¡Lo intente!
Vi un comic y esto se me ocurrió ^_^
Espero que les guste~
Nota: Lo rumores de que Oswald puede conseguir un show o algo así en Disney+ son, por el momento, simplemente rumores. No han negado ni confirmado nada pero seria genial que Oswald tuviera su propio show, la verdad :3
Oswald esta preocupado, no ha visto ni sabido nada de su hermano Mickey en más de un mes. El espejo ni siquiera se activa como para dejar pasar a la coneja para ver como esta el ratón, así que solo le queda quedarse preocupado. Esta en la sala, después de haber acostado a sus hijos para dormir una siesta, cuando un sonido muy familiar llama su atención. Va hacia el espejo rápidamente, sonriendo al ver que esta brillando y no tarda mucho para que alguien pase por allí.
-¡Mickey!- se siente aliviado de verlo pero se detiene en seco al ver bien al ratón. Su expresión esta en blanco, sus manos entrelazadas frente a él están temblando un poco y se ve horriblemente tenso. -¿Mickey?- la expresión del menor se arruga lentamente. Comienza despacio, con lagrimas saliendo de sus ojos lentamente, seguido de un sollozo y de repente, llanto. El conejo se sobresalta con algo de pánico, no se esperaba esa reacción.
-¡Lo siento!- solloza y el mayor abre la boca para preguntar la razón de la repentina disculpa pero el ratón continua. -¡Lo intente! En serio lo intente, el videojuego fue le primer paso para todo y cuando pidieron una secuela, ¡pensé que las cosas podrían salir bien! Les pregunte muchas veces pero...- paso sus manos enguantadas por sus mejillas para secar las lagrimas pero era inútil, seguían saliendo. -...¡me ignoraron o rechazaron todo lo que les dije! Lo seguí intentando...lo intente...de veras lo intente...-
-Mickey...- llama, sin saber si debía acercarse o no, queriendo abrazar a su hermano que sollozaba. -...¿Qué intentaste?- se anima a preguntar.
-...a traerte de vuelta- hizo una mueca.
-Ho...- abrió los ojos con sorpresa, sin haber esperado esa respuesta. La posibilidad de volver al mundo real, ser visto en la televisión y ser conocido por los humanos realmente no era algo que haya cruzado su mente, no desde que el Páramo volvió a la normalidad y se reconcilio con su hermano.
-¿Estás molesto?- Mickey lo miro con pena y vergüenza, sus ojos rojos por las lagrimas que ahora salían a un ritmo más lento.
-No- negó. -¿Sabes qué? Quita eso, si estoy molesto...- se lo pensó mejor y el menor bajo la vista con tristeza. -...porque te causaste estrés sin ninguna razón- suspiro con algo de cansancio. -No debiste estresarte por eso...es decir, volver seria genial y todo...- se rasco la nuca. -...pero si no quieren traerme de vuelta, realmente no me molesta-
-¿En serio?- lo miro con los ojos bien abiertos, luciendo más relajado que hace unos minutos.
-¡Claro!- sonrío enormemente. -¡Aquí tengo todo lo que quiero! Mi esposa, mis hijos, amigos, un hogar...- extendió su mano para apoyarla en el hombro ajeno. -...y a mi tonto hermano- el ratón sonrío ligeramente ante aquello.
-Lo siento...- suspiro, tapándose el rostro con ambas manos. -...soy un desastre-
-Un poco- rio, acercándose para rodear los hombros de su hermano con su brazos. -Ahora que estas más relajado, tu y yo debemos actualizarnos ¿no?- Mickey asintió con entusiasmo, dejándose guiar por su hermano, sintiéndose más relajado y contento que en los días anteriores.
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