarradera sin perder sus pies sobre el suelo. "Huh, entonces, ¿siempre supiste que eras omega?"
"Podía ser un beta, si a mí me preguntaban. Pero el celo dijo otras cosas."
"Sí, claro..." cómo hubieran sido distintas sus situaciones si ahora ChanYeol fuese un beta, ¿no? Sí... BaekHyun no debería estar pensando en eso. "De cualquier modo, tú sabes que a mí nunca me ha gustado depender de un alfa."
"Por supuesto. Ni aunque TaeYeon se ofrezca," chasqueó la lengua. A ChanYeol cómo le gustaba molestarlo.
"Aja. Por eso, cuando mi hermano se puso en su modo alfa-puede-todo y me quiso quitar de remar el bote porque, según él, yo era un debilucho ahora, le quise demostrar lo contrario al quitarle un remo."
"Oh, cielos."
"Sí, pero BaekBeom no me dejó, estaba luchando conmigo por tomarlo. Yo me puse firme y empecé a manotear para que me dejara," ChanYeol ya se rio un poco, lo que trajo su sonrisa. "Y luego cuando BaekBeom quiso usar su voz de mando contra mí, solté el remo como quería, pero en mi coraje lo solté para que se hundiera en el lago."
"¡BaekHyun!"
"¿Cómo se atrevió mi hermano a usar su voz de mando contra mí?"
"Eres increíble."
"Obvio. BaekBeom se enojó conmigo, pero como su tierno hermanito menor omega solo dije 'ups' y él no me hizo nada. Quiso ver si lo alcanzaba y cuando se inclinó al borde, lo pateé para tirarlo a él también fuera en mi venganza."
"Pero..."
"Eso fue lo malo, no calculé qué tanto peso era de BaekBeom, y en el movimiento oscilante, nuestro bote se inclinó con BaekBeom," ChanYeol se cubrió la boca. "Y los dos caímos al agua con el bote volcado."
"Demonios, BaekHyun."
"Ya sé, qué tonto. Lo peor fue que como estaba debajo del bote y realmente no era muy... eh, fuerte, no podía salir a superficie. Me atoré de algún modo, y cuando empecé a estresarme porque mis pulmones iban a explotar, mi hermano salió al rescate. Llegamos empapados y él cargándome como un bebé mientras lloraba del susto."
"Ay, BaekHyun."
"Nos cobraron el remo... y el mantenimiento del bote, lo que a mis papás no les gustó mucho. Pero cuando BaekBeom se echó la culpa de todo, se disculpó conmigo por tratarme de esa forma, y yo con él por haberlo aventado solo por mi berrinche..."
"¿Tuvo moraleja esa historia?"
"Sí, no deberías meterte con un omega y qué tanto puede ser sin importar su categoría, edad o tamaño."
"¡BaekHyun!"
"¿Ves lo divertida que es la historia?" No evadió reírse luego de eso. Lo que fue una linda imagen para BaekHyun.
Ver así de cerca a ChanYeol mientras se reía con esa facilidad en su conversación, incluso cuando le sacaba media cabeza y claramente estaban en un espacio abierto al público, lo hizo sentir que nada tenía importancia ahora. Solo estaban él y ChanYeol. En ese que era su momento...
Luego, recordó que ChanYeol mismo ya le había rotado las esperanzas. Se lo dijo una vez más ahí, él nunca había sentido algo por otro omega.
En la siguiente estación, BaekHyun se separó, quitó su mano de la agarradera y respiró hondo. ChanYeol lo miró dubitativo por su acción, aunque BaekHyun no lo vio, eso hizo. Se sintió extraño, pero lo ignoraron juntos cuando BaekHyun dijo:
"La siguiente es nuestra estación. Caminaremos un poco para llegar al lago, pero es lo más cerca que puedo llevarnos."
"Está bien, no me importa caminar, creo que eso ayudará a hacer algo del ejercicio que hoy no he podido."
"¿No tienes un día de descanso o trampa?"
"¿Por qué le haría trampa a mi cuerpo? ¡Es mi templo!"
"Eres aburrido."
"Deberías intentarlo, verás que cambiarías muy pronto tu opinión."
"Si tú lo dices..." la estación llegó casi en seguida, BaekHyun no necesitó decir nada más que: "Vamos."
"Bien, sigamos con el tour de Bucheon. Espero no acabemos como la anécdota con tu hermano en el lago."
No necesitó ni discutirle aquello, porque lo cierto fue que no importaron los muchos chistes que hicieron, nada se cumplió al ver que el lago estaba congelado.
Bueno, congelado como tal no, porque la nieve aún no caía, pero por la temporada fría, el agua se estaba convirtiendo en hielo en algunas partes y la renta de botes se había temporalmente cerrado para el público. A BaekHyun se la aguó la fiesta. ¿A qué venía a traer a ChanYeol ahí si no había cómo disfrutar del lago?
"Es una linda vista, igual creo que podemos dar una vuelta," ChanYeol quiso rescatar.
Lo malo fue que esa linda vista no duró mucho. El parque estaba un poco muerto. La vegetación se había ensombrecido por la temporada, los árboles ya no tenían hojas, unos estaban completamente secos, sin pasto más que tierra a sus pies, y mientras más iban caminando lo único que había eran rocas y madera vieja rodeando el lago sin permitirles acercarse al menos a la naturaleza. Ni patos había para alimentar, debieron migrar a principios del otoño.
BaekHyun no consideró lo importante que era pensar en el clima.
"Lo siento, ChanYeol, te he traído a un lugar tan aburrido y todo ese viaje que hicimos en metro..."
"No, no, no, está bien, me gusta, o sea... creo que no es importante si pudimos hacer lo que veníamos, sino el tiempo que hemos pasado juntos. Tu compañía es algo que me gusta, y pasarme platicando contigo todo ese tiempo más estar aquí juntos ahora..." BaekHyun inclinó la cabeza, parado junto a ChanYeol en medio de un recorrido frente al lago sobre el aire frío que hizo que ChanYeol se abrazara para cubrirse mejor con su chaqueta. Pero igual mostró sobre lo feo una sonrisa. "No sé, es bonito."
Fingió que no hubo una sensación cálida embargando su pecho sobre esas palabras. BaekHyun solo lo aceptó y al menos estuvieron otros minutos caminando alrededor del lago en el escenario muerto. Hasta que se les hizo tarde y para el mediodía, BaekHyun los llevó de vuelta en metro. Se bajaron antes en otra estación para que al menos fuesen a comer a otro lado.
BaekHyun lo llevó al mercado de fideos, donde las calles eran populares porque cada tienda que hallaban tenía fideos coreanos; eran especiales por la receta familiar que se guardaba para cada negocio. Para el frío que pasaron al exterior, a ChanYeol le vino de maravilla, un plato caliente de comida fue todo lo que necesitó para llenar sus grandes mejillas de gusto.
Después en autobús, BaekHyun decidió que iba a intentar con otra cosa. Los exteriores no eran muy bonitos en la época invernal, aunque tuviesen su toque, necesitaban algo que mejorara ese recorrido. Parques no, así que iban a recurrir a otra cosa.
"¿Qué tipo de museo es este?"
"Oh, bueno, es un búnker que antes se usaba para incinerar basura, pero después de tanta contaminación, lo cerraron y decidieron usarlo como un museo para el turismo," BaekHyun explicó como si supiera. En realidad, él no sabía. Mientras ChanYeol se sentaba en el único asiento disponible del autobús, BaekHyun tomó el tiempo para leer en su celular qué era esto. Les había preguntado a algunos de sus viejos amigos en Bucheon qué lugares eran buenos de visitar en domingo rápido cerca de su ubicación, y ese había salido. Era el mejor porque tampoco cobraban la entrada. BaekHyun nunca lo había visitado, así que no tenía nada de conocimientos. Pero al hacerse el conocedor, le dijo a ChanYeol eso con toda seguridad de un maestro que acababa de preparar su lección hacía cinco minutos, y ChanYeol asintió al mirar la gran estructura del museo ante el que estaban. "Es muy grande, habla un poco sobre la historia de la incineración y me dijeron que hay algunas exposiciones de arte dentro."
"¿Te dijeron?" ChanYeol preguntó en lo que él se mordía la lengua. No debió decir eso. Pero se hizo el tonto al entrar para registrarse con un guardia.
"Sí, pues... hace tiempo que no vengo, digo... creo que las exposiciones cambian y un amigo me dijo que a veces hay algunos espectáculos, pero eso a mí no me ha tocado," por no decir que nunca. "Supongo que veremos qué es lo que hay hoy."
"Ok. Uy, este lugar es frío, lo siento mucho más de lo que afuera," ChanYeol exclamó con un temblor notorio de su cuerpo. BaekHyun admitió lo mismo para sí, mas, no lo dijo. No estaba esperando esto, no cuando se suponía que en interiores iban a sentirse más cómodos. ¿Se había equivocado de nuevo? "¿Te encuentras bien?"
"¿Eh?"
"Te acabo de preguntar si te encuentras bien."
"Oh, sí, ¿por qué lo dices?"
"No sé, te noto extraño," parpadeó. ¿Lo estaba? ¿Era tan obvio para que ChanYeol solo lo viera? Tal vez debía guardarse más sus emociones de lo que pensaba. "¿Tienes frío, acaso?"
"Oh, bueno, yo..."
"Toma," ChanYeol le pasó su bufanda. Lo que a BaekHyun le fue una sorpresa, no pudo ni reaccionar, al verse embargado de un momento a otro con ese dulce olor a cerezas, admitió que se hundió un poco en la bufanda. Era increíble, frío o no, BaekHyun ya no sentía nada más que completa calidez con ese aroma. "Creo que tú lo necesitas más que yo, tienes las mejillas muy rojas."
"¿E-En serio?"
"Hm. Vamos, úsala bien y enséñame qué hay en todo este museo."
"C-ChanYeol, pero..." no supo qué decir tampoco cuando el omega alto ya estaba avanzando por el gran pasillo de entrada. Al dejarlo atrás, BaekHyun tuvo que correr para alcanzarlo. "¿No necesitas tú la bufanda? H-Hace frío y dijiste que sentías..."
"¿Estás despreciando mi buen gesto, BaekHyun?"
BaekHyun se detuvo. Ahí ya lejos de la recepción y cerca de un barandal que daba hacia un gran tragaluz de pisos más arriba como abajo, no supo cómo interpretar las palabras de ChanYeol. Hacer regalos o gestos como este que le daba ChanYeol muchas veces tenían simbolismos. Para las parejas sobre todo, en el cortejo de una, los regalos como pieles para calentar al otro eran extremadamente reconocidos como una fuerte muestra de cariño y amor. La protección de la persona que te gusta debería ser una de sus prioridades, y normalmente una o un dominante llegaba a dar este tipo de cosas.
En la antigüedad eran las pieles de animales, ahora en la era moderna los suéteres, sacos y bufandas los habían sustituido, pero justo por eso que ChanYeol dijera algo así... Si se despreciaba un regalo de protección declaraba fin de un cortejo. Era decirle a tu pareja que no sentías algo recíproco, no deseabas su cariño.
ChanYeol y él no estaban en ningún cortejo. No al menos que él hubiese declarado, mucho menos por su posición. Sin embargo, ¿ChanYeol lo vería distinto? ¿Por qué había dicho eso así si pensaba lo contrario?
Si nunca se había enamorado de un omega y creía que era irracional...
"S-Solo me preocupa que pases frío, ChanYeol."
Era eso, ¿no? Después de todo, solo era un acto de preocuparse, ninguna protección...
«¿Cierto?».
"Está bien, no tienes por qué sentirte así, BaekHyun."
¿De verdad no tenía?
BaekHyun miró otro segundo a ChanYeol. Se estaba congelando, ahí adentro definitivamente hacía más frío que afuera. Al mirar cómo acariciaba sus manos solo...
"Toma esto," las tomó y le puso sus guantes. Como ChanYeol obvio lo miró con inquietud, él no se detuvo y fue hasta ponérselos. ChanYeol tenía las manos más grandes que él, pero sus dedos eran largos, eso le servía para que le funcionasen. "Listo, así estamos a mano, ¿no?"
"Eres un tonto," ChanYeol se rio al poco rato sobre sus cejas enarcadas antes de aceptar su gesto con las manos en los bolsillos de su chaqueta. "Gracias."
Continuaron su recorrido después de eso. Vieron un par de exhibiciones, como le dijeron, había algo de la incineración con viejos mapas del búnker y notas a sus lados. ChanYeol le fue tomando foto a todo. Igual pasaron por las salas de arte. Cada puerta que había sin señal de estar prohibida para el paso, entraron y descubrieron muchos escenarios de arte moderno como contemporáneo, con algunas esculturas que poco entendían, pero fingieron hacer al mostrarse serios y mirarlas por más de un minuto.
Por supuesto se rieron, porque ambos notaron lo que el otro estaba haciendo. Al menos entremedio hicieron comentarios después de lo que creían que era alguna cosa u otra, con más carcajadas por hacer suposiciones tontas y reírse de las fotos que se pudieron sacar imitando alguna o fingiendo estar en un lugar extraño alrededor de otras. Un ejemplo fue cuando llegaron a una sala llena de estalactitas y estalagmitas de sal. Casi estas del tamaño de ellos, BaekHyun pudo colocarse en medio de unas y mostrar cara aterrada como si estuviese perdido en un escenario de terror sobre una cueva sin salida. ChanYeol lo imitó al fingir quedarse pegado a otra con la lengua de fuera. Nadie les dijo que se alejaran o no tocasen la indumentaria.
Como tampoco había mucha gente ni guardias, disfrutaron como niños y hasta se olvidaron del frío. El museo era más grande de lo que pensaron. Puertas y puertas se les extendían, junto a pisos que solo podían ser el antiguo búnker para no mostrarles nada, o más escenarios de arte tridimensional que estaban prácticamente olvidados por los pocos turistas.
"¿Y esta puerta a dónde lleva?" ChanYeol le preguntó como si él fuese a saber. Tal vez lo hacía en la creencia de que él realmente lo sabía. Después de todo, eso le hizo pensar en un principio, aunque seguro ya estaba un poco claro como hasta para él esta era una nueva experiencia.
Al BaekHyun encogerse de hombros lo dejó muy claro.
"¿Por qué no la abres y lo averiguas?"
"No puede ser, BaekHyun," ChanYeol exclamó con tremendo terror. BaekHyun no miró al estar en su espalda. Cuando se volteó, casi temió que hubiesen llegado a un lugar secreto, oculto de la vista humana por elección del gobierno hasta que... "Encontré el baño."
"¡ChanYeol!"
Claro que igual vino la risa.
Esta no fue la salida que esperaba, pero al menos dio en el blanco. Mejoró su ánimo, se reivindicó del fraude del lago. Cuando salieron después de descubrir que había también un café del museo y comprarse un aperitivo de galletas y bebidas humeantes, ya estaba pegando el atardecer.
BaekHyun creyó que era hora de volver a casa.
"Me hubiera gustado llevarte a más lugares. Alguna aldea o un evento, quizá hasta un estadio o deportes extremos como sé que a ti te gusta hacer, pero no tenemos mucho tiempo y tampoco hay muchas de esas cosas en Bucheon. Es más tranquilo que Seúl. Se está haciendo tarde, casi todo cierra temprano aquí, y tenemos que volver a casa."
"Está bien, BaekHyun, sé que un día no iba a ser suficiente para incluir todos los paseos turísticos de Bucheon. ¿Y no te dije antes?" BaekHyun arqueó una ceja mientras esperaban el camión de vuelta, con la sonrisa de ChanYeol que lo miró, lleno de gusto. "Tu sola compañía ya me es suficiente."
¿Por qué tenía que decirle todas esas cosas? Era lo que tanto preguntaba BaekHyun.
No lo dijo, por supuesto, él solo le mostró su sonrisa por igual, y aunque no alcanzó sus ojos porque estaba un poco conflictuado con sus sentimientos tontos, se quedó en el olvido cuando hicieron el camino de regreso.
De ir en autobús y luego en metro, BaekHyun lo llevó a un último lugar, al menos antes de volver a su casa como dijo.
"¿Adónde vamos? ¿No debíamos bajarnos en la siguiente estación?"
"Sí, pero olvidaba que había otro lugar que quería visitar al venir a Bucheon."
"¿En serio?" Asintió. Estaban por ahí cerca, su antigua escuela secundaria ya se veía a una cuadra de esa calle transitada por la noche junto a la acera llena de negocios cerrados. "¿Cuál?"
"Este," señaló. A unos pasos de ellos estaba un simple carrito de una mujer beta mayor que estaba preparando algo en cacerolas al fuego. Humo era levantado de estas aun cuando tuvieran sus tapas y algunas dejaban uno espeso al ser abiertas. La mujer traía sus guantes y mandil para servirle a las personas que estaban paradas frente a ellos.
No había una cola, no era un lugar reconocido ni mucho menos, apenas dos o tres estaban esperando a recibir su pedido. Igual BaekHyun sonrió, porque era tal como la recordaba.
"¿Un puesto de jjinppang?" ChanYeol preguntó, incrédulo al ver cómo lo que la mujer entregaba eran solo bollos al vapor. No era algo que lo impresionase o inquietara mucho, pero sí la forma en la que BaekHyun los había traído hasta allá siendo esto parte de su recorrido. ChanYeol leyó su letrero. "¿Jjinppang de la mamá Jang? ¿Es especial? ¿Algo como una receta típica o diferente que hay en Bucheon de Seúl?"
"No, pero es mi lugar favorito. Me recuerda a mi adolescencia, cuando iba a la escuela y saliendo podía venir a comprarme uno antes de llegar a casa. Como había una estación de metro que pasar a mi residencia, tenía tiempo suficiente para comerme uno, y bueno..." se dio cuenta de que explicarle eso a ChanYeol fue algo extraño. En verdad no había nada particular de ese puesto, sí que había estado mucho tiempo, la mujer llevaba tanto si él lo recordaba de su adolescencia y ahora era un adulto trabajador; sin embargo, no era especial, solo un jjinppang como cualquier otro que ya hasta podían comprarse en las tiendas. ¿Por qué había traído a ChanYeol hasta allá? Él lo sabía. "Me gusta mucho venir a comprarme uno siempre que vuelvo a Bucheon. Es como el cariño de casa. Yo te traje aquí porque quería compartirlo contigo."
No era algo único de Bucheon ni nada parecido, mas, haber dicho eso al final lo dijo todo: él quería que ChanYeol experimentara algo similar a sus sentimientos. Ese amor de casa, lo lindo que era volver a un hogar donde una cálida emoción te esperaba, se había representado para BaekHyun en ese simple jjinppang de alguna forma. Y ahora quería compartirlo con ChanYeol.
Con su jefe omega del que estaba enamorado.
ChanYeol esbozó una amplia sonrisa de labios.
"¿Me comprarías uno?" Asintió sin saber muy bien qué estaba haciendo. "Gracias."
BaekHyun saludó a la beta. La mujer casi lo reconoció, y entre saludos gustosos con sus ya estás tan grande típicos de anciana que te vio de niño, BaekHyun solo le sonrió educado ante todo. Más al rato, la mujer miró a ChanYeol.
"¿Y quién es este que te acompaña hoy, niño?"
"Oh, ahjumma, él es Park ChanYeol, mi..." se mordió la lengua, estuvo a punto de decir algo inadecuado. Algo como mi omega, mi pareja, mi cortejo o una de esas cosas que hasta él aborrecía cuando un alfa lo nombraba de ese modo, porque no le gustaba que antepusieran mi ante cualquier apelativo suyo, como si en verdad les perteneciese. ChanYeol no le pertenecía, incluso como amigo, era solo una persona especial en su vida, no suyo. ¿Qué estaba diciendo? "Hum..."
"Soy su amigo de hace algunos años. Es un gusto conocerla," ChanYeol terminó al saludar de venia a la beta. La mujer se rio como toda una sabia, y al darle esa mirada que decía cómo ella lo sabía, BaekHyun se encogió en la bufanda.
La mendiga bufanda de ChanYeol que lo embriagó en su aroma.
"Claro, su amigo. Debes ser un amigo especial, BaekHyun hace mucho tiempo no trae a nadie por acá conmigo."
"¿En serio?"
"Ahjumma, eso no es cierto," BaekHyun quiso defenderse, pero la mujer no se lo puso fácil. Maldita sabiduría de anciana.
"Es verdad, si alguna vez viniste con alguien fue hace mucho tiempo, desde que eras así de chiquito," Jang señaló casi a la altura de su cintura, lo que era exagerado porque él nunca estuvo así de pequeño en su adolescencia considerada la altura de la mujer menor a la suya ahora. No peleó, porque era maleducado hacerlo con una anciana, mas, ChanYeol se rio y eso hizo que hasta sus orejas se le calentaran. "Y todos esos mocosos eran solo niños de la secundaria, vivían y estudiaban por aquí cerca. Nunca de otros lados."
"A-Ahjumma..."
"Debo tener trato especial porque soy su jefe. Creo que alguien intenta sumar puntos para el próximo ciclo," ChanYeol le desestimó sobre otra risa. La beta enarcó una ceja de ya poco vello que tenía en la cara. Con todas sus arrugas para deformarle un poco su redondo rostro, BaekHyun entendió que era un gesto serio, mas, él fingió demencia. Después de todo, no era como si la beta no lo hubiese notado ya, ¿no? ChanYeol era alto y fornido como un alfa, pero su olor era muy notorio, cualquiera que se le acercase olería a omega. ¿Qué estaba pensando? "Me va a comprar uno de sus jjinppang por eso. Medio lo he obligado, así que no se escapa ahora. ¿Cuál me recomienda que pruebe, ahjumma?"
"Si todo esto es así, entonces tengo uno especial para ti, chico," la beta levantó una de las tapas en la cacerola a la derecha. Con papel y pinzas sacó el bollo del vapor y lo envolvió bien antes de pasárselo a ¿BaekHyun? "Toma, dale a tu amigo."
"¿Huh?" BaekHyun miró el bollo ante él ofrecido por las manos arrugadas de la anciana que lo movió una segunda vez para recibirlo. "Pero..."
"¿Me vas a dejar con la mano extendida, niño?" Lo tomó. Entonces, se lo ofreció a ChanYeol. Antes de que ChanYeol se hiciera con él, la mujer puso sus pinzas en medio. "Ah-ah, así no."
"P-Pero, ahjumma..."
"¿Qué tan especial es para ti esta persona, BaekHyun?"
Abrió la boca para contestar, pero no encontró palabras.
Era ridículo, sabía lo que estaba haciendo la anciana. Justo por lo que se reprendió haberle dado a ChanYeol el tteokbokki en la boca en la mañana, porque ese era otro acto de cortejo. La parte del cuidado y atención estaba ahí, y eran métodos retrógrados, un poco incómodos si lo ponían en términos actuales como si te trataran de bebé al alimentarte directo en la boca, mas, era su parte primitiva hablando.
Ellos ya no eran una civilización de cambiaformas, su jerarquía se originó por eso al tener un lado animal que se llevaba por todas estas cosas, sin embargo, ya nadie se podía transformar. Como todo, el mundo había evolucionado y ellos también, y solo tenían las habilidades y características que eso les dejó. Por algo dar de comer en la boca, ofrecer pieles o una de esas tonterías ya no eran actos que necesariamente debiesen hacer incluso en un 'cortejo', como aún le llamaban a lo que obviamente era ligar, igual...
«Diablos», BaekHyun estaba conflictuado. ¿Por qué quería hacer todo esto con ChanYeol sin sentir la más mínima molestia como lo haría si fuera una o un alfa haciéndolo por él? A BaekHyun le parecía tan vergonzoso, y entendía que la anciana tuviese otras ideas, mas, ¿por qué aceptaba que lo hiciera por él? Por ChanYeol... otro omega.
Antes de que hiciese más un tonto de sí mismo en esta situación, sintió unas manos en la suya. Esos dedos enguantados que tenía ChanYeol los miró tan pronto pudo voltearse, y vio cómo fueron a sostener su mano. Envuelta como un tesoro, BaekHyun lo observó confuso con su ceño junto antes de que ChanYeol le diera una sonrisa y se inclinase a comer un bocado del bollo en su palma.
BaekHyun se asustó y casi quiso alejarse, pero ahí estaban las manos de ChanYeol para retenerlo. Al sentir su cercanía, no pudo irse para atrás. ChanYeol dio otra mordida antes de pararse en su altura y masticar lo comido haciendo un par de sonidos placenteros.
"Creo que ahí está la respuesta," la anciana dijo, si lo hizo fuerte o no, si ChanYeol lo captó y entendió de alguna manera, no lo mencionó. Él siguió comiendo de lo que ya tenía en la boca poco previo a la voz más fuerte de la beta al preguntar: "¿Qué te ha parecido, chico?"
"Está increíble, ahjumma. Veo que es especial, sin duda."
"Es el favorito de BaekHyun, siempre lo pedía cuando era un niño," ahí estaba lo que había pensado: ese compartir le resonaba por saber que la anciana lo ayudó a que ChanYeol viviera como él la experiencia. "¿Quieres otro, BaekHyun?"
"S-Sí, por favor, ahjumma," así se encargó de excusarse en lo que ocurrido. Le entregó a ChanYeol el suyo y tomó uno propio antes de pagarle a la anciana. "Gracias."
Cuando se alejaron del puesto ya con su comida en mano, todo quedó atrás.
Que hubiera pasado ahí solo... BaekHyun lo ignoró por su propio sano juicio.
"Gracias por el día de hoy, BaekHyun," ChanYeol igual se lo recordó cuando ya estuvieron juntos en el metro. Como ya era tarde, pasadas las ocho en domingo, ya no había mucha gente como en la mañana. El andén estaba casi solo, ellos pudieron sentarse en una banca espaciosa justo en medio. Y mientras las estaciones iban pasando, ChanYeol suspiró justo cuando fue a recargar su cabeza en su hombro haciéndolo ponerse recto y tieso. "Me la he pasado genial, aunque estoy algo cansado ahora."
"E-Eh... sí, yo... de nada."
"¿Podemos repetir lo de hoy?" BaekHyun frunció el ceño. ¿Exactamente qué parte quería repetir ChanYeol? BaekHyun lo miró, mas, solo vio su cabello en su hombro.
"¿Cuándo?" Él preguntó haciéndose el tonto.
"No lo sé, cuando sea. ¿Mañana?"
"Claro, cuando quieras."
"¿Es una promesa?"
Tragó duro. Pero ¿qué estaba prometiendo?
«¿Qué es lo que piensas, ChanYeol?».
"Sí, l-lo... Lo prometo."
ChanYeol no le dijo más. Al acomodarse otro poco cerca de su zona especial en su cuello, pudo haber dormido, descansado, cerrado los ojos sin perder consciencia, ¡lo que fuera! Al final no hicieron mucho más.
En cuanto llegaron a la casa de sus padres, perdieron la magia. Volvieron a ser solo esos dos omegas que habían pasado un día juntos en otra ciudad como buenos amigos.
Solo dos personas que compartían algo nuevo para ambos.
Para empezar bien mi 2024, yo les vengo a traer esto. Si acaso están leyéndolo después (o incluso en otro año ya), igual toménlo como regalo, que se ha escrito con mucho cariño para esta historia~
🎁 Ha sido muy lindo, ¿no? ¿A ustedes no les ha parecido? Sé que hay un poco de confusión y dificultad, sobre todo por parte de BaekHyun, pero ya veremos cómo esas cosas se desenvolverán...
🎁 ¿Qué piensan de la salidita que tuvieron? ¿Algún lugar que les gustara más? ¿Gesto favorito que compartieron ChanYeol y BaekHyun? A mí me encanta pensar que ambos quisieron darse algo mutuamente~
🎁 Una más, ¿qué creen que está pensando ChanYeol? 👀
¡Muchas gracias por leer! Si votaron y/o comentaron, se los agradezco el doble y triple más. Espero que nos sigamos leyendo pronto, ¡hasta entonces! 💙
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